Buenas a todos los personigenos :D

Hoy al fin comenzare a publicar mi segunda historia, esta vez sobre este par de hermanitos que tanto nos gustan a muchos... y no tanto a otros :B en fin espero que les agrade esta historia tanto como la anterior que publique (LxMisa) y ya saben, un comentario nunca esta de mas, y motiva harto a seguir escribiendo n_n

Capitulo 1...

*¡Ya lárgate Miku entiéndelo! solo te use para mi conveniencia y no te necesito mas

*Pero… ¡Tú juraste quererme!

*¿Quererte? ¿A ti? Imposible –dije mientras me giraba- podrás tener a todos tras de ti en la escuela, pero yo soy una excepción. Mejor vete antes de que todos vean tu desgracia y termines haciendo el ridículo

En la mesa de aquel restaurante se quedo la joven de cabellos azulados rompiendo en llanto, dejándola como protagonista de la escena que todos los demás ahí ahora presenciaban, mientras que el chico de tan aspecto similar a su hermana se levantaba encaminándose al baño de mujeres, tras cierta jovencita que ahora estaba llorando desconsolada. Len entro en el baño, antes asegurándose de colocar un letrero de "piso mojado" ante la puerta, para asegurarse de tener algo de privacidad.

*Rin, ¿estas aquí? ¡Rin!

*¡LÁRGATE! eres un maldito traidor, no quiero nada que ver contigo -la voz de la chica rubia sonaba en el cubículo del fondo-

*Pero Rin, por favor, dame una oportunidad de explicártelo, solo unos minutos -le imploraba casi de rodillas su gemelo-

*¿Y porque debería? te vi Len, estabas besándola, a esa asquerosa... ¡a Miku!

*Si sales por unos minutos te lo explicare

Un silencio momentáneo lleno el lugar, siendo luego interrumpido por el sonido de una de las puertas abriéndose

*Esta bien, pero más vale que sea una explicación sin igual -hablaba la mayor mientras se secaba el resto de sus lágrimas-

*No tardare lo prometo -Len se recargo en los lavabos y comenzó su disculpa- Rin, esta noche, yo sabia que tu tenias una cita con "el", sabes bien lo que siento cada vez que los veo juntos, o cada vez que incluso me dices que saldrán, dime entonces, ¿aun no lo entiendes?

*Entender que cosa -hablo un tanto desconcertada-

*Rin, la única razón por la que esta noche he venido aquí a sido para darte celos -el rostro de ella ahora lucia sorprendido- si así es, celos Rin, al igual que tu sabes cuanto odio a ese maldito azulito, salías con el, así que sabia que si yo salía con Miku, sentirías lo mismo que yo y tal vez lo entenderías

*¿Entender Len? ¿Que cosa debo entender?

*Me gustas Rin, no como mi hermana, sino como una chica, llevo un largo tiempo sintiendo algo más que amor de hermanos por ti, ya no te veo mas como a la hermanita con la que a diario discutía sobre que ropa usar para salir vestidos igual, o sobre de que debería ser la pizza que cenaríamos, no más, no eso, ahora te miro y te veo como la mujer que eres, la mujer a la que tanto amo y tanto deseo...

El lugar quedo de nuevo sumergido en un silencio total, sin considerar claro, la música que aquel cuarteto de violinistas tocaba afuera en el restaurant.

. . .

Muchos se estarán preguntando porque escribo esto, quien soy, y cosas así, y se los diré, pero... supongo que todo aquel que lee esto ya lo adivino. Mi nombre es Len Kagamine, si, ese chico al que todos mencionan por "shouta" aunque sean solo mentiras.

Pues bien, esto que acabas de leer es solo una parte de como fue que logre estar con la persona que mas amo en este mundo, mi hermana. Dime incestuoso, pervertido (que no lo niego) o como tu gustes, pero si sientes interés de saber, como un chico se puede enamorar de su hermana con el tiempo, tal vez quieras saber sobre esta historia, y comprenderás como fue que ahora, mi gemela ha pasado a ser el amor de mi vida.

