Capitulo 1: Nuestras Vidas
NOTA: Esta historia se situá 10 años exactamente después de la revolución. La había desarrollado originalmente de manera mas clásica, con Peeta y Katniss juntos desde el principio creo que seguiré desarrollándola pero por ahora esta me ha ganado. Después vi el juego de Ender, que había leído previamente, por eso retome lo de la escuela de batalla y la escuela de comando. Por cierto los nombres de los hijos de Finnick y el de Haymitch los retome de algunos Fics que leí previamente ya que creo los autores eligieron bien. Espero después poder darles mención. En mi cabeza ya esta muy desarrollada, de hecho ya tengo hasta el final pero escribirlo me cuesta un poco, así que les pido paciencia. Espero que les guste.
En la Nueva Federación de PANEM.
CAPITULO 1. NUESTRAS VIDAS...
Las primeras notas del himno de Panem resonaban en la plaza abarrotada de personas, la gente vitoreaba, la calzada estaba espléndidamente adornada. La ciudad capital había recobrado parte de su magnificencia pero sin aquella exaservada superficialidad. Las carrozas comenzaban a moverse a lo largo de la calzada hasta llegar al patio central. Los personajes que en ellas viajaban eran reconocidos por sus conciudadanos algunos saludaban y sonreían abiertamente, otros mas bien parecían alejados con actitud gallarda y tal vez un poco altanera mirando hacia el frente con la cabeza en alto como si estuvieran por encima de todo. Todos ellos habían sido personajes destacados durante la revolución; detrás de la carrozas desfilaban representantes de los sobrevivientes de los ejércitos rebeldes de cada distrito, y al final de todos ellos contingentes del nuevo ejercito, así como de las escuelas formadas hace algunos años para la capacitación del ejercito profesional de la Federación de Panem, que era así como se llamaban ahora. En el podium se encontraba para recibirlos y dirigir los discursos el presidente junto con los mas prominentes políticos de la ciudad capital y los distritos.
Mientras su carroza avanzaba Katniss Everdeen sintió un leve estremecimiento que tuvo que controlar ya que era la misma calzada y el mismo podium que recorrió antes de ir al tercer Vasallaje, apretó sus manos sobre el barandal y recordó como hace unos minutos su acompañante pudo notar su inquietud y apretó su mano para recordarte que no estaba sola, ella le miro y se sonrieron el uno al otro. El era fuerte, alto, de piel aceitunada y cabellos oscuro como el de ella los años solo habían acentuado sus rasgos varoniles. Se veían impactantes, ella con un vestido oscuro y él con su uniforme de la armada. Era el general en jefe del ejercito de la nueva federación de Panem. La besó discretamente y le ayudó a subir a su carro y comenzó a avanzar. Mirada al frente, cabeza en alto hasta llegar al podium, iba sola en su carroza. Ambos habían sido amigos, amantes, eran una pareja estable, vivían juntos desde que había acabado la revolución pero nunca lo habían oficializado a través del matrimonio, a pesar de que para todo mundo era un secreto a voces nunca participaban juntos en los eventos oficiales, era como un acuerdo implícito.
Mientras veía como se alejaba el carro de ella Gale Hawthorne acomodaba su uniforme y se dirigía a su propio carro que era el del final ya que concluía el contingente de los personajes y habría el contingente militar también era un poco mas grande que el resto pues aunque el iba a la cabeza en el mismo viajaban los oficiales del ejercito de tierra, marina, aviación y aeroespacial.
El evento era televisado, y los comentaristas referían.
-Y miren por primera vez en 10 años, la inspiración de la revolución el Sinsajo: Katniss Everdeen...observemos que porte.
-Si, tengo entendido que se había mantenido al margen pero es muy bueno que ahora en la primera década de la Federación podamos contar con su presencia.
-Detrás ella Johanna Mason quien ahora es instructora en jefe de la Escuela de Batalla y Escuela de Comando de la Federación desfila en su uniforme de Gala.
-Después Beete Latiere, quien sigue contribuyendo a Panem con sus brillantes descubrimientos
-Tengo entendido que ha sido de gran ayuda para la división aeroespacial de nuestro ejercito...
