Los personajes no me pertenecen son propiedad de Masashi Kishimoto.
Universo alterno
LAS ROSAS BLANCAS SE VOLVIERON ROJAS.
PRÓLOGO
Me encontraba en mi cuarto, me habían traído aquí después de lo que paso, estoy sentada en el piso con la mirada perdida. Escucho que tocan a la puerta, seguramente es mi hermana o una de mis amigas, no respondo, no tengo voz para hablar; solo pienso, pienso en todo lo que pasamos para llegar a este día, y que sucediera algo así.
Aún sigo vestida, se que me tengo que cambiar que a eso he venido, pero he entrado en shock; "tengo que ir a verlo, tengo que saber que pasó pienso, respiro profundo y exhalo, me levanto observando una gran mancha roja en mi regazo pintando mi vestido blanco y también esta en mi ramo de rosas blancas el cual aun sostengo, las observo recordando su rostro y mi angustia.
Comienzo a quitarme el vestido dejando al descubierto el conjunto de lencería que escogí para la ocasión y como sorpresa para él.
Escucho nuevamente que llaman a la puerta, los ignoro y me dirijo al closet, tomo un pants, una sudadera y unos tenis, me visto con ellos rápidamente pidademente y entro al baño para lavarme el rostro. Me observo en el espejo, en mi rostro se puede ver la la preocupación y los surcos que dejaron las lágrimas , me lavo el rostro para quitarme todo el maquillaje, lo seco con una toalla y ahora quito las orquídeas que sostienen mi cabello, lo dejo caer suelto, se forman unas ondas en la caída y recuerdo que a él le gusta demasiado mi cabello. Lo tomo entre mis manos para hacer una cola de caballo y me dirijo a abrir la puerta, cuando estoy frente a ella respiro y digo que tengo que ser fuerte por todo lo que viene, que ya hemos superado suficientes cosas y que podremos con esto.
Mi hermana esta afuera esperándome, me ve y dice:
Yo te llevare -
Gracias –
Baja las escaleras y yo la sigo, ya tiene todo listo para salir, se ha cambiado por algo cómodo. Estamos en el auto, lo enciende y salimos hacia el hospital, mi corazón palpita frenéticamente, estoy ansiosa por llegar comienzo a jugar con la cinta de la sudadera.
Tranquilízate, necesitas estar en calma para poder verlo, inténtalo, no queremos que te desmalles sí.-
Llegamos al hospital y empiezo a hiperventilar, mi hermana me toma de la mano y me da una sonrisa que me transmite un poco de paz y salgo del auto. Camino por la entrada del hospital, pregunto en recepción por él, me dirijo a la sala de espera, me dijeron que esta en terapia intensiva, me dirijo a la sala de espera donde se encuentran nuestros amigos y familiares, todos se ven preocupados, se me quedan viendo esperando que caiga, pero solo me siento en una de las sillas a esperar.
