- Tienes que usar el poder que se te ha sido dado mas sabiamente!! - dijo Gandalf en un fallido intento de parecer calmado. Su interlocutora, mientras tanto, no prestaba oídos a lo que decía y se limitaba a voltear la mirada.
- Presta atención!!! - grito Gandalf sin poder controlarse mas - hice mal al esperar que tu actitud cambiara de la noche a la mañana - dijo para si, luego levantando los brazos en un gesto de desesperación exclamó - solo mira lo que causaste con el rey thranduil! Insultarlo de tal forma en su propio palacio!
La elfa de cabello negro frente a el trato de sonreír.... los sucesos en el palacio del Rey eran muy recientes, la actitud altanera de la joven había provocado al rey, a quien le gustaba tener todo bajo su mando, y cuando ella no respondió a sus preguntas y si lo hizo al final fue con una gran cantidad de ofensas adheridas a estas, criticando la 'curiosidad' del rey.
- Como se te ocurrió hacer tal cosa??!
- No sé.
- Qu---!!!! - Gandalf trataba de calmarse - por menores cosas el rey ha encerrado personas en sus interminables prisiones!
- Bueno, creo que debería 'controlarse' un poco mas! - dijo ella, en un tono medio irónico.
- Contro-...., tienes suerte de que no haya pedido mucho... mañana partirás conmigo hacia el oeste, regresaremos a Imladris permaneceremos un tiempo ahí, tengo cosas que conversar con Elrond - moviendo sus manos en un gesto que señalaba que a ella no debería importarle o preguntar nada sobre esos asuntos- y reunirme con alguien que creo prudente que conozcas, es joven aun para ti, pero tiene los pensamientos asentados y firmes convicciones espero que lo tomes como ejemplo, luego nos marcharemos al sur, te encargare a la dama y me marchare solo, no te veré mucho después de eso, pero estarás segura, eso era lo que tu gente quería, lo que tu familia pidió cuando te encomendaron a mi.
- Hablas del mortal?, crees que debo aprender de el?... paso...
- Qu---!!!
- Pero dime, y calma por favor... no me has informado aun de mi castigo?, permanecemos en las habitaciones de la casa del rey, comemos su comida... cual es mi castigo, porque debe haber alguno, si su cólera como dices no se aplaca fácilmente...
- .... no deberás acercarte a estas tierras sin su consentimiento... ni tampoco acercarte a ninguno de los suyos...
- ah-... - esto pareció dejarla sin palabras, luego solo asintió y camino hacia la puerta - supongo que mi castigo no empieza hoy, ya que debe ser pronunciado oficialmente por el rey mismo cuando partamos mañana... así que hoy beberé la belleza de su tierra y no la olvidare jamás...
- ahhh...- Nienya... espera... ten cuidado, aun sin la mención oficial de tu castigo por parte del rey y dejando de lado tu comportamiento ... ellos los Sindar... no te ven igual, sabes ya lo creen de ti?
- Si, me temen... verdad?
- Tal vez, siempre se teme a lo desconocido después de todo; tus ojos para algunos como los mismos de Arien, pueden ser para otros como el fuego de Morgoth, y eso es lo que temen, temen que tu raza los Avari, hayan sido controlados por los poderes oscuros, como cuentan los Lays mas antiguos. Muy pocos tienen el poder de ver los corazones, aun no desarrollas ese poder, pero lo harás, tal vez, algún día... por ahora... TEN CUIDADO
- Si, lo tendré, ... por eso veré a la dama verdad? Tu también temes... que pierda... el control - y con esto dejo la habitación.
En el bosque Nienya caminaba bajo la noche oscura sin luna pero con brillantes estrellas, como le hubiese gustado verlo, a él, la llamada 'luna' de los mortales, perdida en sus pensamientos camino por largo rato sin sentirlo, suavemente y sin ruido como solo lo saben hacer los elfos. Luego de horas tal vez, por que el cielo comenzaba a aclararse fue sacada bruscamente de sus pensamientos por una figura que se colocó frente a ella de un salto desde el roble al lado del río.
