Disclaimer: Nada de esto me pertenece por mucho que lo desee… esto es propiedad de Tolkien, aún así esta obra posee personajes creados por mi y algunas modificaciones =D
Capítulo 1: Partimos de Rivendel
La mañana era soleada y los pájaros cantaban alegremente, no tan así eran los pensamientos de Lord Elrond que estaba preocupado por el destino del anillo y la Tierra Media. Estaba absorto en sus pensamientos cuando Gandalf el gris entró a su estudio sin aviso sobresaltándolo "debería tocar antes de entrar" le regañó Elrond
Gandalf sonrió "lo lamento Lord Elrond, no fue mi intención" con la seriedad aún en el rostro el elfo dijo "sé que no fue tu intención Mithrandir"
Los dos pasaron un largo rato hablando y debatiendo el destino del anillo y quién debería ser el portador de semejante tarea
"Frodo es el único que ha aguantado tanto tiempo el peso del anillo sin ser corrompido! Él debe llevar a cabo esta tarea" sentenció Elrond con el semblante fruncido
"él nunca debería haber llevado ese peso, no era su responsabilidad…" pronunció estas palabras con culpabilidad, se sentía responsable de que Frodo estuviera pasando por eso
"Mithrandir, el tiempo de los elfos se acaba en este mundo y tu lo sabes mejor que nadie… y cuando nos hallamos ido y el anillo no este destruido… quién los ayudará eh? Los enanos? … Gandalf" dijo con cierto aire de rudeza en la voz "el anillo no se quedará aquí en Rivendel"
El mago frunció el seño y suspiró frustrado "si esa es tu dedición…" tenía la esperanza de hacer cambiar de idea al terco elfo pero no hubo resultado.
Justo en ese momento llegaron los representantes de cada raza admirando la hermosura de la ciudad y el bosque de Rivendel, los altos edificios, las hermosas casas, las flores multicolores adornando una manto verde esmeralda, el palacio imponente, las blancas nubes, el sol radiante y la hermosura del bosque y sus habitantes.
"Mithrandir, debo dejarte, tengo otros deberes que hacer" y dicho esto el delgado elfo salió de la habitación dejando a Gandalf con un peso en el corazón…-" hay Frodo… lamento haberte metido en este aprieto…"- Y así el mago se retiró del estudio para dirigirse a sus aposentos a descansar, pensando frenéticamente en como solucionar las cosas…
"Sean bienvenidos a la magnífica ciudad de Rivendel" recibió cortésmente a los invitados Lord Elrond "han hecho un largo viaje y estarán cansados además de hambrientos, por favor pasen a nuestro salón donde serán atendidos y luego los dirigirán a sus respectivos aposentos" pronunció estas palabreas el elfo haciendo señas de que lo siguieran
La ciudad era magnífica, la música sonaba en el ambiente con la bella voz de las doncellas élficas dándole bienvenida a los invitados, el agua del río y cascadas era pura y exquisita, celeste cristalina.
Todos iban en silencio hasta que una de los representantes de los enanos habló: "Lord Elrond, admito que esta ciudad es bastante impresionante…" todos miraron extrañados al enano por el reconocimiento, después de todo, todos saben la enemistad entre enanos y elfos-"pero su seguridad es un fracaso, durante el camino de ida no hemos topado con una cantidad innumerable de arañas y otras bestias" dijo con voz ronca el enano
"lo sé señor enano, lo sé… es por el poder del anillo único que han sido atraídas y este lugar ya no es seguro como antes" dijo Elrond con la seriedad palpado en sus gestos " es por ello que os he convocado a este concilio… por la seguridad de la Tierra Media y de las razas" todos callaron nuevamente hasta llegar al comedor donde allí comieron y bebieron en abundancia.
Aragorn, hijo de Arathorn II y heredero a Isildur se mantenía serio y sin socializar demasiado al igual que Legolas, príncipe de Bosque Negro. En medio de la cena se armó un pequeño revuelo entre los elfos que cuchicheaban en su lengua natal "Heruamin…" decía con paciencia uno de los elfo a Legolas antes de ser interrumpido por este. No pudo escuchar demasiado el resto de la charla porque hablaban demasiado rápido y silencioso, pero Legolas tenía cara de estar molesto "Quel kaime…" dijo Legolas parándose bruscamente de la mesa y retirándose del salón. Todos se quedaron mirando a los elfos que miraban incómodos la mirada de interrogación en el rostro de todos.
