Me enamore de ti
Summary:
Como una flor fue florecido en su corazón, cada día esos sentimientos se hacían más fuertes e intensos. No supo cuándo, solo sucedió; Korra se enamoró de ella...
Una semana ha pasado desde la convergencia armónica, y en ciudad República las cosas no van marchando muy bien para la joven Avatar, a pesar de que salió victoriosa de la batalla con Batu, la aparición de las lianas le ha traído muchos dolores de cabeza. Reuniones y más reuniones con el presidente Raiko, exigiéndole que encuentre la manera de deshacerse de aquellas enredaderas, regaños y gritos era lo que casi siempre salía de la boca del presidente y ni que decir de los ciudadanos que a cada lugar que iba solo escuchaba sus quejas por el mismo motivo que Raiko no paraba de gritar. Lo único que le agradaba de esas reuniones es que en la mayoría de ellas no se encontraba sola, Asami estaba ahí; como líder de Industria Futuro casi siempre era convocada para asistir, ya sea para aportar ideas de como eliminar las lianas o alternativas para sobrellevar el problema, mientras el Avatar como autora de aquella "calamidad" como lo llamaba Raiko, encontraba la solución definitiva. Cuando Asami estaba presente, las reuniones eran más llevaderas, de vez en cuando la ingeniero volteaba discretamente para observarla y regalarle esa hermosa sonrisa que tanto le fascinaba a Korra…
-espera que!- grito la Avatar cuando en su mente se cruzó la idea de la fascinación que sentía por la sonrisa de Asami, levantándose de golpe de su asiento en medio de la sala de juntas y golpeando con ambas manos la mesa.
- ejemm- carraspeo Raiko dirigiéndose una mirada fulminante - joven Avatar espero que ya se le haya ocurrido alguna brillante idea para acabar con problema que provocó! - dijo con cierto tono de exasperación en su voz
-oh, bueno verá... Yo estaba... Ja ja ja- decía nerviosamente mientras con su mano se recaba la nuca - maldición! - pensó, para luego echar un rápido vistazo a Asami quien reía por lo bajo, provocando un notorio rubor en la mejillas de la morena que no pasó desapercibido por la joven Sato quien al notarlo sintió un leve cosquilleo en el estómago.
Bien al parecer hoy de nuevo no obtendré alguna solución por parte del Avatar Korra por lo tanto doy por terminada la reunión. Les mandaré un comunicado de cuando será la siguiente... Y por favor Avatar-dijo el presidente mirándola de reojo- no llegue tarde. - dicho eso salió de la sala de juntas seguido de sus secretarios y guardias.
-estas bien Korra? - pregunto Asami al notar que la aludida aun seguí en la nubes
-oh! Si, si... Ejem estoy perfectamente- decía nerviosamente sin mirar a los joven a los ojos, y es que si lo hacía no estaba muy segura que pasaría después... Últimamente había sentido cosas extrañas al estar cerca de la ingeniero, todo parecía más…brillante? De alguna manera se olvidaba de todo, su pulso se aceleraba, las palabras salían torpemente de su boca y no sabía muy bien cómo reaccionar a eso, pues era algo totalmente nuevo para la joven Avatar.
-Pues entonces creo que regrese al templo aire para informarle a Tenzin sobre la reunión de hoy- le comenta a la ingeniero con naturalidad, cuando por su mente una loca idea se le cruza... - Umm quisieras ir a cenar con migo.. Es decir nosotros? Con Tenzin y su familia... ya sabes Ikki, Jinora…-
Asami deja escapar una risa ante el notorio comportamiento torpe de Korra, para luego regalarle una mirada llena de ternura que deja aún más aturdida a la morena.
