Capítulo 1 Una visita y la tristeza de un adiós
Las temperaturas bajaban cada día mas, conforme se acercaban las fechas de descanso de diciembre, pronto comenzarían las festividades y muchas casas ya estaban adornadas de acuerdo a la época. Sakura caminaba a la secundaria como todos los días, Kero se había quedado en casa puesto que tenía meses de no tener ningún evento fuera de lo común. La de ojos verdes a veces pensaba en todo lo que paso hace ya cuatro meses y aunque extrañaba a Akiho y sabía que verse de nuevo sería imposible, le daba calidez en su corazón saber que todo había resultado para bien. Siempre sería un bonito recuerdo en su vida
Sumida completamente en sus pensamientos había llegado a la secundaria, sus compañeros como ella estaban bastante abrigados, ya que el día si estaba bastante frio. Recorrió el camino a su salón y le extraño que Shaoran no la estuviera esperando fuera de su aula, como hacia todos los días desde hace cuatro meses, cuando por fin su relación se había vuelto más formal y el chico de ojos ámbar ya no cargaba con el peso de la espera del momento
-Me comentó Naoko que no ha llegado- expresó Tomoyo al ver a su amiga con un semblante de duda. Ante este comentario Sakura decidió revisar su celular a ver si había algún mensaje, a lo cual se desanimó pues no encontró en el aparato la respuesta a la ausencia de su persona más querida. Le envió un mensaje preguntando si algo pasaba, con la esperanza de obtener una réplica, sin embargo, el toque del timbre de la secundaria la obligó a guardar el aparato y esperar hasta el receso por alguna respuesta
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-Madre, enserio no entiendo a qué se debe su visita- exclamó Shaoran aún sorprendido por la presencia de la líder del clan Li aquí en Tomoeda.
-Xiaolang, tú deber esta con el clan eso es algo que hemos conversado múltiples veces durante nuestras llamadas- Ieran se encontraba tranquila tomando una taza de té mientras su hijo parecía estaba al borde del colapso nervioso -Además- prosiguió la líder -habíamos acordado que ibas a apoyar a la dueña de las cartas mientras el momento llegaba y luego volverías a Hong Kong. Han pasado cuatro meses y el consejo se encuentra ansioso por tu regreso-
-Madre, como le indique en nuestra última conversación, mi lugar es aquí con la dueña de las cartas- el chico de ojos ambarinos trataba de hacer entrar a su madre en razón. Ya bastante angustiado se encontraba al saber que había faltado a clases y no había sido capaz de escribirle a Sakura
-Sé que la dueña de las cartas es alguien importante para ti hijo, pero debes entender el clan te necesita para que cumplas tus deberes como futuro líder-
- ¿Qué pasaría si renuncio a mi puesto como futuro líder? - desafió el ambarino. Shaoran tenía muy claro lo delicado del tema y sabía muy bien las consecuencias de lo que estaba proponiendo. Ieran notó como el color ambarino de los ojos de su hijo se volvía más intenso con cada segundo que pasaba después de haber formulado esa pregunta. Sabía que la dueña de las cartas era la persona destinada para su hijo, pero él aún no podía quedarse en Tomoeda. Ese destino juntos estaba en China, no en Japón, muy al pesar de los jóvenes.
-Hijo, sabes las consecuencias que conlleva renunciar al título de futuro líder- Ieran se levantó de su silla y se acercó un poco más a Shaoran -Sé que deseas estar aquí en Tomoeda con la elegida de Clow, pero me temo que eso no sucederá por ahora-
-Deme una razón Madre. Sólo una razón para tener que volver- indicó Shaoran evitando la mirada de su madre.
-Debes entrenar para protegerla- respondió Ieran mientras colocaba su mano sobre el hombro del muchacho -Así no es como el clan quería que te enterarás, pero en tres años un nuevo enemigo vendrá por las cartas y por la dueña y según las predicciones sólo tú puedes protegerla-
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Era la hora del descanso y Sakura estaba entre la ansiedad y la preocupación. Shaoran seguía sin contestarle a lo que no le podía atribuir que fuera algo bueno, tanto así que su mirada estaba ida sin tocar siquiera el almuerzo. Tomoyo escribía por su celular mientras reconfortaba a su amiga
-Ya verás que todo va a estar bien, debe existir una explicación- le comentaba la amatista a su amiga y la invitaba a que intentara comer
-Tengo una corazonada Tomoyo, algo no está bien- le contestaba la de ojos verdes. Sakura podría ser distraída, pero era muy perceptiva. En ese momento el celular de Tomoyo volvió a sonar avisando que un mensaje había llegado. Era un mensaje de Meiling, Tomoyo le había escrito para saber si ella tenía idea de que estaba pasando.
"La madre de Shaoran está en Japón" decía el mensaje a lo cual Tomoyo se sorprendió bastante.
