Capitulo I

Un amor

La noche cae lentamente, estoy en mi departamento, en mi habitación, veo por la ventana como el Sol se va a dormir pensando en ti, solo en ti, teniendo entre mis manos la chamarra que me regalaste el día de mi graduación; al igual que tantos días, deseando que estés aquí, que me ames como yo a ti, pero son solo sueños, por que sueño despierto, sueño contigo, ya no tengo vida, tú la robaste, cada lagrima es por ti, cada suspiro, cada sonrisa, todo, tú eres ahora mi vida.

El destino lo eligió así, no importaba que fuéramos tan diferentes, mientras que yo era un abogado prestigiado y tú un mecánico; hiciste que dejase de preocuparme por quien era yo, por mi magia, por que no era real, me enseñaste a como ser feliz, pero a cambio de dejar las preocupaciones de mi vida pasada te convertiste tu en mi mayor preocupación.

Estoy triste pues pienso en que tú lo estas, no se nada de ti desde hace dos días, haz huido de todo y alejado de mí, todo por ella, creí que te haría feliz, que te amaba tanto como yo, pero solo era una mentira, un bello pero mortal espejismo, no faltaba mucho para que se realizara su boda, pero de un momento a otro decidió terminar contigo, y tú, como era de esperarse, desapareciste cuando eso paso.

Entiéndelo, por favor –dijo ella– no podemos casarnos, ya no te quiero, ese sentimiento desapareció hace muchos años, probablemente desde que me fui a Inglaterra

Pero cuando regresaste acordamos seguir juntos -insististe- y desde ese momento fuimos muy felices . . .

Entiéndelo, fui tu pareja entonces pues creí amarte por que era solo un chiquilla, nuestra relación no pudo y no podrá ser como la que teníamos, esta relación es una simple costumbre, por que aun creímos amarnos, pero ahora sé que es mejor que terminemos esto de una vez antes de hacernos más daño . . .

¿Cómo puedes decirme eso? –dijiste con mirada suplicante tocando su hombro – ¿Por qué si te amo?

Touya, por favor, trata de comprender- apartó tu mano- no quiero que insistas más, si para acabar con esto debo decirte la verdad, tendré que decirte, aun cuando estaba en Japón, me fui dando cuenta de que nuestra relación no funcionaba muy bien, pero quise creer que todo mejoraría, no lo comprendí bien hasta que estuve en Inglaterra conocí a otro hombre con el cual he estado saliendo desde entonces, CUANDO REGRESE A Japón y vi que aun me amabas decidí darnos otra oportunidad, abandonando a ese hombre, nunca mencione nada, sin embargo, tiempo después lo volví a ver y me dí cuenta de que aun lo amaba, pero no te dije nada por que no quería lastimarte, pues entendía que tú siempre tenías que enfrentarte a los momentos difíciles, pero no me gusta esconderme, lo amo y estoy orgullosa de este amor, además de que no deseo seguir mintiendo o evadiéndote, no deseaba ser tan cruel contigo pero la verdad hiere, lo siento, pero solo así podremos ser felices . . .

¡Tú eres mi felicidad!

No yo estoy segura de que pronto te darás cuenta, y abrirás los ojos, así serás feliz y yo estaré tranquila al lado del hombre que amo . . .

¿Es ese chiquillo verdad? ¿el chiquillo ingles?

Si Touya yo amo a Eriol

Kaho . . . Tan solo quiero saber ¿qué es lo que tanto amas de él? ¿Qué es lo que en mi no encontraste?

Tú eres un gran hombre y amigo, pero yo no puedo amarte ni tú a mí.

Claro que si se puede, es solo que tú ya no lo deseas. . .

Touya, por favor, no hagas esto más difícil de lo que ya es, no te debes derrocar nuevamente, ahora que abandonaste a tu familia debes encontrar otra cosa que te de la fuerza pues yo nunca fui suficiente . . .

¿Mi familia, te refieres a mi padre, él es el culpable de que mi madre y Sakura murieran

Tú sabes que no es así

Nunca lo quise culpar de la muerte de mi mamá, pero cuando el permitió que ese mocoso se llevara a mi hermana a China, supe que su muerte fue su culpa, no quiero saber nada de él, además sin ti nada tiene de por si sentido . . .

