Adivinen qué! Así es, es otra dedicatoria por motivo de un cumpleaños! Este es un caso muy especial (Claro que el de mi querida oka-san fue muy especial también), este fic va dedicado a una persona genial y amable conmigo, cuya mentalidad aguda, perspicaz, depravada y yaoista me han mostrado un muy interesante lado de la vida. Además de haberme enseñado esta página y haberme arrastrado (Te estaré siempre agradecida n.-) a este fantástico rincón virtual lleno de chicos lindos, yaoi y escritores grandiosos. Así es! Estoy hablando de TI, Filburt, mi sempai! El Viernes cumplistes un año más, tal como tu dices: Otro año menos de vida, yupi! Me permito escribir esto y dedicártelo para demostrarte... como lo digo para que no suene cursi? Bah, que salga lo que tenga que salir, nya. Para demostrarte mi aprecio, admiración y agradecimiento, desde lo antes mencionado, hasta la ayuda que me diste en la escuela, mil gracias! Y no me vengas con alguna tontería de que no era necesario! Realmente no lo era pero, hey! Aquí podemos hacer lo que se nos de la regalada gana, nyo, y a mi me dieron ganas de dedicarte este fic y usar tu cumpleaños como excusa para publicarlo. Quejas? No? Perfecto -.-
Agradezco desde aquí a mi querida oka-san (me gustó el nombre, así se quedó) por esa dedicación, me dejó devastada en el mejor de los sentidos!!! Lean ese fic, "The key", excelente. Como ya hablé mucho les dejo el fic:
Título: The open door
Autora: Hikaru no Yami
Género: Psicológico, romance, debe haber algo más, pero no sabría decirlo.
Advertencias: Tómenlas ustedes y (obvio!) Yaoi.
Sumary: Luego de muchos años aun guardan el miedo y el rencor, luego de mucho tiempo guardan silencio, luego de crecer se observan y descubren que no son los mismos. Recuerdos perdidos, emociones olvidadas, vidas encontradas... Aquí empieza una historia.
Nota importante:Varios capítulos ya están escritos, otros están dentro de mi cabeza y hay unos que pueden ayudarme ustedes dejando un review. Cualquier parecido con otro fic es mera coincidencia (hasta que recordé escribirlo!).
Nombres: Yuriy Ivanov: Tala
Disclaimer: BB no es mío, le pertenece a Aoki Takao-san, a quien muy cordialmente le agradezco haber creado a estos chicos para poder malgastar mi tiempo.
AVISO SUPER IMPORTANTE: Lo digo desde ya: R&R contestados en mi profile. Pásense a leer alguno de mis fics favoritos, les juro que tengo muy bueno motivos para que están ahí. Y lean Fantasy, para las amantes del KaixTaka lean mi segundo fic, único ONESHOT: "En una noche de verano". Feliz cumpleaños sempai!!!
-bla, bla, bla- Diálogo.
"bla, bla, bla" Mención de algo, ya sea un letrero o un sarcasmo.
Bla, bla, bla recuerdos.
Capítulo 1: "Silencio"
"¿Cómo fue que su vida se convirtió en eso? ¿De que forma llegó a ser lo que era ahora, a vivir de esa manera? Imposible de saber, unos dirían que el destino, otros mala suerte. Quien sabe, el destino puede ser cambiado, la suerte la construye uno, entonces... ¿Qué? ¿Qué le obligó a vivir como lo hacía? Encerrándose en si mismo, privándose de ser humano, dejando de lado los sentimientos, olvidando que era una sonrisa... muerto en vida.
¿Por qué estaba vivo?"
Tecleó un par de cosas más, con su inigualable velocidad. Sus dedos se movían ágiles sobre las teclas, presionándolas con rapidez y suavidad. Bajó la pantalla de cristal líquido de su computadora (ordenador) portátil, escondiendo de la vista los mensajes y ventanas abiertos, en distintos idiomas. Un "clic" se escuchó cuando las partes de la máquina entraron en contacto, asegurándolo.
–Muy bien, ya tengo la información restante: la hora, el lugar, todo está listo –dijo, levantándose de la silla donde escribía–. Acaban de enviarme los últimos datos para la operación, salimos en diez minutos. Abrígate bien –aquella frase, que fingía sonar de preocupación, fue pronunciada con sarcasmo, cruel y crudo sarcasmo.
Unas orbes grises, altivas, indiferentes y vacías, se posaron sobre su persona. El dueño de aquellos ojos tan sólo lo observaron abandonar la estancia con dirección a otra habitación. No le dio mayor importancia y siguió con su labor: terminar de preparar y cargar un arma de fuego. Las balas desperdigadas sobre la mesa brillaban de manera inocente con la luz de la lámpara del techo, como joyas, en una siniestra apariencia inofensiva.
Cargó el cartucho y lo introdujo, produciendo el clásico sonido al cual estaba tan acostumbrado. Dejó el arma sobre la mesa y se levantó para ir a su propia alcoba, donde cambió la camisa de mangas largas que llevaba por un jersey más abrigador, sacó una chamarra gruesa, para cubrir su cuerpo. De la cama sin tender asió una bufanda larga y blanca, que envolvió en su cuello. Sólo faltaba el último toque para estar listo.
Enfundó sus manos en unos guantes de cuero con terciopelo por dentro, cerró y abrió sus dedos para comprobar que todo estaba en orden. Guardó el arma en su cinto, escondiéndola con la cazadora larga que usaba. Levantó la mirada para ver salir a un estoico muchacho, cuyo rostro estaba pintado con marcas de color azul, abarcando un gran espacio de sus mejillas. Aunándole a esto la bufanda, que escondía parcialmente su rostro, era difícil identificarlo como el chico de siempre.