Todo comenzó hace más o menos 7 semanas, cuando salimos de la escuela, y las vacaciones de verano habían comenzado, rápidamente todos nuestros compañeros (Rin y yo compartíamos salón y clases) hablaban de sus planes vacacionales, sus viajes que llevaban meses planeando, etc etc etc, pero, Rin y yo solo nos miramos mientras ambos pensábamos lo mismo... "verano = encerrados en casa", y así era, nosotros no acostumbrábamos a salir mucho en vacaciones a menos que nuestros padres lo propusieran, pero esta vez, papa había viajado a España por un negocio, cerraría un trato con un importante empresario, que si se lograba significaría un éxito total en su carrera, y mama, ella se fue con unas amigas a un viaje en crucero "solo para chicas", libre de toda compañía masculina, por supuesto invitaron a Rin a viajar con ellas, pero como siempre, ella la pasaba mejor conmigo, aunque casi nunca hacíamos cosas juntos mas que ver tele, jugar videojuegos o cosas así, siempre la pasábamos mejor, pero bueno, no quiero aburrirlos con cosas de ese tipo, así que mejor les contare los hechos tal cual nos sucedieron a mi amore (solemos llamarnos así el uno al otro) y a mi.

El día siguiente al final de clases, decidimos simplemente descansar como osos, ambos despertamos después de medio día, yo por supuesto como buen caballero y hermano, espere a que despertara ella para desayunar juntos, y mientras le prepare su desayuno preferido, licuado de fresa con fresa en trozos, con crema batida servida encima, en un tazón, y cubierto con algo de miel, claro, sin olvidar algo de chocolate liquido que le puse a un lado por si quería también, aunque no lo se, pues si le gusta mucho, igual mi Rin es algo... especial al comer chocolate. Luego de un rato que desperté yo, ella igual bajo a la cocina (nuestra casa era de dos pisos) aun en su pijama, una clase de enorme playera mía que le gusto en el momento que la vio en mi cuarto, de un color gris oscuro con dibujos de guitarras eléctricas y notas musicales por doquier, y claro, como buena hermanita, lo primero que hizo fue darme los buenos días.

*Len, ¿Y mi desayuno? -de verdad pensaron que lo haría cierto-

*Buenos días hermanita, hoy te prepare tu desayuno favorito

*¡YEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEY! ¡Por eso te adoro hermanito!

Mientras ella se encargaba de devorar literalmente todo, le coloque un par de rebanadas de pan francés con mermelada a un lado de su tazón. Me encantaba verla mientras desayunaba y ver los gestos que hacia al llevarse la cuchara a la boca, a pesar de que tenía casi 17 años ya, seguía actuando como una pequeña niñita, a lo mejor por eso me gustaba tanto consentirla.

*Oye Rin, ¿quieres que hagamos algo hoy? quizá podamos salir un rato a...

*¡VIDEOJUEGOOOOOOOOOOOS! -ni siquiera me dejo terminar de hablar-

*Vale vale, entonces termina tu desayuno y

*¡Termine!

*Pero que ra... -a veces yo mismo me sorprendía cuando la veía desayunar o comer algo que le gustaba-

*Bien, mientras preparas la consola subiré a cambiarme y ponerme algo más cómodo

Y así fue, mientras ella tomaba una rápida ducha en el baño del piso de arriba, lave y enjuague los trastes que usamos para desayunar, y me fui a la sala a preparar su videojuego preferido, ¿creen saber cual es?

*Len ya esta... -unos pasos bajando las escaleras me hicieron notar que ella estaba lista- ... ¡yeeeeey! ¡yoshiiiii!

*Rin no se supone que cuando uno se ducha suele cambiarse de ropa -le hacia notar que aun traía lo mismo-

*Pero no traigo lo mismo hermanito mira

En eso, levanto la playera que traía por encima de sus hombros, supuse que solo había cambiado la ropa que traía debajo, pero cuando su prenda había pasado ya por encima de su cintura, me di cuenta de algo, mmmm, interesante.