Vamos, el gran Touya Kinomoto quien pudo haber hecho maravillas con su vida, no puede decir algo así no puede terminar con una vida común, como un mecánico . . . . pero estoy segura de que aspiras a más

Es eso . . . él que yo ahora sea una persona común y corriente ¿te molesta?

No claro que no, no soy un interesada, pero siempre he admirado la fuerza y valor de las personas para enfrentarse a los problemas de su vida, además creo que tú tampoco te haz dado el tiempo para analizar tus sentimientos, ni organizar tus ideas, con esto que te acabo de decir solo esperaba empezar a abrir tus ojos, pero creo que es demasiado para un día, es mejor que por ahora lo dejemos así . . . lo siento Touya, en verdad espero que no me odies por esto . . .

Dijo esto finalizando la despedida, mientras daba la vuelta y salía de tu trabajo y de tu vida. Yo fui un testigo involuntario de tu dolor, no quería ver ni escuchar aquello que me llenaba el corazón de dolor, no sabía que hacer, y ¿si Kaho tenía razón, no lo sabía pero creí que me necesitarías a tu lado . . .

Tranquilo Touya

¿Escuchaste lo que paso?

No fue intencional Touya-kun, pero estoy aquí amigo para lo que necesites . . .

¿Puedes traerla de regreso Yukito?

Touya yo . . .

Contéstame, ¿puedes hacer que vuelva?

Lo siento Touya

No nunca podrás sentirlo . . . .

Touya hay mucho más en el mundo que no tiene nada que ver con Kaho . . .

¡Tú que sabes! – me aventaste – nunca haz conocido el amor, ni si quiera eres real, eres una imagen, nada más que eso, ¿dime quién demonios te busca? Nadie necesita de tus servicios, mi hermana esta muerta, debiste regresar a un libro junto con el peluche, solo sigues aquí por la energía que te dí, Tu vida es importante cuando alguien ama tu existencia, pero a ti nadie te podrá amar, y aun así vienes a darme consejos, es mejor que me dejes tranquilo, ¡No te necesitó ni a ti ni a nadie!.

Saliste corriendo, tratando de huir de aquel dolor, sin siquiera notar yo estaba destrozado, por que tú estabas llorando, aquel hombre fuerte que no se arrepentía de nada, aquel que llevaba una vida llena de sencillez; aunque dejaste todo por la muerte de Sakura, lograste un futuro, humilde, pero estabas dispuesto a ofrecérselo a Kaho, esta era la segunda vez en todo lo que llevo e conocerte en que veo en tus ojos un gran dolor; Pero esta vez me despreciaste, no te importe yo ni el apoyo que te quise dar, entiendo que estés sufriendo y que de seguro no te imaginas que tus palabras me hirieron, solo soy un estorbo para ti, una imagen, alguien que esta en este mundo por accidente, sé que tienes razón en ello pero si supieras que ya desde hace mucho que aprendí a amar, pues a tu lado fue muy sencillo aprender . . .

Desde hace dos días que aquello paso, hace 48 horas que el teléfono no suena para dejarme oír tu voz . . . te busque en tu casa, pero no estabas ahí; sé que solo son dos días, pero nunca estuvimos separados desde que nos conocimos, siempre había noticias tuyas, aunque fuese por teléfono, por que siempre haz estado al pendiente de mi, y al no recibir noticias tuyas siento como la desesperación consume mi corazón poco a poco . . .

La calle es envuelta lentamente por la oscuridad, mientras el atardecer es opacado por las nubes grises, pareciera como si el cielo compartiera mi tristeza . . . Hasta que al fin ha comenzado a llover, la noche es aun más triste, y yo sigo pensando en ti, en lo que dijo Kaho, en lo que dijiste tú, no creo que Kaho haya hecho esto por maldad, pero sé que aun así te lastimo, todo esto me confunde y también me duele tanto como a ti, creo que solo puedo pedirle a Dios que te cuide y regreses a mi sano y salvo, para poder ayudarte y ser tu guía . . .