Aragorn decidido a saber que ocurría y fue tras del príncipe que había dejado la sala de tal modo. No pasó mucho tiempo hasta que se encontró con Legolas Sentado en la sima de un árbol, demasiado alto de escalar para un humano. Resignado a no poder hablar con el elfo se puso a contemplar la noche. Era hermosa, las estrellas brillaban con toda su intensidad y un aire fresco soplaba haciendo que el perfume de las flores se esparciera por todo Rivendel…
"Kela" dijo una voz algo enfadada tras de él haciendo que se sobresaltara
"Amin hiraetha Legolas" trató de escudriñar en sus ojos y su semblante para encontrar algún indicio de lo que buscaba, pero solo logró incomodar más al elfo…
"deja de hacer eso" dijo molesto
"lo… lo lamento Legolas" dije algo apenado
Pasó un largo rato que miraron al cielo y hablaron riéndose de buena gana…
"lo sé, lo sé… es solo que yo digo que los enanos son tan… sucios!" dijo riéndose Legolas pero lo decía enserio
"elfo quisquilloso" bromeó Aragorn
"humano maloliente" río Legolas "Estel…"
"que sucede Legolas?" dijo este mientras jugueteaba con el césped
"Amin… me duele"
"que cosa Mellon nin?" dijo preocupado acercándose a su amigo pasando a su modo sanador
"tengo herido el hombro…" dijo frunciendo un poquito el ceño
"como no me lo dijiste antes?" dijo algo alarmado
"no quería que nadie se enterara, no sé porque pero si no me siento… débil" calló unos momentos mientras fruncía un poco más el ceño
" es por eso que discutían ustedes?" preguntó Trancos mientras ayudaba a Legolas a ponerse en pie, este asintió levemente…
"no se lo digas a nadie por favor, Mellon nin" dijo legolas poniendo una mano en el hombro de su amigo
" pero Legolas…" vio los ojos suplicantes de su amigo " de acuerdo… iremos a tu habitación así te trato la herida" caminaron hasta los aposentos de Legolas y este se quitó la túnica y su camisa, dejando al descubierto un a herida no muy profunda, pero si bastante grande.
"bien, ya vuelvo iré a buscar las hiervas a mi habitación" dicho esto el humano se marchó. Al rato regresó con ellas. Limpió y vendó su herida "no es muy profunda y mañana en la mañana te podré quitar la venda, aún así te vendría bien descansar. Vendré antes de que comience el concilio a quitártela…"
"Hannon le" dijo el elfo mientras se colocaba otra camisa nuevamente " ah y trata de venir lo mas temprano posible, así puedo darme un baño antes ir al concilio, no soporto más esta mugre" Estel rió y Legolas se le unió a él
"elfo quisquilloso" bromeó Aragorn
"humano maloliente" río Legolas
"Quel kaime" dijo Aragorn como despedida
"Quel kaime" saludó el elfo antes de meterse a la cama y quedar profundamente dormido…
Era de mañana y Legolas gozaba tranquilamente su sueño cuando escucha que alguien toca la puerta. A pesar de ya saber quién era y de que él lo había llamado para que viniera temprano, dijo algunas maldiciones élficas
" un momento "dijo legolas aún algo dormido. Se desperezó y abrió la puerta (antes se cambió)
" te desperté?" dijo Aragorn con una mirada divertida
"no, en absoluto" dijo algo fastidiado Legolas "pasa"
Estel entró a la habitación y saco unas hiervas "bien, vamos a ver esa herida, recuéstate aquí y sácate la camisa"
"de a cuerdo" dijo el elfo haciendo lo que Estel le había indicado
Este retiró las vendas y revisó la herida "para mañana ya estará curada, pero aún así te pondré esta hierba que acelerará el proceso"
"Hannon le" dijo legolas reincorporándose
"no hay problema mellon nin" dijo mientras se dirigía a la puerta "ahora me retiro, así tu puedes darte el baño que querías como buen elfo quisquilloso" dijo mientras reía
" y tu vas a revolcarte al lodo como buen humano maloliente" rieron ambos y Aragorn se fue
"y ahora procederé con mi baño" dijo pensando en voz alta
Toda la mañana el concilio estuvo debatiendo el que, como, quien y porque. Hasta que llegaron a un acuerdo
"Yo llevaré el anillo" dijo un pequeño hobbit llamado Frodo
Todos miraron extrañados, pero finalmente aceptaron
"Ustedes nueve se llamarán la: "comunidad del anillo", serán fieles unos a otros y acabarán con este mal" dijo Elrond aliviado por haber llegado a un acuerdo al fin
Y así la comunidad compuesta por 9 miembros partió de Rivendel, así tierras desconocidas y diversos peligros… Caminaron por 10 días y la tención entre Legolas y Gimli no disminuía. Al enano no le agradaba ni pizca tener que viajar con un principito orejas picudas.
