Disclaimer: Ninguno de los personajes me pertenecen, sólo los uso para la creación de esta historia.
Este fic participa en el Reto #62: "En la Guardia Real" del Foro "Alas Negras, Palabras Negras".
Siete guardias, siete vidas
Por Franela
Padre
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El rostro del Padre es fuerte y severo,
juzga certero el bien y el mal.
Sopesa las vidas, las largas, las breves,
y ama a los niños.
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La melancolía siempre presente en el rostro de Rhaegar le hacía parecer que siempre traía algo entre sus rubias cejas. La relación que habían formado con los años tenía una sólida base; el Príncipe solía pedir su consejo.
Por eso no le extrañaba que el joven acudiera a él cuando tenía problemas con alguien, aun cuando se tratara del Rey a quien él había jurado proteger.
—Lo ha hecho otra vez, Ser —le dijo un día—. Está cada vez peor.
Él lo sabía, por supuesto, pero no era su trabajo juzgar al Rey. Había jurado lealtad, y aquella lealtad lo estaba carcomiendo por dentro. El pueblo ya ni siquiera enviaba con él peticiones para Aerys.
—Necesito su ayuda, Ser —le dijo Rhaegar. Su rostro estaba serio, era la seriedad de un Rey y no de un Príncipe. Arthur se dio cuenta en ese momento quién estaba del lado del bien, y quién del mal.
