Feliz cumpleaños.
High School Musical y sus personaje le pertenecen a Disney.
Y entonces cumpliría años. El terror invadió mi mente: me haría más vieja, más de lo que ya era. Era… cruel.
¿Por qué no podíamos ser siempre jóvenes?, ¿por qué el tiempo no se detenía aquí y ahora?
Las horas pasaban lentamente; segundo a segundo, minuto a minuto, y mi ofuscación por el tema de crecer se hacía más grande.
Debía admitirlo, nunca había tenido tanto problema en crecer y tener un año más de vida, ¡cómo podría ser eso! La edad nos brindaba sabiduría y nos hacía mejores, pero en esta ocasión… no lo quería, no quería cumplir años.
Era algún tipo de temor psicológico, porque no temía envejecer en sí. No. A lo que temía era a otra cosa, a alguien. A alguien con el nombre de Troy.
Suspiré mientras observaba el cielo desde mi habitación.
Lo extrañaba demasiado. Sus abrazos, sus besos, sus sonrisas. La forma en que me miraba y cómo me hacía sentir: enamorada y en las nubes. Él se había ido de viaje con el equipo y yo aquí, sola.
"No te preocupes, no estarás sola" me dijo antes de irse hacía ya dos días, "Taylor te acompañará, ¡ya verás cómo ni tiempo tendrás de extrañarme!". Sí, claro, 'ni tiempo', ¿entonces qué hacía todo el día en mi cabeza? Taylor me había distraído sacándome de mi casa, decía que no quería que me convirtiera en zombie por los siguientes días, pero cada cosa que hacía me provocaba imaginar 'esto lo haría él así'.
Sonreí. Era lo malo de estar enamorada.
Tarareé cualquier sonido que me viniera a la mente, me enojé cuando descubrí que cantaba la canción con la que nos conocimos. Aventé mi almohada contra la pared y me tiré en la cama. ¡Ya estaba cansada! Sería tan sólo 1 día, 24 horas, 1440 minutos, 86400 segundos… un solo día especial en todo el año.
Y sería sin él.
Cerré los ojos antes de comenzar a llorar. Por eso me encontraba así, triste y con ganas de romper las fotografías de ambos que adornaban mi habitación. Me sentía traicionada. Sabía que era una obligación de él ir al campeonato, debía conseguir la beca para la universidad. No era tan tonta como para no entenderlo –menos con las calificaciones que tenía-, pero dolía. Y ese tipo de dolor es difícil de meter en un problema matemático para sacar cuando sanaría.
En algún momento antes de que fuera medianoche me dormí, y soñé con él. Con su voz cuando cantaba, cuando lo hacía sólo para mí. Con su rostro un poco sonrojado y con esa mirada que me cautivaba. Fue entonces cuando escuché un ruido afuera de mi habitación. Me senté con rapidez para ver una luz que llegaba desde mi ventana.
Corrí hasta allá con el corazón en la garganta intentando gritar y llorar… de felicidad.
Un par de ojos azules me veían desde el otro lado del vidrio con un pastel en las manos. Sonreía.
—Feliz cumpleaños, Gabriella.
¡Hola!
Es la primera vez que hago un FanFic de HSM así que no estoy muy familiarizada con sus personajes, si bien me he visto las dos películas muchísimas veces no es de las cosas que más me inspiran para escribir xD!
El FanFic va dedicado a mi prima, Marissa, quien cumple añitos hoy n,n: Mar, feliz cumpleaños. Te quiero muchísimo.
Cualquier comentario, denle en Go ;)!
Gracias a Sandritah por betearlo :D.