HOLA! Bienvenidos a este primer capitulo de mi nuevo ff! he tenido la idea de realizar este ff! desde la mitad de mi anterior. Ciudad República. Espero que les guste!
Avatar no me pertenece! Les pertenecen a Mike&Bryan. & Nickelodeon. Si me perteneciera estos ff! serian cómics o los lanzaría en tv!
I- Vacaciones
Katara
Icebergs. Comenzamos a ver los enormes bloques de hielo mientras volamos en Appa. Cada minuto que pasa me siento más emocionada de por fin llegar a mi hogar. Hace más de cuatro años que no hemos vuelto a pisar la densa nieve de la Tribu Agua del Sur. Ya que desde que terminó la guerra hemos estado sumamente ocupados. Aang lo ha estado. Entre largas juntas por la separación de las colonias de Yu-Dao y otros problemas en Ba Sing Se, no hemos podido descansar.
Aang ha dado todo por llevar las cosas en paz entre los pueblerinos y la verdad es que lo he visto sumamente estresado, tanto como los cuatro días que pasaron antes de la invasión. Cuando comenzaba a tener alucinaciones con el Señor del Fuego Ozai y no podía dormir tranquilo.
Hace cinco días note enormes ojeras en mi novio y su cuerpo se sentía sumamente tenso. Aang siempre ha llevado una enorme carga en su espalda. Primero la guerra. Segundo el balance. Y ahora las Colonias. Mucho para un chico de dieciséis años.
*Flashback*
El sol ya se encontraba en lo alto del cielo, deduje que sería mediodía. Aang tenía una junta a las nueve de la mañana. Me giro lentamente en la cama y lo encuentro acostado, ya vestido pero al parecer el sueño le ha ganado.
Escucho que llaman a la puerta y me levanto rápidamente para que el no despierte. Encuentro con un sirviente del Palacio de la Nación del Fuego.
-Disculpe por molestaría señorita, pero mi Señor del Fuego Zuko pide por la presencia del Avatar Aang en el sala de guerra. De inmediato- me dice
Arqueo la ceja.
-Dígale al Señor del Fuego que en un momento estará presente- le digo y el asiente.
Me visto lo más rápido que puedo y lavo mi rostro con agua fría para despertar. Arropo a mi novio con suma delicadeza y salgo de la habitación directo a la sala guerra. Zuko, el Rey Kuei y algunos importantes hombres de la Nación del Fuego, tanto del Reino Tierra se sorprenden al verme.
-¿Katara?- dice Zuko sorprendido - ¿Qué haces aquí? ¿Dónde está Aang?-
-El no vendrá- le digo firmemente
-¿Qué? ¿Por qué?- pregunta el Rey Kuei
-Él está descansando en este momento - digo
Un hombre de cabello castaño a un lado de Zuko me alza su ceja.
-Entonces él se encuentra durmiendo tranquilamente mientras que nosotros estamos en junta… vaya que dedicación a la causa- dice el hombre
Fruño el ceño. No conozco a otra persona más dedicada por el mundo que Aang. Como puede decir eso.
-¿Se encuentra bien? ¿Está enfermo?- pregunta de inmediato el Rey Kuei.
-No su majestad. Pero ha estado sumamente estresado en esto días- suspiro – creo que necesita un descanso-
-¿Un descanso? ¿Y quién es usted para decidir por el Avatar?- me dice aquel hombre
-¡Soy su novia!- le gruño y me giro hacia mi amigo – Zuko… tú conoces muy bien a Aang y sabes que él siempre se ha dedicado a solucionar los problemas en el mundo, no solo por deber del Avatar, sino porque así es el-
El asiente levemente.
-Usted lo conoce mejor que nadie ¿Qué propone?- me dice el Rey Kuei.
Me muerdo el labio inferior decidiendo mis palabras. Suspiro levemente.
-Propongo que el Avatar Aang se permita tener unas vacaciones- le digo
El Rey Kuei me mira curioso. Tal vez no le guste la idea.
