Soy nueva, no sean tan duros apenas es mi primer fic, se me hizo muy difícil ponerle nombre a este fic
Me pertenece es de Masashi Kishimoto, solo esta loca historia es mía aparte de algunos personajes, pero una amiga y yo los compartimos, lamentablemente ella perdió su contraseña de Hotmail y le robaron la cuenta entonces no podrá continuar escribiendo además su computador se daño, me disculpo por ella para todos aquellos que leyeron Nueva Generación de Himeko
AVISO: Habrá muchos personajes Oc, creados por mi y lemmon bastante
NUEVA GENERACION, NUEVOS PODERES
Primer capítulo: Los hermanos son una verdadera molestia
La vida de un vampiro no es fácil menos aun si vives en Japón con tus hermanos, padre y madre pero esto se complica más si eres el hijo o la hija del líder del clan y la ex heredera de otro
Esto lo tenían muy claro los hermanos Kenshi, Yuki y Hitomi Uchiha Hyuga, hijos de el líder del poderoso clan Uchiha: Uchiha Sasuke y la ex heredera del famoso clan Hyuga: Uchiha Hyuga Hinata. Kenshi y Yuki están cerca de 150 años aunque en su apariencia son 15 años y tenían la mentalidad de un chico de 16, Hitomi está cercana a cumplir los 145 años es decir los 14 años en apariencia y 15 en mentalidad, mientras sus dos hermanos menores Hiro y Himeko aparentan tener 13 cuando apenas estar cercanos a los 3 años, todos ellos están encargados de turnarse el cuidado de sus pequeñas hermanas Mikoto y Hana quienes apenas tenían la mentalidad de una niña de 5 años y el cuerpo de una de 6, quienes apenas tenían 1 año
- Niños, su padre y yo saldremos hoy vigilen a Hana y a Mikoto, ya saben cómo son – se despedía una mujer de cabello de color azul oscuro, lacio que le llegaba a la cintura, ojos como dos perfectas lunas llenas, mirada tierna, piel de gran palidez y cuerpo muy hermoso, de grandes senos, piernas largas, trasero bonito y estomago plano, era de extrema belleza quien aparentaba tener apenas 20 años, cuando en realidad estaba cercana a los 4.000 años de antigüedad, quien portaba un hermoso vestido que le llegaba a los tobillos, entallado y de color rojo pasión, unos zapatos del mismo color en tacón de aguja, su cabello estaba suelto y en el portaba una preciosa rosa de olor celestial, no portaba joyas salvo un antiguo collar de plata que en su centro mostraba un extraño talismán parecido a un diamante pero de color rojo sangre y un hermoso anillo con una piedra de color negro y a los lados unos pequeños diamantes, eso mostraba que estaba casada, no traía mas maquillaje que un labial rosada sobre sus carnosos labios - los amo
- Recuerden no perder la vista de Hana y Mikoto – les recordó un hombre de cabello azabache y lacio que le rozaba los hombros, ojos de color negro como dos pozos sin fondo, mirada fría, piel de extremada palidez, cuerpo muy trabajado, era extremadamente hermoso quien aparentaba tener apenas 21 años cuando ya había sobrepasado los 4.500 años de antigüedad, portaba un traje negro de apariencia cara, sin corbata y con zapatos de gran elegancia, no portaba nada demasiado llamativo salvo el mismo anillo que la mujer y una rosa negra en su traje, ellos dos eran Uchiha Hinata y Uchiha Sasuke padres de los chicos frente a ellos – cuídense
- Hai, Oto-san (Si, Padre) – respondieron todos los chicos de la sala mientras dos pequeñas niñas asentían
Apenas los padres se fueron, alguien toco el timbre de esa enorme mansión, un joven de aparentes 15 años, se dirigió a la puerta, al abrirla una rubia de 18 años, ojos castaños, cuerpo un delgado y muy plano, con uniforme de pizzería junto con 3 cajas de pizzas se mostro ante el
- Aquí tienes – dijo leyendo un papelito antes de levantar la vista hacia el joven quedando embobada con aquella belleza sobrenatural del joven de cabello lacio con un profundo negro por color en el tenia hermosos destellos azulados, hechizantes ojos grises como el humo o una nube de tormenta, rostro digno de un Dios, piel extremadamente pálida, cuerpo muy trabajado y sexy, alto que vestía unos jeans negros con algunas rajaduras y una cadena, una camiseta de color azul marino con una calavera, tenis negros, su cabello estaba despeinado y veía en extremo sensual, y en su cuello portaba un collar que era como un ojo plateado que en su interior tenía una estrella de seis puntas de color negro (como el sharingan mangekyou de Sasuke) – H-hola