-También sabemos que tanto él como Johanna Mason asesoran el proceso de selección para el programa de preparación militar para el ingreso a la escuela de Batalla y el proceso de profesionalizan de la Academia de Altos Oficiales.
-Y hablando de la profesionalización del ejercito mira nada mas lo que viene ahí.
En la pantalla la imagen de un jovencito casi un niño llena la pantalla, es simplemente hermoso de ver rubio, rostro sonrosado y ojos color verde mar, muy alto para su edad. Cabeza en alto, mirada al frente. Estoicamente de pie, ataviado pulcramente con su uniforme de la escuela militar.
-Wow ¿es quien yo creo que és?
-Por supuesto quien podría confundirle, es ni mas ni menos que el joven Odair.
-Seth Odair, encantador muchacho. Junto a él viaja su tutor, nuestro ministro del exterior ¿No es así?
-Así es
En la cámara un hombre de media estatura, rubio, de ojos azules, bien parecido y con rostro sonriente saluda al público. Pulcra y sobriamente vestido.
Las descripciones y referencias a los participantes continúan. Al terminar su recorrido las carrozas se retiran, sus ocupantes descienden y se colocan frente al podium. Los contingentes detrás de ellos se detienen. Inicia la ceremonia. Todos en la plaza interpretan el himno, izan la bandera. Se dan reconocimientos, medallas y se inaugura un monumento a la memoria de los caidos. El joven Odair recibe una medalla para honrar la memoria de su padre. A pesar de su gallardía sigue siendo un niño de 10 años, tan joven como la nueva federación, por un momento sus ojos verdes se nublan con el agua salada apunto de caer de ellos. Pero al llegar junto a su "padre" este lo estrecha, lo abraza por su costado apretando su hombro, se miran el uno al otro, las lagrimas se calman momentáneamente. Katniss junto con el presidente son los encargadas de debelar un monumento. La ceremonia concluye.
La gente se dispersa en la plaza para ir a los diferentes eventos conmemorativos; la gente de las carrozas, los de el podium y una serie de invitados especiales se retiraran a una recepción en la residencia presidencial.
-¿Estas bien?- dice Peeta Mellark al joven Odair
-Si, lo siento yo...-ahora las lagrimas amenazaban con salir de nuevo. Peeta le abraza y este se deja hacer.
-No hay nada de que avergonzarse te lo he dicho, eran tus padres, ¿comprendes?- En su mente regresa la idea de la fatídica muerte de Finnick en aque oscuro lugar de capitolio y de Annie quien nunca se había recuperado de la perdida y como poco a poco había ido desconectándose de este mundo hasta su inevitable partida apenas un año atrás, dejando al pequeño huérfano. En realidad él se había hecho cargo desde que tenia unos cuatro años pero fuera como fuera su madre vivía.
-Si- se seca las lagrimas.
-Vamos- abraza al chico por el hombro y comienza a caminar. A los pocos pasos se une a ellos Johanna Mason.
-¡¿Que hay niño?!- dice mientras da una palmada en la espalda al chico quien la mira y le sonríe.
-Yo también te he extrañado tía Johanna...
-Si, ha sido tanto tiempo...no nos vemos desde...¿esta mañana?, en el comando creo...-dice con tono sarcástico- se que no puedes vivir si mi -y le revuelve el cabello.
Katniss mira la escena desde lejos sin ninguna expresión en su rostro. Una voz la saca de la escena.
-Ya esta ¿nos vamos?
-Claro
Frente a la gente se muestran como si solo fueran amigos o de verdad primos. No queda claro ni para él ni para ella pero así han funcionado desde que decidieron estar juntos hacia tanto de aquello. Y el mundo al fin y al cabo no se mete, es un secreto a voces que viven juntos. Nadie se atrevería a meterse con uno de los hombres mas poderosos del país y ella se había mantenido alejada de la vida publica.
Por la tarde, la comida se realiza en los jardines de las nueva residencia presidencial, ya que la anterior fue remodelada y reignaurada como uno de los orfanatos mas grandes del país para atender aquellos que quedaron desamparados después de la revolución.
