Capítulo 1: Una mentira perfecta
PDV Bulma
Estaba empacando para ir a Londres ya que mi madre se casaría por segunda vez, con otro hombre por supuesto. Y era importante que yo me encontrase allá. En medio de la ropa encontré el vestido de dama de honor que debía llevar puesto el gran día, me lo probé y seguía viendo miles de defectos en él, no me gustaba para nada, pero lo usaría por mi madre.
Mi mamá había llamado para preguntarme que día llegaría exactamente para que me esperen en el aeropuerto, y de paso, le comenté que llevaría conmigo a un "hombre misterioso" que era mi novio, Yamcha. Mi madre no pudo evitar gritar de la emoción, cosa que ya me lo esperaba así que aparté el teléfono de mi oído. Mi novio tenía una banda de rock y siempre que tocaba en bares lo iba a ver con mis amigas.
Yamcha vino por mi en un taxi y me ayudó a meter las valijas al auto, estaba entuciasmado por conocer a mi familia, sobre todo a mis padres. Cuando llegamos al aeropuerto me dió su móvil para que él pueda bajar el equipaje del coche. Una melodía comenzó a sonar cuando me dí cuenta que era el celular de Yamcha que anunciaba que alguien lo estaba llamando. Atendí
- ¿Hola?
- Hola Alicia - dijo una señora del otro lado
- ¿Quién es Alicia?
- ¿Cómo que quién es? ¡La esposa de mi querido Yamcha! - al instante solté el móvil tirándolo con brusquedad al suelo. Fui hacia el auto para recoger mis maletas e irme. Estaba enojada y triste. No podía hablar con nadie y tampoco quería hacerlo. Cuando me acerqué, Yamcha me miró extrañado - Eres un aprovechador - lo empujé y me fui corriendo.
Ya había corrido mucho y necesitaba descansar, mi llanto y mi mal humor no ayudaban mucho así que me detuve. Yamcha venía detrás mío nombrando a gritos mi nombre, algo que me fastidiaba de sobremanera.
- Bulma ¡Es en serio! Estamos ya casi separados, el divorcio implicaba gastos en abogados y no tenía el dinero suficiente, no te lo dije porque no sabía cual sería tu reacción, lo lamento - cada palabra que ese maldito decía me entraba por un oído y salía por el otro, simplemente no me importaba, ya no.
- Si me lo contabas antes de ser tu jodida novia, mi reacción no habría sido igual a esta, puedo asergurartelo. Quiero que te quede una cosa clara, no te gastes en decirme las cosas que deberías habérmelas dicho antes, porque me importa poco y nada, si me haces un favor puedes irte y olvidarte de todo lo nuestro, no quiero verte y mucho menos que respires cerca de mi - le dí una bofetada soltando el odio que le tenía en ese momento, y me fui. ¿Porqué siempre me pasaba a mí? ¿No podía ser como en las películas? Mi vida amorosa nunca fue una de las mejores, necesitaba desahogarme, y cuando al fin creí haber conocido al hombre que iba a compartir el resto de mi vida, me pasa esto. Me dirigí al baño de mujeres, no encontré otro lugar mejor.
Me encerré en la última puerta y comencé a llorar, no tan fuerte sino todo el aeropuerto se enteraría.
- Cariño ¿Estas bien? - escuché una señora del otro lado de a puerta, sequé mis lágrimas y abrí la puerta.
- Si, me pongo sentimental antes de viajar, no se preocupe - la señora me miró con una cara de confusión. Me miré al espejo arreglando mi cabello y mojando un poco mis ojos para que la hinchazón fuera menos.
- Toma esto linda - dijo la señora mientras ponía una pastilla de color blanco frente a mí.
- ¿Qué es? - pregunté desconfiando de que fuera algo malo.
- En mi trabajo tienes que estar sonriendo aunque no quieras, y eso ayuda demasiado, créeme - me guiñó un ojo y se fue sin decir otra palabra. Miré el medicamento, ¿Cuál era el prblema? Si esa pastilla me iba a hacer olvidar por el momento de ese idiota, la tomaría. Debía estar bien ya que tenía que ir en busca de Vegeta, el mejor amigo de mi hermano.
