Universo alternativo donde todos son amigos y pasa lo que a mi se me venga en gana
Capitulo 1:
Kujo Jotaro, biólogo marino de profesión, había salido temprano del trabajo ese día, sin nada mejor que hacer, puesto que aún faltaban varias horas para que su hija Jolyne saliera de la escuela, decidió llamar a su mejor amigo Kakyoin Noriaki para ver si podía pasarse por su casa, la compañía del pelirojo nunca era un extra para el. Saco de su abrigo su celular, pasando los dedos por su lista se deslizo para marcarle a su amigo.
Despues de unos cuantos tonos se escucho una voz en la linea-Jotaro? Que sucede?
-He salido temprano del trabajo y aún no es hora de recoger a Jolyne, puedo pasar por tu casa?
-Que bueno escucharte, puedes pasar sin problema, llevábamos un tiempo sin vernos -Jotaro sabía que detrás del teléfono Kakyoin tenía su misma estúpida sonrisa.
-Apenas han pasado 3 días, exagerado -la contagiosa risa del pelirojo se hizo escuchar- en todo caso en una media hora estoy allá.
-Te espero -el moreno corto la llamada comenzando a caminar para encontrar algún taxi.
Pese a todo SI, Jotaro y Kakyoin eran mejores amigos, de hecho Kakyoin era de sus pocos amigos, ambos se habían conocido en la universidad y aún despues de terminarla siguieron en constante contacto, llegando a ser el pelirojo parte de su familia al convertirse en el padrino de su hija. No iban a la misma clase, no compartían los mismos intereses, pero ambos se llevaban sumamente bien, la compañía de uno llenaba totalmente al otro, se equilibraban y sostenían perfecto no importa el momento que fuera.
El menor era un estudiante de ciencias económicas cuando conoció a Jotaro, el pelirojo tenía sus apuntes sobre unos libros y sin darse cuenta de ello había empezado a dibujar encima de sus libros, aunque tampoco debería haber ido a la biblioteca a dibujar, podría al menos hacerlo en sus propias hojas.
Jotaro, quien en ese momento pasaba con unos libros para un examen miro el accionar del pelirojo y bastante mosqueado le llamo la atención.
-Oye
El chico, totalmente perdido en sus pensamientos cuando fue sacado de estos dio un brinco y volteo hacia atrás, con los ojos totalmente adormecidos y con un sonrojo de vergüenza en el rostro, entonces se dio cuenta de lo que estaba haciendo, y entrando en pánico agarro una goma y se puso a borrar todo. El moreno sin querer inmiscuirse mas susurro un "yare yare daze" y fue a sentarse a otro lugar. El chico de ojos violetas totalmente avergonzado le miro irse y quería que la tierra se lo tragase, aun que no fuera nada del otro mundo lo que hizo, Kakyoin se sintió mas avergonzado por su reacción al ver al moreno que otra cosa.
Con el pasar de los días ambos iban coincidiendo en la biblioteca, aunque Jotaro no lo decía no era un tipo precisamente solitario, y como sus anteriores amigos del instituto no tenían mucha pinta ni posibilidades de entrar a una universidad, Jojo había quedado solo y todavía no conocía a nadie, y francamente su personalidad de delincuente y su constante mal humor no eran muy atractivos, apesar de que varias chicas se le acercaban, no contaban como amigas, no hace falta decir que si fuera por su registro de su anterior colegio no podría haber entrado a una universidad, pero un poco de insistencia de su poderosa familia podía acelerar los procesos. La cosa es que Jotaro se sentaba en ocasiones en la misma mesa en la que podía o no encontrar a Kakyoin, no se hablaban, no se pedían ayuda mutuamente, ni siquiera sabían sus nombres, solo conocían sus rostros y sus hábitos de estudio.
Un día, mientras Jotaro estaba escribiendo y subrayando en sus propios apuntes volteo a ver a Kakyoin, dejando su marcador sin tapa. Realmente estaba pasando un mal rato ese chico con esos ejercicios de matemática, podías ver el sufrimiento en su cara y pensar que estaba teniendo un desgarre interno, el ojiazul volvió a sus ejercicios pero su resaltador había dejado de funcionar, yare yare daze, igualmente le quedaba poco, su mano se dirigió a su cartuchera para buscar alguna otra cosa pero Kakyoin con una sonrisa gentil le tendía uno en la mano.
