Disclaimer: Pokémon no me pertenece, es propiedad de su creador Satoshi Tajiri, esta obra es realizada sin fines de lucro y con puro interés de entretenimiento, por favor, no me demanden.
Advertencia: No lean esto si están bajo un ánimo depresivo XD
Este fic participa en el: "Reto Bonus: Kecleorama, del foro DexHolders del "
"O Celestial de seus olhos"
Acaso la fortaleza está en el alma, es que se ha de suponer que el que más lo intenta es el más fuerte, como no, si yo formara parte de ese grupo no estaría discutiendo esa idea, al fin y a cuentas, los seres humanos nacimos para ser seres individuales a los que les preocupa más su subsistencia que la de otros, ¿yo soy así?, desde que te conocí mi corazón me ha dicho que debo luchar no por mí, sino por ti, que no importa si yo estoy bien o mal, solo debo confiar en lo que más me impulsa, tú, pero cuando me aprecio verdaderamente, me doy cuenta de que jamás fui lo suficientemente fuerte para cuidarte, por eso actuó así, indiferente a lo que me dices, frío como el hielo para no herir tus sentimientos, pero aun así, el frío quema.
Sé de antemano que como mi amiga siempre te has preocupado de mí, que tus quejaderas y griteríos son las maneras en las que expresas cómo te sientes, pero como lo dije antes, no soy lo suficientemente fuerte, yace mi pesar en la falta de voluntad que tengo, cuando miro al cielo siento una paz tremenda, los colores que iluminan mi mente son los mismos que tú y el edén me ofrecen, tu mirada de ojos celestes siempre tenía algo que decir y yo, lamentablemente, ignoraba lo que decías, no por aburrimiento o desinterés sino por debilidad.
Que voy a hacer, desde lo más profundo de mi corazón desearía estar contigo, pero conozco muy bien mis limitaciones, la distancia que nos impone Arceus, ese límite que para algunos es ficticio pero en el que yo siempre he creído, el cielo.
Te extraño sobremanera, dudo mucho que puedas escucharme, o que siquiera te lleguen estas palabras pero te prometo que cuando sea lo suficientemente fuerte, te volveré a ver. Cada vez que miro al cielo mi mente entra en estado de coma, dejo de pensar en lo que me rodea, es una sensación agridulce, dulce porque recuerdo todas nuestras aventuras, nuestras vivencias ocasionales nuestras reuniones con Red y Yellow que siempre terminaban en un gran alboroto, en gran parte por tu culpa, y agria porque la distancia me impide volver a verte, recuerdo el día en que me llegó la noticia, una manada de Tauros salvajes habían pisado a la flor más azul de la pradera, sin piedad, la habían vuelto trisas, que dolor, que melancolía siento al recordar ese día, actué por instinto, no llore, tenía bien claro que tu no hubieses deseado algo así, por lo que me esforcé y salí corriendo al lugar más lejano posible, necesitaba saciar mi sed, cometí un error aquel día, lo sé, pero quien comprende sus errores es capaz de no volver a hacerlos otra vez, ¿cierto?, bueno, me hubiese gustado darme cuenta de ellos el mismo día en que te conocí.
Todos me han nombrado como fuerte, como valiente, pero tú fuiste la única que rompió ese esquema, viste más allá de lo que cualquiera pudo, como es posible que yo no me haya dado cuenta de eso antes, soy un idiota.
Sé que algún día nos volveremos a ver, que algún día yo moriré y me encontraré contigo en lo más alto del cielo, pero hasta ese día, seguiré recordando esa celeste de tu mirada hasta que deje de confundirse con el cielo.
Este es mi primer fic, gracias por leerlo, si tienes el interés, podrías dejarme en los comentarios críticas constructivas o zonas en las que deba mejorar mi escritura, como lo puse en la historia, de los errores se aprende, de antemano gracias.