Hola, mi nombre es Mafer, y he aquí una historia que se me ocurrió recientemente sobre mi videojuego favorito, The legend of zelda Twilight Princess, pero me enfocare a revelar detalles de lo que me habría gustado que sucediese después del juego, Midna es una enigmática persona y es muy importante en este fanfic por no decir que es mi protagonista.

La saga no me pertenece ni los personajes salvo algunos nuevos que introduje, pero la historia es 100 % mía, tratare de ser constante y no duden en sugerir cualquier cosa nvn

Eso es todo, QUE COMIENCE EL FAN FIC (la audiencia enloquece)


Capitulo 1

¿Qué sucede cuando vuelves de una metamorfosis física que se envuelve en todo tu cuerpo hasta ingresar a lo más profundo de tus sentimientos? ¿Por qué todas estas emociones de melancolía y tristeza inundan mi ser justo cuando he vuelto a la normalidad? Bueno he me aquí de vuelta a mi reino, yo Midna la emperatriz del crepúsculo he vuelto a mi reino, sin embargo he sufrido una transformación, y me he separado de alguien especial. He cambiado. Pero algo me llama, alguien, ¿el?...

Esa princesa, Enigmática:

Una lagrima rueda sobre mi mejilla y alcanzo a tomarla con mis largos y finos dedos para luego dejarla ir en dirección al espejo de crepúsculo, esta poco a poco levita frente a mí y choca justo en el centro de la placa translucida, rompiéndola desde su radio y haciendo mil pedazos a el único portal útil para llegar al mundo de la luz, miro de reojo a aquel chico rubio, aquel que me ayudo a lo largo de esta aventura, aquel de quien me acostumbre tanto… Un temblor recorre mi columna vertebral al verlo reaccionar a la ruptura del espejo, y así como el temblor termina su camino, el nudo en mi garganta se desata para formar las palabras que diré para despedirme –Link, yo…- no puedo pronunciar esas tres palabras – nos vemos- se redujeron a dos que sugieren ser mentira porque en realidad no sé si nos volveremos a encontrar de nuevo.

Pero era necesario romper el espejo, porque nuestros mundos están bajo aviso para ser separados, y solo mi voluntad es capaz de deshacer ese lazo que nos une, y decido romperlo, sin más. Antes de que Link se acerque, subo las escaleras que conducen a mi pasaje de salida a toda prisa; siento las piernas de plomo en el último escalón pero lucho contra mi voluntad y finalmente soy absorbida por la gran placa de piedra negra, primero mis pies, luego mi cintura y poco a poco me desintegro, la brisa es cálida, sin embargo es la última que rozara mi rostro de ser crepuscular.

Y con la frente en alto sonrió, tanto a la reina de hyrule como a su héroe, fue bueno conocerlos. Pero ahora ya no hay vuelta atrás, porque el paisaje desértico ha desaparecido y fue remplazado por el eterno atardecer del mundo del crepúsculo, mi hogar. Mas lagrimas corren por mis mejillas, se deslizan por mi mentón y caen a la tierra roja, he sido una egoísta, por pensar en querer permanecer a lado de alguien que no era para mí e imaginar cómo le doy la espalda a mi pueblo. Mis piernas me fallan y se doblan dejándome caer sobre mis tobillos, sollozo lentamente y en silencio, no por el sino por mí, he sido egoísta.

Desde un inicio supe que una vez después de obtener lo que quería y sacar provecho de los nobles seres de luz, volvería a mi reino, pero jamás determine que podría tomar cariño a las pequeñas maravillas de un mundo distinto al mío, nunca pensé que dolería tanto volver. Continuo, ahora me he calmado, pero mis mejillas siguen húmedas.