-Toma, se que no es del mismo color pero...
Jotaro le miro sorprendido y acepto el resaltador -Ah gracias...susurro, el pelirojo volvió a enfocarse en sus ejercicios, no era precisamente esa clase de persona pero no le iba a hacer el feo -te importa si miro? matemática no es mi especialidad pero soy bastante bueno -decía a la vez que tomaba un lápiz.
-Ah..si, por que no...-Jojo tomo el cuaderno con sus dedos y empezó a resolver el ejercicio en el que estaba enfrascado el otro chico, el cual lo miraba sorprendido. Al cabo de un par de minutos el mayor le devolvió su cuaderno al otro, Kakyoin le miro aliviado y bastante tímido -Si no estas ocupado te importaría...
-Para nada, siéntate aquí, será mas sencillo -respondió el ojiazul con su usual indiferencia.
-Muchas gracias -Kakyoin le respondió con una sonrisa y se levanto para sentarse al lado suyo, pese a que su propia tarea quedo atrás enseñarle a Kakyoin no era tan malo como parecía, el chico escuchaba pacientemente y ponía su mejor empeño.
Poco a poco los chicos se fueron reuniendo mas seguido, no solo en la biblioteca para estudiar si no también a las salidas de las clases y los descansos, tener a Kakyoin a su lado le hacía pasar un buen rato, pese a que el chico no era muy hablador por que era bastante timido disfrutaba de su mera presencia, Kakyoin era muy casual por decirlo de alguna manera. Poco a poco gracias a Jotaro fueron ganando varios amigos de otras carreras y otros grados, Noriaki se encariño especialmente con una chica morena de nombre Anne, se habían vuelto muy buenos amigos, autocompletando las frases del otro, teniendo los mismos gustos, riéndose al mismo tiempo de las mismas tonterías, Noriaki se veía plenamente feliz con todo su grupo. Polnareff, un francés que estudiaba en esa universidad para profesor era también, algo así como el top 3 de amigos de Kakyoin, por que primero estaba Anne luego Jojo y luego el francés, lastimosamente el egipcio Avdul había quedado atrás en esa lista, se llevaba bastante mejor con Jotaro por que, ambos eran tipos serios y sus personalidades cuajaban.
Kakyoin tenía con Anne ese tipo de amistad donde son casi hermanos y realmente la presencia del otro se extraña y es como que se necesita para pensar en ciertos eventos e ideas, es como si fuera un cachito mas de su alma. Jojo sin embargo no lo notaba de tal manera y creía que Anne tenía un interés romántico por el bastante intenso, pero por supuesto, Jotaro el desgraciado rompecorazones mas perseguido de la universidad no entendía de estas cosas, para el era todo muy blanco o negro, nadie le había ablandado su corazón todavía.
Kakyoin había establecido una relación bastante linda con la familia de su amigo, la hermosa madre de Jotaro, Holly, le había tomado muchísimo cariño por ser el primer amigo derecho de su hijo y además tan guapo~ según palabras de ella, el pelirojo casi gana una fiesta de golpes cuando le confiesa a Jotaro que su madre es una bomba, aunque fuera solo una broma, pero tuviera un pequeño crush con ella? En fin, jugaban videojuegos juntos, pasaban la tarde en su casa, al moreno le mosqueaba bastante que el ojivioleta fuera de estos jugadores agresivos que gritaban a la pantalla pero podía dejarlo pasar, sus tardes de estudio eran bastante tranquilas y sus reuniones con amigos de lo mas divertidas. El conocer a los padres de Kakyoin fue un golpe bastante duro para Jojo, quien habiendo tenido duras peleas durante tantos años en su adolescencia no había sentido mayor intimidación y de cierta manera desprecio hacia su persona con tan solo unas miradas, tan solo eso, miradas, cero comunicación.