-Claro! Sera divertido, además hoy termine temprano con los asuntos que tenía pendiente en la compañía - le dice mientras coloca una mano sobre el hombre de Korra provocando en esta que su cuerpo se tensara
-viene contigo Naga? – le pregunta la ojiverde ya que es raro verla sin su mascota
-Emm no hoy viene en el planeador, quería dejarla descansar después de jugar con ella gran parte de la mañana – decía con una sonrisa risueña recordando lo divertido que fue jugar con su perra-oso polar
-Entonces, creo que nos iremos al puerto en mi satomovil.. Nos vamos?- dice la heredera mientras se lleva una mano a su sedoso cabello haciendo ese ademan tan peculiar que le encanta a Korra
-Te sigo- contesta apenas la morena sacudiendo su cabeza
Comenzaron a caminar hasta el lujoso satomovil de la ingeniero, mientras Korra comenzaba nuevamente a divagar en su mente
-espíritus! Pero qué diablos pasa conmigo?! No puedo mirar a Asami a los ojos sin sentir ese extraño cosquilleo en mi estómago, y estoy segura que no es hambre, siempre llego satisfecha antes de las largas reuniones de Raiko... Arhg! - pensaba mientras llevaba sus manos a su cabeza en señal de exasperación- oh! Valla miren ese increíble cabello tan suave y brillante que se menea con el andar se sus... Caderas... - su mirada traviesa había descendido hasta la parte de su trasera de la ingeniero, perdiéndose en el cadencioso movimiento que hacia al caminar.
-Korra? - escucho decir a la ojiverde sacándola de su transe -ya hemos llegado, anda sube-
-Ah sí, si lo siento- mientras Asami se agachaba para abrir la puerta de su auto Korra volteo al poste más cercano solo para darse leves topes contra el sin que la ingeniería la viera...
- pero qué diablos!... Pasa... Conmigo! - pensaba mientras seguía dándose de topes al mástil.- Soy una pervertida!-
-Korra que haces? – pregunto Asami alzando una ceja, al ver a la morena sosteniendo la estructura con ambas manos.
-oh esto…es que creí que el poste estaba algo...flojo y quería verificar que no fuera así… ya sabes, soy el Avatar tengo que cuidar a las personas del peligro- contesto no muy convencida de lo que acaba de salir de su boca.
-está bien... Creo... Anda sube – dijo la heredera con cierto escepticismo en voz
-Sip- el Avatar abre la puerta del copiloto para tomar asiento a lado de Asami, esta pisa el acelerador comenzado su camino hasta el muelle.
El trayecto fue raro, ninguna de las dos decía nada, Asami noto el comportamiento raro de su compañera, era la primera vez que la veía así de distraída, tal vez lo que paso en la convergencia armónica aun la tenga muy preocupada, pensaba la pelinegra mientras veía a Korra de reojo sin quitar la vista del camino. Hasta que al fin decidió romper el silencio:
-sabes creo que sería divertido si aprenderás a manejar- comento casualmente Asami
-Yo? No lo sé, es decir Naga la mayoría de las veces me acompaña y eso de los satomovil no se me da muy bien- dijo con inseguridad en su voz
-tranquila no es tan complicado como parece, yo misma te enseñaré a conducir... Además no crees que sería interesante competir la una con la otra en la pista de pruebas de los satomovil?- dijo en tono desafiante, que para la morena no paso desapercibido.
Y es que esa idea le pareció realmente excitante al Avatar, una carrera! A gran velocidad!
-Eso sería genial!- Dijo por fin mirando a Asami con una gran sonrisa llena de entusiasmo
Al fin habían llegado al templo, entrando al comedor donde ya se encontraba la familia de maestros aire reunida, esa noche Bolín no los acompañaba pues Mako lo llevaría a cenar a su restaurant favorito Norok
-Hey chichos hola, parece que llegamos a tiempo para la cena- dice la morena mientras se introduce y toma asiento a lado de Jinora.
-Korra, Asami que bueno que llegaron! - decía Pena con alegría,
-vamos Asami siéntate aquí- decía la esposa de Tenzin mientras hacia un ademán con su mano para que la heredera se acercara al asiento vacío a lado de ella.
La cena trascurría con normalidad, Tenzin llamándole la atención a Meelo por molestar a Ikki, el tío Bumi tratando de impresionar a Jinora con sus historias y Asami y Pema charlando amenamente:
-Y bien Korra que tal te ha ido esta vez con el presente Raiko?- pregunto Tenzin, pues sabía de antemano lo duro que podría llegar a ser aquel político con la joven Avatar cuando él no podía asistir a la reuniones.
-Lo mismo de siempre regaños, gritos, diciéndome cada dos minutos que todo es mi culpa, que la ciudad es un desastre y bueno nada importante-
-Ya veo será mejor que…-pero el maestro no pudo terminar su frase, pues su hermano comenzó a hablar de repente:
-Esto me recuerda a una de mis tantas aventuras en el barco de mi tripulación cuando era general del ejército…-interrumpió Bumi como era costumbre.
