Y Alec?
Voltee a ver a Alec, mientras el cambiaba el canal de la televisión. Mi amigo se habia dejado crecer la barba y el cabello. Yo odiaba esa nueva apariencia. Ocultaba su gran atractivo. Su sonrisa quedaba oculta por todo ese pelo. Sus ojos azules aun brillaban al verme.
Se acerco y me dio un beso en la mejilla, su barba me hizo cosquillas.
-Van a dar una muy buena película en el canal 135 -me dijo con una sonrisa y dejandose caer a mi lado en el sofa-. Quieres que vallamos a la tienda a comprar botanas y bebidas para verla?
-Claro, si quieres - haría cualquier cosa que el me dijera.
Si el un dia llegara y me dijera: " Saltemos de un puente, tomados de la mano, y así estaremos toda la eternidad juntos" yo le contestaría: "De cual puente?" Sin siquiera pensarlo.
Cuando fuimos a la tienda, el no quiso ir conmigo en mi viejo camaro azul. Se subió a su moto y me siguió hasta la licorería que tambien tenia servicio de abarrotes.
Yo fui la primera en entrar y tome una canastilla azul, y dentro puse una bolsa de frituras - las favoritas de Alec-, una botella de vino blanco, otra de tinto, cerveza. En la pequena area de carnes frias, pedí un cuarto de kilo de jamón y un cuarto de kilo de queso.
Siempre que Alec iba a mi casa haciamos un pequeño picnic, en el suelo alfombrado de mi habitación. Nos embriagabamos y hacíamos algo asi como una pijamada.
Nunca se habia propasado conmigo, a pesar de que yo estaba mas que dispuesta a llegar hasta el final. La unica vez que nos besamos, el se sintió muy mal por que yo tenia diecisiete y el veintiuno. Estabamos algo ebrios y al día siguiente yo fingí no recordar nada.
Alec merodeo por los pasillos de la licorería y solo me sonreía, mientras yo hacia las compras de nuestro picnic. Como yo conocía al dueño del establecimiento, le pedí de favor que me dejara usar su baño, el amablemente me dio la llave y entre.
Cuando me estaba lavando las manos, escuche un alboroto, luego un disparo.
Silencio.
De nuevo mas gritos y a lo lejos escuche el rugido parecido al de una moto.
Me asuste y no quise salir del baño. No me di cuenta cuando empeze a llorar, pero no podía parar. Recorde que Alec estaba afuera, esperandome. La sirenas de la policía, me aturdieron. Los policías hablaban y gritaban por sus radios. Cuando deje de llorar, o al menos deje de sollozar. Sali del baño.
Tres policías me apuntaron con sus armas y me paralice.
-No! -grito Benjamin, el dueño del lugar a sus espaldas-. No le hagan nada, ella ni siquiera vio nada.
Los policías dejaron de apuntarme y Benjamin se me acerco.
-Estas bien, niña?
Asentí.
-Que ocurrio?
-Dos tipos quisieron asaltar el lugar. Uno moreno de ojos cafes, alto. Y otro un poco mas bajo de cabello rubio y desordenado, traia barba y tenia los ojos azules. Traía una camisa azul oscuro y jeans. Cuando lo vi me dio muy mala espina, y mas cuando vi como te observaba.
-Que?
Alec! El tipo de barba y camisa azul era Alec!
Había querido asaltar el lugar?!
-Señorita voy a tener que tomar su declaración- me dijo de mala gana uno de los policías.
Me pregunto que hacia ahí. Y le señale la canasta con los artículos que ya había tomado, que yo había dejado en el mostrador de la caja registradora.
-Con quien venia?
-Sola - mentí.
-Por que llevaba todo eso?
-Tengo una visita mañana - mentí de nuevo
-Quien la va a visitar?
-Esto es relevante para la investigación?
-Queremos saber todos los detalles.
Suspire.
-Vivo con mi madre y mi papa va a venir de visita. Mis padres se divorciaron cuando yo era pequeña. Quiere otro detalle?
-No -contesto molesto y avergonzado-. Por que estaba en el baño?
-Por que quería hacer del uno urgentemente.
Sin que me preguntara agregue:
-Me estaba lavando las manos, escuche un alboroto y un disparo. Luego silencio, después escuche mas voces. Me asuste, llore. Escuche las sirenas. Me controle, salí del baño y usted y sus amigos me apuntaron con sus armas y ahora me estan interrogando. Algo mas?
-Entonces usted no vio nada?
-No.
Después de eso me hizo firmar unos papeles y mi declaración y me dejo ir. Subí a mi auto y conduje por los alrederores. Vi a Alec vestido direrente. Como un verdadero motociclista, montado en una Harley Davidson. Trate de seguirlo por las transitadas calles de la ciudad, pero conducia muy de prisa.
Despues de hora y media de persecusion fallida, decidí irme a casa.
No le conte a mi mama lo que ocurrio cuando regreso del trabajo.