La personalidad de los padres de Kakyoin ayudo al moreno a entender cuando el chico lo cito en un rincón alejado de la universidad para hablarle de algo: necesitaba ayuda para convencer a sus padres de dejarlo cambiarse de carrera. Podría parecer algo sumamente tonto pero el pelirojo vivía asustado de sus padres y de lo que estos pensarían de el, el chico quería dedicarse a las artes puesto que las matemáticas no eran lo suyo y realmente se sentía estúpido, Jojo acepto sin problema, sabiendo que esto era importante para su amigo como no ayudarlo? Todo resulto relativamente bien, los padres del pelirojo dan mucho miedo pero gracias a la valentía de Jotaro para hablar con ellos se convencieron de que lo mejor sería dejar de idealizar a un hijo ideal y dejarlo hacer lo que mas quería y tenía mas afinidad.
Felicidad, mucha felicidad, Jojo y Kakyoin con todos sus amigos pasándola en grande todos juntos, a insistencia de Polnareff obligaron a Jotaro a conseguir una novia pero aunque todas llegaban como imanes salían despavoridas por el intento tierno de personalidad que Jotaro quería poner a petición de sus amigos de ser un poco mas humano, parece que el Jotaro machista y macho era menos escalofriante que sus tartamudeos o sus ataques de ira por no poder hacer las cosas bien.
-Creo que lo de las relaciones no me va -susurro Jotaro al hombre de excéntrico peinado.
-Que te haya ido mal por que seas inexperto no significa nada, aparte tienes suerte, chica que te parece linda es chica que cae ante ti -le explicaba el francés con ánimos.
-No es eso, es que creo que no me siento realmente interesado hacía nadie, osea, serán lindas y algo como para...hacerlo una vez pero seguir en ese tipo de cosas...no me va, supongo.
Kakyoin y Anne, quien le tenía tomado del brazo de una manera muy inocente, compartieron miradas, confundidos por un momento, entendidos por el otro, sabiendo lo que Jotaro quería decir. Era un poco momento de dejar ese tema atrás.
Sin embargo todo fue diferente cuando Jojo conocía a la madre de su hija.
Jojo bajo del taxi que lo había conducido hacía la casa de Kakyoin, el chico vivía en un edificio residencial bastante bonito, había empezado a ahorrar vendiendo sus cuadros y presentándose en galerías desde que estaba en la universidad, por lo que 2 años despues de graduarse ya tenía su propia casa, lo cual era algo digno de admirar, claro que Jotaro podía tener un hogar mil veces mas elegante y grande que un departamento así, pero el era rico, no era el mismo merito, estaba realmente orgulloso de su amigo. El moreno toco el timbre y automáticamente se abrió la puerta, con el pelirojo siempre era así, le dijo varias veces que tuviera cuidado a quien le abría pero según el sabía que solo venía el así que no había problema.
El moreno tomo el ascensor y no fue ni necesario tocar la puerta cuando este llego al piso por que Kakyoin había dejado la puerta abierta, el entro suspirando
-Yare Yare Daze
-Jojo, estoy en la cocina haciendo unos jugos, puedes cerrar? -el pelirojo escucho el click de la cerradura mientras movía las pajitas en el jugo para mezclar los sabores, cuando el otro hombre llego a su cocina se dirigió a el para saludarlo con un beso en la mejilla- que gusto verte -Jojo volteo la vista, como leyendo sus pensamientos de que estaba siendo un exagerado de nuevo, a lo que Kakyoin río- en realidad pese a que te dije que podías venir no podre prestarte mucha atención, dentro de poco tengo una exposición y tengo varios cuadros que terminar.
-Estabas pintando hasta ahora no? -Jotaro comenzó a rascarle con la uña pintura seca de una de las mejillas.
-Si, sabes que me ponen nervioso los días previos a una galería y estoy corrigiendo y terminando todo.
