Disclaimer: Los personajes de Hawaii Five-0 no me pertenecen.
N/A: Spoilers.
Capítulo Único: Cielo.
Danny ha muerto.
No duele, nada duele, aunque eso no evita que tenga miedo.
Está solo. Una pequeña casa equipada a la deriva de una playa se encuentra a su espalda, de arena cálida y un océano frente a él que no ruge, no se mueve y apenas logra hacer un oleaje que mima la orilla a sus pies descalzos. Hay una brisa suave que le alivia, aves cantando apenas de forma audible a metros de él y dos mecedoras frente a la casa.
Es acogedor a pesar de la desagradable circunstancia.
Danny está solo, porque ha muerto y ese es su Cielo Personal.
No es lo que hubiera esperado.
En realidad, ni siquiera hubiera esperado morir. Pero lo había hecho.
Le habían disparado, había sangrado y muerto entre los brazos de Steve.
Steve.
Danny apenas recuerda sus ojos con lágrimas, el dolor de perderle y la ira por no saber que hacer. Por no haberle salvado.
Danny había muerto entre los brazos de Steve y está bien, porque había partido en la calidez de quien amó a pesar de nunca habérselo dicho. Ahora se pregunta si sus sentimientos hubieran sido recíprocos.
Observa la playa, la casa y las dos mecedoras. Extrañamente, todo está equipado para dos personas. Danny supone que su Cielo está listo para esperar a alguien más. No sabe a quien.
El rubio entra en la casa lentamente, hay fotos de su familia en las paredes y muebles. Él observa a sus hijos en un cuadro a parte.
Danny ha muerto y sus hijos, huérfanos de padre, ahora están bajo la tutela legal de Steve hasta que ellos cumplieran la mayoría de edad. Sabe que su -ex-compañero cuidará de ellos como nadie. Danny puede descansar en paz por ello.
Sube al segundo piso del hogar, entra en su habitación y se recuesta en la cama matrimonial bajo una canción de Bon Jovi; Danny cree que es Wanted Dead or Alive. Porque su Cielo Personal está listo para alguien más, y una parte de él anhela que fuera para cierto Seal.
Porque puede que Danny esté muerto, pero aún ama a Steve McGarrett como lo hizo en vida y esperará por él incluso en el otro mundo.