- disculpa, te vi llegar... y pensé...
- en asustarme?...
- no, lo siento - dijo Legolas inclinándose profundamente
- no hay necesidad de eso, yo soy la que te molesto, no pensé que alguien andaría por aquí, es muy alejado, casi fuera de los lindes de la tierra de tu padre.
- si, pero de vez en cuando traigo patrullas por aquí, lo vez, sobre el río?
- si, lo vi desde que pase por aquí con Gandalf, nos desviamos para evitar a los orcos, dijo que este era un paso seguro aparte de la ruta protegida.
- lo es, lo cuidamos mucho, es un lugar hermoso, es un roble joven el que cayo ahí por ataques orcos, aun lleva sus marcas, pero aunque tirado se resiste a morir lo vez?, es hermoso - dijo con expresión risueña, que cambio luego de un momento al dirigirse otra vez a Nienya- ven crucemos sobre el con cuidado hay algo aun mas hermoso del otro lado entre los matorrales... mi padre y mi madre me trajeron aquí cuando era muy joven, mi padre solía acompañarme... pero no lo hace mas, ... ven...
luego de cruzar por el roble el río la visión que tuvo al pasar los matorrales sobrepaso incluso la belleza que conocería en Lorien o en cualquier otro lugar...
- este lugar se llama Mirgon - dijo Legolas con gran solemnidad.
Una pequeña caverna, en la cual la luz del sol parecía haberse adelantado ya, una gruta que chorreaba agua, diminutas gotas que caían de innumerables cristales blancos de diversas formas que recubrían todo y el piso, al parecer tallado por manos elficas, era de mármol negro y contaba en palabras del alto elfico el inicio del mundo. Pero al fondo detrás de una espada incrustada en el mármol negro se encontraba una tumba, un simple montículo cubierto de flores, nada lo marcaba salvo la espada, como atraída por una fuerza magnética se acerco suavemente hacia la tumba y se sentó a un lado observando la espada, notando su intrincado diseño de hojas, orgullosa de que eso solo lo podían lograr las manos elficas, de que solo lo lograron los antiguos herreros, noto también que la espada poseía incrustado en el mango los cristales que revestían el sagrado recinto, tan cuidadosamente colocados en el mango, que parecía estar hecha completamente de frágil cristal; a otro lado del montículo Legolas silencioso, también se sentó, contemplándola solo a ella.
- estos son los cristales de los Istari, ni siquiera tienen valor para los Naugrim, solo los Istari los toman y los forjan para ellos, tallándolos o simplemente recibiéndolos como la caverna los entrega, los elfos no los tocan, y muy pocos vienen a este lugar salvo para defenderlo, casi todos han contemplado esta belleza, pero se contentan con vigilar y dejarla imperturbada, yo en cambio nunca me canso de ella, vengo siempre que puedo - terminó con una sonrisa, una mixtura sutil entre alegría y melancolía, y una felicidad que esperaba alcanzar.
Nienya había escuchado con el corazón abierto cada una de sus palabras, pero al momento de observar su expresión final no pudo resistir las otras que salían de sus labios, y finalmente las emitió.
- Quién esta aquí?, justo aquí? - dijo tomando su mano en la suya y colocándola en el centro del montículo acariciándola para darle seguridad, pero sin dejar en ningún momento la mirada de Legolas.
Luego de unos momento, luego de un intercambio de preguntas y respuestas en sus ojos respondió
- mi madre...
Basics: Siempre me pregunte... por qué Thranduil tiene ese carácter y su hijo le salió tan lindo??, dónde este la madre de Legolas? (la tuve que matar, porque la otra opción era que se fuera con otro rey *_* ja ja ) creo que me quedo bien... y qué le ocurre a Legolas luego de la derrota de Sauron?, así pues la historia es larga (aunque no tanto no desespereis...)
