Primero agradecer la invitación para participar en este reto y segundo gracias por el apoyo hacia mis otros fics. Es un mundo que aun estoy conociendo y del cual aprendo cada día.

* Título: Love, cry and seasons (Amor, llanto y estaciones).

* Pareja: Harry Potter y Draco Malfoy.

* Rating: M (escenas un poco explicitas).

* Advertencia: Yaoi. Relación chico-chico.

* Disclaimer: Los personajes y lugares mencionados en esta historia pertenecen a J. K. Rowling.

* Palabras: 761 (Sin contar todo lo escrito anteriormente).

* Nota de autora: Este fic participa en el reto de Febrero "A través de las estaciones" del foro "Del Yaoi & el Slash". / Como dice al principio relación entre hombres, si no te gusta por favor no insultes.

El comienzo de todo

Las relaciones que comienzan en circunstancias intensas, no perduran. Puede que aquel dicho sea cierto y realmente él lo creyó cuando la relación que mantenía junto a su novio pareció no funcionar. Cuando tuvieron la primera pelea, hace unos años, fue algo que jamás imaginó pasar. A ese episodio lo calificó como "un mal despertar", uno de tantos.

Si se remonta en el principio de todo. La primera vez que lo volvió a ver. Estaba irreconocible, no era él, en realidad no estaba en sí cuando le hablaron. Encontrarse con Hermione Granger aquella mañana calurosa de verano, hace cinco años, fue el comienzo de todo. ¿Por qué quiso ayudarla a buscar a Po… Harry? Es algo que aún se pregunta, pero de lo que no se arrepiente de haber hecho.

A medida que el tiempo fue pasando, tuvieron la oportunidad de irse conociendo mejor, por diversas circunstancias siempre se encontraban en cualquier lugar muggle o mágico. Draco en ese entonces se dio cuenta de que Harry Potter ocultaba muchas cosas, secretos, que solo con el tiempo fue revelando, confiando.

Sin la aprobación de ninguno de sus amigos, Granger y Weasley, comenzaron a tener una relación. Una relación que no estuvo exenta de críticas o de palabras mal intencionadas, de parte de las personas o de los medios de comunicación. Harry venia saliendo de una larga relación con Ginny Weasley la cual no funciono gracias a la pelirroja y Draco, por su lado, decidió no seguir la tradición de su familia lo cual provocó la ira de Lucius Malfoy.

A pesar de que todo fue difícil, en un principio, su relación se mantuvo y mantiene muy solida. Sin embargo, en algunas ocasiones, sus personalidades salen a relucir demostrando quienes son. Por otro lado estaba el pasado que habían mantenido en Hogwarts, las peleas o palabras hirientes, en ese caso intentaban no discutir por ello, pero como siempre a alguno se le salía alguna palabrita y ese era el detonante de todo. Al final todas esas peleas siempre terminaban en extenuantes sesiones de reconciliación.

Al tercer año de relación se fueron a vivir juntos. Todo fluyo bien, por algunos meses, hasta que Harry tuvo su "mal despertar" y Draco creyó que todo había sido un error.

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Se paso una mano por la frente y al hacerlo casi se arrepintió. Odia el sudor, lo odia tanto o más que un resfriado en invierno, porque ambos son asquerosos.

Tiene que suspirar cuando se da cuenta de que la persona que lo tiene abrazado, también tiene los brazos con algo de sudor, lo entiende, es una mañana bastante calurosa de verano.

En sí, Draco, agradece despertar primero que él, porque bueno así podrá saber su estado de ánimo y si está bien, normal.

Luego de unos minutos, siente como su compañero se remueve. Draco se queda bastante quieto e intenta no respirar.

– ¿Draco? –una voz somnolienta, muy cerca del oído, le hace temblar–. Sé que estás despierto.

El rubio suspira cuando una mano traviesa se desliza por su estomago – ¡Detente Potter! –brama.

Harry suelta una risita y no le hace caso. Comienza a besar el pálido cuello de su novio y su mano sigue el camino hacia la zona sur, una mano bastante sudada. Draco no sabe si detenerlo o dejar simplemente de pensar en tonterías cuando está a punto de recibir una paja o mamada. Obviamente opta por lo segundo y simplemente deja de pensar cuando Harry le comienza a hacer una estupenda mamada. El moreno hace una trabajo rápido, pero intenso y digno de archivarse en el montón de momentos que han compartido.

–Buenos días –le dice Harry, luego de terminar, mirándolo desde donde está.

Draco acaricia los suaves mechones de su cabello, aunque no lo parezcan– Buenos días. Creo que debemos ir a ducharnos.

Harry sonríe ampliamente, sabiendo el motivo por el cual Draco quiere tomar una ducha –Claro, pero necesito mis lentes.

Draco se los facilita, ya que están cerca de mesita de noche.

–Vamos.

–Adelántate, debo dejar un mensaje.

Harry frunce el seño, pero no dice nada y comienza a caminar hacia el baño.

Draco suspira. A pesar de todo lo malo que han pasado y lo cansado que esta, Harry siempre tiene despertares así de buenos y Draco espera que siempre sean así.

Saca un cuaderno que mantiene escondido, gracias a un hechizo, y escribe: 01 de febrero del 2006. Sin complicaciones. Con el mismo hechizo lo guarda y se dispone a ir a tomar la ducha que necesita desde que ha despertado.