-Aang puede trabajar en presión, de estoy cien por ciento segura… pero el también necesita tiempo de relajación y meditación… El siempre encuentra la mejor decisión cuando no se encuentra presionado- digo tímidamente
-Eso es verdad- asiente Zuko –Bien… qué tal si posponemos esta reunión dentro de una semana ¿Es tiempo suficiente? – me pregunta.
-En realidad, pediría un mes, Señor del Fuego Zuko- dice el Rey Kuei- Tengo que atender unos asuntos en Ba Sing Se y estoy seguro que será el tiempo suficiente para el Avatar Aang-
Asiento sonriendo.
-De acuerdo-asiente Zuko
Regrese rápidamente hacia la habitación y me encuentro a Aang saliendo, bostezando.
-Cariño- le digo y el me mira atento
Brinco en su dirección y él me toma en el aire. Sosteniéndome con fuerza de mi trasero para no caer al suelo y lo beso apasionadamente. El beso de buenos días.
-Hola amor- me sonríe- ah… perdón pero tengo que salir volando, me he quedado dormido y tengo una importante junta con Zuko y…-
-Ya me encargue de eso- lo interrumpo
El arquea la ceja confundido. Puedo notar en sus ojos que pide a gritos otra siesta. Tenía razón el necesita una largas vacaciones, no recuerdo que hayamos tenido unas desde que fuimos a la biblioteca. Las peores vacaciones que escogió Sokka.
-¿Cómo que te encargaste de eso?- me pregunta curioso, bajándome lentamente de sus brazos.
-Sí, ah… fui a la junta en tu lugar y le pedí… bueno más bien le exigí a Zuko y al Rey Kuei que te dieran unas vacaciones- sonrió
-¿Qué tu qué?- pregunta perplejo- Pero… creí que era un tema de importancia-
-Si lo es, pero el Rey Kuei también tiene asuntos de Ba Sing Se, Zuko no se opuso para nada- el me mira curioso- tenemos un mes de vacaciones-
-Oh vaya que genial- sonríe- ¿Cómo logras que todas las cosas marchen bien?- me pregunta y me abraza
Me encojo de hombros.
-No lo sé tal vez me temen que me enoje- bromeo
Él se ríe levemente.
-Yo no te temo… pero siempre haré lo que me pidas- me sonríe.
Sus hermosos ojos grises se posan atentamente en los míos, aquellos ojos que siempre me quitan el aliento. Que me prometen un buen comienzo. Y aquella sonrisa que me he vuelto adicta a ella. Y aquel espíritu libre que me apasiona. No puedo creer que tenga junto a mí el ser más hermoso del mundo…
Sonrió maliciosamente.
-Bueno si es así… te pido que duermas otra siesta cariño, estas muy cansado todavía- le digo
El suspira y asiente vencido.
-de acuerdo Katara… ¿Pero tú que harás?- me pregunta
-Iré con Toph al pueblo para comprar unos zapatos perfectos para una maestra tierra ciega- digo
El asiente.
-¿Un beso de buenas noches?- me pide levantando sus labios
Sonrió ruborizada. Y lo beso. Observo como Aang camina de regreso a la habitación estirando sus brazos todo lo que puede y me dirijo hacia el comedor del Palacio Real.
*Fin del Flashback*
Siento los cálidos dedos de Aang atravesando los míos. Calentándome. Desde que comenzó a entrenar con Zuko Fuego Control ha aprendido a controlar su temperatura corporal. Lo cual ahora es muy útil ya que me he olvidado de las frías temperaturas que tienen los polos aun trayendo un grueso saco de invierno. Me abraza.
-¿Cuánto falta?- escucho la voz de Sokka en el lomo de Appa -¿Cuánto falta?-
Ruedo mis ojos. Ha estado con esa pregunta por más de dos horas.
-Falta poco Sokka- le dice Aang
El suspira derrotado.
-Tranquilo chico boomerang, tendremos que llegar algún día- dice Toph arropándose con el saco de invierno que compro - deja de estar preguntando cada cinco minutos-
-Toph tiene razón, deja de ser tan insistente- le digo
El resopla. Y se calla por unos minutos.