- Hola – soltó indiferente el muchacho, pasándole un puñado de billetes – me pasas las pizzas
- Eh, Oh – se sonrojo la rubia al notar que se había quedado mirando al muchacho – s-si a-aquí t-tienes
- Ya puedes largarte – dijo pero pensó "me hace dar hambre" – o si lo deseas te puedes quedar, aquí conmigo – dijo con una sonrisa seductora y una voz igual
- C-claro, s-solo terminare este pedido y volveré en 15 minutos – dijo sonrojada sin darse cuenta de que la sensual sonrisa del pelinegro se había transformado en una llena de maldad ni de que acababa de sentenciar su propia muerte, apenas se fue el pelinegro pensó "que fácil fue" y entro a la mansión
- ¿Por qué tienes esa sonrisa, Kenshi? – le preguntaron desde atrás, volteo y no pude evitar sonreír de nuevo de manera malvada, frente a él se encontraba una hermosa joven de cabello lacio hasta las caderas con dos mechones más cortos que enmarcan su cara, su cabello era de color negro profundo en donde se formaban extraños pero preciosos destellos de color azul metálico, ojos color gris tormenta, piel de extremada palidez, rostro esculpido por ángeles y digno de la diosa del Olimpo, cuerpo bien proporcionado, perfecto y sexy, alta, delgada, de grandes senos, largas y torneadas piernas, trasero de modelo, estomago plano, caderas anchas y cintura delgada. Aquella joven era la lujuria en persona o para otros era la perdición, vestía un jean azul oscuro con cadenas y cortadas, una blusa morada con el dibujo de unos labios de los que sobresalían unos colmillos con gotas de sangre, tenis morados, su cabello estaba desordenado pero una rosa de color morado resaltaba en su cabello haciéndole ver aun más sensual, tenía el mismo collar que Kenshi – Ya dime, por favor Aniki (hermano mayor)
- Esta bien, Yuki, lo que pasa es que, hoy voy a tener una cena muy especial – enfatizo la última palabra para que Yuki supiese que hablaba de un humano – entiendes Imoto (hermana menor)
- Aniki, eres horrible, pero espero que te diviertas, te molesta darnos la pizza
- Aquí tienes Imoto – le lanzo las tres pizzas por el aire
- Gracias, Hitomi, ven – una joven de mirada dulce, cabello azabache hasta los hombros con dos mechones más largos, ojos grises como sus hermanos, era la inocencia personifica, de aparentes 14 años apareció ante ellos, delgada, baja y proporcionada, con un corto vestido de color lila, botas blancas y chaleco blanco, con el mismo collar que Yuki y Kenshi – puedes llevar esto a los demás tengo que hablar con Kenshi
- Hai nee-chan (Si, hermana) – agarro las pizzas y se fue
- ¿Qué paso con Yoko? - pregunto Yuki, apenas Hitomi desapareció – hace más de dos meses que no la veo
- De estarse revolcando con alguien, terminamos porque la encontré con el idiota de Teo
- ¿Con él? – pregunto incrédula al imaginarse a un chico de cabello morado, ojos verdes, piel bronceada y cuerpo normal con una chica de cabello celeste, ojos violetas, piel pálida y cuerpo semiplano – no me parecen buena pareja
- No podría estar más de acuerdo contigo – pronuncio Kenshi – pero sabes que pienso…
Un llanto lo interrumpió y maldiciendo ambos hermanos corrieron a la velocidad de la luz hasta llegar al recinto de donde provenía el llanto, al llegar se encontraron con que Hitomi intentaba darle de comer a una aparentemente triste Hana, mientras los mellizos Hiro y Himeko traían cosas a gran velocidad para intentar contentar a una llorosa Mikoto, ambos se acercaron para dar auxilio a sus hermanos que parecían perdidos
- ¿Qué sucede Miko-chan – pregunto a la muchacha mientras la pequeña niña señalaba su tobillo queriendo decir que esa era el problema, mientras Kenshi se encontraba intentando darle de comer a una desobediente Hana - ¿Te duele el tobillo, Miko-chan? – la niña asintió mientras se acercaba a Yuki y le mostraba su tobillo, Yuki después de examinarlo decreto – Hiro tráeme el botiquín de primeros auxilios que está en la cocina – luego se dirigió a Mikoto - ¿Cómo te lo hiciste Miko-chan?
