Bueno, este es el primer fic que hago… yo solo espero que les guste y lo disfruten
Lo que esté entre estos símbolos ~ ~ son pensamientos
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Recuerdos
Vi como la manzana caía desde el árbol sobre mi cabeza.
-Auch… -
-Hina-chaaan, ¿estás bien? -
Sakura corría hacia mi con un rostro que reflejaba preocupación.
Nos encontrábamos en un parque en medio de la ciudad, donde había muchos niños de nuestra edad jugando en los columpios, los subibajas, o las resbaladillas; también había otros niños más grandes que estaban en las canchas de básquet-futbol o simplemente platicaban unos con otros.
Desde ayer, viernes, Sakura quería venir al parque porque ansiaba ver al chico que le gustaba, y estaba segura de que lo encontraría por aquí. Habíamos llegado desde temprano, pero no lo encontrábamos, así que Sakura me ofreció descansar bajo la sombra de un manzano, tal vez el único que había en todo el parque, y comer la merienda que nos había preparado mi madre: un par de sándwiches y dos juguitos, sobre un mantelito…
Después de acabarse la primera mitad del sándwich, Sakura se había parado para ir al baño, yo me quedé ahí al cuidado de las cosas. Recuerdo haber volteado un momento hacia el cielo, asombrada por lo cautivador y relajante que podía ser; y fue cuando… un grito, un balón y el sonido de las ramas y las hojas del árbol moviéndose que me sacaron de mi ensoñación…
-¡Cuidadooo!
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Hinata volteó a ver al chico que había gritado, se fijó como el balón se estrellaba contra el manzano, vio sus ramas moverse, y vio como una pequeña manzana se desprendía e iba directo hacia ella…
-Auch… -
-Hina-chaaan, ¿estás bien?. -
De repente Hinata se vio rodeada por 3 pares de ojos: Sakura, su mejor amiga desde que tenía uso de razón, si no es que desde que usaban pañales: su piel era clara, sus ojos verde esmeralda, y su cabello del color de las flores de un árbol de cerezo; Sasuke, el niño al que le gustaba Sakura, no sabía nada de él más que iba en su escuela en el grupo de Sakura: Sus ojos eran de un negro profundo al igual que su cabello, peinado de una manera extraña; y el niño que había gritado antes, era rubio de tez bronceada y unos ojos azules tan profundos y llenos de vida como el cielo. Hinata no sabía quién era este último y peculiar personaje, solo no podía quitarle la mirada de encima…ese niño… tenía un no sé qué, que qué sabía ella; para su sorpresa fue él quien habló…
-Lo… lo lamento, fui yo quien pateó el balón… - se le veía preocupado y culpable. Hinata se inquietó un poco, no quería que se sintiera culpable ese niño que, sin saberlo, le atraía de una manera especial.
-Eres un idiota Naruto – Lo interrumpió Sasuke con pose de superioridad –Te dije que te fijara hacia donde pateabas.
-Naruto, - La voz de Sakura se escuchaba sumamente molesta - Cómo te atreviste a hacerle eso a Hina-chan? - Se encontraba con el ceño fruncido y las manos sobre su cintura.
-Me estoy disculpando, por si no te habías dado cuenta, - se escuchaba molesto por las interrupciones de sus amigos y compañeros de clase… pero… volvió a ser interrumpido - …
-Pues no lo estás haciendo bien – Sakura no tenía piedad con sus regaños.
La chiquilla se inclinó ante él mirándolo fijamente a los ojos llenos de fuego, su furia iba en aumento cuando vio que Naruto iba a responderle pero…
-O…oigan – todos voltearon a ver a la pequeña niña de ojos perla y cabello azulado muy oscuro -yo… yo estoy bien, no se tienen que pelear por favor… discúlpenme.
Los tres chiquillos parados en frente de ella la miraron con un poco de confusión, ¿por qué se disculpaba?, ¿se habían perdido de algo importante?, pero sonrieron ante la visión de la pequeña: Se encontraba en cuclillas, con sus manitas apretando su vestidito, la mirada baja, había inflado los cachetitos y un adorable sonrojo cubría sus mejillas…
~Linda~ Naruto se sonrojó al mirarla un poco más de cerca y sonrió todavía más.
Se escuchó un suspiro - Pues que se le va a hacer contigo, Hina-chan – Sakura le tendió su mano para ayudarla a levantarse, la cual aceptó la nombrada.