Mirgon, un nombre que parece que invente, a nos ser que exista ya o alguien lo haya enunciado antes significa, Joyas (rocas) escondidas Naugrim enano Arien, la istari que controla el curso del sol (o el sol, la sol....ehh, es mas fácil en ingles ya que no tienen pronombre definido! )
- Presta atención!!! - grito Gandalf sin poder controlarse mas - hice mal al esperar que tu actitud cambiara de la noche a la mañana - dijo para si, luego levantando los brazos en un gesto de desesperación exclamó - solo mira lo que causaste con el rey thranduil! Insultarlo de tal forma en su propio palacio!
La elfa de cabello negro frente a el trato de sonreír.... los sucesos en el palacio del Rey eran muy recientes, la actitud altanera de la joven había provocado al rey, a quien le gustaba tener todo bajo su mando, y cuando ella no respondió a sus preguntas y si lo hizo al final fue con una gran cantidad de ofensas adheridas a estas, criticando la 'curiosidad' del rey.
- Como se te ocurrió hacer tal cosa??!
- No sé.
- Qu---!!!! - Gandalf trataba de calmarse - por menores cosas el rey ha encerrado personas en sus interminables prisiones!
- Bueno, creo que debería 'controlarse' un poco mas! - dijo ella, en un tono medio irónico.
- Contro-...., tienes suerte de que no haya pedido mucho... mañana partirás conmigo hacia el oeste, regresaremos a Imladris permaneceremos un tiempo ahí, tengo cosas que conversar con Elrond - moviendo sus manos en un gesto que señalaba que a ella no debería importarle o preguntar nada sobre esos asuntos- y reunirme con alguien que creo prudente que conozcas, es joven aun para ti, pero tiene los pensamientos asentados y firmes convicciones espero que lo tomes como ejemplo, luego nos marcharemos al sur, te encargare a la dama y me marchare solo, no te veré mucho después de eso, pero estarás segura, eso era lo que tu gente quería, lo que tu familia pidió cuando te encomendaron a mi.
- Hablas del mortal?, crees que debo aprender de el?... paso...
- Qu---!!!
- Pero dime, y calma por favor... no me has informado aun de mi castigo?, permanecemos en las habitaciones de la casa del rey, comemos su comida... cual es mi castigo, porque debe haber alguno, si su cólera como dices no se aplaca fácilmente...
- .... no deberás acercarte a estas tierras sin su consentimiento... ni tampoco acercarte a ninguno de los suyos...
- ah-... - esto pareció dejarla sin palabras, luego solo asintió y camino hacia la puerta - supongo que mi castigo no empieza hoy, ya que debe ser pronunciado oficialmente por el rey mismo cuando partamos mañana... así que hoy beberé la belleza de su tierra y no la olvidare jamás...
- ahhh...- Nienya... espera... ten cuidado, aun sin la mención oficial de tu castigo por parte del rey y dejando de lado tu comportamiento ... ellos los Sindar... no te ven igual, sabes ya lo creen de ti?
- Si, me temen... verdad?
- Tal vez, siempre se teme a lo desconocido después de todo; tus ojos para algunos como los mismos de Arien, pueden ser para otros como el fuego de Morgoth, y eso es lo que temen, temen que tu raza los Avari, hayan sido controlados por los poderes oscuros, como cuentan los Lays mas antiguos. Muy pocos tienen el poder de ver los corazones, aun no desarrollas ese poder, pero lo harás, tal vez, algún día... por ahora... TEN CUIDADO
- Si, lo tendré, ... por eso veré a la dama verdad? Tu también temes... que pierda... el control - y con esto dejo la habitación.
En el bosque Nienya caminaba bajo la noche oscura sin luna pero con brillantes estrellas, como le hubiese gustado verlo, a él, la llamada 'luna' de los mortales, perdida en sus pensamientos camino por largo rato sin sentirlo, suavemente y sin ruido como solo lo saben hacer los elfos. Luego de horas tal vez, por que el cielo comenzaba a aclararse fue sacada bruscamente de sus pensamientos por una figura que se colocó frente a ella de un salto desde el roble al lado del río.
- disculpa, te vi llegar... y pensé...
- en asustarme?...