-No pasa nada, en ese caso me prestas tu notebook? tengo que escribir unos articulos...y sabes que me gusta tu sillón
-Claro -sonrió el pelirojo pasándole un vaso de jugo de limón con una adorable pajita blanca de rayas azules. Ambos se movieron hasta el bien iluminado salón, el departamento de Kakyoin estaba en un piso bastante alto, tenía unas vistas increibles a la ciudad y era de este tipo de departamentos con ventanas que eran casi paredes, tenía varios sillones blancos con un moderno tv y dispersos por todos lados cuadros y lienzos, también en sus correspondientes soportes, cuadernos por todos lados, varias cajas y estuches de pinceles y pinturas, era un desorden bastante estético a la vista -Por otra parte te quería mostrar algo -Noriaki tomo un cuaderno de bocetos que tenía en uno de los sofas, Jotaro tomo la notebook y se sentó en el sofá blanco mas largo, el pintor se sentó al lado suyo y le mostró un dibujo- Disculpa, te molesta que utilize a tu Star Platinum para un cuadro? si quieres puedo darte tu...
-Sabes que lo puedes usar, no se ni para que me preguntas
-Es un diseño tuyo al fin y al cabo y es hermoso, estoy seguro que puedo hacer muchos cuadros preciosos de el -dijo Noriaki abrazando su cuaderno.
-Usalo, es tuyo, te lo regale en la universidad después de todo - Jotaro puso la notebook en sus piernas y la prendió para empezar a trabajar sintiendo la risa del pintor, quien se levanto para tomar un pincel y seguir con su trabajar a Kakyoin era algo que disfrutaba mucho, no particularmente por sus pinturas, no era que no le gustaban o no las entendía, simplemente era un tipo muy seco y muy frío y aunque podía entender ese tipo de cosas no le causaban nada, las veía bien y ya, no captaba como había gente que los cuadros de su amigo le provocaban cosas super intensas. Particularmente el lo disfrutaba por ver la paz y serenidad que mostraba el rostro del chico, aveces notaba expresiones de lo mas raras, pero nunca lejos del disfrute, aun que sea un momento que algo se le arruino o se hastió con algo el pelirojo dejaba claro que era bueno en el arte y era su pasión. Sintió un ruido en su abrigo y era que su celular se había quedado sin batería -Disculpa, puedo poner a cargar mi celular y usar el tuyo mientras tanto?
-Claro claro -el pelirojo estaba muy enfrascado en pintar unas cejas en aquel retrato.
La figura del pintor se doblaba y acomodaba según sus necesidades, Jotaro fácilmente admitía que tenía un amigo bastante apuesto cuando los veían juntos y alguien comentaba al respecto, tenia unos hombros grandes y una cintura pequeña, era bastante musculoso y estaba marcado donde debía, sumando que tenía unas facciones muy finas, casi andróginas, adaptables. Jotaro lo había mirado varias veces y reconocía plenamente que era guapo, pero nunca esos pensamientos surcaban nada mas allá de la sinceridad y el respeto, siempre amistad, siempre eso, nada mas, best friends. Aunque la luz pegándole en su camisa manchada ahora mismo lo hacía ver lindo.
Jotaro se puso a teclear en la notebook, trabajar junto con el pintor era una cosa que disfrutaba bastante, era un ambiente tranquilo y se sentía acompañado sin que estuviera molesto, no le gustaba mucho trabajar con otra gente en espacios tan chicos pero con el era diferente, cada uno estaba en su cosa y ya, además que disfrutaban estar en silencio, mucho de su amistad era así. Cada tanto levantaba la mano para tomar un poco de su vaso de jugo, notando que el pintor ni siquiera lo había movido de lugar.
-Kakyoin, te importa si mando un mensaje desde tu celular? -el pelirojo le hizo señas de que haga lo que quiera, el mando su mensaje tranquilamente, cuando llego al menú sintió por alguna extraña razón la necesidad de mirar un poco en el teléfono de su amigo, de todas maneras no pasaba nada, que podía tener para ocultar? o que a el le importara plenamente, o que se lo fuera a reprochar. Entro a la galería de imágenes y de mero aburrimiento se puso a ver las carpetas, fotos de galerías, de cuadros, imágenes varias, fondos para celular (los cuales cambiaba bastante frecuentemente) fotos de Kakyoin con el y con Jolyne, muy pocas con Polnareff y Avdul, fotos de Anne y el juntos... estaba por apagarlo cuando a la siguiente foto, y a la siguiente, y a la siguiente, y a la siguiente, y así varias encontró selfies bastante cariñosas y juguetonas con un hombre, no lo reconocía, seguro era del trabajo de Kakyoin, algo, molesto dentro de el, hizo que le naciera la necesidad de preguntar, no por mera curiosidad, si no...por que si, quería saber y ya ok? no es como que la familiaridad de ese tipo con el pintor le causara nada -Puedo preguntarte una cosa?