-Sakura, nos faltan solo dos clases, ¿qué te parece si apenas terminemos vamos a la casa de Li? - le comento a su amiga que apenas y comía
-Pero tienes coro hoy ¿cierto? - contesto la castaña más desanimada con la comida entre los palillos -no voy a ir, prefiero acompañarte- le dijo la amatista tratando de ver algo de ánimo en los ojos de su amiga.
-Está bien, gracias Tomoyo- contesto esta última, realmente estaba agradecida de tener a su amiga apoyándola en este momento, en el cual no sabía porque, pero su sexto sentido le avisaba de algo.
La madre de Li aquí, espero no sea lo que pienso se dijo a sí misma la amatista tratando de que Sakura no notara su preocupación
Shaoran se encontraba terminando de empacar sus últimas cosas. Muy a su pesar, después de que su madre le había confesado el verdadero motivo por el cual debía regresar, había aceptado volver. La única condición que había pedido era que se le dejará hablar con Sakura y explicarle la situación.
-Madre, le pido que me deje explicarle todo a Sakura. Me niego a irme repentinamente de nuevo-
-Xiaolang...-Ieran sabía lo terco que podía llegar a ser su hijo. Al fin y al cabo, era una copia exacta de su padre -Está bien- accedió la matriarca -pero yo seré quien le explique a la dueña de las cartas la situación-
-En verdad que es la líder del clan- suspiró Shaoran -no hay forma de llevarle la contraria y siempre terminamos haciendo lo que ella quiere-Justo en ese momento pudo escuchar a su madre hablando con la encargada de recepción. Parece ser que dos jovencitas habían llegado.-Sakura- dijo Shaoran en un susurro.
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Nerviosa era una palabra que no alcanzaba a describir lo que Sakura sentía en ese momento. Tomoyo trataba de calmar a su prima y mejor amiga, pero después de leer el segundo mensaje que envió Meiling no encontraba como reconfortarla.
"Tía Ieran va por Shaoran"
Cuando Tomoyo vio ese mensaje no pudo ocultarlo más y se lo mostró a Sakura. Sakura por su parte, al leer ese mensaje sentía como el mundo se le venía encima de nuevo, pero no podía llorar. No todavía ya que al menos necesitaba escuchar de boca de Shaoran los motivos. Ambas chicas se encontraban frente a la puerta del apartamento cuando está se abrió repentinamente. Y para sorpresa de ellas fue Ieran Li quien las recibió.
-Es un gusto volver a verlas pequeñas. Por favor pasen adelante creo que hay algo de lo quedebemos hablar-Ieran seguía tan hermosa como la última vez que le habían visto cuando visitaron Hong Kong. Su piel de porcelana no mostraba ninguna imperfección, su cabello largo y negro caía sobre los hombros de la hermosa mujer. Quizás el único cambio es que estaba usando un traje ejecutivo en lugar de su usual traje ceremonial.
-D-disculpe…p-pero ¿dónde está Shaoran? - preguntó Sakura mientras se regañaba portartamudear frente a la mamá de su novio. No fue necesario responder ya que en ese momento Shaoran apareció. Al joven le costó muchísimo no abrazar a su novia en ese mismo instante, pero sabía que no debía comportarse de esa manera frente a la líder de su clan. Por eso, se limitó a acercarse a ambas jóvenes y saludarlas con una reverencia. Para las chicas no fue una sorpresa el comportamiento de Shaoran ya que este les había explicado un poco de las reglas de etiqueta del clan.
-Madre- dijo Shaoran en último intento de convencer a su progenitora para que le dejará explicar todo.
Ieran solo miró de reojo a su hijo y le tendió su mano derecha a Sakura- ¿podrías venir conmigo? -Sakura tímidamente tomó la mano de la mujer y la siguió hasta una de las habitaciones. Ieran cerró la puerta y se sentó en uno de los dos pequeños sillones que tenía la habitación.
-Veo que mis temores eran ciertos- dijo Sakura al notar que estaban en la biblioteca y todos los libros habían sido almacenados en cajas- parece que Shaoran volverá a Hong Kong- dijo con un hilo de voz la joven de ojos verdes.
- Querida niña, siéntate a mi lado- dijo la mujer al ver lo afectada que estaba la joven. -Sabes que Xiaolang es el futuro líder del clan Li ¿verdad? - preguntó Ieran y continuó al ver que Sakura afirmaba con la cabeza- como futuro líder mi hijo tiene responsabilidades. Debe ser entrenado para proteger no sólo al clan sino también a sus seres amados-Sakura al oír estas últimas palabras levantó un poco la cabeza y escuchó con más atención. Ieran podía aparentar ser una mujer distante pero solo ella sabía lo difícil que era explicarle toda la situación a la dueña de las cartas. Especialmente cuando sus ojos verdes estaban reflejando el dolor que sentía en este momento la joven. Se alegraba ser ella y no su hijo la que estaba en esta situación ya que sabía que su hijo no tendría el valor de continuar la explicación al ver la mirada de Sakura.-Hace unos pocos días, el clan recibió unas predicciones indicando un gran peligro...un peligroque podría aparecer dentro de unos años. Al inicio debo admitir que quería que las predicciones no fueran acertadas pero el resultado siempre era el mismo-
- ¿Qué...cla-clase de peligro? - pregunto la joven bruja.