Tenzin lo miro de manera desaprobatoria mientras su hermano seguía con su discurso sin prestarle atención al maestro aire,.. Korra dejó escapar una risilla de sus labios ante la situación, pues era muy gracioso ver a Tenzin discutir con Bumi
-Jajaja, eso debió haber sido muy vergonzoso- escucho Korra decir a Asami quien aún platicaba con Pema, dirigió su mirada hacia la ingeniero y de pronto el tiempo se paró para ella, de nuevo la joven Avatar se encontraba mirando a su amiga, perdiéndose en su figura, el dulce sonido de voz, el movimiento de sus labios al hablar, la bellas sonrisas que se dibujaban en su cara. No supo cuánto tiempo paso un minuto?, diez?, estaba tan sumida en aquella musa, hasta que una voz la saco de su sueño:
-Korra?- era Jinora quien la llamaba, la Joven maestra aire era muy suspicaz y se había dado cuenta del comportamiento extraño del Avatar, la miro divertida pues ya sospechaba lo que le estaba ocurriendo a la morena.-Koorrraaaaa….-volvió a decir esta vez en un tono travieso.
-Ah? Ah! Jinora que pasa?- contesto por fin la ojiazul saliendo estrepitosamente de su trance.
-¿Qué pasa? Es lo que yo te pregunto, pareciera como si estuvieras…ida?,-diciendo lo último mientras lanzaba una mirada a Asami.
-Que?! No yo no la estaba viendo a ella, es decir yo…-dijo totalmente nerviosa, sintiéndose atrapada.
-Jajaja…Korra eres muy divertida, nunca te había visto de esta manera por alguien, ni con Mako- dijo Jinora alzando una ceja
-A que te refieres? –Pregunto la morena confundida, -con Mako? Que tenía el que ver en todo esto? -pensó
-Es que acaso no te has dado cuenta?- preguntaba Jinora en voz baja
-Cuenta de que?- Ahora si estaba más que confundida la joven Avatar
-Valla que en vedad eres despistada….no sé si deba decírtelo o esperar a que te des cuenta por ti misma, aunque pensándolo bien creo que lo último llevara algo tiempo- comento dándole una media sonrisa a la morena
Korra miraba confundida a la pequeña, a que se refería?, acaso ella ya sabía que era lo que le pasaba? Estaba a punto de atreverse a preguntar cuando escucho de nuevo la voz de Asami, esta vez dirigiéndose a todo los presentes:
- Bien creo que ya debo marcharme, antes de que se haga más tarde, muchas gracias por la cena, estuvo realmente deliciosa y lo mejor fue la compañía- dijo educadamente y con la elegancia que la caracterizaba.
-oh Asami por que no te quedas?, aun te queda un largo camino para llegar a tu casa- le pidió Pema en ese tono materno.
-De verdad me encantaría pero tengo una reunión importante muy temprano por la mañana con uno de mis clientes y no quisiera incomodarlos a tan tempanas horas- dijo la ingeniera con pena en su voz
-Claro que no es molestia, pero si es muy importante adelante, no quiero que vayas a llegar tarde por nuestra culpa- decía Pema
-muchas gracias por todo- decía mientras hacia una reverencia y daba media vuelta para dirigirse a la salida
-Korra! Acompáñala a tomar el barco de regreso a la ciudad!- Le ordeno Tenzin, si no fuera porque los bisontes voladores ya se encontraban dormidos y para despertarlos era todo una odisea, hubiera llevado a la joven Sato hasta su mansión.
-Que! Ah!...si! Decía Korra mientras se levantaba de golpe de la mesa, corrió para alcanzar a Asami, mientras Jinora la seguía con la mirada divertida ante la actitud de la morena.
-Hey! Espera te acompañare a tomar el barco de regreso- le decía la ojiazul acercándose a la bella joven a paso veloz.
-Korra muchas gracias- respondió Asami regalándole un cálida sonrisa que provoco un ligero rubor en las mejillas del Avatar.
-es muy divertido cenar con ustedes…con compañía.-decía con un tono de tristeza en su voz que Korra pudo apreciar.
-Por qué no vienes a cenar con nosotros siempre?- sugirió Korra entusiasmada
-De verdad?-dijo Asami un tanto sorprendida, por la repentina invitación.
-Claro! Será divertido, yo pasare por ti a tu trabajo y te llevare de vuelta al terminar a la cuidad que dices? - Decía Korra emocionada sin procesar muy bien aun lo que dijo.
