Pequeño Hanny, porque tenía rato sin escribir algo de ellos y ya los extrañaba.
Drabble.
Palabras: 522
Disclaimer: Harry Potter no me pertenece…y no me quejo por eso, la diosa J. K. Rowling (Alabado sea su nombre) es la única que merece tenerlo.
Desde la ventana de la torre de Gryffindor
El amor no es algo que se borra de un día para otro, no cuando llevas tanto tiempo amando a una persona. Ginny Weasley lo sabía muy bien, llevaba enamorada del mismo chico durante seis años, no estaba clara cuando paso de ser algo platónico por Harry Potter el gran héroe del mundo mágico, a ser algo real por Harry Potter el chico de ojos verdes, dulce, inocente, atrae problemas, un poco histérico, y muy valiente que era el mejor amigo de su hermano mayor, lo que si estaba clara es que amaba a Harry Potter y punto.
Estaba sentada en la ventana de la torre de Gryffindor, veía el horizonte, preguntándose donde demonios estaría él. Lo extrañaba tanto que hasta dolía, sabía que él había terminado su relación para no ponerla en peligro, pero ella no necesitaba que la protegiera, ella no era una ridícula damisela en apuros de esas películas muggles, ella sabía cuidarse sola. Y lo extrañaba.
Y sí, sabía de antemano Harry partiría a alguna misión heroica con Ron y Hermione y que probablemente pasaría mucho tiempo sin verlo, pero eso no evitaba que ahora que estaba lejos lo extrañara. Uno no deja de amar a una persona solo por despedirse de ella. Es más, entre más lejos está la persona que amas, más pareces amarla, es como masoquismo de parte del corazón, para hacer sufrir a los enamorados. Porque sí, el corazón era cruel, entre más tiempo pasaba sin Harry más se empeñaba en recordarlo, en sentir ese vació de preocupación en el estómago, y el golpeteo angustioso en su corazón.
Dicho así parecía niña enamorada que no puede estar un día lejos de su amado, pero no era el caso, ella podría pasar la vida sin Harry si supiera que él era feliz, le dolería sí, pero mientras él fuera feliz ella también lo sería. Lo que de verdad le aterraba de su ausencia era saber que estaba cumpliendo una misión que aunque no sabía lo que era, sabía que seguramente lo pondría en la mira del que no debe ser nombrado. Casi no podía vivir con la angustia de despertarse un día y oír la noticia de su captura, sentía que le faltaba el aire de solo pensar en la posibilidad de él muerto a manos del señor tenebroso, no solo él, también Hermione ella era como su hermana, ni tampoco a… no podía pensar en el último nombre, jamás soportaría perderlo a él, a su idiota y sobreprotector hermano por él que daría la vida.
Y volvía a dirigir la mirada por la ventana, veía la orilla del lago en donde Harry y ella estuvieron sentados durante un rato especialmente feliz, un recuerdo que atesoraba y aunque había sucedido solo hace meses, parecía muy lejano, como si hubiera pertenecido a otra época. Siente que algo quema en su bolsillo, saca el galeón falso, deja salir un suspiro y embotella sus sentimientos, los Carrow han castigado a unos alumnos de primer año y harán a los de séptimo aplicarles el hechizo cruciatus, no es tiempo de estar comportándose como una tonta enamorada, Hogwarts la necesita.
FIN
Si dejan Review: les envió un dotación de por vida de Grageas Bertie Bott de todos los sabores.
Besos
Tete
