Nota del autor: Hola a todos, este fic basado en FMA primer anime, yo amo la primera serie y la película Conquelor of Shamballa, pero decidí escribir este final AU lo más cercano al cannon posible, más adelante comentaré que otras cosas aparecerá, espero les gusten.
Disclaimer: Full Metal Alchemist no me pertenece.
El alquimista más allá de la Puerta
CAPÍTULO 1
En la extraña nave que surcaba los cielos grises de ciudad Central, el menor de los hermanos Elric no podía creer que su hermano lo estaba dejando de nuevo.
"¿Qué sucederá con Winry?" − gritó desesperado, intentando convencer a su hermano de quedarse, pero este solo dio media vuelta con una sonrisa melancólica en su rostro y le mostró su automail.
"Dile, que le estoy agradecido por esto" − respondió y se vuelta para marcharse dentro de la nave, y así sacrificarse una vez más por su hermano y por todo lo que quería.
"¡Hermano! ¡Hermano!" − gritaba desesperado Alphonse con lágrimas en los ojos mientras era sujetado por el Coronel para que no siguiera al chico de cabellos dorados, pero este siguió luchando, y finalmente logró zafarse de los brazos del militar y dio un salto para llegar a la otra plataforma de la nave que se separaba lentamente.
Edward ya dentro de la nave volteo y vio acercarse a Alphonse rápidamente.
"¡Al!" "¡Espera...!" − expresó sorprendido ante la imprudencia de su hermano, pero fue interrumpido por el menor quien se le abalanzo encima para detenerlo, haciendo que Ed cayera de espaldas y se golpeara la cabeza con un casco de armadura que se encontraba en el piso.
"¡No dejaré que te vayas de nuevo!" "¡No te dejaré!" "¡No te dejaré!" − gritó Al encima de Ed agarrando el cuello de su camisa y con lágrimas en los ojos, pero al ver que Ed no reaccionaba notó que estaba inconsciente y al ver el casco de la armadura cerca de su cabeza dedujo lo que sucedió, enseguida comprobó el estado de su hermano y permaneció unos momentos contemplando lo ocurrido, al ver que se encontraba bien pero inconsciente se levantó poniendo a Ed sobre su espalda.
"Coronel" − llamó el chico, Roy dio un salto hacia el la otra plataforma de la nave.
"¿Pero qué sucedió?" - preguntó preocupado al ver a Ed.
"Creo que se golpeó la cabeza, Coronel, por favor cuide de mi hermano. Llevaré esto a la puerta y transmitiré explosivos para que explote estando dentro y así destruirla, no se preocupe yo huiré antes de eso ¿de acuerdo?"
"Puerta..." − musitó pensativo – "de acuerdo pero no te arriesgues demasiado, si lo harás explotar debes tener cuidado."
Al asintió y le entrego a Ed, Roy lo cargo a sus espaldas y se dirigió a la otra plataforma. A su vez Alphonse uso alquimia para activar los motores y llevar la nave hacia la ciudad subterránea. Lo mismo hizo el Coronel en la otra mitad de la nave para aterrizar con seguridad y una vez en tierra, destruirla y dirigirse donde Alphonse.
Mientras tanto en las ruinas de una parte de la ciudad, se encontraban dos ciudadanos del país vecino, que al estar en Central se vieron involucrados en la invasión. Los jóvenes estaban cansados y un poco agitados con pequeñas rasgaduras en sus ropas debido a la lucha, ya que debieron defenderse antes los ataques y proteger a las personas que se encontraban cerca para que pudieran escapar.
"¿Pero qué rayos sucede? este país es muy extraño" – comentó el chico extranjero al abrir el casco de una de las armaduras y ver el cadáver que se encontraba dentro.
"Señor" – expresó rápidamente la chica que lo acompañaba – "miré" – y ambos miraron hacia arriba sorprendidos por aquellas "maquinas voladoras" que flotaban en los cielos despidiendo humo y que se dirigían muy cerca de donde se encontraban ellos. Una a de esas "maquinas" parecía que iba a aterrizar en las ruinas que al parecer eran de una iglesia pero que ahora debido a alguna explosión se encontraba un gran agujero en el suelo.
"Lan Fan ¡vamos!" – se apresuró el joven.
"Puede ser peligroso señor"
"No importa, tal vez nos acerquemos a encontrar "algo" que nos ayude a nuestro propósito" - respondió decidido.
La chica pareció entender la mirada de su joven amo y lo siguió corriendo también, entonces vieron otra extraña nave que aterrizaba cerca.
"Lan Fan, primero acerquemos a esa otra máquina, sigilosamente para que no nos detecten." – dijo agitado mientras corría.
"Sí señor."
Después de aterrizar, Roy salta a suelo firme cargando en brazos a Ed, se alejó rápidamente de la nave a una distancia segura y lo depositó en el suelo.
"Acero ¡Acero despierta!" – dijo preocupado dando unos pequeños golpes en la mejilla del chico y examinando su herida que al parecer no sangraba.
Los extranjeros vieron la escena y de inmediato se sorprendieron enormemente al ver al chico de cabellos dorados, acaso ¿Él era la persona que estaban buscando?
El hombre del parche se levantó y alejó del chico, chasqueó los dedos haciendo una gran explosión para destruir la extraña máquina, hizo esto hasta terminar su trabajo completamente.
Mientras esto sucedía Edward comenzó a despertar.
"Qué sucede..." – musitó mientras despertaba de su letargo, giro la cabeza y vio lo que el Coronel hacía.
"Coronel..." – y entonces recordó todo lo sucedido – "¡Al! – gritó desesperado mientras se incorporaba.
Roy terminó su cometido y fue donde Edward al escuchar su grito.