-Toph te va a encantar la Tribu Agua del Sur, ya lo veras- dice Sokka
-Oh claro… estoy muy segura que así será Sokka- dice Toph sarcásticamente
Él sonríe ampliamente y después cambia su mirada drásticamente a seria. Haciéndonos reír a Aang y a mí ante su comentario.
-Amas hacer eso ¿no es verdad?- pregunta
-Tú fuiste el idiota que lo comento… yo solo dije la verdad- Toph sonríe con orgullo
Aang y yo nos tiramos a carcajadas.
Justamente comenzamos a ver una lejana torre hecha de nieve, sumamente alta y observamos entre la niebla nuestra tribu. Recuerdo que en la guerra Pakku y algunos maestros agua de la Tribu Agua del Norte viajaron para ayudar a la reconstrucción de nuestra tribu. He escuchado rumores que toda la tribu ha cambiado para mejor y ahora es muy parecida a la del Norte. Y vaya que sí lo es.
-Vaya…- murmura mi hermano
Podemos observar enormes casas hechas de hielo y nieve, largos ríos como la Tribu Agua del Norte, un enorme iglú en el centro de la tribu y lo que es más sorprendente… una enorme y firme barrera de hielo.
Debo admitir que al principio me sorprendió de que Aang haya escogido pasar nuestras vacaciones en la Tribu Agua del Sur. Y ahora estoy más que agradecida con él. Sokka y yo no hemos visto nuestro padre desde la coronación de Zuko. Estoy entusiasmada de volverlo a ver.
-Por fin estamos en casa- susurro
Aang me sonríe.
Cruzamos la enorme barrera y podemos observar claramente la ciudad. Es hermosa. Descendemos justamente en frente del enorme iglú y todos los pueblerinos que se encuentran a nuestro alrededor se ven felices por vernos.
-Hola a todos- grita Sokka con una sonrisa tonta
Aang me carga en marcha nupcial y descendemos de Appa. Mis pies tiemblan por unos segundos cuando entran en contacto con la nieve. He olvidado por completo esa fría sensación. Ayudamos a Toph a descender de Appa y noto que lleva puestas unas botas para el frío. Toph siempre ha odiado los zapatos ya que no le permiten ver, pero aunque se los quitara no estoy segura que pueda ver. No es el hábitat perfecto para ella.
Puedo ver rostros familiares alrededor de los pueblerinos, saludamos a algunos viejos amigos. Puedo escuchar los típicos gritos de chicas emocionadas y se porque gritan. Por Aang. Mi novio simplemente saluda gentilmente a cada una de las personas de la tribu, desde ancianos, hombres de guerra y una que otra escandalosa chica.
-Oh Avatar Aang… usted es mi héroe… gracias por traernos paz…no puedo creer que se encuentre aquí- escucho a una chica decirle.
-Ah… no hay de que… - dice mi novio tímidamente
Arqueo mi ceja a la chica y tomo la mano de Aang con fuerza haciendo que él se gire atento a mí y me sonríe. Que puedo hacer, no se controlar mis celos.
-¡Papá!- escucho gritar a mi hermano
Me giro rápidamente y encuentro a mi padre junto con nuestros viejos amigos caminando entre el pueblo. Sonrió al verlo.
-Corre- escucho susurrar a Aang.
Me suelto de él y corro con todas mis fuerzas hacia mi padre.
-¡Papá!- grito y el abre sus brazos aceptando mi abrazo
-¡Katara! ¡Sokka! mis niños- dice papá – Por fin están en casa-
Siento como mis ojos comienzan a llenarse de lágrimas, son lágrimas de felicidad. Estoy sumamente feliz por volverlo a ver.
-Si por fin estamos en casa y estamos felices- dice Sokka
Yo no digo nada simplemente me limito a abrazarlo nuevamente, impregnándome de su aroma. Ese aroma familiar, protector y dulce que ha sido él.
-Llegaron en el mejor momento… hoy es el solsticio de invierno, lo cual tenemos una pequeña celebración esta noche- dice mi padre sonriendo
-Oh que bien, la fiesta del solsticio- dice Sokka – nunca me lo perdería-
Me giro nuevamente en busca de mi novio y lo encuentro cargando de Toph en su espalda. Sabía que odiaría la nieve. Me rio levemente.
