Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de SNK Playmore. La canción en la que me inspiré de "Young and beautiful" le pertenece a Lana del Rey, se aconseja escucharla mientras se lee.
Advertencias: Empalagoso hasta la no-sé-cuanta-potencia.
Luego de una larga ausencia [?] les vuelvo así bien sorpresivamente Bv Debo recalcar que no sé escribir romance, pero quería intentar, además de que quería hacer algo con la mejor otepé del mundo mundial UwUr. Próximamente quiero hacer algo Whip y Kula (Oh si, le voy al yuri entre esas dos, que K ni qué K).
Es corto porque sí. Bai.
—Young and beautiful—
Era de noche cuando sus inquietudes lo atacaron una vez más. La luna estaba redonda, el cielo estaba adornado con millones y millones de estrellas y estaba particularmente fresco para ser verano. Andy estaba boca arriba en su cama, con sus dudas comiéndole la cabeza, sin dejarlo dormir. Miró a su lado, ahí estaba Mai, durmiendo plácidamente, ajena a las preocupaciones de su novio. Ella era, precisamente, la razón de sus preocupaciones. No, no tenía que ver con ninguna de esas tonterías de enamorados.
Horas antes ambos volvían de una feria que se había realizado en el centro de una ciudad, con copos de nieve y uno que otro peluche que Mai había exigido a Andy le ganase en los juegos, porque así de linda novia es. Cuando estaban entrando, la castaña lanzó un suspiro al aire seguido de una frase que dejó perplejo al rubio: —¡Por eso te amo, Andy! Eres tan lindo, de seguro esas chicas que te estaban viendo sin parar me tenían envidia.
¿Mai lo amaba nada más por su físico? No, no podía ser. Tenía años de conocerla, sabía que no era tan superficial, sin embargo esa pequeña frase lo había descolocado un poco, o quizá solo la había sacado de contexto, sí, era lo más probable.
—Seguro lo malinterpreté... —murmuró, volviéndose a acostar, Mai al instante lo abrazó, no porque estuviera despierta, sino por un reflejo involuntario que ella tenía. Admitía que era adorable la forma en que hasta en sus sueños lo tenía presente.
…Y justo en ese momento se sintió verdaderamente estúpido, era ilógico pensar que luego de tantos años, tantas demostraciones de afecto y un anillo de bodas de juego, la castaña lo quería solamente por su físico, si fuera así lo habría dejado hace muchísimo tiempo.
El tiempo pasaría, ninguno de ellos dos sería joven y lo más seguro es que ella aún le siga profesando ese amor tan grande que le tiene desde que lo vio.
Después de todo, Mai amaría a Andy hasta que ya no fuera joven ni bonito.