Marcas Del Destino
Capítulo 1 Bienvenida a la familia Prólogo:Muchos dicen que nuestros destinos están palpitantes en nuestras vidas desde el mismo día que llegamos al mundo, otros piensan que depende de las circunstancias de nuestras vidas y lo que suceda a partir del primer segundo fuera de nuestras madres.
Así empieza mi historia, que sucede cuando uno de los pasos más importantes de nuestras vidas es interrumpido? Qué pasará luego que nuestras vidas tomen un giro de 180 grados, solo por el beneficio de las personas a nuestro alrededor? Puede ser solo una oportunidad para probar nuestro valor, o simplemente la posibilidad de seguir viviendo…
(…..)
Caminaba de un lado a otro frente a la habitación donde su mujer, nuevamente, estaba por dar a luz a su tercer hijo.
Ya tenía dos varones, se sentía orgulloso ante eso y la emoción de tener otro niño en sus brazos lo consumía, después de todo no había más honor para un rey de una raza guerrera como los Sayajins, que todos sus hijos fueran varones.
En ese instante la puerta se abrió y sin pensarlo dos veces el Rey entró, encontrando en la cama a su mujer, un poco cansada por el parto claro. -y el bebé?- preguntó sin recelo a uno de los médicos.
-señor, tenemos noticias que no le van a agradar...- había que tener con gran valor para mirar al rey a los ojos y posiblemente la voz se hizo un hilo al pronunciar con miedo la frase que haría, sin dudar, enfadar a aquél indiferente rey -el bebé es una niña...-
El rey se tomó unos segundos para analizar aquella respuesta... Una niña... Una mujer... Una hembra... No podía dejarla allí, no! Su casta, su honor se vendría abajo, no podría dejarla viva, no lo haría.
Con la decisión tomada fue a la habitación donde tenían a la pequeña, la levantó y sin más apretó el pequeño y débil cuerpo de aquella criaturita hasta dejarla sin aire.
-desháganse de ella- fue lo último que pronunció el Rey dejando caer el cuerpo "sin vida" de la criaturita. El soldado encargado de deshacerse del cuerpo era Bardock, un simple guerrero de clase baja que tenía un trabajo que hacer. Tomó el infantil cuerpo saliendo del castillo, debía dejarlo en el incinerador y justo antes de hacerlo, dio una débil señal de vida. El guerrero no era capaz de matarla... Era muy pequeña... Muy débil... Muy indefensa. Miró a ambos lados, no lo veía nadie, oculto a la pequeña en una manta y salió volando hacia su hogar, ahora cuidaría la pequeña y nadie se enteraría de la verdad, en especial el Rey.
(….)
Había visto muchas veces a mamás embarazadas, sabía que los bebés crecían en el estómago de las señoras, haciendo que se les hinchara como si se hubieran comido a un animal muy grande, su pequeña cabecita comenzó a calcular muy rápido, si nunca había visto a su tía Gine así, ¿de dónde había aparecido esa niña que ahora se escondía detrás de la pierna de su tío como ella lo hacía detrás de la de su padre?
-Bardock, esto no está bien
-¿empezarás de nuevo con eso, hermano?
-empezaré siempre con eso hasta que tu cabeza empiece a razonar como debería, hace tres años que te lo digo, y aún no has hecho nada al respecto
¿De qué estarían hablando ahora su papá y su tío? Parecían muy molestos entre sí, debía ser algo serio para que aquello fuera posible. La otra niña era muy diferente a su tío o a su tía, no tenía parecidos ni siquiera con sus queridos primos, y es más, había oído a su abuelo decir que era la primera vez que veía a una sayan de raza pura con el cabello de aquel tono, eso solo había hecho crecer su infantil pero justificada curiosidad.
-Ps- la llamó su padre, haciendo un lado su capa, la cual la cubría completamente -¿por qué no vas fuera con Veggita? Tengo que hablar cosas de adultos con tu tío
"cosas de adultos", odiaba esa frase, siempre que la oía tenía que irse y era algo que no le gustaba, sin embargo, muy a su pesar, aceptó las órdenes de su padre. Ese día era especialmente frío, es decir, para un planeta donde los habitantes son llamas de fuego andantes, lo era, sin embargo la niña invitada no parecía sentirlo, ¿cómo le habían llamado su padre y su tío...?
-Veggita, ¿tú eres hija de mis tíos, entonces, significa que eres mi prima?
-eso creo
-¿te gustaría ir conmigo al bosque?
Esta vez se tomó su tiempo para pensarlo, la descripción que su padre le había dado de la niña-León había sido que "es demasiado afectiva, su madre la había criado para respetar todo tipo de vida y eso a menudo solo lograba lastimarla, pues se mete en muchos problemas por su inocencia" y ella no quería estar en problemas, ya que su padre la castigaría muy probablemente.
-¿quieres?- la niña de ojos verdes reiteró la pregunta, había estado esperando a su respuesta, y cuando la vio negar y marcharse, no pudo hacer más que bajar las orejas y volver dentro para buscar a su hermano, pensando en que quizás él si quiera acompañarla. Ninguna sabía que eso, más allá de lo que alguien pudiera creer, solo era el comienzo de su larga amistad.