-Su majestad- susurra una voz joven y suave, pero me cuesta reconocerla, es cálida y alentadora como si de repente me impulsaran a moverme de mi lugar, miro por el rabillo del ojo y ahí está el, Todd, mi fiel lacayo, es joven tiene apenas 18 años, pero sin embargo nunca he subestimado sus tácticas para gobernar y mucho menos sus consejos. Su cabello es el más rojizo de por aquí, y las líneas azules lumbrosas características de los seres crepusculares, solamente le cubren una pierna y el resto es piel azulada y negra, lleva una capucha negra con bordes azules en las extremidades de las mangas y en el cuello, y en la cintura lleva atado una especie de prenda similar a la mía, solo que no llega a los tobillos, sino que solo cubre las rodillas, tiene cierto aire arrogante pero con la perspicacia de un caballero. Ese es Todd y no deja de llamarme entre mis sollozos.

-Midna, has vuelto- dice con un toque de alegría, pero retoma la conciencia, no es costumbre que los lacayos se expresen coloquialmente con la realeza, pero a mí no me importa, sin embargo a él si, por lo tanto retoma sus modales.- ¿Qué le ha sucedido?, quiero decir, todos aquí la hemos pasado mal, pero al fin ha vuelto a su forma original- veo como me examina de pies a cabeza a medida que me levanto y contengo más lágrimas, es de mi estatura quizá unos pocos centímetros menos ahora que me doy cuenta.

-Tranquilo Todd, estoy bien, ciertamente he vuelto a ser la misma, pero aun no me acostumbro a la forma- respondo, al parecer la respuesta no logra calmarlo tanto pero si lo suficiente, me mira a los ojos durante unos segundos y luego suspira aliviado.

-Bueno, está bien, entonces- tiende una mano hacia mí y sonríe con esa amplia dentadura blanca – acompáñeme su majestad, durante su ausencia después de luchar contra Zant, la ciudad entera ha reconstruido los edificios que fueron destruidos y nos hemos encargado de todos los monstruos que penetraron el área del edificio principal, por eso mismo preparamos un banquete en la espera de su llegada y en honor a nuestra victoria- concluye.

Valla que es bueno volver a los lujos y eficiencia de la gente del mundo del crepúsculo, les echaba de menos…

-Bueno, eso es estupendo- digo sonriendo abiertamente –pero basta de los buenos modales, ya sabes que pienso de ellos- me digo rechazando la mano del chico Todd que seguía tendida en la espera de una respuesta positiva.

-sí, si "La educación es hipocresía envuelta en papel de envolver"- el chico imita las palabras que solía decir hace mucho tiempo, cuando apenas iniciaba mi reinado, nos reímos juntos y seguimos caminando hasta la puerta principal del castillo.

Al parecer no hay nadie en los jardines reales que rodean los edificios del castillo, seguramente todos estén dentro festejando la victoria, así que intento despreocuparme temporalmente de lo que evita que mi mente se calle y entramos al comedor principal del complejo, donde noto tantas caras familiares reunidas para celebrar, todas con ese característico color azulado grisáceo del cual ya me había desacostumbrado un poco de ver, hay gente de muchas edades, en su mayoría todos son jóvenes puesto que no hay una tasa de mortalidad muy alta por las batallas.

El comedor principal es de techos altos y paredes grises con grabados azules, la energía de Tao le brinda una fría luz azulada a estas líneas, hay varias mesas de piedra grises para 20 personas cada una, fácilmente podría entrar toda la población del mundo del crepúsculo aquí pues somos pocos "decentes" aquí así que entrarían sin problemas. No hay ventanas, en su lugar hay grandes huecos que dejan la luz anaranjada del exterior entrar por ellas.

Distingo a todos, y ellos a mí, me reciben con sonrisas complacientes, miradas alegres y abrazantes por mi llegada, he vuelto y mi gente está reunida, este es mi pueblo y yo su reina.

Todd que se encuentra a mi lado, se une a la audiencia y todos juntos hacen una reverencia, aunque saben que me disgusta tanta modestia, se inclinan rápidamente para luego abrir paso a Evelin, la chica que siempre es buena para los discursos, y en esta ocasión parece que es necesario uno de bienvenida.