- Y-yo estaba jugando con Hana-chan y me caí – la niña hizo un puchero extremadamente tierno – no te quería molestar N-nee-chan
- Esta bien Miko-chan pero ten más cuidado la próxima vez – Hiro llego con el botiquín y Yuki a gran velocidad vendo el tobillo lastimado e hizo una buena curación en el – pronto sanara
- A-arigatou (gracias) – la niña de cabello azulado hasta sus hombros cortado en "V" y muy bien peinado, ojos tiernos y humeantes, de mirada tierna, piel pálida, cara de ángel, pequeña y delgada, que portaba un kimono blanco con flores lilas y obi morado, bonitos zapatos blancos y una caléndula lila en su cabello, que solo portaba exactamente el mismo collar que sus hermanos, y un osito en una de sus mano, se acerco a la pelinegra y la abrazo con mucho amor – Te quero, nee-chan
- Yo igual, Miko-chan – correspondió al abrazo de la menor, mientras Kenshi también era abrazado por otra de cabello azulado que le llegaba a media espalda recogido en un moño alto, ojos grisáceos, mirada dulce, tierna y tímida, piel igual de pálida a la de Mikoto, cara de angelito, menuda y delgada, que tenia puesto un kimono del mismo color de sus ojos con caléndulas blancas y obi también blanco, zapatos grises, una rosa blanca adornaba el moño y tenía el mismo collar que todos sus hermanos y un osito muy parecido al de Mikoto
Sonó el timbre y Kenshi se dirigió a la puerta y esbozo de nuevo aquella sonrisa llena de sensualidad ya sabiendo quien era, y tal como supuso allí se encontraba aquella rubia, que ahora vestía un vestido strapple color rojizo que intentaba fallidamente resaltar aquello que la rubia no tenia, le llegaba peligrosamente cerca del trasero y mostraba unas delgadas piernas en las que al final se hallaban unos zapatos de tacón rojos igualmente, su cabello estaba recogido en un moño y tenía una pequeña pinza de color también rojo
- ¡Guau! – fingió sorprenderse el pelinegro aunque lo que le provoco fue desagrado la forma en que se entregaba a alguien aun sin conocerlo sin embargo se acerco a su oreja y le susurro – te ves muy sexy, bebe, ven
- Claro
Justo cuando iban a subir al segundo piso de la mansión una chica grito "Hermano, muéstranos a esa belleza de la que hablabas", la chica se sonrojo mientras el menor la guiaba hacia donde se encontraban
- Hola soy Uchiha Yuki, y ¿tu?
- Sabella Montes pero díganme Salla
- Que nombre más extraño ¿no eres de Japón? – la rubia negó – digo porque si lo fueses sabrías que el apellido es primero que el nombre
- Lo lamento apenas llegue dos meses y aun no me acostumbro – la rubia miro a toda la familia y no pudo evitar soltar - ¿Acaso toda su familia es así de hermosa?
- Pues tal parece que sí, - respondió una pelinegra de 14 años según la rubia – soy Uchiha Hitomi pero dime como quieras
- Yo soy Uchiha Hiro – dijo un chico de 13 años según la rubia, cabello lacio de un profundo negro, ojos color tormenta, piel pálida, cuerpo ejercitado, cara esculpida por los dioses, mirada fría que un traía un pantalón normal, una camisa manga larga de color blanca, e igual que todos sus hermanos él también tenía aquel collar parecido a un ojo – Nii-chan ¿desde cuándo te gustan tan grandecitas?
