Carmesí, por donde mires todo es carmesí, tú que eres, "NO", eras Dios, has caído, aquellas balas disparadas por quien menos pensaste, te han hecho saber que no tienes y nunca tuviste algo de divinidad.

"Duele", las heridas, la verdad, la derrota, todo absolutamente todo duele y no encuentras mas bálsamo que gritar, gritar hasta quedarte sin aliento, mientras el sabor metálico inunda tu paladar.

Y con las pocas fuerzas que te quedan logras verlo, aquel que fue tu némesis, tu igual, y que como cruel broma viene, estás seguro, a reclamar la victoria, SU victoria.

"es hora" oyes la voz del que siempre te acompaño estas seguro que es mejor así, después de todo qué clase de vida te espera en caso de sobrevivir, NO, aun eres demasiado orgulloso para aceptar tan patético destino, antes prefieres morir.

"37, 38" sientes como todos tus latidos disminuyen y la conciencia comienza a abrazarte, y lo miras por última vez, al que fue el mejor adversario en este juego macabro.

"jaque mate" sonríes, con burla, ironía, para él, solo para él, porque al final nadie gano, EL, que cayó ante ti, y TU, que en pocos segundos caerás ante lo que supiste no podías escapar.

"39, 40" cierras los ojos y aspiras por última vez el aire del mundo que quisiste cambiar. "oh si, dos perdedores y ningún ganador" así es como tenía que ser, por que el juego siempre fue de dos, de ustedes dos.