La chica es un tanto bajita, para nuestra población estirada es una chica pequeña, delgada de ojos azules brillantes y llamativos, su cabello rubio anaranjado solo le llega a la barbilla y usa una capucha similar a la de Todd. Todos los presentes forman un semicírculo en la sala y yo me quedo donde estoy, para luego sonreír a la chica antes de que empiece.

-Bueno, creo que ya saben todos porque estamos reunidos aquí- siempre tan simpática y con ese toque de arrogancia en su voz.- A lo largo de estos años, hemos notado como el consejero real, Zant, se ha vuelto un usurpador, y vimos como dio la espalda a toda nuestra raza por sus acciones separatistas, vimos como derroco a nuestra propia emperatriz y la desterró de nuestro mundo, y no solo eso, causó estragos en tierras desconocidas para nosotros y se hiso de su propio poder para sacar provecho- Todos asienten conforme Evelin enumera las fechorías de Zant, yo también asiento un tanto molesta, aunque hay algo que mi gente no sabe y es que Zant no fue absorbido por su propio poder, sino que uso el de un enemigo mayor .

- Y cuando creíamos haber perdido la esperanza para el pueblo y a nuestra líder, Zant seguía manipulándonos, pero luego de todos sus crímenes, nuestra reina regresó hace 3 días para vencer a este usurpador recuperar lo que por derecho es nuestro- Todos asienten con miradas feroces, ciertamente como si les hubieran arrebatado algo de gran valor para todos, -y es ahora cuando hemos de cantar victoria, porque nuestro reino vuelve a nuestras manos y el trono de Midna regresa a su designada "majestad"-. Sabe perfectamente que odio la modestia pero aun lo hace, para seguí el juego de la reina y sus plebeyos.

-Hemos ganado esta batalla- finaliza Todd con un puño en alto, todos lo observan y no esperan ni un segundo para imitarlo, todo se ha vuelto de palabras de aliento a gritos y aclamaciones de victoria, siento la necesidad de unirme a mi gente, e imito el comportamiento de lo que abrió un festejo para todos, aquí en el mundo del crepúsculo no nos tomamos enserio las jerarquías, así que sin problemas que uno a mi pueblo como la habitante del sol rojo que soy…

-Es bueno volver a casa ¿no es así?- Todd está a mi lado, después de celebrar, decido salir a los balcones del comedor para tomar un poco de aire fresco, y mi fiel compañero me acompaña, recarga con los codos contra el barandal y yo imito la misma posición, ambos miramos al vacío.

-Valla que sí, aunque el mundo de luz no está nada mal- respondo, mis palabras tienen un dejo de tristeza al recordar aquellos momentos.

-¿enserio?, bueno la verdad quería preguntarte, ¿Cómo es el mundo de la luz? ¿Es cierto que los árboles son verdes? ¿Y qué me dices de los humanos? ¿Son agradables? ¿Son anaranjados? ¿Son demasiadas preguntas?- creo que si son demasiadas pero no lo comento para no ahuyentar su entusiasmo y me limito a responder aquellas preguntas de las que logro retener en mi memoria.

-Es un mundo muy hermoso y colorido, olvídate de lo monocromático, si, los árboles son verdes, los humanos no son anaranjados, y si son demasiadas preguntas- respondo entre risas, Todd me mira asombrado a pesar de mis abstractos detalles. Este chico de verdad que disfruta curiosear, desde que recuerdo siempre hablaba maravillas del mundo de la luz, a los 12 años de edad lo encontrábamos buscando libros acerca de la biología humana, pero desde que tomamos conciencia de la locura de Zant y sus atrocidades planeadas, Todd omitió el tema de la luz, puesto que en nuestras conversaciones Zant corrompía con odio, pero hoy ya no está aquí, así que podemos hablar del tema.

-Fascinante- vuelve la vista al frente y se queda callado unos segundos, de seguro debe estar imaginándose hablando con algún humano sobre biología, o paseando debajo de los cálidos rayos de sol que se cubren por las copas de los arboles verdes, bueno uno nunca sabe lo que este chico puede estar pensando. –En fin, Midna…- Me mira los ojos entrecerrándolos por la luz –Yo… bueno, estoy feliz de que volviste, bueno estamos, todos, nos alegramos de tu llegada, bueno-.