*¡Rin por Dios!

*A que no te la esperabas hermanito -y solo me sonrió pícaramente-

Rin se había duchado si, pero ahora solo traía puesta la playera y... nada mas, ni su ropa interior, cosa que en ese momento no esperaba, pero, pude ver todo su hermoso cuerpo frente a mi sin tener que intentar espiarla como otras veces que lo hacia por curiosidad.

*Hay hermanito, se nota que eres tan inocente

*Ya, acomódate tu ropa y juguemos

*¡Ok!

Aunque no lo pareciera, Rin era realmente buena en videojuegos, a la fecha, no conocía algún juego que ella no hubiese acabado ya, pero, yo era todo lo contrario, perdía y perdía como un novato, pero, no se si sea por que, no sabia jugar, o porque en esos momentos lo único que pensaba era en lo que vi, como lo describiría rápido... fue perfecto. Rin, aunque no muy desarrollada aun, era extremadamente hermosa, y no es mi opinión como su hermano, sino como hombre, si, no tenía un físico excepcional como Meiko-sensei de la escuela, y ni hablar de Luka-sensei, pero, mi Rin tenia otras cualidades que la hacían mucho más hermosa que cualquier chica... un cuerpo perfectamente delineado, unos senos que aunque pequeños, eran perfectos, con unos pezones pequeños y de un color algo rojizos, pero muy apetecibles. Además, su rostro y sus ojos... sus ojos, sin duda era lo que mas me enamoraba de ella.

*Muahahahahaha, de nuevo perdiste Lenancio

*Ya te dije que no me llames así Rin, es raro

*Pero suena genial Lenancio -y solo se dedico a molestarme con lo mismo un rato-

*Mejor me voy, un amigo me pidió que le ayudara con unas cosas de su computadora

*Cierto, ¿que hora es?

*son las... ¡que demonios! 11:15 pm -sin darnos cuenta, ya llevábamos casi 9 horas jugando, vaya vicio-

*Yo tengo que irme, debía conectarme igual a hablar con una persona hace como 15 minutos, así que, yo mientras iré a pedir algo para cenar y mientras desconecta la consola, ¿si Lenancio?

*¡Que no me digas así!

*Si si Lenancio como quieras

Así la pasamos un rato, luego de que Rin pidiera una pizza italiana para cenar, y de que comiera cada quien su parte, ambos subimos a nuestros cuartos, no sin antes desearle buenas noches a mi hermanita y dulces sueños. Al estar encerrado en mí habitación, y luego de prepararme para dormir, me tire en mi cama, pero sin éxito, no podía conciliar el sueño por una razón algo obvia. Al instante en que cerraba mis ojos, me venia a la mente la imagen de Rin desnuda, Dios que tortura, desear tanto a alguien, que este a no mas de 10 metros de ti, y que no puedas hacerla tuya, buena suerte la mía.

En una de esas, recordé una cierta pagina de la que un amigo de la escuela me conto, una pagina de internet donde el controlaba esas emociones, y como todo ser humano, la curiosidad me venció. Me levante de la cama y me dirigí a encender mi laptop del escritorio, pero mientras cargaba bien note como mientras yo mas pensaba en mi Rin, un cierto bultito como de algo bien conocido se comenzaba a notar en mis shorts para dormir. Al fin cargo la pagina que me contaron, y entre.

Parecía un chat para conocer gente, pero cuando lo note mejor, supe que era algo así como para citas y ligues en internet, de nuevo la curiosidad me venció y termine entrando en una de las tantas salas que había... "fantasías". Al principio pensé que era mala idea, pues ver a tantas personas narrando como deseaban a otras personas, o sobre ideas que se compartían sobre el tema, pero la curiosidad hizo nuevamente su magia y en medio de mi interés hubo un nick en la sala de chat que me hizo cambiar de parecer y quedarme un rato más...

Nekita Kagamine...