-Es un honor verlo nuevamente señor- le dice Aang a mi padre sonriendo
- El honor es todo mío Avatar Aang- dice mi padre
-Por favor… solo Aang- le pide gentilmente
-Papá ¿no sé si recuerdas a Toph?-dice mi hermano
-Por supuesto … la mejor maestra tierra y metal del mundo-
-Un placer señor… diría que es un gusto verlo pero, ya sabe usted por qué- dice Toph meneando sus pies
Todos nos reímos por un segundo.
-Bueno me imagino que han de querer descansar y estoy seguro que se encuentran sumamente hambrientos- dice mi padre girándose a mi hermano
-tú si me conoces viejo- bromea mi hermano
-Bueno síganme por aquí… estoy seguro que Gran-Gran se emocionara al verlos- nos dice
Comenzamos a seguir a mi padre por varios minutos hasta que llegamos a una enorme casa cerca de una preciosa fuente. Aang baja lentamente a Toph y Sokka la guía dentro de la casa. El interior es casi todo de hielo adornado con las típicas pieles de animal y el uniforme de guerra de mi padre resalta en la sala.
-Por favor, pónganse cómodos- nos dice mi padre
Todos nos sentamos alrededor de una mesa de hielo, aunque las pieles calientan completamente el lugar todavía siento escalofríos. Entrelazo mis dedos con los cálidos dedos de mi novio y este tensa ligeramente sin mirarme. Como si hiciese algo indebido. Me giro ignorando su comportamiento y noto que los ojos de mi padre se han posado en nosotros. Un tanto curioso pero con una pizca de enojo.
Puedo sentir que el corazón de Aang se acelera y traga saliva. No entiendo porque esta tan nervioso frente a mi padre y tampoco porque mi padre nos ha mirado de esa forma. El no odia a Aang. Al contrario siempre ha dicho que es un buen chico ignorando que es el Avatar.
-¿Y cómo han ido las cosas aquí papá?- pregunta Sokka rompiendo el silencio
-Bien hijo, todo marcha de maravilla- sonríe mi padre - ¿Y cómo han estado ustedes?-
-Un tanto ocupados, todavía tenemos que resolver el problema de Yu-Dao y Ba Sing Se, Aang hace todo lo necesario para que todo se lleve en paz- digo
Mi padre asiente.
-Me imagino que es una carga pesada- dice mi padre atento a mi novio
-Un poco- dice Aang –Pero… todo tiene solución- sonríe.
Mi padre asiente.
-¿Y dónde se encuentra Gran-Gran?- pregunto curiosa
-Estoy seguro que ha acompañado a Pakku en sus lecciones- dice mi papá
Tanto Sokka como yo nos sorprendemos.
-¿Pakku todavía sigue en el pueblo?- pregunto
-Así es, es maestro de dos niños y todas las tardes tiene lecciones- me contesta
-Vaya…- murmuro
-¿Qué tal si hacen algo divertido mientras llegan? Estoy seguro de que se mueren por ver el pueblo- sugiere mi padre
Todos asentimos.
-Oh si… Toph tengo una actividad sumamente divertida para todos, que estoy seguro que te encantara- dice Aang emocionado
-¿Hay algo divertido en este lugar? ¡Genial estoy dentro!- dice Toph
-¡Yo también!- dice Sokka rápidamente
-¿Katara?- se gira mi novio atento a mí
-Claro que si- sonrió
Aang carga de Toph nuevamente emocionado, Sokka se levanta igual de emocionado y toma su saco de invierno, todos comenzamos a salir de la casa, dejando a papá atento de una olla de ciruelas de mar.
Caminamos por unos largos minutos en busca de algo, no estoy segura de que, en mi mente se ha quedado grabada la mirada de mi padre. ¿Por qué le ha dado esa mirada a Aang? ¿Estará enojado? ¿Triste?