Al principio todos estaban aliviados porque su relación era: "tú me ignoras y yo te ignoro. Y así estamos en paz". Pero con el tiempo pasó a ser: "tu me molestas y yo te molesto. Y así aprenderás". Las peleas entre Gimli y Legolas eran agobiantes para el resto de la compañía y estaba siendo agobiante en ese momento
"Señor elfo, le informo que usted no sabe nada de lo que es una buena arma…" La pelea de ahora: Gimli le dijo a Legolas que los arcos no sirven
"Los enanos si que NO reconocen lo que es una buena arma ¡Esas hachas tan incómodas y pesadas! Lo ideal son los arcos, armas de larga distancia que no permite que nos hieran!"
" Pamplinas!" grito Gimli furioso "quieres que peleemos así te demuestro lo eficaz que es mi arma?" levanto el hacha y comenzó a acercarse a Legolas peligrosamente
"Me encantaría demostrarte que soy mejor que tú!" exclamo Legolas esquivando el hacha mientras tensaba su arco
"BASTA USTEDES DOS!" gritó Gandalf enfurecido, pero le dieron muy poca importancia y continuaron su duelo
Legolas estaba a punto de volarle la cabeza con su flecha a Gimli cuando Aragorn lo empujó y lo sostuvo fuertemente mientras el elfo forcejeaba por librarse. Entonces Gimli se acercó para clavarle el hacha
" Boromir sostén a Gimli!" gritó Estel desesperado y así lo hizo este.
Los hobbits miraban impresionados el odio que se tenían Legolas y Gimli, entonces gandalf se puso en medio de los dos hombres
" los dos desde que salimos han estado agrediéndose mutuamente! Las dos especie son iguales, ninguna es mejor que la otra… por Eru, son compañeros ya basta de peleas!" Gandalf esta vez si se había enfurecido, el enano y el elfo bajaron l mirada y Gandalf se fue más adelante con los 4 hobbits.
Los dos hombres soltaron a Legolas y Gimli y se quedaron mirando las miradas de odio que se largaban, Gimli comenzó a caminar y dijo: " aún así las hachas son mucho mejor que los arcos" Legolas no pudo resistir más y saltó para ahorcar al enano, pero justo a tiempo Boromir y Aragorn lograron agarrar al elfo que temblaba de furia…
Esperaron a que Gimli se hubiera alejado suficiente y finalmente dejaron libre a Legolas
"Amin delotha han" dijo con un voz tan fría y una mirada tan asesina que a los dos humanos les provocó escalofrío. El elfo volvió a caminar aún temblando ligeramente…
"Legolas no digas eso!" dijo Boromir tratando de calmar al alterado elfo
"pero si es verdad, es un… es un… " calló y comenzó a mirar a su alrededor un tanto alterado, los dos hombres se miraron entre sí y comenzaron a desenfundar su espadas. Legolas sacó un flecha y tensó su arco disparando mortalmente a un huargo que saltaba hacia ellos, los dos hombres mataron a su jinete y los tres corrieron en dirección de donde estaban los demás, seguramente también los estaban atacando…
"Gimli! Protege a los hobbits!" gritó Gandalf mientras apuñalaba a un orco que se acercaba peligrosamente a él "dónde diablos están los otros tres?" dijo al mismo tiempo que liberaba a Sam de un orco que lo apartaba del grupo. Justo en ese momento llegan Boromir, Aragorn y Legolas derribando a tantos enemigos como se les hizo posible.
"Merry!" Gritaba Pipin que intentaba agarrar a su amigo que era llevado lejos por un jinete de huargo y antes de desaparecer en la espesura del bosque una flecha le atravesó el cuello al animal provocando que su jinete y el hobbit cayeran "si!" dijo Legolas celebrando su puntería y lanzándose sobre el orco que tenía aprisionado a Merry "Suéltale!" gritó el elfo apoyando su cuchilla en el cuello de la vil criatura, este obedeció y el hobbit corrió a la protección de sus amigos.
