Siempre opuestos
Ella era muy emotiva lloraba por una película, una historia triste o simplemente por la emoción en el ambiente por el que era rodeado donde ella estuviera, él no parecía inmutarse por nada siempre dando ese rostro serio e inexpresivo a los demás; Sasuke no soportaba a su sobrino y en ocasiones terminaba haciendo llorara al pequeño de tres años mientras que Hinata siempre se encargaba de consolarlo y jugar con el pequeño; ella nunca se lo diría pero no soportaba ir a conciertos con Sasuke, las bandas que a el tanto le gustaban a ella le ocasionaban migraña era música demasiado intensa, pero cuando Sasuke le quito un audífono para saber que escuchaba su novia simplemente quiso vomitar, la música suave y con letra cursi la revolvían el estomago.
Este par tenía un grupo de amigos en común a Hinata le gustaba salir con ellos y divertirse juntos, Sasuke prefería quedarse en casa sin el ruido imparable de sus amigos; cuando salían a comer Hinata pedía dos postres nunca lograba decidirse solo por uno le encontraba el sabor de lo dulce en la boca, Sasuke solo la acompañaba en la mesa con una taza de café sin azúcar, lo dulce no era para él. Ella tenía su colección de libros, él prefería las películas: Hinata brincaba y gritaba en las películas de terror mientras que a Sasuke le parecían aburridas.
Ambos eran demasiado diferentes pero tenían algo en común, se amaban, ninguno lo había dicho en voz alta por timidez o por orgullo pero eso los mantenía juntos y esta noche en especial los dos estaban en perfecta sintonía como pocas veces lo estaban.
Entraron en la habitación nerviosos y decididos, besando sus labios y acercando más al cuerpo del otro, ella sacaba su valor para recorrer con sus manos la piel desnuda de él mientras que a Sasuke lo inundaba el miedo de lastimarla; Hinata perdió su valentía cuando lo sintió dentro de ella y se derritió como mantequilla cuando lo sintió moverse en su intimidad, el miedo desaparecía cuando la escuchaba suspirar y gemir para él, alimentaba su ego y la hacia disfrutar más. Sasuke la hacia suya y ella se dejaba hacer, el clímax llego para ambos después de saborearse por un buen rato y se dejaron desfallecer en la cama, él junto sus frentes y susurro un "te amo" a ella se le aguaron los ojos y le contesto un "también te amo" unieron sus labios con delicadeza una ultima vez por ese día. Sasuke la atrajo a sus brazos y Hinata se dejaba inundar por su calor, no tardaron mucho para alcanzar el descanso placentero de tenerse por fin completamente.
Tal vez no compartan los mismos gustos y eso los lleve a tener que tolerar actividades del otro pero el amor funciona mejor siempre que sean opuestos.