Naruto: El legado de Namikaze-Uzumaki

Por:pyon25namikaze

Qué pasaría si al encerrar al zorro de nueve colas dentro del pequeño Naruto no solo fue él y si alguien más reside dentro del sello, que cambio traería… si se pudiera cambiar ese futuro no tan lejano, como cambiar algo que tú has visto y que tienes que detener. Descubre y acepta el nuevo destino que el ángel que no debió haber sido sellado y que motivo tuvo el yondaime para encerrarle, descúbrelo y diviértete con la nuevo formación y los acontecimientos del pasado regresan no solo para resurgir un clan sino para que la voluntad de fuego que se está extinguiendo se vuelva a reavivar… Naruto sabrá lo que es una familia y será una persona fuerte y respetada todo gracias a ese ángel que muchos amarán pero muchos también odiaran.

Naruto no me pertenece pero si la historia

Capitulo 1. El nuevo ángel… Un cambio de vida

El futuro es algo que no debería verse o poder predecirse pero he visto como sucumbe ante el odio y la venganza, el poder y la codicia, los humanos somos criaturas tan extrañas pero como poder detenerlos y hacerles ver que la vida es única e efímera que hay que vivirla al máximo encontrar personas a las que quieras amar y proteger, tener un ideal o meta, formar una familia y ser felices por siempre hasta que la misma muerte y nunca pero nunca rendirse tener esa voluntad de hacer lo imposible y proteger todo lo que es valioso, esa fueron las palabras que un día mi padre me dijo y que voy a cumplirlas aun sabiendo que todo lo que soñamos un día no podrá volverse realidad he visto la maldad del mundo pero confió en que encontrare esas paz y felicidad pero sobre todo protegeré a lo que más quiero en este mundo y lo que podrá venir en el futuro esa es mi voluntad y la voluntad es lo que me hace fuerte aun si tengo que luchar porque esta siga viviendo en el corazón de las personas, porque ese es mi propio camino y no pienso rendirme hasta lograrlo.

YO SIEMPRE TE APOYARÉ

CON CARIÑO H.U.U.

10 OCTUBRE

10 de Octubre, una noche tranquila y con nada fuera de lo común. En la Aldea de la Hoja todo era paz y tranquilidad. Pero, no todo era paz y alegría, o al menos no en los alrededores del pueblo, donde el líder de la Nación Ninja y su esposa emprendían su propia batalla contra el demonio de nueve colas que amenazaba con salir debió a que el sello de las mujeres jinchuriki se debilita durante el embarazo.

—¡AAAAAAAAAAGGGGHHH! —gritaba desesperadamente y con sumo dolor una mujer de largos y rojos cabellos, con hermosos ojos color violeta pero llenos de desesperación. Estaba recostada sobre una camilla en una habitación tan solo iluminada por unas pocas antorchas ubicadas en las paredes. Estaba cubierta por unas pocas mantas, indudablemente estaba en trabajo de parto.

—¡Kushina, resiste! —Le alentaba el Yondaime a su esposa, ubicando sus manos en su estómago, haciendo gran presión sobre un raro conjunto de marcas ubicadas allí, cuyo epicentro parecía inflarse como si de un globo se tratase.

—Naruto… apresúrate en salir…y tu kiuby quédate donde estas —suplicaba el rubio a su hijo—. En su subconsciente, su gran poder estaba contrarrestando las ataduras de la pelirroja que lo mantenían apresado contra una piedra circular. Poco a poco la estaba corrompiendo, poco a poco la estaba venciendo, era cuestión de tiempo antes de que el sello explotase y él tomase el control de la ojivioleta. Estaba a punto de salir, estaba a punto de librarse y reducirlo todo a nada. Estaba a tan solo un paso de obtener su libertad.

—¡NARUTOOOOOOOO!

Y de repente, todas sus emociones, pensamientos, acciones, habla, su mundo entero quedaron en blanco por un segundo después de escuchar el llanto de la nueva persona, o personita más bien, presente en la habitación.