Asami dejó escapar una sonrisa ante lo que acababa de decir, realmente era una hermosa propuesta.
-Me encantaría...-hiso una pausa al recordar el trabajo -maldición –pensó, suspiro pesadamente y con desgano contesto-…aunque creo estaré algo ocupada con los proyectos de la compañía esta semana…- dijo recordando que tenía que entregar unos planos a los clientes que estaban ansiosos por cerrar trato con industria Futuro.
-oh..ya veo- contesto con decepción el Avatar –Entonces eso quiere decir que no te veré en algunos días?- levanta su mirada para encontrarse con un par de orbes verdes que alcanzan a apreciar en el rostro de la morena un puchero de lo más tierno.
-Tal vez…-respondiendo cabizbaja, ya que en verdad deseaba asistir a esas cenas, y pasar tiempo con Korra.
Al fin el bote que la llevaría de regreso a ciudad Republica apareció y Asami muy a su pesar lo abordo.
-Nos veremos pronto!- decía Korra mientras sacudía su mano en señal de despedida
-Hasta luego, Korra, tratare de terminar mis asuntos antes…además aun te debo una clases de manejo- contesto mientras le giñaba el ojo a la morena, causándole una pequeña descarga en su ser.
El bote comenzó su marcha y Korra no se movió de ese lugar hasta perder de vista a la ingeniero, regreso al templo aire con su mente hecha un lio, solo podía pensar en ella, era como si lo demás no importara, los problemas con las lianas, los regaños de Raiko, los entrenamientos con Tenzin…simplemente quería verla, estar con ella. Se dirigió a su alcoba a tratar de conciliar el sueño, tal vez eso era lo que necesitaba, si tal vez y solo estaba cansada…
Los días pasaron y Korra no había visto a Asami desde entonces, la ingeniero había tenido bastante trabajo en su empresa y Tenzin la tenía demasiado ocupada con el entrenamiento, en varias ocasiones había querido ir a visitarla a su oficina o su taller pero siempre que iba no estaba, al preguntarle a sus empleados le decían que estaba en alguna reunión o algún viaje de negocios en la nación del fuego. Por lo que regresaba sin ánimos a la isla aire. Lo único rescatable de esos días era que Raiko no la había llamado para escucharlo gritar.
Era de mañana, ya terminando la segunda semana desde los acontecimientos de la convergencia, y Korra se encontraba entrenando junto a Tenzin su aire control.
-Korra concéntrate!- decía el maestro visiblemente enojado, y es que desde hace una hora la chica morena parecía estar en las nubes, no le prestaba atención al entrenamiento y muy apenas lograba esquivar los ataques de Tenzin, parecía una novata.
-eso intento!...es solo que- contesto la joven si saber bien que responder, se sentía triste, como si algo le faltara.
-Tal vez lo que necesites sea meditar unos momentos en paz, ahora ve, espero que eso te ayude- le ordeno el hombre con tono autoritario
-está bien- contesto pesadamente mientras se giraba sobre sus talones rumbo a donde solía sentarse a meditar. Llego a aquel balcón, se acomodó en el suelo, se puso en posición de meditación, dio un profundo suspiro y cerro sus ojos…nada, simplemente no lograba concentrarse en su mente solo se encontraba una persona.
Suspiro en signo de resignación y sin más se dejó car en el suelo boca arriba, mientras llevaba su brazo derecho sobre su cara, tapándose los ojos con el dorso de su mano.
- por qué Asami? Que es lo me pasa, esto es tan raro y tan nuevo para mí…eres mi mejor amiga pero estoy segura que esto no es nada normal pera las "amigas"….es como si…como si estuviera….enamorada- dijo para sí misma, murmurando la última palabra con apenas un audible susurro.
–Q…q…que?!-grito al fin reaccionando ante descubrimiento que acababa de hacer, se sentó rápidamente como si alguien le hubiera lanzado un balde de agua fria.
-oh, espíritus esto no puede estar pasando…Como? Cuando? Porque?!- se exigía una explicación para ella misma, trato de rememorar todos los momentos que ha pasado con ella, tratando de encontrar la razón de su dicho, pero nada, que fue? …tal vez y fue todo, tal vez y desde el primer momento que la vio en esa fiesta que organizo Tarlok en honor al Avatar, había comenzado su dilema y ella ni por enterada estaba, no estaba segura de cómo fue, pero de lo que si tenía certeza es de que se había enamorado de su mejor amiga.