Tomó la llave del departamento, abrió la puerta y esperó a que el otro saliera. Echó el pestillo, asegurando que nadie tuviera tan fácil acceso a la morada. En total silencio bajaron las escaleras hasta la planta baja, cruzaron el hall con paso rápido, el eco de sus pisadas era tan bajo que costaría creer que ahí había alguien, pero esa era una de sus habilidades.
Salieron al intempestivo frío de la noche, cuya bóveda oscura estaba cubierta por densas nubes, posiblemente llovería. Bajaron con tranquilidad las escaleras del pórtico hasta la acera, las calles estaban desiertas para esa hora. Las doce y cuarenta y seis, exactamente, debían estar en su destino a la una en punto, sin faltas ni retrasos.
Las luces nocturnas de la ciudad les permitían caminar sin tropiezos, el ruido de las discotecas, los bares y otros tantos lugares semejantes les acompañó hasta el final de su recorrido, dejando atrás a Moscú y llegando a una zona boscosa y silvestre. Levantaron la mirada hacia una imponente edificación de tres pisos, rodeada de frondosos, nudosos y viejos árboles.
La mansión de Pavel Bagautov, un alto funcionario de gobierno y socio activo de uno de los bancos más importantes del país, era una bella muestra de arquitectura bizantina, algunas de las altas ventanas despedían una opaca luz amarillenta, otras tenían las cortinas corridas, las restantes estaban a oscuras.
Lastimosamente para el señor Bagautov, ellos no estaban ahí para hacer ninguna visita formal. El hombre era acusado por el delito de lavado de dinero en conjunto con uno de los gerentes de la sede principal en Moscú, y se les había encargado eliminarlo esa misma noche. Yuriy apartó la vista del jardín delantero, donde unos cinco guardias se paseaban, cuando Kai señaló con el brazo hacia un grupo de árboles. Se dirigieron hacia allí con paso silencioso.
La metodología que usaban a la hora de hacer los tratos era simple: consistía en contactarlos de manera discreta ya fuera por correo electrónico, postal o citaciones (de las cuales aceptaban muy pocas); les estregaban los datos correspondientes y el 50 por adelantado, cuyo límite era el mismo día de la misión. La segunda paga tenía un plazo de cinco días, o se cobraría de otro modo. Hasta la fecha jamás se vieron obligados a llegar a esos extremos.
Un hombrecito de aspecto nervioso, con ojos y calva brillantes los esperaba. Les entregó un cheque como primera parte de la paga y se retiró haciendo exageradas reverencias. Su actitud fue completamente estoica hasta que desapareció de su vista. Yuriy guardó el primer depósito y se acercaron sigilosamente a las rejas de entrada de la propiedad, donde dos guardias apostados vigilaban con sendas armas.
Parecía relativamente fácil.
Quizás demasiado fácil...
Yuriy Ivanov, un joven ruso de diecinueve años, era un atractivo pelirrojo, de más de un metro ochenta, cuyos fríos ojos azul cielo parecían una ventana a un mundo helado. Su estrecha cintura, amplia espalda y largas extremidades haber sido moldeadas en su época adolescente por la mano de un escultor. Sus dedos, largos, de uñas brillantes, eran perfectos para tocar piano, aunque los usara para otras... cosas. El increíble contraste entre su nívea piel, su flamante cabello y sus brillantes ojos lo hacían resaltar entre la multitud con una facilidad increíble.
Junto a él, en silencio, caminaba un chico más bajito pero de su misma edad. Cuyo rostro, de textura de seda, era de los rasgos más finos y exquisitos, perfectamente proporcionados, el único problema en ese bello rostro... eran los fríos ojos grises que poseía, incapaces de demostrar sentimientos. El viento sopló, revolviendo sus ya desordenados cabellos, en dos tonalidades: gris y azul oscuro, todo un reto a la naturaleza. La característica bufanda blanca que siempre llevaba se agitó, y sus ropas se apegaron a su cuerpo, menudo pero fuerte, torneado pero delicado.
Sacaron sus armas, dos preciosos revólveres, con chapa de plata, diez municiones por cartucho, livianos, manejables, rápidos... en fin, hermosos y sumamente efectivos.
La razón para tener esos objetos no era otra que las necesitaban para su trabajo. Y la manera de ganarse la vida, la forma que eligieron para ganarse el pan de cada día no era otra que...
–El objetivo está adentro, el plazo es de tres horas –habló Yuriy.
–Es mucho tiempo para lo que necesitamos –comentó Kai, inexpresivamente. El pelirrojo contuvo una sonrisa. Eso era tan típico de Kai: subestimar absolutamente todo.
–Bien, vamos ya. No nos están pagando para que demos un paseo, sino para que acabemos con ese corrupto.
–Si, ya lo sé –dijo avanzando primero.
...no era otra que la de asesinos a sueldo.
O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O-.-O
Me disculpo por algo tan... simple, hubiera sido el primer cap completo, pero mi maldita computadora (correcto! maldita! a quien no le guste se...!) se puso comiquita y, BAM! Cerró el archivo antes de haber guardado, acabando con al menos cinco páginas, la furia no se me pasó sino hasta... aun la tenía el Viernes u.ú
Como, nótese lo obvio y mi enojo, esto es lo único que pude escribir les pido que esperen a la semana que viene para la continuación, el final del primer capítulo.
Bien, hay otro fic llamado: Tenshi no tsubasa (alas de ángel), y, sí, dedicado a una amiga porque hoy cumple dieciséis años. Feliz cumple, Aleinis!!! TQD!!! Y oka-san, feliz día de
las madres, jiji n.n
Ya saben, R&R, please!!!