—¡Nnnggaahhh, nnghaaah, aaaah! —Era la señal de que una nueva vida había nacido.

Abrió sus ojos a más no poder, mientras esa nada que sintió por un segundo, lentamente iba dando paso a una nueva mezcla de emociones y sentimientos: felicidad, amor, orgullo, satisfacción, era como si una parte extraviada de su ser hace mucho, antes de siquiera estar en este plano de la existencia, haya sido atada nuevamente a él. Pero esa extraña sensación que lo invadió todavía no acababa, es más, se intensificó al escuchar de nuevo un llanto parecido, pero algo ¿diferente?

—Hoy soy padre —Su rostro no parecía andar a la par con sus palabras ya que éste solo reflejaba sorpresa, como si hubiera visto un fantasma. No duró mucho así, solo le tomó momentos para salir de su estupefacción y actuar como debía hacerlo cualquiera en su situación rió. Empezó a reír con una gran sonrisa, derramando lágrimas, lágrimas de felicidad.

—Es un bebé muy saludable —enfatizó Sarutobi Biwako, esposa del Tercer Hokage, quien sostenía al recién nacido Naruto junto a una médico que había ayudado.

—¡Naruto…!—La voz de Minato se quebró al final acercándose, debido a la alegría por el nacimiento del bebe que él y Kushina habían estado esperando tan ansiosamente desde hace meses.

—Naruto…—susurró la pelirroja que hace pocos momentos, entre lágrimas recibió al nuevo integrante de su familia.

Recordó todas las fantasías e ilusiones que había tenido debido a la noticia de su embarazo, y los posibles consecuencias que implicaban pero eso ya no importaba, todo había salido bien, había valido la pena estar 10 meses embarazada.

—Ya tendrás tiempo de estar con ellos —decía Biwako con una sonrisa, retirándose de la habitación

— Dios mío, qué bebés tan hermosos.

Con Biwako alejada, Minato decidió acercarse más a su esposa, tomándola de la mano.

-Kushina, gracias. Gracias por todo —Fue todo lo que pudo articular el ojiazul mayor a la jinchūriki, mirándola directo a sus ojos color violeta.

—Minato…—Sé que ya ha finalizado el parto, pero todavía tengo que completar el sello que encierra al Kyūbi. —Y justo cuando ubicaba su mano derecha sobre el sello en el abdomen de su amada…

—¡AAAAAAHHH!

Se voltearon en el acto ante tal grito que se extinguió a los segundos, solo para descubrir a un oscuro hombre cuyo instinto asesino y frialdad sofocaba fácilmente el ambiente.

—Yondaime Hokage, Namikaze Minato, aléjate ahora mismo de la jinchūriki si no deseas que tus hijos mueran a la corta edad de un minuto de nacidos.

El cuarto hokage se encontraba en estos momentos junto a su esposa, la cual lucía muchísimo peor que en el momento del parto, mientras de su espalda salían largas y gigantescas cadenas de chakra que retenían a un Gigantesco Zorro con nueve impotentes colas, quien intentaba con todas sus fuerzas —aunque sin mucho éxito— romper el agarre que ejercía el poderoso jutsu, que contenía su terrible chakra.

Minato había logrado salvar a su hijo del misterioso ninja que los emboscó por sorpresa y rescatar a su esposa, aunque lamentablemente después de que se le fuese extraído el Bijū en su interior. Si no había muerto, era porque ella era una Uzumaki.

Logró desviar una Bijūdama proveniente del Kyūbi antes de que chocara con su rostro esculpido en la Montaña Hokage, así como había vencido al hombre enmascarado que además de todo afirmaba ser Uchiha Madara. Logró quitarle el control del Zorro al liberarlo del genjutsu al cual lo sometía y se propuso a enfrentarlo. Sin embargo, no salían de su mente las malignas palabras que pronunció ''Madara'' antes de desaparecer en un raro vórtice espacio-tiempo.

—Volveré, el Kyūbi será mío y entonces el mundo también, no me lamento de haber perdido la batalla, hay muchas maneras de lograr mis objetivos.