-No digas más, yo también estoy satisfecha de volver con mi gente, y estoy agradecida por lo que han hecho por mí- no se a que vienen estas palabras cursis, no acostumbro decirlas, solo a pensarlas, quizá estoy pasando por una epifanía y de repente digo cosas cursis, no lo sé…

- ¿A qué viene tanta cursilería de ti Midna?- dice burlándose un poco, lo sabía, no debí decir nada relacionado a mis sentimientos, no por reflejar frialdad si no que soy muy susceptible a esas cosas de mostrar las emociones o abrirme como lo hace Evelin con sus palabras, simplemente no va conmigo…

-olvídalo ya Todd- suelto una carcajada y agito mi puño enfrente de su cara de forma amenazante y sobreactuada, la verdad es que extrañaba estar bromeando con este chico.

Continuamos conversando sobre algunas cosas interesantes sobre el mundo de la luz, pero nada que fuese muy detallado, nos reímos y hablamos justo como cuando éramos más jóvenes, extrañaba esto, pero aun siento nostalgia por hyrule, si, extraño a las personas que conocí en el mundo de la luz, pero mi gente, mi gente es mi gente y yo soy como ellos, pertenezco aquí, debo hacerme a la idea de que no hay vuelta atrás a hyrule…

El mundo crepuscular no distingue las horas del día, no del todo, aquí no hay noches oscuras ni medios días soleados, tampoco hay puestas de son por la mañana, solo un atardecer eterno que las nubes negras ocultan, sin embargo los seres del crepúsculo si distinguimos el paso del tiempo mediante el sol que oscila horizontalmente alrededor del reino en vez de forma vertical como es en el mundo de luz, así es como calculamos las horas del día, y por cómo está el sol, puedo distinguir que ya es tarde para seguir despiertos.

Me despido de Todd, y entro al complejo principal para ir a mi habitación, la cual se encuentra en la planta más alta de la sede crepuscular, mientras me dirijo a mi cuarto, muchos de mis compañeros me saludan al pasar, otros solo me felicitan por mi llegada, y yo imito sus acciones.

Los pasillos son similares todos, de paredes grabadas en tonos grises y amplios huecos que dejan entrar la luz, finalmente el pasillo que conduce mi cuarto tiene una serie de luces azul aguamarina que conducen a una amplia puerta, la abro con cuidado y distingo el mismo orden minimalista, todo es perfecto y limpiamente ordenado, es la única habitación blanca con luces azules en todo el complejo, es preciosa sin mencionar la vista que por supuesto, es redonda, y hay unas escaleras de caracol en el centro que comunican con la segunda parte del cuarto, donde están todos los muebles.

Las dos secciones redondas tienen ventanas que dejan una visibilidad de 360 grados, la primera planta tiene un balcón alrededor de los huecos que simulan ser ventanas con persianas azules y brillantes que vislumbran el lugar, y los pisos son blancos todo aquí es del mismo color con el resaltante azul de líneas simétricas.

Sin embargo el volver a mis comodidades de reina crepuscular, no siento las ganas de dormir, mi cuerpo no me pesa sin embargo sigo reteniendo las lágrimas que no solté al entrar de vuelta a mi mundo, salgo al balcón para ver el sol que se posa en mi ventana, me pregunto si en hyrule y aquí tenemos el mismo sol, puede que sea lo único que nos une.

Hyrule, ya no estoy en hyrule ni estoy luchando con la ayuda de Link… Siento correr más lágrimas, pero ahora no me detengo, estoy a salvo en mi guarida y puedo llorar las veces que me plazcan, la cuestión es cuánto tiempo me tomara olvidarlo todo…


Eso fue todo por hoy, que opinan? bueno continuare después, tratare de subir 2 por semana, seré de esas que actualizan constante para evitar que me odien por esperar 6 meses para actualizar un capitulo : es un proyecto personal, y espero que me apoyen chicos y chicas :)