(A/N): ¡Hola a todos! Bueno, esta será mi siguiente historia... La primera de varias que pienso publicar en este mes. Pero bueno, es mi primer intento de Kogan (Si ya me conocen sabrán que mi OTP es Kames). Bueno, ya saben, es mi primer Kogan y no sé si lo estaré haciendo bien... Sus opiniones cuentan.
La mayoría de esta historia estará narrada en algo así como un Flashback (Ya sabrán por qué). Pero mientras tanto me gustaría que lean este capítulo y me digan lo que piensan.
DISCLAIMER: Ni Big Time Rush, ni ninguno de los personajes me pertenece. No hago esto con fines de lucro.
ES LA GUERRA,
Prólogo/Capítulo 1: El inicio ¿O el final? de todo.
Era la segunda vez en la semana que estarían en la oficina del director. Últimamente se estaban portando muy mal, pero esta definitivamente era la peor cosa que habían hecho. El director estaba furioso. Estaban completamente seguros de que los expulsarían, pero tal vez, pudieron haber logrado su objetivo. Estaban en la sala de espera, el sonido incesante del teclado de la secretaria haciendo el reporte era incómodo para todos, pero lo ignoraban para sumergirse en alguna forma de matar el tiempo.
James daba vueltas por todo el lugar, estaba más furioso que asustado. No tenía por qué estar asustado, tenía la certeza de que los cuatro saldrían de esta sin problemas, aún quería seguir 'Destruyendo' la escuela, aprovechó que su cuerpo estaba completamente pintado de negro y se recostaba de las paredes para ensuciarlas un poco. Su última idea fue arrojarse al suelo y empezar a ensuciarlo también.
"¿Podrías dejar de moverte?" le preguntó Logan fastidiado, sin duda era quien estaba más nervioso de los cuatro.
"No, el plan aún sigue en marcha para mí" respondió el empapado de pintura continuando con su cometido.
La secretaria simplemente les ignoraba escribiendo el reporte. Kendall ideaba alguna excusa que fuese creíble, pero lo más adecuado sería decir toda la historia para ser comprendidos. Carlos, era el más calmado de todos. Estaba en silencio jugando con su celular, aunque aún así deseaba patear el trasero de todos aquellos inútiles que provocaron que ahora esté aquí junto con sus mejores amigos a punto de ser expulsados.
"¿Qué vamos a hacer?" preguntó Logan a Kendall, sacándolo de sus pensamientos.
"Decir toda la verdad, no hay de otra" respondió observando a los demás chicos, el empapado y el entretenido asintieron. Logan frunció el ceño ante eso.
"¿Estás bromeando, verdad?" preguntó. El rubio negó con la cabeza.
"Al menos ya se dirigen la palabra" susurró Carlos a James el cual asintió conforme.
"¡Pero no podemos..!" empezó Logan pero guardó silencio inmediatamente.
La puerta se abrió, la señora Knight había llegado. Los cuatro se sintieron un tanto avergonzados frente a la mujer, no les gustaba molestarla pero la idea de que ella fuese la única madre de los chicos en venir no era tan mala. En ese momento era quien estaba a cargo de todos ellos.
Kendall y Logan abandonaron su conversación y guardaron silencio, Carlos guardó su celular y James dejó de ensuciar todo el lugar, aunque ya había hecho un buen trabajo con las paredes. La señora Knight les dedicó una mirada entre compasiva y reprobante.
"¿Qué hicieron ahora?" preguntó después de suspirar.
"¡Juro que no fue nada malo!" empezó Logan, el más asustado de los cuatro "Simplemente nosotros queríamos..." empezó a admitir pero fue interrumpido.
"Pueden pasar" interrumpió la secretaria señalándoles la puerta para pasar a la oficina del director Simons. Los cuatro chicos dejaron a la señora Knight ser la primera en entrar, fue seguida por el aún empapado de pies a cabeza James, y los demás que evitaban pisar los charcos negros que dejaba James a su paso.
El director Simons estaba sentado detrás de su escritorio, su rostro ahora reflejaba paciencia. Hace un rato estaba descarriladamente furioso y ahora se veía tranquilo, los chicos esperaban que la tranquilidad sea duradera durante el momento que pasarían allí.
"Buenos días, señor Simons" habló la mujer dándole la mano al director, el cual respondió el saludo no muy gustosamente.
