Sacrificio de sangre.
Capitulo 1
Los sonidos de sus pisadas resonaban por todo el corredor, no sabía que tan cerca ni que tan lejos estaba de la confrontación, lo único que importaba ahora era llegar a él lo más pronto posible, no había tiempo para dar un respiro o de reunir fuerzas, tenía que seguir corriendo si quería alcanzarlo a tiempo.
Las visiones que le atormentaron las recientes noches, el pesar de la mentira, el repudio hacia la manipulación, el dolor que su héroe paso todos estos años. Todo flotaba por su cabeza a tal punto que incluso podía escuchar las palpitaciones de su corazón en su mente. La impotencia ante todos estos sentimientos le hacían seguir su paso.
La mujer no podía darse el lujo de recobrar aliento tampoco a pesar de su pesada y cansada respiración, los músculos de las piernas estaban tan agotados que sentía que en el próximo paso podría tropezar y caer en el suelo, aun así era de menor importancia, tenía que correr.
Los ruidos de la batalla, las espadas chocando contra el acero aún se podían escuchar en las afueras del castillo. El asedio a la fortaleza imperial ya había durado demasiado tiempo y aun la balanza no parecía beneficiar a ningún lado.
Aun mientras corría una pequeña parte de su mente se enfocaba en el posible resultado de la batalla, el estado de sus soldados twili, los soldados de la reina de hyrule, los guerreros de la antes conocida guardia imperial y la milicia que estaban aún bajo el mando del héroe contra la legión imperial. ¿Acaso estarían ganando? O ¿estarían perdiendo?
No, eso no podía importar ahora, la reina zelda había decidido quedarse atrás para comandar a sus twili y los soldados de hyrule con la guardia y la milicia protegiendo sus flancos, ella se encargaría del conflicto campal. Midna por su parte tenía que enfocarse en una sola cosa, Link.
Su corazón comenzó a palpitar más rápido cuando el ruido proveniente de la sala de tronos se hacía más y más pronunciado, el estruendo de las espadas chocando, las armaduras desgarrándose entre ellas y los gemidos de furia y enojo enfrentándose.
Link ya estaba en combate contra el caballero rojo, para ella él fue la causa de todo. La mente de Midna maldecía la existencia del caballero rojo, su conciencia por otra parte la señalaba a si misma por su hipocresía, por aceptar haber participado en tal manipulación.
El sacrificio por un bien mayor, valla excusa había creado para justificar tal acción, tal vez solo quería salvarlo para poder redimir lo que quedaba de su honor como reina, tal vez quería salvarlo como decir un ''lo siento'' hacia su héroe, o tal vez porque de verdad lo amaba.
Final mente había llegado, los sonidos de la lucha estaban girando la esquina del corredor, el corazón acelero el latido aún más fuerte al entrar al salón del trono del emperador. Allí estaban.
Link aun luchaba contra el caballero rojo, el enfrentamiento de las espadas eran tan fuerte que el sonido del metal hacían eco por todo el enorme salón, sus armaduras estaban desgarradas casi echas pedazos, a duras penas y se mantenían sobre los cuerpos de sus dueños.
Alrededor de ellos una muralla de fuego rodeaba la zona de combate, las llamas casi alcanzaban los 4 metros. Para ella habría sido fácil simplemente flotar por encima de las flamas, pero arriba de ellas otro muro apenas visible se levantaba hasta el techo. La magia de la Reina de fuego era más poderosa que el poder de la reina del crepúsculo. De ninguna forma podría penetrarlo.
Midna observaba de arriba abajo las dos murallas en un intento desesperado de buscar una debilidad, una forma de entrar.
-no entraras, mi amo así lo ha ordenado- se escuchó una voz que provenía del segundo piso del salón por la pasarela, era la reina de fuego, su cuerpo estaba conformado por llamas que daban forma a su figura, solo la cara y cuello mostraban piel humana que representaba a la de una mujer joven y atractiva con cabellos que ardían como llamaradas. Sus ojos estaban cubiertos por una pañoleta que rodeaba su cabeza similar a la de un ciego.
-Intenta todo lo que quieras Reina del crepúsculo, pero no pasaras hasta que el combate termine-
Midna sabía que todo intento seria en vano, el caballero rojo había ordenado a la reina de fuego encerrarlo a él junto con Link para que puedan pelear a muerte sin interrupción alguna, no había de otra más que observar cómo se desenvolvía el combate y esperar lo mejor.
