Prólogos - 1 de 3 - Personaje: Iris-KI
Antes de que los últimos rayos de sol se ocultaran tras una grande colina, una joven conversaba con un extraño sujeto en un pequeño callejón, este en sus aspectos físicos parecía un simple gnomo, en cuanto la joven mostraba ternura en todos sus aspectos.
Al momento de desaparecer el último rayo del sol, ambos sujetos estrecharon sus manos. En ese momento, el hombre cae al suelo con su rostro completamente pálido; a simple vista no mostraba expresión alguna, pero era cierto que el rostro de este hombre mostraba una mezcla de confusión y miedo… su boca pedía auxilio a gritos.
Después de esto, la chica se marcha como si nada hubiese pasado, pero por su expresión facial si se mostraba confundida y con unas cuantas palabras en su mente… "(¡Que fue eso!)" tomando el rumbo para donde vivía.
Antes que nada, es necesario hacer una pequeña observación; este hombre, que parecía gnomo, había citado en aquel lugar a esta chica, sin que ella sospechase de que se tratara. Al parecer, este hombre había hecho un trato con ella sobre una habilidad, pero al momento de haber estrechado ambas manos ella trato de no llevar a cabo ese plan, haciendo algo inexplicable el por qué de la muerte del hombre.
Después de lo sucedido, y antes de llegar a su casa, 3 hombres enmascarados llegan por detrás de ella, y no dudan en lanzársele; esta chica no sabía ni que hacer… sólo era una de tantas, pero...
Por suerte o por alguna otra razón, ella pudo esquivar los ataques de estos hombres. Tomando en cuenta que es una muchacha que no cuenta con ninguna habilidad especial ni mucho menos con un estilo de pelea, (sólo era una persona cualquiera), esa noche se dio cuenta de algo que pudiese cambiar su vida por completo. Cuando esquivaba los golpes de estos sujetos, podía ver claramente los movimientos que usarían antes de atacarla; no sabía exactamente a que se debía esto, pero aprovechó la oportunidad para atacarlos, no con los golpes fuertes de un luchador ni por otra táctica. El único golpe que tiene una mujer para defenderse es el de golpe bajo… así lo hizo con uno y ese fue el momento para salir corriendo del lugar… Ella sigue corriendo hasta estar segura de que los había perdido, al fin ya no pudo más y se detiene a descansar… aún le faltaba mucho para llegar a su casa, pero no tenia más energías para continuar… tal vez al ver los movimientos de estos hombres le había costado energía, así que poco a poco se fue acurrucando sobre las duras y frías banquetas de las calles, tratando de descansar como un pobre vagabundo…
Al día siguiente:
Ella se encontraba descansando sobre unas y blancas y suaves sábanas… su piel lograba camuflarse ante ellas y sólo unos minutos más bastaron para que el sol lograra escabullirse entre las cortinas y lograra tocar el rostro de la joven. Debido a esto, ella abrió sus ojos… muy lentamente, ya que los rayos del sol la encandilaban; al lograr levantarse vio el lugar donde se encontraba, salta de la cama ("¿Cómo?")… miró el lugar, extrañada y entonces, escuchó una voz:
-"Parece como si estuvieras perdida"
-"¡Hermano"
-"Oye... mi madre me mandó a ver como te encontrabas, creíamos que ya estabas muerta, pero veo que desgraciadamente no..."
-(" Imbécil"). Pero... ¿Cómo llegue a este lugar?"
-"¿?!¿?!¿?!"
-"Ustedes. Me encontraron en la calle... me trajeron hasta aquí… ¿es verdad?
-"No sé de que me hablas, ayer te encontrabas muy mal, te dolía la cabeza y te subiste a descansar"
-"Entonces¿lo de ayer fue solo un sueño?
-"¡Vaya!... Sí que esos dolores de cabeza te hacen ver cosas raras, hermanita... cada vez estás mas loca"
-("No cabe duda de que esto no es un sueño, por que será que siempre me insulta)"
El hermano de esta chica salió de la habitación, pero ella estaba confundida… estaba segura de que no se había tratado de un sueño, lo había vivido tan real o al menos que... hubiera vivido una parte de su vida en su mente… sí… eso era... había vivido en su propia mente, aunque ella no lograra entenderlo….