El sonido de la puerta ha llamado mi atención, ¿quién será? No espero visitas, me asome por el visor de la puerta, no hay nadie, por un momento creí que al asomarme vería tu rostro con esa mirada fría que cambia cuando estamos juntos, que iluso soy, me di la vuelta, dispuesto a regresar a mi melancólico estado.

El sonido insistente de la puerta comienza a desesperarme, no dejan de tocar, pero ahora con más fuerza, ¿será que alguien desea jugarme una broma, Tome el bat que me regalaste en mi ultimo cumpleaños para poder dar un susto a quien juega conmigo, abro la puerta, y . . . y no hay nadie ¡qué raro, de pronto del lado derecho salió una figura masculina empapada por la lluvia, para mi sorpresa eras tú, baje el bat algo avergonzado.

Acaso ¿ya no soy bien recibido? – preguntaste

No . . . es . . . eso – conteste aun impresionado - solo me asustaste

De repente me tomaste de los hombros y me empujaste suavemente al interior del departamento, cerrando la puerta tras de ti.

¿Estas bien Touya?- pregunte mientras te dirigí al sillón – siéntate, enseguida te traigo algo para secarte

No quiero

Touya no te estoy preguntando . . . .

No te vallas –dijiste casi en susurro – por favor . . .

Pero Touya, solo voy por eso y enseguida regreso . . .

¡No! ¡Acaso no vez que quiero disculparme! ¿no entiendes que quiero que estés aquí? – me tomaste de la cintura y me acercaste a ti, quedando tu rostro en mi vientre – no me dejes, por favor . . . perdóname . . . y-yo . . . yo . . . te necesitó mucho Yuki

Esas palabras me dejaron anonadado, nunca me habías dicho eso, nunca me había sentido tan necesitado por alguien, no conteste nada, solo me aleje de ti para sentarme a tu lado, hubo silencio, lagrimas comienzan a deslizarse por tus mejillas, hasta que no soportaste mas y rompiste el silencio con tu llanto, estabas destrozándome, cada lágrima era una puñalada a mi corazón, yo te quiero desde hace tanto y tú lloras por alguien más . . . pero aunque llorabas no tenía el valor de verte a la cara, esas emociones guardadas desde hace tantos años me impiden reaccionar, aunque quisiera abrazarte y llorar a tu lado mientras te confieso lo que siento por ti, pienso que es mejor mantenerme fuerte e indiferente, justo como tú alguna vez lo hiciste, para que puedas tener un poste sólido que te sostenga, mientras veo como te derrocas poco a poco . . .

De pronto en un intento desesperado de consuelo y de que no te viera humillado escondiste tu rostro sobre mis piernas, cuando por fin reaccione de donde se apoyaba tu cabeza, ya no pude quitarme, tu rostro sobre mis piernas, mientras seguías llorando como el niño que nunca pudiste ser, como el niño que solo mostrabas frente a mi y del cual me enamore profundamente, me puse rojo al sentir tu rostro empapado en mi regazo; Acerque mi mano a tu rostro tratando de mostrarte mi apoyo sin palabras, no importaba que dijera tu dolor no se iría, quite el cabello que amenazaba con cubrir esos hermosos ojos, lo acaricie con la dulzura que siempre te muestro, por que te quiero es lo menos que puedo hacer.

Así paso el tiempo, pasaron un par de horas y la lluvia paro, al igual que tu llanto, ya tranquilo dormías, mientras que yo te miraba aun rojo, no era para menos, estabas dormido en mis piernas, podía sentir tu respiración rompiendo en ellas, que lindo era tenerte tan cerca . . . Despacio me levante y acomode tu cabeza en el sofá, nuevamente te mire, eres muy guapo, tan lindo, tu rostro tan compasivo y tranquilo, tus brazos tan fuertes, tu camisa mojada dejaba ver tu torso perfecto, unos músculos remarcados, mientras que tus pantalones, estando igual que la camisa, dejaba ver tu deliciosa masculinidad, me gustas tanto y te amo aun más.

