Disclaimer: Los personajes del anime y manga son pertenencia exclusiva del señor Masashi Kishimoto, de lo contrario Hatake Kakashi sería totalmente mío *¬* Yo sólo lo uso para mis maniacadas y, claro está, sólo por diversión.
Nota inicial: Fic dedicado a Andrea Lizette, del grupo de facebook "Naruto All Project", te lo debía y como forma de compensarte te dedicaré algunos más (aún no sé cuantos o-o)
Advertencia: Palabras soeces (no muchas ¬¬)
.
.
.
.
.
"La palabra es libre; la acción muda; la obediencia, ciega."
- Schiller -
.
.
.
.
.
.
.
.
.
= Words =
By: I can hear the screams tonight
.
.
.
Definitivamente lo había dicho ¿pero en qué coños estaba pensando?
Bueno, por supuesto que sabía en el coño de quien estaba pensado, lo que no podía creer era que se le había salido, casi sin querer, esos pensamientos de sus labios.
La había visto desde la lejanía, todas las mañanas mientras hacía su recorrido correspondiente hacia el trabajo, con esa mirada perdida y ensoñadora que se cargaba, sus ojos claros denotaban cierta pureza que por alguna razón le daba morbo corromper, no podía decir que sentía pena porque la chica fuera el objeto de su deseo, es decir, era bastante hermosa y sin embargo una sombra lúgubre la apagaba, se notaba a simple vista lo tímida que era y eso no la hacía resaltar como debería.
Jamás se había atrevido a siquiera hablarle, eso no quería decir que fuera cobarde, no, no, Sasuke simplemente se ahorraba energías en sacarle plática, la torpeza de la chica era bastante evidente y probablemente se enfadaría con solo intentarlo; podría decirse que se conformaba con verla desde la vitrina contraria a la cafetería, escondido entre los estantes cargados de libros con olor a nuevo, sofocando la ansiedad que le provocaba verla sonreír tan tímidamente detrás de ese sonrojo suave y sutil que mostraba a la clientela.
De alguna forma lo engatusaba.
Creía firmemente que con sus manías terminaría por hartarlo, pero, estaba comenzando a sospechar que haría algo mucho más que dejarlo hasta la madre y es que, cuando menos lo pensó, se vio a sí mismo cruzando la calle hasta la puerta de la cafetería, importándole poco su propio negocio al sacar, decididamente, de su bolsillo el dinero suficiente para adquirir algo de ese café que ella misma servía con sus manos.
− Un café, por favor. − Ni una sola respuesta, la había agarrado en sus cinco minutos de Facebook, idiotizada por completo por el celular entre sus manos. – Un café, por favor. – Exclamó el chico con más fuerza, sacándola de su ensimismamiento. La mirada de Sasuke parecía furiosa y eso intimidó a la chica.
− L-lo siento, ahora m-mismo lo atiendo c-como se debe. – Dándose la vuelta, dejándole Sasuke el panorama de su retaguardia, éste alzó la ceja dejando en claro que estaba impresionado.
− Si realmente me atendieras como se debe, te mantendría con todo y los hijos que tengamos.
Puta madre, había hablado sin pensar ¿o había pensado en voz alta?
Ya no importaba ¿ahora qué haría?
− L-los hijos que tengamos m-más el perro. – Sonrió bromista la chica al momento de colocar el café ordenado sobre la vitrina.
La miró suspicaz, percibiendo en su mirada cristalina ese eco de miedo y ligereza, no lo decía tan en serio pero tampoco tan en broma.
− Sasuke. – dijo su nombre al darle la mano
− Hinata. – respondió ella al corresponder.
Tan simples palabras
Tan sencillas y baratas que podría ser interesante.
¿por qué no?
.
.
.
.
.
.
NOTAS DE LA AUTORA:
Cortito de nuevo, lo sé, simplemente es la escena de un principio que dejaré a su imaginación XD