Y ahora estaba aquí, junto a su esposa la cual estaba inmovilizando a la máxima masa de odio en el mundo. Solo había hallado una salida para esta situación, como el impotente monstruo de chakra aún contaba con todas sus fuerzas, solo podía sellarlo con el Shiki Fūin y debía hacerlo rápido ya que el Gran Bijū peleaba con todo su poder para obtener su libertad, y lo tendría que sellar en sus hijos ya que solamente los recién nacidos pueden encerrar hasta a las entidades más poderosas, gracias a sus prematuras redes de chakra.

Confiaba en que el dominaría ese poder en un futuro, se le hizo imposible no recordar las palabras de su sensei sobre el ''chico de la profecía'', y Minato pensaba que aquel chico que salvaría al mundo shinobi de la época de calamidades que azotarían el futuro, sería no uno, sino sus dos hijos, por eso les dejaría ese gran poder como legado, para salvar Konoha, para salvar el País del Fuego, para salvar a las Naciones Elementales y para mantenerlos a salvo a ellos mismos cuando crecieran, incluso si tenía que dar su vida para ello. Hasta que…

¡Kuchiyose no jutsu!

En ese instante, el mismo gran sapo que Minato había invocado sobre la cabeza del Kyūbi para después tele-transportarlo y sacarlo de la aldea había hecho acto de presencia una vez más, junto a una serpiente y una babosa de tamaños idénticos.

—¡ Minato-nissama espera!—exclamó una joven de 16 años con un cabello roji-negro- Minato que estaba sorprendido por la repentina aparición de la suponía que estaba fuera de la aldea por una misión.

—¿Pero cómo…? —Iba a continuar con su pregunta hasta que fue interrumpido por cierta cierta pelirroja.

—No hay tiempo de explicaciones —habló con tono cortante—. Minato, sellara de nuevo al zorro de nueve colas en nuestro Naruto, por favor cuídalo y protégelo lo necesitará. Nosotros nos encargaremos de esto.

—Nooo, nessama, no por favor no me dejen sola que voy a hacer Naruto los necesita más que a mí por favor déjame hacerlo a mi- Necesitamos que lo ayudes y orientes lo necesitara- dijo el rubio Hokage

El gigantesco monstruo de inmediato sin intenciones de perder una sola oportunidad, alzó su brazo derecho listo para aplastar al Hokage y a su esposa, gritando con locura y sediento de sangre.

¡ESTÚPIDOS HUMANOS, LOS MATAREEEEEEÉ!

-En ese momento el zorro atravesó tanto a Minato como a Kushina al intentar salvar a su pequeño retoño de la garra del zorro—rugió la máxima Bestia con Colas, podría haberse liberado del agarre fácilmente pero debido a que su poder estaba siendo retenido hasta hace solo unos momentos, todavía no se encontraba en toda su capacidad.

—¡nissama, nesamaaaaaa…malditooooo kiuby! —llamó la roji-negra mientras activaba su kekkei genkai y salían de su cuerpo cadenas blancas que atraparon a al zorro mientras corría y tomaba y separaba a su familia de la garra del zorro.

¡MALDITAAAAAAAAAAS SEAAAAAASSSS, TU Y ESOS OJOS MALDITOS PERO SOBRE TODO MALDITA UZUMAKIIIIII, TE MATARÉ!—vociferó el terrible Kitsune después de sentir que le apretaban con esas cadenas blancas eran como veneno lo quitaban mas chakra del que tenía.

— no te voy a perdonar zorro pero tampoco perdonaré a quien te controlo por ello los dos padeceremos el mismo destino—le advirtió la roji-negra con esos ojos que cualquiera no querría ver.

¡Nissama, nesamaaa! Yo me ocuparé del sello, y me sellaré dentro de el y cuando despierte yo me encrgare de ayudarlo a ser un gran ninja y seré siempre su familia, nuestro legado y voluntad pasaran a el, así que pueden descansar en paz los amo mucho mucho —respondió la roji-negra entre sollozos y lagrimas

—¡Hikari imouto, aunque agradecemos tus intenciones es deber de los padres y hermanos mayores velar por nuestros personas amadas y lamentamos que tengas que tomar este papel pero confíanos en ti y confiamos nuestra voluntad en ustedes! —habló la rojivioleta Kushina también entre lagrimas.