-Los adivinos del concejo tienen la certeza de que en 3 años una sombra atacará y vendrá por objetos mágicos muy preciados, esta sombra está llena de una sed de venganza...- Indico Ieran
-Las cartas...- comentó Sakura rápidamente
-Exacto mi niña... pero para evitar un cruel desenlace las predicciones indican que el futuro líder del clan debe volver a su tierra natal y seguir su entrenamiento... para protegerte-Un sentimiento de impotencia invadió el corazón de Sakura. No podía creer que ella era el motivo por el cual los estaban separando una vez más.
- ¿Existe alguna forma de que Shaoran se quede aquí y tome sus entrenamientos? – preguntó Sakura en tono de súplica.
-El concejo de ancianos no lo permitirá, lo lamento mucho Sakura-
- ¿Cuándo deben partir? - aunque Sakura ya sabía la respuesta, no quería escucharla.
-Xiaolang partirá conmigo esta misma noche en el vuelo de las ocho-
La joven sentía como todas sus energías se iban y todo le parecía un mal deja vú. Pero una chispa de esperanza apareció en su cabeza, aunque todavía no era el momento de decirlo. Primero iba a entrenar y mucho hasta poder lograrlo.- ¿Me puedo despedir de él? - Pregunto Sakura con temor
-Claro, los dejare unos minutos a solas-Ieran salió y a los pocos momentos Shaoran entró. Lo único que Sakura reaccionó a hacer fue abrazarlo con todas sus fuerzas mientras las lágrimas empezaban a rodar por sus mejillas.
-Sakura...perdóname- decía Shaoran en un susurro mientras sentía su corazón partirse nuevamente en mil pedazos y acariciaba el cabello de su amada.
-No hay nada que perdonar, es tu deber como líder Shaoran... Además, es para proteger a aquellos que amas...- Sakura estaba tratando de ser valiente y aceptar lo que venía, pero tener a su amado joven de ojos ambarinos en sus brazos y saber que no volvería a verlo hasta mucho tiempo después la hacía derramar más lágrimas.
- ¿Me esperarás? - preguntó Shaoran. Él sabía que eso era un deseo egoísta, pero pensar en ella era lo único que le daba fuerzas para seguir adelante.
-Hasta el fin del mundo lobito tonto...hasta el fin del mundo- le respondió Sakura con una sonrisa y unos ojos esmeraldas llenos de lágrimas. A pesar del dolor en sus corazones Shaoran le devolvió la sonrisa a su amada y tomo sus mejillas haciendo que la chica se sonrojara. Con cuidado limpio las lágrimas con sus dedos de una manera muy cariñosa, queriendo transmitir todos sus sentimientos en ese gesto. Sakura sintió aquella calidez que le trajo un poco de paz a su corazón mientras levantaba su mirada, para toparse con aquellos ojos ambarinos que la veían fijamente. Sakura sintió un nudo en el estómago cuando una voz que venía de la sala interrumpió el momento.
-Xiaolang, debes terminar de empacar- se escuchó la matriarca del clan Li decir desde la otra estancia. Shaoran frunció su ceño mientras Sakura sonreía ante tal gesto.
- ¿Estarás bien? - le preguntó el castaño a su novia, tratando de sonar lo más tranquilo posible ante tanta tribulación.
-Lo estaré...lo estaremos- le respondió la ojiverde tratando de que las lágrimas no escaparan de nuevo de sus ojos. Ambos salieron de la habitación hacia la sala donde tanto Tomoyo como Ieran se encontraban esperando.
-Si gustan pueden venir con nosotros, el vuelo es a las ocho, pero nos iremos de aquí a las seis-comunico la madre de Shaoran invitándolas a despedirse antes de su vuelo.
-Son casi las cinco- interrumpió Tomoyo ante la mirada confundida de su amiga
-Tengo que cambiarme e ir a dejar mis cosas, nos vemos allá- exclamó Sakura tratando lo máximo posible de sonar tranquila -además mi papá no sabe dónde estoy- terminó de decir la castaña haciendo una reverencia a manera de despido, acto que imito Tomoyo al ver la urgencia de su amiga.
-Nos vemos entonces- contestó Ieran con una reverencia acto imitado por un Shaoran sin ningún destello de emoción. Las chicas salieron del departamento con cierto apuro a lo cual Tomoyo tomo a su amiga por los hombros para calmar esa ansiedad.
