El amor no había sido lo mas propio de la gran Santana Lopez, si no que la mayoría eran 'aventuras de una noche' con algunos de los miembros del equipo de futbol o de hockey.
Una de sus 'relaciones' más durareras, por así decirlo, había sido con Noah Puckerman, uno de los 'matones' que disfrutaba tirar a los perdedores a los basureros, o empaparles la cara con un slushie de fresa.
Ella y Puckerman solían tener una 'Sesión de besos' detras del colegio, o incluso, tratar de tener sexo allí. Después de eso, su relación no pasaba de la semana.
Para Santana, el amor no era para ella.
Después de un tiempo, empezo a ver a su mejor amiga, la hermosa rubia, Brittany S. Pierce, como otra cosa. – ¡No!– Solía gritarse, no podía ser lesbiana, ni siquiera bisexual. Ella se había acostado con todos, no podía cambiar eso por una persona.
Solía perderse en los ojos de la rubia, unos hermosos y profundos ojos azules, que reflejaban toda su inocencia y ternura que tenía. No podía evitar suspirar, no podía evitar sentirse enamorada.
Sí, ella y Brittany habían tenido un tipo de 'sexo casual', pero ninguna hablaba de eso a la mañana siguiente, según la morena, era para 'Pasar el tiempo'
¿Lo peor? Fue cuando Brittany quizó hacer el dueto con Abrams, el idiota cuatro ojos en silla de ruedas. Santana no podía evitar sentir celos, porque esa rubia era suya, no de él. Totalmente suya, siempre.
Era oficial.
Santana Lopez se había enamorado de Brittany Pierce.
Ni Puckerman, ni Finn, Ni ningún hombre se podía comparar a lo que la rubia le entregaba, cuando se besaban o tenían sexo en casa de la latina. No era solamente sexo, para Santana, aunque no lo admitiera, era amor.
– ¿Como puedo romper la relación de Britt con Abrams?– Se preguntó. Ya sabía la respuesta, diciendole a Abrams que Brittany había tenido sexo con casi toda la escuela, y que el sexo no significaba nada para ella.
Funciono.
Aún seguían enojadas, aunque a ambas le dolía estar así. ¿Luego? Puck les invita a una cita doble, Él y Santana, Brittany con Artie. Acepto. Tal vez podría dejar esa locura de enamorarse de la rubia y volver a ser heterosexual denuevo.
No. Después de eso Brittany se había vuelto novia de Artie, y Santana, auque fuera en silencio, sufría todas las noches. Habían vuelto a ser amigas, pero para Santana no sería lo mismo.
No.
– Quiero alguien como tu, Brittany Pierce.– Susurró Santana, por lo bajo, para que la rubia no la escuchara.– No, te quiero a tí.
