¡Hola!

Notas Iniciales: Primera historia que hago de Shaman King. Como ya mencione, serán historias de Yoh y Anna; podrían ser viñetas, one-shots o en su caso drabbles (Lo siento, no se como se escriban). Pueden o no tener relación entre si, todo sea a preferencia del lector. Los personajes tendran diesciocho años. Me basaré en el anime principalmente, pero si me llegara a basar en el manga, lo diré en las advertencias de cada capitulo, por eso de los spoilers.

Advertencias: Este capitulo es narrado desde el punto de vista de Yoh.

Disclaimer: Shaman King, Yoh y compañía no me pertenecen. Son de Takei y yo solo los pido prestados un ratico para que interpreten lo que se le ocurre a mi mente retorcida. Claro que sin fines de lucro.


Enfermedades

"Por que todo lo malo tiene algo bueno"

By. Angel Kane

El vapor de una olla me informó que era momento de meter la pasta.

Hoy le tocaba hacer la comida a Anna, pero un estúpido resfriado se alió con ella desde el fin de semana para obligarme a preparar el desayuno, la comida y la cena hasta que ella se mejore. ¡Malditas enfermedades que me obligan ha hacer esto!

No había nadie en la pensión. Cada uno de mis amigos se encontraba con su familia, con sus amigos o de vacaciones.

-A si que somos ella y yo… solos.- Ese pensamiento me hizo vibrar un poco, una serie de imágenes no muy adecuadas se cruzaron por mi mente.- ¡Jeje! Qué cosas pienso- Me dí ligeramente una bofetada para sacarme esas ideas locas.

Y&A

Ya entraba el firmamento nocturno cuando termine de hacer la cena. Solo una tenue capa de color naranja se asomaba por el horizonte… ¡Mmm!, naranjas. Creo que iré a comprar un poco de jugo al mercado, sirve que le doy un poco a Anna.

Saludé a la anciana de la tienda con una de, según Anna, mis bobas sonrisas. Tomé el litro y le pague.

-¡Jeje! Anna me golpeara por no llevarle la cena a tiempo…- Quizás si alguien hubiese pasado en ese instante me catalogaría de loco por estar hablando solo.

Al llegar a casa, rápidamente puse en un cuenco pasta y serví jugo en un vaso. Subía lentamente las escaleras temiendo por mi vida al no llevar la cena a tiempo.

-Anna ¿Puedo pasar?- Pregunté en voz baja, al no darme alguna respuesta volví a preguntar.- Anna ¿Estás despierta?

No se de donde saque el valor para adentrarme a la habitación de ella sin permiso. Tal vez quería morir en ese instante, pero algo me empujo ha hacerlo. Abrí la puerta y observe como ella estaba aun dormida sobre el futon.

La poca luz que habitaba afuera se colaba por la ventana hasta llegar a la cara de ella. Su respiración era delicada y sutil. En su frente había una capa de sudor, quizás por la fiebre que tenia. Rápidamente deje la bandeja en una repisa, corrí hacia el baño y moje una pañoleta. Cuando regrese al cuarto me hinque junto a ella y le puse la tela en su frente para así disminuir un poco la temperatura.

De un momento a otro sus labios parecían tan apetecibles… si, sé que ya los probé antes, pero estaban rosados, gruesos y algo entreabiertos que repentinamente comencé a babear un poco. No era nada comparado con mis anheladas naranjas.

Se veía tan frágil, delicada… nada comparado como cuando está despierta y es la gran itako que yo conozco. Y la cereza del pastel fueron sus mejillas, quienes estaban adornadas con un leve color cereza debido a la fiebre. No me había dado cuenta de mi estado de ensoñación hasta que sentí cono se arremolinaba un poco tratando de despertarse. Sus parpados se abrieron dando paso a dos hermosos cuarzos negros que me miraban con duda y un poco de ira.

-¿Qué haces Yoh?- Aún y con su estado no perdía esa mascara de frialdad que la distinguía.-¿Y que haces en mi habitación?

-Te traje un poco de comida. Creí que tendrías un poco de hambre, Jeje.- Conteste con un par de risitas tontas.

Mi atención se desvió un poco hacia toda su cara. Su entrecejo levemente doblado demostrando enojo; sus penetrantes ojos azabaches; su labio inferior que temblaba ligeramente por los escalofrío… ¡Por mi vida! Era lo más lindo que había visto.

-¿Por qué me miras de esa forma?- Me preguntó friamente al darse cuenta de cómo la observaba.

-Te ves muy linda así.- Mi completa sinceridad me terminara matando un día de estos. Al darme cuenta de lo que dije solo pude complementar mi frase con risas bobas.

-Idiota.-Dijo con voz baja volteando levemente su cara, intentando inútilmente de ocultar la sonrisa y el sonrojo que se formo en su rostro.

De todas las respuestas que esperaba, esta fue la que nunca me imagine. Esperaba una cachetada. Quizás un golpe o el triple de entrenamiento mañana, pero nunca esto. Tal vez las enfermedades no sean tan malas después de todo…


Notas Finales: Bueno... ¿Qué les pareció? ¿Bobo? ¿Sin chiste? ¿Lo mejor que han leido?. Se aceptan criticas y comentarios, jitomatasos y chocolates; ¿Y por qué no?, tambien un premio nobel. Sin mas, esperó y les haya agradado esta lectura escrita por una chica con complejo de escritora fracasada.

Besos Kane.