Todo esto tenia fines propagandísticos ya que les interesaba tomar fotografiás de como vivían hoy en día los ex revolucionarios, obtener fotografiás de Seth Odair, Gale y Johanna con el uniforme de la armada, ya que en el parlamento se estaba discutiendo el tema del servicio militar obligatorio. Con esto en mente había dos festividades a las que asistirían hoy esta una comida familiar en los jardines, y por la noche un baile de gala, solo los adultos.
Katniss permanecía sentada observando a su alrededor, los meseros se esforzaban por atenderla a la perfección, mas de un admirador se había acercado a saludarla y otros tantos la miraban considerándola inalcanzable. Le dio un pequeño sorbo al jugo de un vaso.
-Hola descerebrada...
-Hola Johanna...-jala una silla y se sienta junto a ella.
-Es una suerte verte en una de estas cosas...
-No soy tan importante como tu- dijo mirando su uniforme y contemplándola- ¿Al fin te reformaron?
-Que va, solo lo hago por la licencia para matar, jugar con armas y atormentar niñitos...
-Vale-Katniss solo atinó a reír
Ella mira como Gale se acerca a dos chicos que jugaban a uno metros de donde ellas. Uno era Seth Odair quien al verle de cerca de inmediato se levantó de golpe dejando su juego he hizo un saludo militar, vio como Gale le respondió, le dijo algo y se marchó el chico volvió a lo suyo, junto a él había otro chico rubio unos años menor. Pero congeniaron bien ya que había pocos niños y ellos parecían entretenidos. En ese instante en silencio, solo la mirada interrogante de Johanna la saco de sus cavilaciones.
-¿...y de verdad el comandante en jefe es tan bueno en la cama como dicen?
-Perdón- un sobresaltada Katniss.
-jajajaja veo que no has cambiado mucho, en ese aspecto...
-Es que tu cambias de tema como si...
-No te pregunte nada fuera de este mundo, cada vez que se miran el uno al otro es como si quisieran comerse entre si, es lujuria pura...
-Que cosas dices...
-Lo que se ve no se juzga querida...
-Da igual- da un sorbo a su bebida- ¿Y tu? ¿Hay algún cadete que te visite?
Johanna se veía muy bien en verdad el uniforme le sentaba bien, ese aspecto retador e irreverente seguro que hacia que los hombres cayeran a sus pies y sin dudarlo poseeia un atlético cuerpo.
-jajajaja hay muchos que matarían por estar en mi cama pero ninguno de ellos cumple los requisitos...
-¿Una cadete entonces?
-Wow vaya Katniss ¿Tu haciendo esas preguntas? Te responderé pero tu deberás responderme a mi, no tengo inconveniente en que fuera "una cadete" ya lo experimente antes y no hay ninguna que tampoco cumpla con los requisitos. Y ahora me toca a mi ¿Gale es salvaje en la cama o es de los que una vez llegado el momento se retraen? -dijo doblando el dedo meñique.
-Katniss pone los ojos en blanco- Que gráfica...
-Que evasiva...
-Lo primero...
-¿Y te gusta?
-Mi turno ¿entonces hay alguien?
-mmmm- le mira significativamente- si que hay alguien-los ojos brillan y para Katniss es algo nuevo, algo que nunca había visto en Johanna, estaba a punto de preguntar cuando son abruptamente interrumpidas y ella se queda sin respiración por lo que acaba de percibir en la castaña y por la persona que se sienta junto a ella y se une a la platica. Es él, no han hablado desde que ella misma lo había corrido de su casa en el distrito doce de la manera mas humillante y dolorosa con la que jamas había tratado a nadie, hacia tanto tiempo...
-Hola- dijo como si los tres fueran los grandes amigos- Katniss se ruborizo un poco y sus ojos se negaban a verle directamente. Johanna tenia una mirada divertida en el rostro pues notaba su incomodidad. El parecía despreocupado- uff que calor hace...-un mesero le da un jugo similar al de ella- Gracias- y bebe.