"Señora Knight" habló el hombre después de terminar el apretón de manos "Lamento decirle que no es un placer verla por aquí nuevamente. El comportamiento de estos chicos va de mal en peor" habló el hombre.
"No entiendo que les está pasando, no son malos chicos" respondió la mujer observando a los cuatro que estaban tras ella. "¿Qué hicieron ahora?" preguntó a los muchachos.
"Pues verá, el día de hoy han realizado varios actos de vandalismo, una pelea en los pasillos y una guerra de comida en la cafetería" respondió el director indignado.
"Sabemos que todo estuvo mal pero podemos explicarlo todo" habló Kendall.
"¿Podrían decirme la razón por la cual están sembrando el desorden en mi escuela?" preguntó el director aún indignado.
Los cuatro se observaron entre sí, para luego observar a su líder, Kendall. Este asintió y dio un paso hacia adelante.
"Es una muy larga historia" respondió el rubio.
"Pues tenemos todo el día, estoy dispuesto a escucharlo todo" alegó el director.
El chico tomó asiento al lado de su madre, observó nuevamente a sus amigos los cuales asintieron nuevamente. "Mire, todo comenzó hace unos meses..." empezó.
La luna se reflejaba sobre las aguas de la piscina. Los cuatro estaban sentados en el borde apreciando aquel reflejo en silencio. Era el último día del verano, al día siguiente terminaría la libertad y deberían regresar a la escuela. Aunque, por primera vez, no parecía mala idea para ninguno de ellos. Todos ellos estaban maquinando sus planes que pondrían en marcha al día siguiente. Tantas ideas, tantos deseos. Definitivamente la escuela no sería el lugar perfecto, pero era un nuevo comienzo, como ellos pensaban.
"¿Qué tienen planeado para mañana?" preguntó Logan, el inteligente de los cuatro que ya tenía la completa seguridad de sus metas para el nuevo año.
El primero en responder fue James, por supuesto. "Como siempre, voy a ser deseado" respondió con una sonrisa en su rostro.
"¿Serás 'deseado'?" bromeó Carlos imitando el tono del primero.
"Seré deseado" recalcó "Es decir, ¿Acaso no ven esta piscina? ¿O ese Jacuzzi de allá? seré el rey de las fiestas" respondió arrogantemente. Logan bufó por la nariz al escuchar semejante respuesta. "A ver, genio, ¿Tu qué pretendes hacer?" preguntó.
"Voy a superar mi récord de calificaciones. Este año sacaré diez en todas las asignaturas, y como mínimo... Nueve" pensó.
"¡Aburrido!" vociferó James "¿Y tu Carlos?" preguntó al latino sentado a su lado.
"Yo conseguiré una novia... La llevaré al cine, le compraré regalos..." respondió el pequeño emocionado.
"No tan aburrido, te ayudaré a conseguirla en una de las fiestas" respondió James.
"¡Genial, hazlo pronto!" dijo el pequeño una sonrisa.
"¿Y tu que harás Kendall?" preguntó James al rubio el cual no había dicho mucho aquella noche "No me digas que vas a pasar todo el tiempo metido en la pista de Hockey como el año pasado"
El rubio negó con la cabeza, aún pensativo "Sólo pienso ser yo mismo" respondió dedicando una mirada a sus amigos, los cuales le observaban curiosos.
"Suerte con eso" respondió James levantando una ceja.
"¿Hay algo malo con eso?" preguntó Kendall.
"No... Bueno, sí... Siendo tú mismo no ganarías mucho, todos te pisotearían, primero debes de ganar lo que quieres y luego debes de ser lo que quieras ser" habló James con seguridad.
"¿Pero de qué estamos hablando? Por favor, chicos, sólo es un nuevo año escolar en la misma escuela con las mismas personas, ¿Qué cambiará?" reaccionó Kendall ante el comentario de James.
"El año" respondió Logan.
"¿Nosotros?" dudó Carlos.
"La presión" respondió James llamando la atención de todos "Ahora debemos esforzarnos con más fuerza para obtener eso que queremos y alcanzar nuestras metas" terminó. Una sonrisa se dibujaba en el rostro de los otros tres. "Ahora, ¿Quién quiere ordenar Pizza?" preguntó el castaño.