Link bloqueaba cada estocada que el caballero rojo lanzaba sobre él, las manos le empezaban a doler por resistir cada duro impacto de la espada del caballero, los ataques que recibía eran cada vez más duros y pesados, pero Link sabía exactamente lo que planeaba, cansar las manos del oponente con golpes de alto poder y luego hacer una movida velos y ligera para herir su mano y desarmarlo, era una técnica de texto que el conocía muy bien, tenía que contra atacar rápidamente, con la fuerza que recibía en cada estocada el caballero debía poner toda su fuerza en los antebrazos, hombros y abdomen para mantener el equilibrio de la espada, si atacaba el muslo o la rodilla la posición del abdomen se descuidaría y dejaría el estómago abierto a un golpe final. La siguiente estocada iba a ser la más fuerte, lo podía notar por la forma en como los músculos del antebrazo del caballero se forzaban, esta era su oportunidad. Cuando el caballero se abalanzó contra el con su espada Link la esquivo a centímetros antes de que el filo fuera contra su armadura, se acercó por la lateral tan rápido como pudo moviendo la hoja de su espada en una curva en dirección a la pierna del caballero, la hoja de la espada de link dio justo en la pieza que cubría el muslo perforándola. La espada salpico una cantidad considerable de sangre sobre el aire al asestar contra la piel. El caballero gimió de dolor no antes de usar el impulso de Link contra su contra, cuando Link ataco la pierna del caballero el impulso obligo a link dejar la parte derecha de su espalda al descubierto. El caballero golpeo la espalda de su contrincante con su antebrazo cuando este paso a su lado, el golpe que propicio el antebrazo impulso a link a dar varios pasos hacia delante dejándole espacio al caballero de mover la espada de manera curveada de abajo a arriba. La punta de la misma perforo la armadura y causo una enorme cortada por la espalda de link. La sangre comenzó a correr por toda la espalda hasta llegar a su cadera.
-LIIIINK- grito midna en desesperación al verlo herido.
El corte en la pierna del caballero había causado el daño deseado, el muslo estaba perforado no de forma fatal, pero si como para dañar su soporte, ahora el abdomen no tendría el balance que necesitaba para asestar golpes de gran fuerza. La ofensiva del caballero estaba rota, pero aun así Link estaba en una situación igual, el daño por su espalda había quebrado su contra ofensiva al quitarle apoyo de su espalda, si la punta hubiera llegado a los huesos de la columna habría estado discapacitado y habría sido el fin, por suerte la cortada en esa área era superficial, pero el mayor daño lo sufrió el musculo que cubría el área trasera del hombro. El brazo derecho estaba comprometido, ahora solo podría dar golpes de poca precisión con la espada usando la mano izquierda. Él podría seguir peleando con la mano izquierda, su entrenamiento se lo aseguraba, pero con el daño sobre el musculo toda la parte derecha trasera del hombro le dolía a cada movimiento.
El caballero se sostenía el muslo con gran fuerza, se podía notar el dolor en la expresión de su rostro, ambos se habían hecho un daño que dejaba el estilo de pelea de ambos discapacitado.
El combate vería su fin muy pronto, tanto como ambos guerreros como ambas reinas lo sabían.
La reina de fuego trataba de mantener su respiración a calma, pero le era imposible, ver a su amo herido de tal magnitud de era algo que deseaba ver, la sola idea de que el callera en batalla era muy dolorosa, su impotencia incrementaba a la par con la de Midna, pero no podía hacer nada, tenía que obedecer la orden de no detener el combate hasta que uno callera.
Las lágrimas sobre los ojos de Midna se hacían notar, era justo como lo había visto en sus visiones, ambos guerreros al límite de sus capacidades, heridos, ensangrentados, rodeados de la muralla de fuego impenetrable, el momento en que Link moría, no, no podía permitirlo.
Midna coloco ambas manos sobre la muralla de fuego, su magia le evitaba que las llamaradas le quemaran las palmas, intento penetrarlas para abrir una brecha que le permitiera entrar. La reina de fuego observo a Midna y su inútil intento. Ella podría fácil mente quitar a Midna del medio, pero no lo hacía, después de todo Midna estaba haciendo algo que ella misma desearía hacer, intervenir para detener el combate, aunque confiaba en la habilidad de su amo no podrían concebir la idea de perderlo, pero aun así debía obedecer su deseo. Nadie debería de intervenir, sea como sea, el intento de la Reina del crepúsculo era en vano, no podía penetrar la muralla sin importar cuanto poder usaba contra el muro. Aun si zelda estuviera a su lado sería muy poco probable que juntas pudieran derribar el obstáculo.
Link y el caballero mantuvieron la mirada contra el otro sin parpadear, la siguiente estocada lo definiría todo y ambos lo sabían, Link apretó el mango de la espalda con toda la fuerza que le quedaba en la mano izquierda manteniendo su brazo derecho contra el estómago tratando de mantener el brazo fuera de movimiento lo más que pudiera para evitar el dolor, el caballero trato de mantenerse sobre ambas pernas pero tambaleaba de forma irregular por el dolor del muslo.