PDV Vegeta
Llegué temprano al aeropuerto para no tener problema con los vuelos ni con el horario y comenzaba a aburrirme, decidí ir hacia un bar para tomar algo mientras pasaban las horas. Para colmo debía esperar a Bulma, la hermanita menor de Mike. Esa niña que me molestaba cuando éramos niños, el recordarlo nada más era irritante. De pronto sonó mi móvil.
- ¡Vegeta! ¿A qué hora vas a llegar? - escuché a mi amigo hablar por el celular y parecía felíz. Ví una mujer de piel morena y alta entrar al bar dirigiéndose hacia la barra y sonreí con picardía.
- Llegaré tarde Mike - dije aún sonriendo - Creo que el vuelo se atrasó.
- A mi no me mientes. ¡Vegeta no puedes perder el vuelo solo porque se te presentó la oportunidad de acostarte con una mujer! - escuché a mi amigo regañándome.
- ¿Quieres gritarlo más alto? Casi te escucha - dije algo molesto por su tono de voz. Oí que suspiró.
- ¿Cómo es? - dijo él rindiéndose.
- Luego te digo - corté para acercarme a ella y tratar algo. Después de todo, faltaban 2 horas para viajar, suficiente tiempo.
PDV Bulma
Estaba sentada encima de mi maleta esperando a que esa maldita pastilla haga efecto, y de la nada comencé a reír. No pensaba en nada concretamente, me miré al espejo y simulaba ser feliz. Siendo así, agarré mi valija y me fui a hacia un bar, tomar algo y sacarme el sabor salado de mis lágrimas iba a ser lo mejor. Cuando entré, vaya sorpresa, encontré a Vegeta ligando con una mujer que era muy bonita.
- ¡Vegeta! - grité llamando su atención, y no pude evitar reírme con su cara de desesperación. Me acerqué corriendo y salté dándole un abrazo a él, pero no fui recibida con la misma alegría, lo único que pude ver es que la mujer que lo acompañaba me miró con mala cara, cosa que me molestó - ¿Quién es esta? ¿Tu nueva ramera? - dije soltándome del abrazo mientras me reía, no sabía porque carajo había dicho algo asi, era irrespetuoso y mal educado, pero en ese momento me daba lo mismo lo que ella pensara, yo me sentía bien y todo me daba lo mismo.
- ¿Cómo me dijiste mocosa? - dijo ella en un tono de ofensa.
- Oye, está bien que el oído sea un orificio, pero por allí no se meten cosas como consoladores, mejor sácatelos haber si escuchas mejor - oh por dios, ¡Que alguien me calle!
- ¡Bulma! - me gritó Vegeta - Disculpala, ahora mismo hablaré con ella - me levantó y me llevó hacia el otro lado del bar - ¡¿Qué clase de cosas estás diciendo?! ¿Tomáste éxtasis o algo? - me daba muy poca importancia, ya que giraba para ver si la mujer seguía ahí y no se había marchado por mis insultos - Mejor espérame aquí - me senté en una mesa y lo esperé.
PDV Vegeta
No sabía que clase de droga había tomado Bulma, lo que más me molestaba es que después de haber dicho semejantes barbaridades se seguía riéndo. Podría haber jodido todo, aunque todavía no lo sabía porque no hablé con la mujer que aún no sabía su nombre. Me acerqué algo nervioso, no sabía lo que me esperaba.
- Te pido mil disculpas, en serio - dije apenas me miró.
- ¿Ya terminó de molestar esa mocosa? Porque me gustaría pasar algo de tiempo contigo - me dijo susurrándome al oído. Mierda, Bulma siempre echaba a perder mis buenos planes, no podía dejarla sola a ella y menos en la situación en la que se encontraba. Dejando de lado que Mike me mataría si se entera que me fui a acostar con una mujer en vez de cuidar a su hermana.