¡sabemos que ustedes tienen la voluntad de fuego dentro de ustedes y siempre siempre los amaremos, cuídense y crezcan Fūin jutsu: shiki fūjin!—Sin perder tiempo, Minato uso el sello que es una técnica prohibida de sellado por la que pudo encerrar al zorro dentro de su hijo recién nacido, Naruto Uzumaki, al precio de pasar el resto de la eternidad con su alma siendo devorada por el Dios de la Muerte que había invocado para realizar el sello.

No te preocupes neesan y nissan yo se que el pequeño Naruto aprenderá y crecerá siendo fuerte y cuando sea el tiempo me liberare del mismo sello y le enseñare y seremos una familia feliz—Kushina asintió, aunque entre lagrimas sabiendo que poco a poco la vida se les iba, al tiempo que ella hizo un ritual de sellado…- FUIN ICHIJI-TEKINA SHĪRU HONTAI TO TAMASHĪ NO JUTSU (sello de cuerpo y alma temporal)- grito mientras hacia el sello y veía los cuerpos inertes de sus dos personas amadas….-el sello ha funcionado solo me queda poco tiempo antes de lloraba por la vida que tendría que alguien llegue y deje instrucciones, perdóname Naru prometo que nos veremos pronto espero y tengas unos años felices en los que reparo mi propia fuerza- le dijo al pequeño que tomo entre brazos .

La barrera que estaba alrededor empezó a caer y el tercer Hokage Sarutobi Asuma vio algo que no podría las personas más importantes de la aldea estaban sin vida mientras que detrás de ellos una niña de 16 años llorando por la pérdida de las personas más amadas.-Al fin llegas Sandaime-sama- expreso la muchacha-No tengo mucho tiempo, pero quiero que cuides de Naruto, sabes que él es la nuevo voluntad y su legado es más fuerte que cualquier otro te pido que lo cuides y protejas pero sobre todo el debe crecer siendo feliz, yo no podre estar con el pero a la vez si estaré con él

-no entiendo de que hablas Hikari que está pasando- expreso el viejo mono-

Sandaime, me he sellado en el cuerpo de Naru y saldré del sello hasta recuperar mi poder ya que perdí mucho al sellar al kiuby pero también porque lo cuidare desde dentro pero volveré y espero que todo vaya bien porque sino entonces habrá problemas y una advertencia cuidado con la gente cuida a Naru porque él es un héroe es lo que hubiese querido Minato nissama- expreso de nuevo la pequeña con lagrimas en los ojos al momento en que estaba desapareciendo y decía sus ultimas palabras.- nos volveremos a ver pronto viejo mono- y desaparece con una sonrisa en su rostro-

Estúpida sacerdotisa, porque lo hiciste—El Kyubi rugió desde dentro del sello—Esto será suficiente kiuby, ni tú ni yo queríamos esto pero es para protegerte y protegerlo, nos esperan grandes cosas terribles pero grandes la batalla aun no empieza y mi querido amigo la tormenta aun no se avecina, nos conocemos desde hace mucho y sé que no me recuerdas pero sabes se que volveras a ser el mismo pero por mientras hay que dormir—le dijo la chica al Nueve Colas, mientras la oscuridad empezaba a reinar en la mente del pequeño.

Mientras el Sandaime Sarutobi tomaba al pequeño y lo llevaba a la aldea, cuanta destrucción en una noche pero sobre todo tendría que cuidar de ese pequeño porque su familia pronto regresaría y el todo volvería a empezar porque grandes cosas están por pasar eso es lo que l destino tiene preparado.

Hola que tal este mi primer fanfic, así como mi primer capitulo de esta nueva historia que pense y aunque un poco loca y confusa tendrá un buen desarrollo, espero y les guste.