En un descuido, una milésima de segundos, el orco levantó una navaja atravesando el brazo de Legolas "Ahh!" salió un grito ahogado de la garganta del elfo y antes de poder reaccionar el orco lo tomó por el cuello tirándolo bajo él y asestándole un navajazo en el hombro izquierdo. Entonces la criatura alzó el puñal resplandeciente a la luz rojiza del atardecer, dispuesto a enterrárselo en su pecho y comenzó a descenderlo. Todo pasó en cámara lenta: el intentando librarse y cerrando los ojos fuertemente para no ver el mortal golpe, un grito de dolor proveniente del orco y después…nada. Abrió los ojos lentamente y encontró al cadáver del orco tirado a un lado suyo con Gimli incrustándole el hacha en la espalda de este.
"Gr-gracias…" tartamudeó el adolorido elfo
"no hay de qué señor elfo" dijo el enano algo engreído pero sincero
"Legolas tu hombro y tu brazo están sangrado!" dijo Aragorn un tanto alterado, acercándose a él para revisar sus heridas.
"ah?" fue lo único que pudo decir Legolas aún algo aturdido. Al decir verdad se había olvidado de sus heridas
"estás sangrando" dijo Aragorn mientras obligaba a recostar al elfo
"cierto…" dijo Legolas con un hilo de voz
Aragorn limpió y vendó sus heridas y mientras se ponía en pie dijo: "por suerte no eran graves y sanarán en algunos días" le dedicó una sonrisa al elfo mientras ofrecía una mano para que este pudiera ponerse en pié. El la aceptó.
"bueno, todos están bien, pero no podremos avanzar en la noche… caminaremos hasta encontrar un lugar seguro y allí nos quedaremos" dijo Gandalf mientras se adentraba en la espesura del bosque con el resto de la compañía detrás.
Caminaron un rato más y la noche ya se les venía encima. Gandalf iba adelante dirigiendo, luego seguía Boromir con los hobbits que bromeaban y reían, después Aragorn y Gimli que hablaban animadamente y por último Legolas, que iba solo y silencioso pensando en lo ocurrido hace algunas noches…
"Los turnos de vigilancia serán: Yo, Boromir, Aragorn, Gimli, Legolas, Merry, Pipin, Sam y por último Frodo" dijo Gandalf mientras todos se sentaban a cenar alrededor de un gran fogata…
Todos charlaban animadamente cuando Legolas se queda muy silencioso y serio
"qué sucede mellon nin?" preguntó Aragorn por el repentino cambio de humor de su élfico amigo
" no muy lejos hay una gran cantidad de presencia negativa, probablemente un ejercito orco, de una cantidad aproximada de 70 soldados…" todos se incomodaron por la noticia "y… están torturando a alguien. Puedo escuchar sus gemidos" los hobbits se estremecieron con la idea y los otros tres clavaron la mirada en el elfo "tienen dos rehenes, creo que hombre y mujer" el elfo podía oír los llantos de ambos y como la respiración de sus compañeros se aceleraba…
"Tenemos que ir a ayudarlos!" gritó Aragorn poniéndose en pie
"no hay que arriesgarnos! Son 70 contra 4!" dijo Gandalf agarrando a Aragorn por los hombros impidiendo que caminara
"pero…" se quejó Estel
" Sé que duele, pero hay que ser fuertes y dejarlos allí… es su problema, no el nuestro…" dijo Gandalf claramente angustiado
Todos quedaron en silencio hasta que la noche se vio interrumpida por un grito atroz de odio y dolor "¡NOOO!" todos los de la compañía se sobresaltaron por dicho grito haciendo que se les humedeciera levemente los ojos. Porque eso solamente podría significar una cosa… alguien había muerto. Otra vez se escucho otro grito cargado de ira, odio y un millón de emociones más "AHHH!" el grito era desgarrador "TE ODIO! TE ODIO!" los gritos cesaron y no se volvió a escuchar nada más en toda la noche, dejando un nudo en la garganta en todos los de la compañía…
* Mithrandir = Peregrino gris (es el nombre que dan los elfos a Gandalf)
*Heruamin = Mi Señor
*Quel kaime = que tengas buenas noches
* Kela = Vete.
*Amin hiraetha = Lo siento
*Amin= Yo
* Mellon nin = Amigo mío.
*Hanon le = Gracias
*Amin delotha le = Te odio
Bueno, bueno! Este es mi primer fic en esta página =D así que espero que les guste (se aceptan todo tipo de comentarios). Cuidense =)