- no, lo siento - dijo Legolas inclinándose profundamente
- no hay necesidad de eso, yo soy la que te molesto, no pensé que alguien andaría por aquí, es muy alejado, casi fuera de los lindes de la tierra de tu padre.
- si, pero de vez en cuando traigo patrullas por aquí, lo vez, sobre el río?
- si, lo vi desde que pase por aquí con Gandalf, nos desviamos para evitar a los orcos, dijo que este era un paso seguro aparte de la ruta protegida.
- lo es, lo cuidamos mucho, es un lugar hermoso, es un roble joven el que cayo ahí por ataques orcos, aun lleva sus marcas, pero aunque tirado se resiste a morir lo vez?, es hermoso - dijo con expresión risueña, que cambio luego de un momento al dirigirse otra vez a Nienya- ven crucemos sobre el con cuidado hay algo aun mas hermoso del otro lado entre los matorrales... mi padre y mi madre me trajeron aquí cuando era muy joven, mi padre solía acompañarme... pero no lo hace mas, ... ven...
luego de cruzar por el roble el río la visión que tuvo al pasar los matorrales sobrepaso incluso la belleza que conocería en Lorien o en cualquier otro lugar...
- este lugar se llama Mirgon - dijo Legolas con gran solemnidad.
Una pequeña caverna, en la cual la luz del sol parecía haberse adelantado ya, una gruta que chorreaba agua, diminutas gotas que caían de innumerables cristales blancos de diversas formas que recubrían todo y el piso, al parecer tallado por manos elficas, era de mármol negro y contaba en palabras del alto elfico el inicio del mundo. Pero al fondo detrás de una espada incrustada en el mármol negro se encontraba una tumba, un simple montículo cubierto de flores, nada lo marcaba salvo la espada, como atraída por una fuerza magnética se acerco suavemente hacia la tumba y se sentó a un lado observando la espada, notando su intrincado diseño de hojas, orgullosa de que eso solo lo podían lograr las manos elficas, de que solo lo lograron los antiguos herreros, noto también que la espada poseía incrustado en el mango los cristales que revestían el sagrado recinto, tan cuidadosamente colocados en el mango, que parecía estar hecha completamente de frágil cristal; a otro lado del montículo Legolas silencioso, también se sentó, contemplándola solo a ella.
- estos son los cristales de los Istari, ni siquiera tienen valor para los Naugrim, solo los Istari los toman y los forjan para ellos, tallándolos o simplemente recibiéndolos como la caverna los entrega, los elfos no los tocan, y muy pocos vienen a este lugar salvo para defenderlo, casi todos han contemplado esta belleza, pero se contentan con vigilar y dejarla imperturbada, yo en cambio nunca me canso de ella, vengo siempre que puedo - terminó con una sonrisa, una mixtura sutil entre alegría y melancolía, y una felicidad que esperaba alcanzar.
Nienya había escuchado con el corazón abierto cada una de sus palabras, pero al momento de observar su expresión final no pudo resistir las otras que salían de sus labios, y finalmente las emitió.
- Quién esta aquí?, justo aquí? - dijo tomando su mano en la suya y colocándola en el centro del montículo acariciándola para darle seguridad, pero sin dejar en ningún momento la mirada de Legolas.
Luego de unos momento, luego de un intercambio de preguntas y respuestas en sus ojos respondió
- mi madre...
Basics: Siempre me pregunte... por qué Thranduil tiene ese carácter y su hijo le salió tan lindo??, dónde este la madre de Legolas? (la tuve que matar, porque la otra opción era que se fuera con otro rey *_* ja ja ) creo que me quedo bien... y qué le ocurre a Legolas luego de la derrota de Sauron?, así pues la historia es larga (aunque no tanto no desespereis...)
Mirgon, un nombre que parece que invente, a nos ser que exista ya o alguien lo haya enunciado antes significa, Joyas (rocas) escondidas Naugrim enano Arien, la istari que controla el curso del sol (o el sol, la sol....ehh, es mas fácil en ingles ya que no tienen pronombre definido! )
