El regreso
Las Sailors Starlight junto a su Princesa han llegado a Kinmoku, en sus mentes y corazones todavía persiste el recuerdo de la gran batalla contra Galaxia y el brillo de Sailor Moon, el ángel que bajo del cielo. Aunque esto las llena de esperanza Sailor Fighter siente un gran dolor en el pecho, no es un dolor físico es peor, es un dolor del alma.
Kakyuu al observar el planeta detenidamente se da cuenta que le espera una colosal misión junto a sus guardianas. En la lejanía ven aparecer una silueta, las guardianas se colocan delante de su Princesa, no permitirían que nadie vuelva a arrebatársela, ahora se distingue que quien se acerca es una mujer, lleva puesto un traje azul como la noche con toques plateados, su cabello es lila.
La princesa sonríe muy complacida, pero es Sailor Maker quien habla cuando la extraña se encuentra a pasos de ellas "Así que eres tu Sailor Star Kin". La extraña le devuelve una sonrisa y se arrodilla en una gran reverencia hacia su princesa, el resplandor por el cual aquella había dado su vida.
Kakyuu da unos pasos hacia ella dejando atrás a sus compañeras de viaje y se arrodilla junto a su cuarta guardiana, para darle un beso en la mejilla y pedirle que se levante. Sailor Star Kin con los ojos llenos de lágrimas la mira y le confiesa "Princesa… por fin se ha acabado esta horrible pesadilla, yo pensé que jamás la volvería a ver… tuve tanto miedo cuando se marcho… pensé que ellas quizás no la encontrarían y Sailor Galaxia destruyéndolo todo a su paso… nuestro pueblo y nuestro hogar". Las Sailors se dan cuenta que la gran incertidumbre que ellas vivieron en el planeta Tierra todos esos meses su compañera la había sentido al momento que todo comenzó y la acompaño incluso en su prematura muerte.
Kakyuu le dedica una mirada de comprensión para luego decirle "te agradezco, porque fue gracias a ti que yo pude escapar de Kinmoku, porque tuviste la fuerza de enfrentarte a Galaxia".
Las Sailors Starlight las miran sorprendidas. Star Kin respondió llorando "yo siempre daré mi vida por Ud, princesa… perdóneme porque no pude defender el planeta como es mi deber". Kakyuu la abraza con mucha ternura y le susurra " Sailor Galaxia era demasiado fuerte y el Caos la había poseído solo un brillo poderoso como el de la princesa de la Luna podía contra ella".
Las palabras de la princesa hacen que Sailor Figther se gire dándoles la espalda a las demás, siente como si puñales le desgarraran el corazón. Sailor Healer se da cuenta de la actitud de su amiga se acerca a ella y le pregunta "estas bien Fighter?"
"Sí, es que de solo recordar todo me siento impotente e inútil" al decir esta últimas palabras Fighter se mira las manos.
"Yo me siento igual, pero ahora estoy feliz porque estamos con nuestra princesa y juntas podremos reconstruirlo todo… hay esperanzas para todos" la consuela Healer con una gran sonrisa. Pero Fighter piensa "hay esperanzas para todos menos para mí o mejor dicho para Seiya" mientras mira al piso.
En otra parte del universo, "Serena ya levántate, llegarás tarde a clases!" Luna acababa de entrar al cuarto de su dueña, "ay ya se levanto… que raro, bueno mejor" dirigiéndose hacia la puerta otra vez, pero Serena viene corriendo comiendo una tostada por lo que no la ve y la pisa cayendo al suelo.
"ohhh Luna perdóname no te vi, estás bien?" dice Serena preocupada refregándose su rodilla, la pobre Luna solo contesta "miauuuu".
"Discúlpame, se me hace tarde quedé de salir temprano porque Darien me acompañara en el camino a la preparatoria, que felicidad! Un paseo matutino con mi querido Darien" toma su maletín y sale "adiós!".
Darien esperaba en la esquina acordada, mirando el reloj piensa "será que llegara a tiempo?"
Una voz lo saca de sus pensamientos "hola Darien, como estas?"
"Hola Amy, buen día" le contesta cortésmente el muchacho como es su costumbre.
La chica lo mira extrañada "esperas a Serena? Es muy temprano aún… ahhh mira allá viene, eres afortunado jajaja"
"Buenos días Amy y Darien" llega saludando con una gran sonrisa y ellos le responden el saludo.
"Me alegro de que llegarás a tiempo, viste que no es difícil cuando te lo propones" dijo Amy.
"Si, eso es verdad Serena" agregó Darien
"Ya lo sé, ya lo sé… no me van a regañar tan temprano verdad?" dice ella y viendo la posibilidad de eso hace un puchero.
"Vamos antes de que se haga tarde y será nuestra culpa por estar hablando de más" dice Amy sonriéndole a su amiga. Serena toma del brazo a Darien y empiezan a caminar rumbo a la preparatoria.
"Espero que la entrevista no se demore, porque luego me tengo que ir inmediatamente a otra clase en la facultad" dijo el muchacho.
"Acerca de que es la entrevista? si es que puedo preguntarte Darien" dijo Amy algo avergonzada por su curiosidad.