"¡Yo!" respondieron los demás.
El despertador martillaba nuevamente haciendo ese ruido incómodo. No sonaba desde hace varios meses, en definitiva ahora sonaba peor que el año anterior, estaba renovado. Su incomodidad era obvia, aunque aún no comenzaba el día por completo, sabía lo que se venía: Escuela, tarea... Y nada de libertad. El llamado de su madre le hizo abrir los ojos y levantarse.
"¡Kendall, despierta!" gritó la mujer desde abajo. El chico tambaleó un poco mientras se abría paso por su habitación hasta el baño. Se observó unos segundos en el espejo para apreciar una piel un tanto bronceada por el sol que había tomado en los últimos meses, un pelo dorado que brillaba cada vez más y sus ojos verdes que no realizaban contraste alguno.
Después de alistarse y vestirse con una camisa azul oscuro, que fue lo primero que encontró, no le prestó atención alguna a su cabello el cual estaba un poco despeinado, pero lucía bien. Empacó su mochila sin saber que llevar o que no y se dirigió a la cocina a encontrarse con su madre.
"Hola mamá" le dijo a la mujer para después depositar un beso en su mejilla.
"Buenos días, cielo" respondió la mujer.
El chico se dirigió al refrigerador "¿Dónde está Katie?" preguntó distraído observando lo que había dentro.
"Se fue temprano a tomar el autobús" respondió.
"¿Y no me esperó?" preguntó divertido levantando la vista.
"No quiere ser vista contigo" respondió su madre rodando los ojos.
"Se arrepentirá de eso" habló el chico divertido llenando un vaso de jugo de naranja. "James dijo que nos vendría a buscar hoy en su auto... Tú sabes, la carcacha del '98"empezó a describir cuando escuchó un clarkson afuera. "Debe ser él..." observó el reloj "¡Adiós, mamá!" dijo tomando un enorme sorbo del vaso caminando hasta la puerta, al abrirla y observar lo que estaba estacionado frente a su casa no tuvo más remedio que escupir todo el jugo.
Frente a él se encontraba un Dogde Challenger convertible del año 2011. Sus amigos estaban en el auto con la misma emoción del rubio mientras James estaba al volante.
"¿De dónde sacaste esto?" preguntó Kendall emocionado acercándose al auto que significaba la perfección para sus ojos, hace unos meses había trabajado en un taller y desde entonces se encontraba fascinado hacia cualquier auto.
"Mamá me lo compró" respondió James sacando unas gafas de sol.
"¿Cuándo?"
"Esta mañana... Ahora sube" respondió el castaño y Kendall de un solo movimiento ya se encontraba en la parte trasera del vehículo al lado de Carlos. El motor emitió un perfecto rugido y arrancaron. "Este será el paso número uno para gobernar la escuela, el mejor auto de todos" habló James.
"Se lo está tomando muy en serio" susurró Logan a Carlos y Kendall volteándose desde el asiento de copiloto. Ambos asintieron y se quedaron en silencio.
"¿Y cuál es el siguiente paso?" preguntó Carlos con curiosidad.
"Ya lo verás" respondió el castaño con seguridad.
Su llegada a la escuela no pasó desapercibida, al estacionarse y bajar del nuevo y lujoso auto de James las miradas de todos los presentes se intercalaban entre el auto y los chicos. El primer paso de James funcionó a la perfección.
Después de buscar los horarios, los cuatro discutían en los pasillos sobre las clases que tenían juntos y las que no.
"Estoy sólo en química" habló Kendall.
"Los cuatro estaremos juntos en geografía" continuó Carlos.
"Y en matemáticas" agregó James.
"Tendré inglés con Carlos y James y estaremos juntos en arte" dijo Logan hablando con Kendall.
"Genial, eres el más inteligente y solo tendré arte contigo" bufó Kendall para después hacer una mueca y guardar su horario. En ese momento el timbre sonó "¿Cuál es la primera clase?"
"Geografía" respondieron los otros.
(A/N): Sí, ese fue mi desabrido inicio ._. pero prometo algo mejor para el resto de la historia, eso lo aseguro. Quiero dar las gracias a Danrusherboy quien me inspiró a escribir un Kogan y a HikariXrossRushLove por ayudarme a escribir con la tercera persona, espero estar haciéndolo bien :3
Un besito, Liz.
