RENDEZ-VOUS AVEC TOI.
Dulce Muerte, llévame con él…
Ésas fueron las últimas palabras que dije en vida ante mi único hijo.
Ésas fueron mis palabras de despedida, fueron mi "hasta siempre, hijo mío" pero con la sola mención de ese bello ángel llamado Muerte.
Ahora camino en medio de una bruma espesa que tapa todo lo visible; sé que ante el Creador debo de responder por mis faltas, por muy graves que sean, pero sé que también logre reunirme con esa persona que me está esperando ahí, en algún lado de este lugar.
Amor mío…
Un susurro.
Un susurro dulce y tierno empecé a escuchar; reconocí esa voz, esa voz que había dejado de escuchar desde que la muerte le arrebató de mis brazos. Reconocí en ese instante que esa persona estaba cerca…
Que estaba ahí, frente a mí, con su dulce mirada sonriente dirigida a mí, un anciano que ha vivido una vida llena de miedos, pesares y sufrimientos, pero también llena de amor y felicidad a lado de esa persona con la que compartí todo y por todo.
Había rejuvenecido, lo sé porque aún en vida evocaba con fuerza esa imagen suya en su juventud: Sus cabellos rojos, su camiseta naranja y sus jeans azules; sus ojos verdes esmeraldas parecían tener más vida que cualquier cosa en este paraje.
Con esa mirada me pedía que me acercara.
Y lo hice.
Al principio era complicado debido a que sentía el peso de los años, pero conforme a cada paso que daba, el vigor de la juventud regresaba.
Para cuando me di cuenta, me vi otra vez joven, atlético, vigoroso… Mi cabello se tornaba nuevamente rubio. Me hallé vestido con la misa ropa que llevaba en mi juventud: Camiseta blanca, chaqueta roja a cuadros sin manga, pantalones raídos y tenis.
- ¿Por qué tardaste tanto? – me preguntó.
Le sonreí y respondí:
- Digamos que… Mi hora no llegaba aún hasta ahora.
Y él me sonrió.
Luego, tomados de la mano, empezamos a caminar juntos, a charlar sobre todo lo que había acontecido en nuestras vidas antes y después de la muerte.
Caminar para toda la eternidad junto a esa persona amada es, sin duda, la dicha más grande que se puede gozar después de la muerte.
Hola!
Tenía ganas de escribir esto, en serio! Para ello, me inspiré en este cuadro cuyo link les dejo aquí (favor de borrar los asteriscos al momento de copiar y pegar por favor):
**http:/www. /member_?mode=medium&illust_id=20649565 **
Al principio pensé en escribir un Ezio/Cristina basándome justamente en esa imagen de la cual ellos dos son protagonistas, pero decidí intentarlo con Kyle y Trent Boyett. ¿Por qué? No lo sé, simplemente se me ocurrió. O.o
Buenos, nos vidrios, pues!