"No hay problema Amy, es acerca de un trabajo que presente en la Facultad, por suerte pude inscribirme al segundo semestre no se que habría sido de mí si no podía estudiar este año" decía él muy contento.
"Te irá muy bien, yo confió plenamente en tus capacidades, eres muy inteligente además de apuesto" Serena la miraba con ojos que delataban el gran amor que le profesaba.
"Serena tiene razón, estoy segura que todo saldrá bien" dijo Amy y continuo "bueno, será mejor que entre así se pueden despedir tranquilos, adiós Darien, éxitos en la entrevista, Serena te espero adentro" sonrió alegremente y se marcho.
"Creo que me debo apura,r para volver rápido a mis demás obligaciones, Serena gracias por acompañarme" él la miraba con dulzura a los ojos, de esa forma su novia podía ver todo el amor que él le profesaba sin tener que decirlo.
Abrazándolo con fuerza Serena le dijo "te deseo lo mejor en este día, veras que todo saldrá bien" ella tenía su cabeza apoyada en su pecho para poder sentir los latidos de su corazón.
"Hola chicos" se escucho una voz y de pronto la romántica atmósfera había caído, por lo que la chica de chonguitos en la cabeza se giro y miro a su amiga que recién llegaba "Lita! Buen día" respondió algo cortante.
"Hola Lita, se me hace tarde ya debo irme adiós" Darien abrazó a su novia y le dijo "adiós, por la noche te llamare".
"Perdóname, no quise interrumpirlos" dijo la chica alta.
"Está bien… vamos Amy nos espera" Serena le dedicó una sonrisa a su amiga, luego entraron al edificio. En el salón de clases Amy estaba leyendo un libro, cuando Lita la saludo "buenos días Amy".
"Hola Lita, Serena ya estás aquí… tenemos que hablar de algo muy importante, pero aún falta Mina" Dijo la más inteligente de las sailors.
"Ocurre algo malo?" decía Mina quien justo iba entrando cuando escucho lo que su amiga decía. Amy continuo "chicas esto es muy serio y nada debe interferirnos de aquí en adelante…" todas estaban asustadas por las declaraciones que acababan de escuchar "… estamos atrasadísimas para los exámenes de fin de curso, esta tarde debemos ir a casa de Rei, ya he hablado con ella y está de acuerdo" sentenció.
"Ayyyyy Amy pensé que se trataba de alguna amenaza" decía Lita, mientras Mina acotaba "En verdad lo es, de solo pensar en los ejercicios de matemáticas, pierdo el sentido". Mientras Serena agregaba "yo que en este tiempo esperaba recuperar el tiempo perdido con Darien". Alguien anunció que el Profesor se acercaba así que cada chica tomo su lugar. Mina al sentarse en su puesto miro a su derecha y noto una ausencia, la pena empezó a llenar su corazón pero no iba a permitirse que ese sentimiento la embargara, así que dirigió sus pensamientos a las prácticas de volleyball.
En el planeta de las flores doradas, la princesa Kakyuu estaba esperando la aparición de dos guardianas más, mientras que el resto de sus Sailors se dedicaba a hacer una inspección de los daños. El paisaje de su planeta era desolador, "Creo que lo primero que debemos levantar es el castillo así nuestra princesa se encontrará a salvo, ¿qué opinan?" dijo Sailor Kin.
"Me parece lo mejor" asintió Maker.
"Siento el resplandor de dos estrellas acercándose a gran velocidad" dijo Healer a sus compañeras para alertarlas.
"No te preocupes son ellas, ya era hora" le contesto Fighter.
Las cuatro guerreras se reunieron alrededor de la princesa y ante ellas aparecieron dos resplandores uno naranja y otro amarillo, de repente estos desaparecieron y en su lugar dejaron dos nuevas sailors cuyos trajes eran iguales al de las sailors starlights pero con detalles plateados en vez de dorados, rápidamente se pusieron de rodillas "Princesa… que alegría nos da verla otra vez" dijo la guerrera de resplandor amarillo, mientras su compañera asentía.
Kakyuu las miraba con infinita ternura a su vez les pedía que se levantaran "mis queridas Sailor Star Leader…" mirando a la de resplandor amarillo y luego a la de resplandor naranja "y Sailor Star Helper deseaba mucho volver a verlas, me alegro de que por fin estamos todas reunidas". Ambas guerreras miraron a sus compañeras y no pudieron evitar mirar con rencor a las Sailor Starlighs, esta vez fue Helper quien hablo "Uds… trío de traidoras, se fueron del planeta cuando más las necesitábamos nos dejaron a nosotras solas…" aunque quería llorar no lo hizo no demostraría debilidad ante ellas. Las stralights no se defendieron solo se limitaron a desviar sus miradas.
"Cálmense Sailors Starshines, si deben enojarse con alguien es conmigo..." las recién llegadas miraban incrédulas a Sailor Kin "…yo fui quien les dijo a las Starlights que se marcharan".
La princesa Kakyuu escuchaba paciente a sus guardianas sabía que había llegado la hora de que se supiera cómo habían sucedido las cosas en medio del caos que fue la llegada de Sailor Galaxia a su planeta.
