-¿Son novios?-preguntó escéptica Allegra a su mejor amiga, Bridgette-¿Tu y Félix?
-Si-afirmó soñadora.
Deteniéndose en la entrada de la escuela. Allegra estaba atónita.
-Pero de que me perdí-refutó mas perdida que Wally-El parecía detestarte.
-Pero no lo hace.
-Aquí hay gato encerrado.
-Si hubo un gato-contestó aun en las nubes y Allegra quería arrastrarla a la tierra y zarandearla para que le explique como sucedió eso.
Y lo estaba haciendo. La estaba moviendo de un lado a otro. Exigiendo una explicación.
-Si sigues haciendo eso, va a perder el poco cerebro que posee.
Allegra dejo de moverla desquiciadamente y miró a Félix. Lo de recién no había sido un comentario amoroso.
-Tu no la amas-apuntándola con el dedo-Admitelo, tu ni siquiera tienes sentimientos.
-No tengo porque admitir nada a ti. Solo a mi novia.
-Dijo novia -repitió embobada Bridgette.
Allegra no podía creer lo que escuchaba.
-Aun si son novios. Estoy segura que la estas usando, seguramente la quieres para tener sexo -Félix se sonrojo, carraspeo -¡Todos los hombres quieren eso!
-Piensa lo que quieras-repuso-No me importa.
-A mi si-saltó-Quiero saber ¿La amas?
-No tengo porque contestarte eso.
-Di que le amas-pidió, tenia que oírlo y tenia que mirarlo a los ojos cuando lo diga.
-No.
-Yo quiero oírlo-añadió Bridgette, dulcemente.
-Yo también -refutó Allegra, cruzandose de brazos.
-No-repitió.
Y en eso, vio el brillo de los ojos de su novia. La petición silenciosa.
Él paso de largo, pero como siendo un hombre enamorado, un joven con rebosantes sentimientos románticos por la chica, volvió, la tomó de sus hombros y le susurró en su oído: Te amo.
Eso la mato en sentido figurado. La hizo desmayar por tanto amor.
-¡Hey! ¿Que le hiciste? -le cuestionó viendo a su amiga tirada en el suelo que no escuchó lo musitado- ¡Haz algo! -suplicó mientras tenia a Bridgette en sus brazos.
-Esta bien- sin preocuparse- Dejala tirada -y siguió caminando