-y que lo digas
-¿Que?- dice él mirándola
-Nada, Hola señor ministro- dice Johanna con fingida reverencia después ríe abiertamente.
-No habrá aumento en tu presupuesto por mas que me trates bien Johanna, yo no lo decido...
-¿No puedo ser cortes sin que pienses que trato de obtener algo?
-Tu nunca eres cortes con nadie, mas bien eres abrasiva, ¿No lo crees Katniss?
Escuchar su nombre en los labios de Peeta Mellark dirigiéndose a ella y mirándola es algo surrealista. Le mira su expresión es tranquila y divertida. Solo atina a decir.
-él tiene razón Johanna
-¿Lo vez?
Los dos ríen. Johanna hace discretamente un ademan obsceno para ambos las carcajadas de los tres ahora son abiertas.
-Papá, papá- el niño Odair se acerca corriendo con un juguete en sus manos.
-Sí- dice Peeta Mellark mirándolo
-Dijiste que me enseñarías a usar esta cosa, que pueden volar muy alto...-dice jalando a su "Padre" de la mano para que este se levante del asiento.
El otro chico se acerca corriendo.
-Ya lo intentamos y no logramos- dice poniendo ojos de cachorro
-Muy bien -dice poniéndose de pie-les enseñare como, pero antes ¿ya saludaron?.
Ambos miraron a Johanna y luego a Katniss.
-Es que no nos has presentado oficialmente- dice Katniss de manera amable.
-Yo se quien es usted- dice Seth Odair- usted es Katniss Everdeen "el Sinsajo"- dice y en su voz se nota una solemnidad poco frecuente en un niño de esa edad.
-¿De verdad?- dice el otro pequeño mirándola como si de un ser de otro planeta se tratara- ¿Qué es un sinsajo?
-Si no lo sabes ¿Por que te emocionas?- dice Seth
-No sé- dice encogiéndose en hombros el pequeño.
-Esta bien – dice Peeta- este es Seth Odair, hijo de Annie y Finnick-recorre el cabello del niño con una de sus manos y coloca sus dos manos en los hombros del chico.
-Tu madre era una mujer amable y encantadora- Seth Sonríe- y tu padre era el hombre mas noble, valiente y entregado que jamas conocí en la vida, el te amaba aun antes de que nacieras
-Gracias, lo sé.
-Y este jovencito-
Alguien mas se une a la platica, y es sorprendente lo que dejar el alcohol, hacer ejercicio y mantenerse ocupado puede hacer por el cuerpo, pues mas que envejecer parece haber rejuvenecido.
-...es mi creación particular, cielito...-dice su ex-mentor con un vaso en la mano
-¿y eso es agua?- dice Katniss
-Lo es
-La vida da muchas vueltas- responde, el niño se abraza a Haymitch y le mira como si fuera un monumento, este le rodea con su brazo libre
-Donovan Abernathy...yo no elegí el nombre...por eso lo llamamos Van.
-Yo elegí el nombre, si hubiera sido niña tu lo habrías hecho- una hermosa mujer rubia impecablemente arreglada, con una sonrisa cálida en su labios pronunciaba esas palabras.
Y ahí estaban la buena de Effie Trinket y Haymitch Abernathy. Quien imaginaria que debajo de esos extravagantes atuendos y excesivo maquillaje se encontrara una mujer tan hermosa y el otro asunto es que para ser una persona que vivió los estragos de la guerra en las mazmorras, que también fue atormentada por ser amiga de los traidores y aun ahora en ocasiones era juzgada por la gente por haber sido una figura publica del capitolio, la encargada de llevarse a los chicos de la cosecha, aun con eso, aun con todo eso no había perdido aquel optimismo, alegría y elegancia. Ahora era madre. Trataba de ser una buena madre. Por su parte Haymitch luchaba día a día con sus viejos hábitos, aun tenia ese ácido sentido del humor pero su animo era diferente sonreía mas, adoraba a su esposa y a su hijo, esas palabras eran extrañas, tan extrañas nunca pensó en escucharlas unidas a un "mí", se veía rebosante de vida.
Después de hablar sobre trivialidades, todos se retiraron ya que debían descansar pues la noche sera larga.