-Pies ligeros, creo haberte escuchado decir una actividad sumamente divertida para todos- gruñe Toph - ¿Y bien?-
-Tranquila Si Fu Toph, ya verás que será lo mejor- le contesta
En ese momento escuchamos el sonido de un animal y lo identifico de inmediato. Un pingüino.
Sonrió tontamente al verlo haciéndome recordar aquel día en que encontramos a Aang en el iceberg. Lo primero que me pidió… un paseo en pingüino.
-¡Pingüino!- grita Aang
-¡¿Pingüino?!- pregunta Sokka- ¡Paseo en pingüino!-
Aang asiente.
-¿Paseo en pingüino que es eso?- pregunta Toph confundida
Aang deja a Toph en la nieve y los tres nos vamos en su búsqueda. Sokka comienza a perseguir algunos con brusquedad lo que recibe algunos picotazos y los ahuyenta.
-Sokka no los ahuyentes- le pide Aang
Mi hermano se cruza de brazos
-Bueno encuentra algunos si es que eres tan bueno –le replica
Aang arquea la ceja con orgullo
-Observa y aprende- le dice
Saca de su saco de invierno tres pescados y todo un grupo de pingüinos comienzan a seguirlo. Sokka gruñe mientras que mi novio le saca la lengua levemente.
-El viejo truco del pescado… vaya- murmura Sokka
-Vamos, ve por Toph haremos una carrera- le digo a mi hermano
Este se levanta y corre rápidamente por Toph quien se encuentra a unos pasos de nosotros.
-¡Carrera genial!- grita Toph
Caminamos hasta la pendiente de una enorme montaña. Aang toma un enorme pingüino y se sube a él. Golpea levemente el lomo del animal. Por un momento pienso que no soportara el peso de ambos pero el pingüino se ve grande y sumamente gordo. Me siento detrás de Aang y entrelazo mis brazos en su cintura. Me ruborizo tontamente.
-Abrázame con fuerza- me susurra
Sokka y Toph toman un pingüino aún más grande que el nuestro, pero esta competencia no es de peso sino de velocidad. Toph se encuentra bien sujeta de mi hermano y sus ojos se encuentran cerrados, temerosa de lo que suceda.
-Vamos Toph esto no dará miedo- dice Aang
-Habla por ti pies ligeros- le gruñe.
-Bien, las reglas son simples el que descienda antes de la montaña gana- digo
-Pero ¿cuál es el castigo de perdedor?- pregunta Sokka – Lo tengo… enfrentarse a un lobo del polo-
-¡Sokka!- lo regaño
-Bien… mejor… esta noche duerme afuera- sugiere
-Si perdemos tu dormirás a fuera- le gruñe Toph – Odio este frio-
-Me agrada la sugerencia de Toph- dice Aang
-Bien si perdemos yo duermo afuera y su ustedes pierden Aang dormirá a fuera-
-Hecho- dice Aang
-Bien a la cuenta de tres…- digo
Me sostengo con todas las fuerzas de Aang y Sokka arque la ceja preparándose para cualquier golpe de mi novio.
-Uno…- nos mira a ambos y alza sus piernas del pingüino
-Dos…- Y sale deslizándose de la pendiente.
-¡Tres!- grita Sokka a lo lejos.
-¡Oye!- gritamos Aang y yo al unísono.
Aang se desliza rápidamente con su aire control. Siento la fría brisa recorrer mi rostro y mi pecho, me abrazo de Aang por equilibro y por calor. Este sonríe ampliamente.
-Abrázame más fuerte- me dice dulcemente
Encontramos a Sokka y Toph a pocos metros de nosotros, deslizándose velozmente. Aang sonríe maliciosamente y mueve sus brazos haciéndolos acelerar con su aire control. En el momento en que atravesamos miradas con mi hermano ambos le sacamos la lengua.
