¡Hola!

¡Espero que todas se encuentren muy bien y hallan tenido un excelente inicio de año!

Bueno, si ya sé que hace dos semanas inicio el año, pero en fin, que mejor manera de comenzarlo que con ¡un nuevo fic! Esta va a ser una historia pequeña, de solo ocho capitulos cortos, así que las actualizaciones serán pronto.

En fin, no les digo más y ¡espero que disfruten de esta historia!


Recuérdame

Por Serenity

Capítulo 1

El Despertar

Abrí mis ojos lentamente, sintiendo las luces contra ellos, de inmediato los cerré sintiendo que me dolía todo el cuerpo, principalmente la cabeza. Volví a abrir los ojos y parpadee varias veces hasta acostumbrarme a la luz, observe a mi alrededor y me di cuenta de que estoy acostada en una cama de hospital. Creo que estoy en el Hospital General de Tokio, donde trabaja Ami.

–¿Serena? ¡Al fin despertaste! –grito Mina acercándose a mí y me envolvió en un fuerte abrazo –Me alegro tanto que despertaras.

–También me da gusto verte, Mina… Pero me vas a matar con ese abrazo.

–Lo siento –dijo ella soltándome y se sentó a mi lado –Estoy tan feliz de verte despierta. Tenía tanto miedo. Esta vez sí que nos diste un buen susto.

–¿Qué me paso? ¿Por qué estoy aquí?

–¿No lo recuerdas?

–No… lo último que recuerdo es que estábamos en el Templo Hikawa con Rei, Ami y Lita.

–Eso fue ayer en la tarde. ¿Recuerdas que paso después?

–No… no lo sé… me duele mucho la cabeza –dije llevándome una mano a la cabeza. Logre sentir un vendaje en la frente, muy cerca de mi cien.

–Te tuvieron que dar tres puntos. Estabas sangrando demasiado.

Me asuste enormemente al escucharla ¿Qué me había pasado?

–Tranquila, Serena, estarás bien. Llamare a la enfermera para que te de algo para el dolor.

–¡Bombón!

Un hombre muy atractivo, aunque algo desalineado y con unas enormes ojeras que delatan que necesitaba una buena noche de sueño, apareció de pronto en el umbral de la puerta con un par de vasos de café. Esta vestido con un traje rojo y con la corbata torcida. Tiene el cabello largo de color negro peinado con una coleta y los ojos más impresionantes que había visto en toda mi vida de color zafiro.

Tan rápido que apenas y pude notarlo, él se acercó rápidamente a mí mirándome con una enorme sonrisa mientras Mina le quitaba de las manos los vasos, solo segundos antes de que se sentara a mi lado y me envolviera entre sus brazos, estrechándome en la calidez de su cuerpo como si nunca me quisiera dejar ir.

–No te imaginas lo preocupado que he estado por ti, Bombón… –musito él besando mi cabeza, muy cerca de mi herida, sin soltarle.

Lo aparte de mi totalmente confundida por lo que hizo –¿Quién eres tú? ¿Y por qué me llamas Bombón?

–Muy graciosa…–dijo él con una pequeña sonrisa –No, en realidad no. Esa no es una buena broma después del susto de muerte que me has dado… Y pensar que yo estaba a la mitad de un concierto cuando ocurrió todo –dio un largo suspiro –No sé qué habría sido de mí si te hubiera perdido, Bombón.

–¿De qué hablas? –voltee a ver a mi amiga –¿Quién es él, Mina?

–¿Qué te pasa, Serena? –pregunto ella confundida –Es Seiya.

–Pues mucho gusto, Seiya –dije con una pequeña sonrisa –Y no me llamo bombón, soy Serena Tsukino.

–Sé cuál es tu nombre, y sabes que para mí eres y siempre serás Bombón… mi dulce Bombón –dijo él acariciando mi rostro con mucha ternura. No es que me queje, porque es muy agradable su caricia, pero es raro. No tengo ni idea de quién es él.

–Oye, no deberías de tomarte tantas confianzas conmigo como si fuera tu novia o algo así.

–Pero es que si es algo así. Eres mi novia, Bombón.

–¿Qué? –grite sorprendida –¡Mina, ya no me está gustando tu broma!

–¿De qué hablas? Seiya te está diciendo la verdad.

–¿Qué te pasa, Bombón? ¿Por qué actúas así? –pregunto Seiya preocupado.

–¿Y cómo debería actuar ante un extraño que dice que es mi novio cuando es la primera vez que te veo?

–Eso no es cierto, Serena –replico Mina –Conoces a Seiya desde hace años.

–No es posible, no recuerdo haberlo visto antes de hoy.

–¿Por qué dice eso, Mina? –le pregunto Seiya.

–No lo sé. Ni siquiera logra recordar lo que sucedió.

–Eso no explica porque si sabe quién eres tú y no sabe quién soy.