- Desde que conocí a Salla
- O sea hoy, no es así Onii-chan – dijo una chica de 13 años aparentemente, cabello negro hasta la cintura en V, ojos grises y hechizantes, mirada desafiante, piel pálida, menuda y delgada aunque un poco más desarrollada que las chicas de su edad, short blanco, camiseta que le queda grande y cubría parte del short de color negro, el mismo collar que sus hermanos, tenis negros, y un broche en su despeinado cabello en forma de estrella color blanco – soy Uchiha Himeko y ellas son las gemelas Mikoto y Hana – señalo a ambas niñas que estaban ocultas detrás de Yuki – son muy tímidas y algo traviesas, solo ten cuidado y mas con el – señalo a Kenshi
- Parece inofensivo – dijo la rubia convencida de que hablaba con la verdad, mientras todos los demás chicos rodaban los ojos por lo ilusa de la muchacha y Kenshi sonreía de manera exageradamente malvada para sus hermanos
- Vámonos preciosa – se escucho como la mayoría a de los Uchihas reirán sarcásticos, haciendo que la chica se volviera a sonrojar y Kenshi gruñera por lo bajo, solo audible para sus hermanos
- Diviértete hermanito – dijo Yuki burlándose discretamente de su hermano
- A la habitación – dijo en tono de orden Kenshi ya harto de lo molestos de sus hermanos, al ver que la chica estaba muy entretenida declaro - ¡ahora! – la guio hacia su habitación sin que ella opusiera resistencia
- Eres demasiado sexy Kenshi-kun – le dijo la muchacha acercándose para darle un beso - ¿yo te gusto?
- Si – mintió
Se besaron, Salla con lujuria y Kenshi con hambre, él alzo a Salla con fuerza desmedida a la cama haciendo que la chica se quejara por lo brusco, el con sus manos desgarro aquel vestido dejando ver el delgado y plano cuerpo de la chica, la cual lo atrajo a ella quitándole la camisa en el proceso, Kenshi se lanzo a los casi planos pechos de la rubia, arrancándole el brasier y empezando a jugar con su boca, llenando de placer a la rubia quien casi inconscientemente le quito el pantalón haciendo que quedaran a la par, Kenshi fue bajando por su estomago hasta llegar a la parte privada de la rubia que solo era cubierta por una pequeña tanga roja que Kenshi destruyo con su boca para encontrarse con aquel botoncito de color rosa que rozo con su lengua haciendo que la rubia lanzara un alarido de placer y le terminara de quitar los Bóxers a Kenshi quien sin dudar la penetro de manera brusca pero dándole gran placer a la rubia, espero pacientemente a que la rubia llegara al climax.
- E-eso e-e-estu-estuvo exquisito – dijo la rubia, pero Kenshi estaba volteado – Kenshi-kun
- Sabes ¿Qué significan los collares?
- No ¿Qué significan, ?
- ¡Byaringan! – exclamo el pelinegro aun volteado
- ¿Qué?
Pero no pudo decir más porque Kenshi se lanzo hacia su yugular, quitándole toda su sangre y dejándola muerta en el piso del cuarto, se vistió lentamente como si estuviese disfrutando como nunca, al salir se dirigió de la sala de nuevo a sala de esa enorme mansión, para encontrarse con que sus hermanos estaban comiendo muy tranquilos pizza pero al verlo volvieron a empezar con las burlas, en especial de los cuatro mayores porque las gemelas solo interrumpían de vez en cuando:
- Te divertiste, con tu preciosa zorra, nii-chan – pregunto una divertida Himeko recibiendo un gruñido como contestación – que mal humor y yo que creía que estar con esa zorrita te lo mejoraría
- ¿Acaso no te quedaste satisfecho con tu "Bebe", Kenshi? – pregunto Yuki divirtiéndose de la expresión de su hermano
- Yo, creo que no – respondió por Kenshi, Hiro – era muy delgada y zorra
- Tienes razón Hiro – le respondió esta vez Hitomi
- Me voy a mi cuarto para deshacerme de aquella anoréxica, y por cierto ustedes son… una verdadera molestia
CONTINUARA…
Este es el primer capítulo, de esta historia, a decir verdad ya tengo escritos los dos próximos pero los estoy corrigiendo, y el Lemmon de este capítulo fue solo uno chiquito, cuando lo haga con la pareja que ellos quieren será muy distinto, las actualizaciones probablemente sean cada semana pero también es posible que entre mas fics tenga, mas tiempo tardare y ya estoy con el segundo fic
Saludos y besos de la autora
"No olvides quien eres o tu amanecer no saldrá"
Quiere decir que si olvidar quien eres en realidad nunca podrás encontrar la verdad ni el camino