-aquí es donde se acaba Link, todo lo que has logrado, dicho y hecho culminara en este momento- Dijo el caballero apuntando la espalda hacia él.
-Al final tenías razón Leandros- dijo Link con una voz baja con un tono de tristeza – al final tenías razón, somos reemplazables-
Leandros trato de sostener su espada tan fuerte como pudo mostrando una leve sonrisa, no era una sonrisa de satisfacción, fue una sonrisa de decepción.
-siempre es así para personas como nosotros…..-
Midna intentaba gritarle a Link en un intento de detenerlo, la batalla tenía que terminar ahora antes de que fuera muy tarde, pero link decidió ignorarla, simplemente imaginaba que no estaba allí. Link y el caballero rojo se preparaban para la estocada final, lucharon contra el dolor para sostener la espada con ambas manos apuntándola contra el otro.
–Link no lo hagas por favor, detente- gritaba midna inútilmente, la decisión de ambos guerreros ya estaba tomada. La reina de fuego no pudo contenerse más y giro la cabeza a un lado para evitar ver el resultado del último movimiento, luchaba contra sí misma para mantener en pie la muralla de fuego en honor al deseo de Leandros, solo deseaba que todo terminara ya antes de que el miedo le ganara y rompiera su palabra.
Ya estaban listos, no paraban de mantener la mirada sobre la espada del contrincante tratando de predecir el ataque del otro, ya no había tiempo de esperar, era hora de terminarlo. Ambos tomaron impulso tratando de correr contra el otro manteniendo las espadas en posición de tajo. A leandros le dolía enormemente cada paso que daba con su pierna herida pero el aumento de estamina y de adrenalina bloqueo el dolor temporalmente.
La distancia entre los dos se acortaba a cada segundo, listos para el golpe final. No había nada que hacer y Midna lo sabía, había llegado muy tarde y cerró los ojos rezando para que su visión no se hiciera realidad, el momento en que Link moría.
Justo antes de chocar espadas un ruidoso estruendo reboto por todo el salón, el techo se estaba cayendo y junto con él una enorme masa de piedra envuelta de aceite y fuego penetro fácilmente el techo, varias rocas estuvieron a punto de caer encima de la reina de fuego, a duras penas y tuvo segundos para saltar del balcón y creo un escudo de fuego delante de ella bloqueando los trozos de mármol del techo. Para mantener el muro de fuego que rodeaba a Link y a Leandros debía mantener una gran cantidad de su poder enfocada en la muralla, pero tuvo que concentrar gran parte de su poder sobre el escudo que la rodeaba para protegerse de los enormes escombros que estaban a punto de aplastarla, se esforzó para seguir manteniendo la muralla de pie pero no fue suficiente. La maza de piedra que seguramente había sido lanzado por una catapulta por un mal cálculo entro demasiado rápido contra la debilitada muralla de fuego penetrándola, toda la muralla callo y se desvaneció, esta era la oportunidad que Midna esperaba, se cubrió la cabeza tratando de esquivar los restos de piedra que seguían cayendo del techo, observo que la maza de piedra se dirigía exactamente contra Link y Leandros. –LINK CUIDADO- grito Midna tratando de advertirle.
Los guerreros observaron como la muralla de fuego no resistió más y callo completamente, saltaron con todas sus fuerzas para alejarse de la trayectoria de la maza, a duras penas y pudieron esquivarla, pero cuando esta golpeo el suelo lo craqueo hundiendo gran parte del área de impacto creando un enorme agujero sobre el mármol, los alrededores del enorme agujero no tardaron en ceder y caer uno por uno, Link y Leandros trataron de levantarse para alejarse del punto de impacto y evitar caer junto con el débil suelo.
La Reina de Fuego cedió su escudo protector al darse cuenta que la muralla había desaparecido, uso demasiado poder concentrado para protegerse que no dejo demasiado para el muro –oh no, amo…LEANDROS-
El piso cedió con rapidez cayendo por el vacío acercándose más y más a Link y Leandros, los continuos escombros que caían evitaban que Midna se acercara a ayudar a Link, a cada paso que daba su avance era interrumpido por las rocas enormes que caían del destrozado techo con toda fuerza contra el suelo.
De repente un enorme trozo de suelo se desprendió del resto cayendo por el vacío causando que Link y Leandros cayeran por el mismo. Trataron de aferrarse con lo que pudieran agarrar pero no servía de nada, todo ese pedazo de suelo caería junto con ellos. -NOOOO- Midna observo horrorizada al ver a Link caer. Si tan solo hubiera llegado antes.