–No tengo idea –dijo Mina preocupada –Serena ¿sabes quiénes son las Sailor Scouts?

–¿Un nuevo grupo musical? –replique confundida.

Mina y Seiya intercambiaron una mirada de preocupación, como si acabara de anunciar la Tercera Guerra Mundial. No entiendo porque actúan así.

–Ok, esto se está poniendo muy feo… Voy por Ami. Quédate con ella, Seiya –dijo Mina dejando los cafés en la mesita a un costado de la cama para después salir corriendo de la habitación.

–No te preocupes, Bombón. Todo estará bien.

–Seiya ¿verdad? –dije y él asintió con la cabeza –En primer lugar, no me llamo Bombón. Y es muy lindo de tu parte preocuparte por mí, pero pese a lo que diga Mina, no te conozco. Creo que será mejor que te vayas

–No me voy a ir. Te prometí que nunca te dejaría y eso voy a hacer –dijo él poniendo un mechón de cabello detrás de mi oreja y empezó a acariciar mi mejilla, lo cual tengo que me pareció muy agradable –Ya hemos recorrido un largo camino para estar juntos. Unidos hemos superado muchas cosas y también superaremos esto. No me apartare de ti ahora que más me necesitas. Yo te amo, Bombón…

Seiya se inclinó rompiendo la distancia que nos separaba acercando sus labios a los míos, eche mi cabeza hacia atrás sorprendida de lo que está haciendo, pero él deslizo su mano hasta mi cuello acercándome a él y…

–¡Aléjate de ella, Kou! –exigio una profunda voz masculina. Seiya se separó de mí y vi frente a mi cama a un hombre muy alto y pocos años mayor que Seiya, de cabello corto oscuro y sus ojos de un profundo negro. Al lado de él estaba Haruka.

–¡Haruka!

–¿Por qué no nos avisaste que la gatita había despertado, Kou?

–Porque apenas despertó hace unos minutos, pero hay algo importante que resolver primero –replico Seiya –Además, ¿qué hace él aquí? No tiene ningún derecho a estar aquí.

–Sabes que está preocupado por ella –respondió Haruka –Pese a todo, no podemos negarle que la vea.

–Pues deberíamos…

El hombre que está al lado de Haruka, supongo que es el tal Darién, miro a Seiya con una profunda molestia. No le dijo nada mientras Haruka y él discutía, simplemente aprovecho para intentar acercarse a mi lado. No lo logro.

–¡Ni siquiera la toques, Chiba! –grito Seiya molesto interponiéndose en su camino.

–¿Quién es él?

–¿Tampoco sabes quién es él, Bombón?

–¿Debería? –musite confundida.

–Sí, para que así entienda que no tiene nada que hacer aquí.

Estaba por preguntarle a Seiya porque, cuando irrumpió en la habitación Mina junto con Ami.

–¿Qué hacen aquí? Les dije que esperaran con el resto de las chicas en la sala de espera –dijo Ami mirando a Haruka y al hombre que la acompaña.

–En lugar de regañarnos, deberías de hacer tu trabajo y ver a Serena.

–No me digas lo que tengo que hacer, Darién. Ya me dijo Mina lo que ocurre –le dijo Ami tras lo que se acercó a mi cama con una sonrisa amable –¡Hola, Serena! Soy la doctora Ami Mizuno.

–Ya sé quién eres, Ami.

–Me alegra que me recuerdes, esa es una buena señal –dijo ella con una dulce sonrisa –¿Cómo te sientes?

–Me duele la cabeza y creo que aumento mi dolor al escucharlos discutir.

–Comprendo. ¿Me permites? –Ami saco una pequeña linterna y me empezó a examinar los ojos por alguna razón que no entiendo –¿Puedes recordar que paso antes de que despertaras hace unos momentos, Serena?

–No, solo recuerdo que estaba contigo y las demás en el Templo Hikawa. Lo demás está en blanco hasta que desperté y a la primera que vi fue a Mina.

–¿Pero no tienes idea de quién es él? –pregunto Ami indicándome a Seiya.

–No, solo sé que dice que es mi novio.

–Eso es lo peor de todo….

–Lárgate ya de aquí, Chiba –musito Seiya molesto.

–Compórtense si no quieren que los saque a ambos –les pidió Ami a ambos.

–¿Crees que lo que le paso sea la causa de que no recuerde a Seiya? –pregunto Mina.

–Es probable… ¿Sabes quiénes son ellos, Serena? –pregunto Ami señalando a Haruka y al otro hombre que la acompaña.

–Solo reconozco a Haruka. No tengo idea de quien sea él.

–Soy Darién Chiba. Tu novio.

¿Otro novio?

–Ex novio –dijo Seiya de manera tajante –Ustedes terminaron hace mucho tiempo.

–Dejando a un lado el asunto del novio y el ex novio –dije interrumpiéndolos antes de que se desatara otra discusión y me duela más la cabeza –Quiero que alguien me diga porque estoy aquí. ¿Qué fue lo que me paso?