Te amo Touya –dije mientras besaba tu frente – lastima que tú a mi no, lastima que esto sea lo más cerca que pueda estar de ti declarándote mi amor, no importa si no me amas, solo importa que yo estoy dispuesto a darlo todo por ti y que tú al menos eres mi mejor amigo.

Suspire una vez más, por la tranquilidad que me das al estar aquí y por que te amo. Me di la vuelta, fui a mi alcoba por algunas mantas y toallas para cuando despiertes; Cuando de pronto sentí a alguien atrás de mí, volteo rápidamente, dejando caer lo que en mis manos llevaba por la impresión, Dios no puede ser, siento que como tu mirada esta fija en mi y se clava en mi corazón, estabas despierto, escuchaste la verdad de mi corazón, ahora ya sabes que te amo, lo más seguro es que ya nada sea igual entre nosotros, quiero dar una excusa pero no la hay, ya no, como desmentir la verdad, mi verdad.

Touya . . . perdóname – dije completamente nervioso

Gracias por estar aquí para mí –contestaste con aquella sonrisa que a nadie más regalas y que tanto me gusta– perdóname por no darme cuenta.

Solo hiciste que me pusiera aun más rojo, que el temblor de mi cuerpo fuera aun más notorio y que bajara la mirada, cosa que no me gusta hacer, pero las sorpresas no se acababan.

Te acercaste, tú mano sujeta mi mentón, pues querías te viera a los ojos y luego . . . me besaste, la dulzura de tus labios es única, me fascina, es maravillosa, tus fuertes brazos ahora me rodean, tus manos ya no están en mi rostro ahora se deslizan con libertad por mi torso, mi espalda, mi cintura . . . . mientras que yo siento lo mojado de tu ropa en mi cuerpo.

Poco a poco comienzo a demostrarte el gran sentimiento que había guardado para ti desde que te conozco, ahora sabrás lo mucho que te amo.

Deslizas tu mano sobre mi pecho, mientras yo me estremezco ante tal caricia, metes tu mano por debajo de mi playera y lo acaricias, al principio con suavidad, para después apretar mis pezones, comienzas a alzar mi playera y a bajar el cierre de mi pantalón, como no encuentras resistencia de mi parte un par de minutos estoy desnudo frente a tu magnifica presencia, disfrutando cada roce de nuestros cuerpos y las caricias tan dulces y delicadas de tus manos.

Te separas un poco de mí para quitarte tu playera y bajar tanto tus pantalones como tus bóxer, dejándome apreciar tu deliciosa figura y tu hermosa piel morena, solo me avergüenzas más, ahora si, ya no hay ropa alguna que nos separe, te vuelves a acercar a mi, me besas cada más profundo, de manera mas provocativa, mas pasional, mientras dejas que nuestras erecciones se rocen, aumentando con ello el calor de nuestros cuerpos, correspondo cada beso con la misma fogosidad, acompañado debes en cuando por un gemido de placer, tus labios comienzan a bajar de los míos a mi cuello, es imposible quedarnos de pie, me recuestas con suavidad en la cama, tu boca se desliza como una voluptuosa serpiente por todo mi cuerpo, cada rincón, cada espacio de piel recibe el mismo caluroso trato, que bien se siente, voy a volverme loco en tus brazos, el éxtasis que me provocas en cada contacto es demasiado me hace sentir tan extraño . . .

La cordura me ha abandonado por completo, no puedo ni quiero detenerte estoy embriagado de tu amor, tratando de contribuir a este acto, mis manos dejan de acariciar tu espalda para posarse en un lugar tuyo aun más intimo, lo acaricio con suavidad pero deseando que te guste, solo me guió por los leves y dulces gemidos que salen de tu boca y me invitan a seguir.

Estoy cada vez excitado y por lo visto tú no te quedas a tras, puedo sentir como tu masculinidad comienza a calentarse velozmente entre mis manos y claro comienza a hacer lo que es por instinto natural, algo que no puedes evitar, y tratas de unirme a ti, de que seamos uno.