- A mi me encantaría, créeme, pero ahora no puedo. Tengo que estar con ella, me necesita - la miré y me fui hacia donde Bulma estaba sentada - ¿Bulma? - dije , y me dí cuenta que la niña se había quedado dormida.
Pasó media hora y mi móvil sonó otra vez, supuse al instante que sería Mike para volver a regañarme por lo de vuelo, pero no, era mi madre, seguro me preguntaría a que hora iba a llegar.
- Mamá - dije con una sonrisa.
- ¡Vegeta! ¿Cómo estás? Se supone que deberías llegar aquí el 12, osea hoy - me decía gritando.
- Mamá, aquí todavía es 11, hay un día de diferencia. Mi error - me disculpé - Igual no te preocupes, ya estoy por salir - escuché un suspiro - ¿Y papá?
- Aquí estoy - dijo mi padre, seguro había agarrado el otro teléfono que estaba en el comedor y escuchó la conversación - ¿Cómo esta mi hijo?
- He estado mejor - dije sin más - ¿Y tú?
- ¿Le contaste? - dijo él, no entendí mucho lo que quiso expresar pero para mí no iba la pregunta, estaba seguro.
- Creí que le íbamos a decir cuando él esté aquí - dijo alterada mi madre. No sabía que pasaba y su tono de voz me estaba preocupando.
- ¿Pasa algo? - pregunté algo cansado ya.
- Yo... Yo voy a cortar - y mi madre salió de la charla.
- Hijo, ¿Tienes novia ya? - odiaba que mi padre insistiera con eso, me estaba presionando mucho y no me gustaba. Lo que más me enojaba, era que solo quería que me case para que él sea abuelo y que ese niño tenga su apellido. Si bien yo a mi padre lo respetaba, pero estos temas me estresaban.
- Papá... - dije tratando de mantener la calma.
- Antes de que me lo digas, déjame contarte algo... - escuché atento - Estuve yendo al doctor estos últimos días porque de verdad me siento muy mal, y la vez anterior que fui, me diagnosticaron una enfermedad.
- ¿Cuál?
- Que es terminal... Tengo cáncer Vegeta - abrí mis ojos totalmente sorprendido, no me esperaba eso y me puse mal - El doctor me dijo que solo me quedan 6 meses de vida, y esperaba que mi hijo en ese tiempo me llegara a casa con una mujer - genial, lo que me faltaba... ¿Que haría ahora? Si solo le quedaba ese tiempo aquí en la Tierra, quería verlo feliz... - ¿Tienes prometida? ¿Novia? ¿Alguna amiga muy cercana? - me dijo metiéndose más en el tema, mis nervios aumentaban ya que no sabía que decirle. Y fue entonces que miré hacia mi derecha, allí estaba Bulma... Esperaba que me haga el favor y no se arrepienta, después de todo lo que tuve que aguantar, me debía pagar con algo.
- Estoy comprometido, pero te pido por favor que no cuentes nada en casa, pienso dar la noticia cuando llegue. - dije sin creerme a mí mismo lo que acababa de hacer, no había vuelta atrás, ya estaba dicho y no podía borrar esas palabras de la cabeza de mi padre.
- ¿Con quién? ¡Espero con ansias conocerla! - dijo mi padre con un notorio cambio de humor, lo notaba feliz y demasiado alegre. Genial, ahora no tenía manera de salir de esa mentira.
- Y... ¿Si ya la conoces? - ¿Porqué no venía alguien y me daba una bofetada así me calle? Por dios.
¡Vegeta se ha metido en una gran mentira que no tiene final! A menos por ahora... ¿Cuál será la reacción de Bulma al enterarse? ¿Aceptará formar parte de esa farsa? ¡Lo que le espera a la preliazul!
Espero haber escrito bien el relato y sobre todo que les haya gustado. Para mi es un placer que me lean, y en serio les agradezco. Subiré el próximo capítulo pronto, estoy en vacaciones así que no estoy tan ocupada. ¡Gracias! Y no se desconecten, pronto sabremos que pasará con esta pareja.