Todos intercambiaron miradas mientras se extendía el silencio a mi alrededor, lo cual empezó a asustarme de saber la respuesta.

–Tuviste un accidente en tu auto, gatita –respondió Haruka. Me quede paralizada cuando la escuche… un accidente automovilístico, así murieron mis padres y Sammy.

–No puedo creer que le dijeras eso, Tenoh, y más después de todo lo que le ha pasado –Musito Seiya molesto.

–Fue lo que le paso, Kou –dijo Haruka severamente –Sé que es duro y más después de lo que les paso a los Tsukino, pero afortunadamente la gatita está bien y se recuperara pronto.

Seiya la miro con molestia, como si no estuviera del todo de acuerdo con sus palabras.

¿Por qué tengo la sensación de que me están ocultando algo importante?

–Ami ¿por qué Serena no recuerda a Darién y a Seiya?

–Tiene amnesia selectiva, Mina. Significa que Serena perdió parte de su memoria, y parece que algunos de esos recuerdos que perdió tienen que ver con ellos –respondió ella –Supongo que es una forma en la que su cerebro la protege de lo que le ocurrió.

–¿La pérdida de los recuerdos de Serena podría ser a causa de su lesión en la cabeza? –pregunto Haruka.

–Sí, al parecer así es…

Seiya se acercó a la cama y me tomo la mano, apretándola con suavidad mientras Ami seguía hablando. Estaba consternada al sentir nuestros dedos entrelazados. Mi primer impulso fue retirar mi mano, pero por alguna extraña razón, me siento muy cómoda al sentir su cálida mano junto a la mía. Creo que ese golpe en la cabeza si me afecto ya que no entiendo porque siento el impulso de aferrarme con más fuerza al guapo desconocido a mi lado, mientras él apretó un poco más nuestras manos como en señal de apoyo.

–…Tendré que analizar a detalle los exámenes que se le realizaron para estar segura. Lo más probable es que sus recuerdos regresen una vez que baje la hinchazón de la lesión. Aunque no es ninguna garantía –dijo Ami, tras lo que volteo a mirarme –Sé que no es un consuelo, Serena, pero al menos no perdiste por completo tu memoria.

–¿Entonces porque tengo la sensación de que olvide una de las partes más importantes de mi vida?

–Porque realmente es así, Bombón –dijo Seiya –Pero no te preocupes porque pronto estarás bien y te ayudare a recuperar tus recuerdos.

–Los signos de Serena se han mantenido estables, así que no será necesario que se quede en el hospital –dijo Ami –Podrás llevártela a casa, Seiya, pero antes tendremos que hablar del medicamento que tomara para el dolor y…

–¡Espera! –grito Darién molesto interrumpiendo a Ami –No creo que en el estado de Serena, sea conveniente que se quede con ese sujeto.

–Tú ni opines, Chiba –dijo Seiya severamente –Yo mejor que nadie cuidare bien de Bombón, así que ella y yo volveremos juntos a nuestro hogar.

–Ella necesita de atenciones especiales para que se recupere. Creo que el más indicado para cuidarla soy yo.

–Estás loco si crees que voy a permitir que mi novia este contigo –replico Seiya, molesto.

–¡Oigan! Podre tener amnesia, pero soy una mujer adulta y no voy a quedarme con ninguno de ustedes –dije separando mi mano de la de Seiya –Y hasta donde recuerdo, yo vivo con Mina en un departamento frente al parque No. 10 –voltee a ver a Mina –Todavía seguimos viviendo ahí ¿verdad?

–Yo vivo ahí –dijo Mina –Vivimos juntas hasta hace unas semanas, después te mudaste al departamento de Seiya, así que ahora vives con él.

–¡Me dejaste mudarme con alguien que no conozco, Mina!

–Me conocías hasta hace veinticuatro horas, Bombón –dijo Seiya muy tranquilo. ¿Cómo puede tomarse las cosas con tanta calma mientras yo no sé ni qué hacer?

–Lo mejor sería que trataras de volver a tu vida normal, Serena –dijo Ami –Eso ayudaría a que pronto regresen tus recuerdos.

–¿Y eso incluye ir al lugar donde se supone que vivo con Seiya?

Ami asintió.

–¡No! ¡De ninguna manera! –exclame molesta –¡Ni loca iré allí!


¡Pobre Serena! Y más Seiya al ver a su novia así... Aunque si yo estuviera en el lugar de Serena, ni lo pensaba y ¡me iba a vivir al hogar de Seiya! En fin, ya vamos a ver en donde terminara nuestra rubia sin memoria...

Me despido por ahora esperando que les haya gustado el capítulo de hoy, como siempre, les pido que no olviden dejar sus comentarios, dudas, quejas o sugerencias que tengan. Muchos saludos para todos y ¡nos vemos en el proximo capitulo!

XOXO
Serenity