-¡No es justo! ¡Sin poderes!- grita Sokka
-Mira quién habla de injusticia- le digo
Frente a nosotros comenzamos a ver unos túneles hechos de hielo sumamente peligroso. Algunos gruesos bloques de hielo y espacios pequeños. Comienzo a mover mis brazos apartando cada uno de los bloques y abriendo espacio para que ambos pingüinos se deslicen sin problema. Recuerdo aquella vez que me deslice en pingüino con Aang el me gano por causa de su aire control. Y ahora ambos controlamos bien nuestros poderes. Tal vez pueda pedirle una revancha.
-¡Sin poderes!-gruñe Sokka
-Te estoy ayudando- le gruño
-Si esto fuese hecho de piedra ya hubiéramos ganado Sokka- escucho grita a Toph
El camino y hielo sigue y sigue comenzando a cubrir nuestro alrededor. Puedo escuchar el eco de mi corazón en el túnel. La suave respiración de Aang. Todo es sumamente romántico. Abrazo con fuerza de Aang por debajo de su saco de invierno como el me pidió, comenzando a impregnarme de su calor y su aroma. Siento como su corazón comienza a acelerarse.
Podría vivir en este momento por siempre.
Noto la luz del sol al final del túnel, cubro mis ojos por un momento y salimos de él. Terminando de descender de la montaña.
-¡Ganamos!- gritamos Aang y yo al mismo tiempo.
La superficie se vuelve plana y el pingüino comienza a moverse drásticamente haciéndonos caer a ambos a la fría nieve. Nos reímos. Me levanto ligeramente para encontrarme frente a frente con las bellas gemas de Aang quien todavía goza de la nieve.
-Hola…- me susurra
-Hola…- le susurro
Lo beso. Sus dulces labios comienzan a sentirse cálidos como si hubiese un sol dentro de él. Esa sensación comienza a gustarme, lo beso más y más, volviendo el beso sumamente apasionado. Muerdo su labio inferior ligeramente. Aang se gira y ahora él se encuentra encima de mí. Me rio por un momento, comenzamos a besarnos nuevamente. Su calor mezclado con el mío me hacen desear tener privacidad con él. Me hacen desearlo.
Escucho que alguien carraspea la garganta y ambos regresamos a la realidad. Encontramos a mi hermano cruzado de brazos observándonos con la ceja arqueada.
-¿Qué?... Tardaste demasiado- digo
-Podrían por un solo día dejar de hacer asquerosidades frente a mí- dice en tono de sufrimiento- Solo un día-
-Tranquilo Sokka solo era un beso- dice Aang inocentemente.
-Tal vez tú si…pero no creo que ella pensara igual- me mira con enojo
-¡¿Qué?! ¡¿De que estas hablando Sokka?!- lo regaño. Aunque tenga razón -¡Deja de tener una mente tan precoz!-
Aang ser ruboriza por un momento. Y a lo lejos escucho las carcajadas de Toph.
-Sí, lo que digas hermanita- rueda sus ojos – ¡Y tu ten cuidado donde pones tus manos!- se gira a Aang
-¡Sokka!- lo regaño-
-Sokka ya te lo dije… solo era un beso- dice Aang un poco serio.
Lo que hace que mi hermano asienta.
-Bueno por un momento me alegro de no tener mis poderes… ya que no quiero sentir sus vibraciones a cada momento- murmura Toph
Ruedo mis ojos y me cruzo de brazos.
-Bueno pero una cosa por hoy si es cierta… Sokka dormirá afuera- cambia de tema Aang
Ambos reímos.
-¡¿Qué?!- replica mi hermano
-Ese fue el trato- se encoje Aang de hombros
Mi hermano suspira derrotado.
-Espero que pases una buena noche hoy Sokka- le digo y este gime con tristeza.
Sonrió. Sí que necesitábamos esto, un descanso. No solo Aang sino más bien todo el equipo. Regresar a mi hogar. Andar en trineo pingüino. Ver a mi familia. A mi tribu. Estar dulcemente con mi novio.
Simplemente las mejores vacaciones que hemos tomado.
HOLA! Espero que les haya gustado este primer capitulo de esta nueva historia. bueno aqui en un poco de diversión para el equipo Avatar.
Espero que les haya gustado.
Comenten si les gusto o si no... Ahí nos escribimos.
Capitulo II dentro de poco..
