La lluvia azotaba al pequeño pueblo de rizembull, un niño de apenas 10 años observaba atentamente desde una ventana, una gruesa lagrima resbalo por su mejilla, sus ojos reflejaban una tremenda tristeza, eran casi las doce de la noche pero no tenia intenciones de dormir.
–Edward, deberías irte a dormir tu hermano, esta arriba esperándote-
-no quiero-
Dijo Ed decidido, no quería ver a su hermano no en ese estado, sabia que no podría reprimir mas su llanto y no quería llorar enfrente de su hermano menor.
–dormiré aquí-
Dijo finalmente.
–como quieras-
Suspiro pinako rockbell mirando con compasión al pequeño que tenia enfrente.
–te traeré unas cobijas-
El chico solo asintió con la cabeza.
Eran cerca de las tres de la mañana y el chico aun no conciliaba el sueño, un odio inmenso crecía en su corazón, si el no se hubiera ido dejándonos solos mama aun seguiría con nosotros, eran palabras que cruzaban una y otra vez por su mente, ¿acaso el y su hermano nunca podrían ser felices?.
Sus ojos se humedecieron de nuevo, necesitaba un hombro para llorar, pero, no iba a mostrar debilidad, de ahora en adelante tendría que trabajar mas, aprender mas para poder cumplir la promesa que le había hecho a su hermano hace unas horas, que traerían a su madre de vuelta, tenia que ser fuerte por los dos, es por eso que no quería llorar.
–Edo, ¿aun estas despierto?-
Ed se volvió y pudo ver a una niña rubia de ojos azules que lo miraba preocupada desde las escaleras.
–si ¿por?-
Dijo amargamente.
-¿aun estas triste?-
Dijo winry tratando de no lastimarlo.
–No como crees, estoy feliz de la vida sabes, quien podría decir que ¡MI MADRE ACABA DE MORIR!-
Winry bajo la mirada, entendía perfectamente los sentimientos del chico, pero, ¿como podía consolarlo?
–Ed, comprendo como te sientes, yo solo trataba de ayudar-
-¡NO!, tu no comprendes, nadie mas lo hace, solo nos tenemos Al y yo, nos tenemos el uno al otro, siempre hemos estado solos, siempre ha sido así-
Dos gruesas lagrimas brotaban de los ojos de Ed, apretaba sus puños mostrando la frustración que aquello le producía, y sin siquiera pensarlo salio corriendo de la casa.
-¡EDWARD!-
Grito winry yendo tras de el.
Ed solo quería huir, escapar de la realidad, despertar de esa horrible pesadilla y encontrarse de nuevo, en los brazos de su querida madre, la lluvia lo empapaba cada vez mas, no supo como llego allí, había sido como atraído hasta aquel lugar, cuando se dio cuenta se encontraba enfrente de la tumba de su madre y sin poder evitarlo se derrumbo y se ahogo en llanto.
-Ed, perdón si dije algo malo-
Dijo una voz a sus espaldas, su amiga winry se encontraba de nuevo a su lado, no le respondió, no tenia las fuerzas necesarias para hacerlo.
–pero, no todo lo que dijiste es cierto, nunca estuvieron solos, ni lo están ahora, tienen a mi abuela, me tienen a mi, me TIENES a mi, y si necesitas un hombro para llorar yo estaré allí-
-tu no comprendes como me siento-
Dijo Ed débilmente.
–Ed-
Suspiro winry, estaba por tocar un tema que le partía el alma, pero si eso ayudaba a su amigo no le importaría llorar nuevamente.
–claro que te comprendo, recuerda Ed yo... yo también perdí a mis padres-
La culpa embargo el corazón de Ed, le había gritado un sin fin de cosas horrendas a su amiga, sin pensar siquiera que ella apenas se estaba recuperando de un golpe terrible.
–lo siento-
Dijo apenado, winry sonrió tristemente y lo abrazo fuertemente.
–puedes desahogarte, aquí no esta Al para que pueda ver tu debilidad-
Dijo winry mientras las lagrimas brotaban de sus ojos, Edward odiaba ver a su amiga llorar, la miro directamente a los ojos ella estaba haciendo todo lo que le era posible para ayudarlo, pero ella también estaba sufriendo enormemente gracias al fallecimiento de sus padres, que podía hacer el para consolarla.
Ed no supo porque, pero empezó a acercarse al rostro de winry, quien a su vez se iba sonrojando cada vez mas, ambos podían sentir la respiración del otro, y entonces sellaron ese triste momento con un beso, era el primer beso para ambos, ninguno imagino que su primer beso seria en una situación así, se separaron lentamente pero no mencionaron nada solo se quedaron abrazados entre la intensa lluvia.
El sol iluminaba el pueblo de rizembull, todo el pueblo estaba conmocionado por la desaparición de dos de los mas pequeños del lugar, pinako rockbell se encontraba desesperada y asustada, ¿donde podrían estar Edward y winry?
–señora rockbell, venga conmigo, ya los encontré-
Pinako caminaba insegura por el cementerio del pueblo.
–esta seguro que están aquí-
Pregunto dudosa la anciana.
–se lo aseguro-
Dijo el aldeano seguro de si mismo.
Pinako quedo atónita al ver la escena tan triste pero alavés tan tierna que se mostraba ante sus ojos, dos pequeños niños se encontraban sobre la tumba de trisha elric, ambos abrazados, compartiendo el dolor del otro, sin duda esa hermosa escena nunca se le borraría de la mente, de repente la pequeña se movió inquieta y aun dormida menciono
–siempre tendrás un hombro para llorar, no lo dudes...-