-Am yo… yo de verdad lo siento – Hinata se volvió hacia el chico rubio – Naruto Uzumaki – le ofreció su mano, y como no va a ser, acompañada de una brillante sonrisa – esto…, creo que te he visto antes en la escuela, yo soy de 2°A.
~ ¿Naruto?, ¿2°A?... ese nombre ~ casi se escucha un botón de encendido en ese momento ~ pero… debe de ser el chico por el cual las maestras y maestros siempre se están quejando… um pero, aunque se ven enojados, siempre terminan sonriendo y diciendo "hay que niño este, ¿qué haremos contigo, Naruto? ~Hinata aceptó su mano y devolvió la sonrisa – Hinata Hyuga del 2°C
-¡Hinata!, ¡Sakura!, Tenemos que irnos – Alguien llamaba a las pequeñas, quienes voltearon para ver de quien se trataba.
-¿Mamá?, pero… pero… aún es temprano – Sakura gimoteaba y empezaba a discutir con su madre
Naruto y Sasuke, con una ceja alzada y algo de diversión reflejada en su rostro, solo pudieron observar la escena: Sakura chirrioneaba con su madre y Hinata comenzaba a recoger las cosas cuando un nuevo grito se dejó oír:
-¡Sasuke!, ¡Naruto¡ Vámonos – Esta vez fue la voz de un varón que llamaba a los dos pequeños.
-Itachi… - Sasuke con el ceño ahora fruncido y las manos en los bolsillos, se encaminó hacia su hermano. Jamás lo admitiría, pero ese momento tan corto la había pasado realmente bien.
-¡¿eh?¡ - Claro que Naruto no se iba a quedar callado – pero si el Sol todavía está en su punto más alto – Mientras decía esto, señalaba hacia el Sol, el cual, estaba a punto de esconderse – ahhh, pues parece que no jeeeee….. - Es este el momento en el que Naruto se ríe con una mano detrás de su nuca y a todos les escurre una gotita de sudor detrás de la cabeza.
- Venga vámonos, que todavía debo dejarte en tu casa…
-Pero…
-Naruto – Esta vez Itachi sonó molesto – Vámonos – Esa era una orden a la cual, aunque en verdad quería, no podía desobedecer el pequeño de 7 años.
Naruto volteó a ver a las chicas, las cuales ya habían terminado de recoger… más bien fue Hinata la que terminó de recoger, ya que Sakura se encontraba en una esquina refunfuñando y haciendo pucheros… sonrió ante la escena y escuchó como una risilla escaba de su amigo el azabache. Prosiguió diciendo, más a la pequeña niña de los ojitos perla que se le hacía tan dulce, que a su amiga del salón:
-Supongo que nos veremos en la escuela – y volvió a sonreír, pero de una manera que Hinata no había visto a nadie jamás… se sentía tan cálida, tan tranquila, se le hizo más resplandeciente que el mismo Sol.
-Ss… si, nos vemos – No sabía… ¿y ahora por qué estaba sonrojada? –
-Te veo en clase Naruto – la voz de Sakura sonó apagada
- Bueno como sea… nos vemos, Sakura, – Sasuke se fijó en esos deslumbrantes ojos verdes que se posaron de inmediato en él cuando escuchó su nombre… tampoco lo admitiría nunca pero, se le hicieron bonitos… ~ que pensamiento tan molesto ~ decidió despedirse de la otra chica antes de que se enojara consigo mismo – Hinata – La de cabello azul profundo seguía embelesada por el idiota de Naruto, eso le causó algo de gracia.
-Hasta luego Sasuke – Claro que conocía el nombre del chico del cual cierta persona con cabellos rosados siempre hablaba.
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Ya habían pasado unos 10 años desde aquel día… y no había vuelto a ver nunca esa hermosa sonrisa más resplandeciente que el Sol. Después de haber llegado del parque, su padre le avisó que se mudarían a otra ciudad más grande y con mejores tecnologías, ya que la salud de su madre de la nada, aparentemente o es lo que le habían dicho, se vio afectada. Hinata no pudo, y no se atrevía, a negársele a su padre, así que solo le pidió dejarla hablar con Sakura, y como no, con sus ojitos llenos de lágrimas y muchos sentimientos arremolinados en su estómago.
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Am y aquí tenemos el final, si de purísima casualidad quisieran que continuara esta pequeña historia solo tienen que decirme... tengo una pequeña idea. Bueno que tengan un bonito día... o noche