Tiemblo al sentir como tus caricias se concentran en una zona en que nadie más ha estado, cuando introduces el primer dedo en mi, a pesar de que lo haces con suavidad siento dolor, al percatarte de eso, los sacas y los introduces a tu boca hasta que logras humedecerlos lo suficiente, es entonces cuando los vuelves a dirigir a mi entrada . . . no puedo evitar gritar cuando siento como haz introducido ya tres de tus dedos, detienes la introducción pues ya no quieres lastimarme, así que comienzo a tragarme mis quejas para que puedas continuar . . . pasado el tiempo mi entrada esta bien dilatada lista para recibirte . . . sacas tus dedos y con sumo cuidado metes la punta de tu miembro, cuando al fin me acostumbro comienzas a adentrarte más en mi con mucho cuidado de no lastimarme, despacio, despacio, mmm hasta que al fin llegas a un punto en que mi placer y mi dolor se encuentran . . .

Por fin se dio, sentirte dentro de mí es algo maravilloso, el manjar más delicioso . . . mmm . . . no controlo mis gemidos y a pesar de que aun hay dolor, el placer se ha adueñado de mi cuerpo, así que comienzo a mover mis caderas, cuando lo notas tu también te mueves haciendo con cada movimiento que mi éxtasis se desborde, no podré aguantar más tiempo, mi masculinidad ha crecido tanto que duele, parece que lees mi mente pues acercas una de tus manos a ella, acariciándola, recorres de arriba abajo con un ritmo muy parecido al de nuestras caderas . . . aah . . . ya . . . ya no aguanto más . . . y gimiendo tu nombre acabo por derramarme en tu mano, mientras espero a que tu termines dentro de mi, sintiendo al fin como tu calidez fluye dentro de mi, el primer y único orgasmo de mi vida, no puede evitar el sentirme en la gloria, desharía que esto no se acabara, te llevas mi gran tesoro, y lo disfruto tanto . . .

Después de esto nada volverá a ser igual entre nosotros, te miro cuando ya todo termino, tratando de regular mi respiración, me pregunto en que piensas, te arrepentirás de haber estado conmigo, tal vez no te satisfaje como querías, me acomodo en tus brazos, por primera vez no sé lo que piensas, siempre supe lo que pensabas, podía ver la verdad de tu alma en tus ojos y ahora no puedo. ¿Es que acaso mi amor por ti me ciega? o ¿fue lo que paso?.

También me pregunto si recuerdas que eres el primero en mi vida y ya no solo en mi corazón, deseaba tanto estar contigo, deseaba que fueses el primero, tú nunca te diste cuenta, cada vez que te acercaste a mí y rozaste mi cuerpo, provocabas nerviosismo y deseo que con nadie mas sentí, cuando estabas a tan solo unos centímetros de mi, deseaba abrazarte y decirte lo que siento por ti anhelando ser correspondido, hasta ahora sabías eso, lo único que te hacia falta conocer de mi. ¿Qué pasara ahora contigo? ¿Conmigo? ¿Con nosotros?.

Una amistad, una hermandad puede volverse amor sin causar problemas, ¿se puede, la duda principal que ahora me agobia y que sé debí preguntar antes de hacer lo que hice, ¿estuviste conmigo por que me amas? ¿Por despecho? o simplemente ¿no tenias con quien, estabas dolido pudo ser por él . . . todo en mi mente da vueltas mientras que el cansancio se adueña de mi, aunque hay dudas en mi corazón comienzo a cerrar mis ojos . . . siendo mi ultimo pensamiento sobre mi amor por ti y te doy las gracias por esta noche en que disfrute cada momento junto a ti, diciendo una vez más tu hermoso nombre . . .

NOTAS DE LA AUTORA

Liz: Bueno esta historia tiene 3 versiones con esta, la primera es la original donde Andre y Victor son personajes principales, la segunda es versión Beyblade "que ya esta terminada"

Ardently: si y es una porqueria de primera

Liz: callate, en fin, pero como Touya y Yukito son de mis parejas yaoi preferidas decidi hacer esta tercer versión, espero que si no llegaran las demás personalidades que tengo y entonces si se va armar algo, cuídense, Sayonara