-Sakura, ¿cuál es tu plan?, porque tanto apuro es por algo- le dijo Tomoyo mientras la detenía. La amatista sentía angustia por el comportamiento de su prima.
-Tomoyo, necesito que me ayudes con la compra de algo... pero debemos apurarnos- comento la castaña aun con ansiedad. Al ver el estado de su amiga Tomoyo solo asintió y salieron corriendo de ahí.
-Sakura corría por los pasillos del aeropuerto, eran las seis y media y sabía que era tarde, Tomoyo simplemente la seguía de lejos porque tenía muy claro que su condición física no alcanzaba para imitar los pasos de su prima. A lo lejos finalmente pudo divisar a aquella hermosa dama en traje y a Shaoran cabizbajo, esperando en una de las salas de abordaje.
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- ¡SHAORAN! - gritó Sakura mientras acortaba la distancia con ganas de abrazarlo
el protocolo pensó Sakura deteniéndose en seco y quedándose sin saber qué hacer. Shaoran entendía lo que pasaba y volvió a ver a su madre, la cual con una mirada le dio a entender que podría obviar el protocolo en este momento. Shaoran se acercó a la castaña y la abrazo con fuerza, ella al principio asombrada, cerró los ojos y le devolvió el abrazo. No se dijeron nada, pero podían sentir como sus corazones latían a mil por hora y sus esencias se mezclaban. Estuvieron así por unos cuantos minutos.
-Sakura- dijo el castaño apartándola un poco y cortando el abrazo. La ojiverde lo miraba conconfusión -te lo iba a dar para navidad, pero dado los eventos…- Shaoran sacó de su bolsillo una pequeña cajita y se la entrego con todo el sonrojo del mundo. A Sakura se le ilumino la mirada
- ¿puedo abrirlo? - pregunto con una sonrisa genuina a lo que su novio solo atino a asentir. Sakura abrió la cajita para encontrarse con una hermosa pulsera de oro con formas de pétalos de sakura hechos de cuarzo rosado, era una joya preciosa.-Shh-aoran…esto...es demasiado- dijo Sakura profundamente apenada por el regalo que estaba recibiendo. El castaño solo sonrió y le dio un beso en su frente, suspiro y volvió a su faz seria y su ceño fruncido
-debo irme- le dijo con todo el temple, más tiempo y se le empezaría a quebrar la voz
-Espera- dijo Sakura tomándolo de su mano antes de que el chico volviera con su madre –toma- le dijo entregándole una cajita de regalo de forma rectangular -Es muy importante para mí, así como lo eres tú, por eso quiero que la tengas- le dijo la joven sonrojándose en el acto. Ante estas palabras Shaoran abrió la cajita y lo que encontró adentro lo dejo sin habla -ella nació de todo lo que siento por ti, y sé que nos dará la esperanza en nuestros corazones de que todo estará bien, y que nos volveremos a ver- le dijo la castaña con la voz quebrada intentando sonreír.
-Sera mi mayor tesoro- le dijo Shaoran sonriéndole mientras con mucho cariño acariciaba la carta The Hope. Shaoran volvió a darle un corto abrazo a Sakura para luego retomar su camino. Ieran ya lo esperaba en la entrada a la manga de abordaje, solo ellos faltaban. Shaoran camino hasta el punto donde sabia dejaría de verla, se detuvo y volteó para encontrarse con la mirada llorosa de su amada. Le dedicó una sonrisa, lo cual ella devolvió, y siguió su camino perdiéndose de vista por completo.
-Tomoyo- dijo Sakura mientras seguía viendo el pasillo por donde había desaparecido Shaoran. Tomoyo solo la tomo por los hombros, sabia el estado de shock en el que se encontraba su prima - ¿Puedo quedarme en tu casa? - esbozo la castaña con la voz completamente quebrada
-Por supuesto que si- contesto la amatista con un nudo en la garganta por lo acontecido mientras veía como su prima se quebraba entre sus brazos y dejaba salir un amargo llanto
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Bienvenidos lectores de LPDLO!
Espero que este primer capitulo sea de su agrado. La historia ya esta completada asi que tranquilos que no habra hiatus. Se estara publicando los dias Lunes, Jueves y Domingo :D
La hstoria se escribio en conjunto por mi persona y Mel_Char y pueden seguirnos en la pagina de facebook que tiene el mismo nombre del fic (Los poderes de la oscuridad: Un fic de SCC) esten atentos a la pagina pues ahi se estaran subiendo imagenes o canciones relacionadas con cada capitulo, de hecho el capitulo 1 tiene una imagen relacionada que la pueden encontrar alli ;)
Todos los review son bienvenido y esperamos que la disfruten :)
Saludos!