-Hmmm? -respondío Kakoin sin voltear a verlo, aún enfrascado en su trabajo.
-Kakyoin te gustan los hombres? -y lo dijo así, seco, sin preparación, sin casi se cae de la sorpresa, volteando a ver a Jotaro impulsivamente -Eh? por que dices eso!? -Jotaro levanto el celular mostrando la foto de ambos donde el desconocido le daba un beso en la mejilla haciendo los 2 gestos coquetos y graciosos a la cámara, el pelirojo se acerco a ver, un poco molesto por la luz de los ventanales en la pantalla -Mira que si malinterpretas las cosas...ese es Steely Dan, uno de los modelos que había traído uno de la agencia para que otro pintor lo retratara, al parecer es una celebridad pero nunca había oído jamas de el, es un tipo bastante molesto, ínsito varias veces con lo de las fotos y en que posiciones sacarlas, y ni siquiera las saco con su telefono, las tenía ahí y me olvide de borrarlas, solo pensar en lo pesado que es me da escalofríos, realmente aterrador, además tenía, una actitud de diva bastante rara...borra esas fotos por mi quieres?
Jotaro guardo silencio un momento-Nunca te vi con ninguna mujer
-Te molesta?
-No...- Jotaro le miro sorprendido, no creyó que se lo fuera a tomar a mal
-No, no es eso, es solo que...me doy mi tiempo para estas cosas, nunca me paso que me gustara nadie seriamente por que tampoco conozco demasiadas personas, sabes que no soy alguien muy sociable pese a mi trabajo y todo -el pelirojo se cruzo de brazos tironeándose de su camisa, evadiendo la mirada de su amigo- cuando tenga que pasar que alguien me llame la atención pasara y ya...después de la muerte de Anne me cuesta mucho acercarme a las mujeres mas allá de lo profesional
-Se lo importante que ella era para ti
-Anne era mi complemento, era mi mejor amiga y el accidente mato también esa parte de mi que podía tener una camarada mujer, nunca voy a volver a tener algo como lo que tenía con Anne, ella era realmente...parte de mi persona...en cuanto a lo otro...no puedo decir si me gustan los hombres o no por que...nunca me ha gustado ninguno, no lo descarto pero como me pasa lo mismo que con las mujeres, que ninguno me llama la atención a profundidad es como que...no se...
-En la universidad tampoco te vi con ninguna chica nunca, si vamos al caso de un tiempo donde estábamos juntos mas rato
Kakyoin solto una ligera risita -Tu no sabes que cosas hacía en la universidad Jotaro -ok, eso definitivamente significaba que las mujeres no le desagradaban -A que viene todo esto?
Jojo se encogió de hombros -nunca hablamos de este tipo de cosas, ni idea
-Si vamos al caso, hay un presidente de una gran empresa, si, así de rebuscado, ni idea por que me conoce, creo que nos presento uno de sus agentes empleados, que me esta persiguiendo desde hace días -Jojo levanto la ceja como gesto de interrogación, pidiéndole que siga -hace un par de días me dio su número por si algún día me apetecía concretar para ir a cenar juntos o algo, y siempre viene a saludarme.
-Y que tal?
-Como que...no es mi tipo...como que no, no, no -Kakyoin se hecho a reír imaginándose diferentes situaciones de pareja con aquel sujeto- creo que no.
Jojo sonrió al escucharle reir, puso una presión innecesaria en el ambiente pero por suerte había desaparecido facíl
-Todavía no supero a mi ex...si vamos al caso
-Tu esposa fue muy importante para ti, recuerdo que no te sentías realmente interesado por esas cosas y luego llego ella
-Fue la única que me pego así...y luego nunca más, tampoco nunca luego lo quise o pude intentar con nadie más por que...simplemente no, no se me da, no quiero, no me interesa
-Quédate como yo entonces -el pelirojo le sonrío, tomando un pincel de nuevo.
Jotaro solo le devolvió la sonrisa para ponerse a trabajar de nuevo
