Título: Leyes del bien común

Descargo de responsabilidad: No poseo nada remotamente citado en las obras literarias de J.K. a estas alturas ya deberían haber entendido que soy una loca desquiciada que disfruta de escribir fics.

Número de palabras: 399

Personaje: Percy Weasley

BETEO: Finalmente puedo decir orgullosamente que este fic ha sido beteado gracias a mi voluntad de no procrastinar mis trabajos y a la increíble ayuda y asesoría de Angelito Bloodsherry

Este fic participa en el minireto de Octubre para "La Copa de las Casas 2018-19 del foro La Noble y Casa Ancestral de los Black"


—¿Rechazado?

El pergamino entre sus manos estalló en chispeantes llamas que consumieron la prueba irrefutable de su fracaso. No, de su injusticia. Su orgullo herido se negaba a aceptar menos que eso.

—¿Por qué habrían de rechazar mi solicitud? —gruñó ofuscado—. ¡Cumplo con cada uno de los requerimientos, ese puesto dentro del ministerio debería ser mío!

Todo por lo que había trabajado, a lo largo de sus años en Hogwarts, se había desperdiciado completamente. No era más que un fracaso, un simple remedo de mago que no merecía el uso alguno de magia. Quizás, solo tal vez, no estaría tan mal finalmente darse por vencido.

¡No!

El rendirse era solo para los magos débiles sin voluntad, aquellos mediocres que no aspiraban a nada más en la vida que un par de galeones y un puesto estable. Se había prometido jamás ser conformista como su padre, y lo iba a cumplir.

Oh, y vaya que lo cumplió. Contactar con las personas adecuadas nunca había parecido tan sencillo, solo tenía que dejar de lado cualquier moralismo lastimero y las puertas del ministerio se abrían por sí mismas. Ah, las bendiciones del poder bajo el estandarte del bien común.

¿Y qué si los nacidos de muggles eran perseguidos y marginados? Eran daños colaterales.

—Arthur Weasley —leyó pausadamente mientras una sonrisa se iba formando en sus labios—, acusado de traidor a la sangre, uso indebido de artefactos muggles y, lo que podría ser lo peor, ayudar a los indeseables número uno, dos y tres a escapar. — Alzó la vista y clavó sus helados ojos azules en la furiosa figura frente a él—. Normalmente estos cargos serían acreedores a una pena de un mes en Azkaban y una multa que, con su mísero ingreso, jamás podría pagar.

Por fin entendía la peculiar satisfacción de Lucius al señalar el estatus económico de su familia, el poder sí que cambiaba tus perspectivas.

—Pero creo que ambos sabemos que ese castigo apenas mellaría en sus acciones. —Cuidó de mantener un tono lleno de dulce pena—. Así que, en su lugar, tomaremos a su hija y esposa como garantía de buen comportamiento. Un paso en falso y ellas terminarán en Azkaban.

—¡Eso es ilegal, Percy!

—¿Es que acaso no lo sabía señor Weasley? —Miró a su padre una última vez antes de dictar sentencia—. Las leyes pueden romperse a favor del bien común.


N/A: Yo quería hacer un Percy medio fumado y más relajado, pero he de admitir que eso no es ni un poquillo escalofriante, así que mi mejor intento ha sido este WI de ¿Qué si hubiesen rechazado a Percy en su aplicación para el ministerio? Creo que hay algunas posibilidades de que se le hubiese ido la chaveta y resintiera esa "mala reputación" de su padre.

En fin, gracias por leer, denle mucho amor a Angelito por el subidón en la calidad y suerte en el reto.