"¡Acero! ¡¿Cómo te sientes?".
"¡Al! ¿Dónde está Al? ¿Qué pasó?" – preguntó exasperado.
Roy respiro hondo y respondió sospechando la reacción que Ed tendría – "Al dijo que dejaría la nave en la puerta y luego saltaría haciéndola estallar."
"¡Qué! ¡Pero por qué! ¡le dije que yo debía hacerlo desde el otro lado!" - expresó sorprendido y exasperado, se levantó ayudado por el coronel, pero este enfadado lo hizo a un lado violetamente – "¿Por qué no lo detuviste?" – le recriminó – "¡Tú debiste convencerlo de dejarme ir!"
Edward sabía que esa era la única forma de asegurarse que amabas puertas, la que conectaba ese otro mundo donde antes se encontraba y este no volvieran a abrirse, debía volver a Alemania para proteger su mundo y el otro, aunque eso significaría no volver a ver a su hermano, ni a Winry, ni a todos sus seres queridos, aunque volver significaría volver a un país al borde de una guerra. Debía hacerlo para proteger a todos, a todos sus seres queridos de amos mundos.
El Coronel solo permaneció en silencio recibiendo los reclamos y lamentos de Edward, él no se defendía porque comprendía muy bien lo que Edward sentía, pero a su vez comprendía a Alphonse, por lo que no dijo ninguna palabra.
Edward miró a todos lados y vio la abertura en forma de cráter que conducía a la ciudad subterránea, y comenzó a correr hacia allá.
"¡Espera!" – gritó el del parche.
Pero de pronto Ed fue detenido por un joven extranjero de cabello negro que se interpuso en su camino.
"Espere por favor"
El alquimista de la flama inmediatamente corrió poniéndose al lado de Ed y en guardia.
"¿Quién eres tú?" – interrogó el militar seriamente.
En su escondite sin ser detectada la chica también preparó su arma, una kunai dirigiéndose al militar y se preparó para ver una la señal para atacar.
"Un momento por favor, solo deseo hacer una pregunta, me llamo Ling Yao del país de Xing, llegue a este país investigando la alquimia de aquí y buscando al alquimista de acero, ¿Es usted verdad? el alquimista de cabello y ojos dorados que dicen los rumores – Esto hizo que Edward y el Coronel se sorprendieran, y el extranjero siguió – "además escuche que ese hombre le llamaba acero, ¿no es asi?"
"¿Por qué me buscas?" – Preguntó enfadado e incrédulo – "Espera, no tengo tiempo, debo ir a buscar a mi hermano, ¡hazte a un lado! – le ordenó.
Y corrió pasando de largo al chico que tenía enfrente, pero Ling no se rendía y continuó intentando detener a Edward corriendo detrás de él.
"¡Espera!" – gritó el alquimista de la flama haciendo una explosión a un lado del chico extranjero para asustarlo y logró detenerlo, pero en ese momento sintió que "algo" se dirigía a él, la pudo esquivar pero a sus espaldas se posó una chica sujetándole un brazo a la espalda poniéndole una kunai en el cuello.
"¡No te muevas!, no permitiré que lastimes a mi amo."
"¡Espera Lan Fan!" – Intenta calmar a la chica, y continúa hacia el militar – "Usted es un Coronel ¿verdad?, yo no quiero causar problemas, solo quiero hablar con el alquimista de acero"
"Como puedes ver esta es una situación de emergencia, no tenemos tiempo."
"Lo sé pero esto depende mi país, debo hablar con el alquimista de acero, solo hablar, iré tras él. Lan Fan ¡ten cuidado!" – esto último dirigiéndose a la chica.
Y luego siguió a Edward dentro de aquel cráter, dejando a Lan Fan y al Coronel.
Alphonse pudo trasladar la nave cerca del gran resplandor que brillaba intensamente en lo más alto de la ciudad subterránea; lo contempló mientras el aire frio golpeaba su rostro en lo alto, entonces recordó una vez más la puerta que pudo ver en el momento de haber intentado revivir a su madre.
Momentos después fue a buscar a Eckhart, la mujer que atacó a su hermano y responsable del ataque, y así poder separar una pequeña parte de la nave para escapar. Preparó los explosivos para que hicieran explosión en unos minutos.
Una vez terminada su tarea se dispone a separar una parte de la nave, pero a lo lejos divisa una figura en el resplandor, y de pronto él, solo él se encontraba frente a una gran puerta, en medio de un espacio vacío donde solo se encontraba él y aquella puerta. Lo observó atónito y una sensación de miedo recorrió todo su cuerpo haciéndole temblar, y al darse vuelta vio una armadura, una armadura parada frente a él que le parecía familiar.
"Mi hermano..." – comenzó a hablar la armadura vacía cuya voz denotaba una gran tristeza "¿dónde está mi hermano...?"
Al asustado por lo que veía y escuchaba, no decía nada, pero lo comprendió, el cuerpo se divide en alma y espíritu, esos cinco años de viaje, su hermano lo hizo junto con una parte de su alma atada a la armadura y al regresar a su cuerpo, aquella alma quedo atrapada en la puerta. Es por eso que ahora él se encontraba allí, y estando cerca de aquella puerta su cuerpo debió activar el alma que quiere regresar al lado de su hermano.
"Hermano..." – continuaba lamentándose la armadura, las lágrimas de Al cayeron por sus mejillas, entonces corrió desesperamente para poder tocarla.
De pronto el chico despertó, abrió los ojos donde se encontraba antes, la mujer estaba a su lado aún inconsciente e inmediatamente separo una pequeña parte de la nave y se alejó. Mientras esto ocurría, observaba las explosiones dentro de la puerta y mientras él decencia, cayo de rodillas y perdió el conocimiento.
