Disclaimer: Plot (c) MC. You know, I know.
Claim: Rosalie/Sharon —no nieguen que son sexys xDD
Advertencias: Cítricos, femslash, as usual.
Notas: Esto va en respuesta al reto Crossover Twilight/The Host, del foro LOL. Enjoy, ppl.
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Maybe A Second Time
1.
Sharon tomó su tequila de un sorbo y golpeó el pequeño vaso contra la mesa de forma torpe y bruta. Miró con rostro un poco desorbitado a la rubia en frente suyo y luego comenzó a reír sin motio aparente.
— Tú eres muy, muy, muy —hipó— hermosa, rubia. Y te estoy siendo —hipó— sincera.
La forma en la que arrastró las letras, como si quisiesen escapársele, logró hacer que una sonrisilla escapara de los labios de Rosalie.
Haberse sentado en su mesa había sido algo bueno.
2.
Rose la miró beber lo que era su segunda botella. Analizándola podía saber que se embriagaba fácilmente. Cada vez que Sharon le miraba, ella le sonreía levemente y luego la muchacha le decía otro cumplido que le hacía sonreír aún más.
La observaba de pies a cabeza. Su cabello llamativo, sus ojos entrecerrados y alegres, su nariz pequeña y de aspecto tierno, sus mejillas incendiadas de aquel rosado apetitoso, su mandíbula femenina y tersa, su cuello liso y cálido, con aquel pulso que tanto parecía llamarle.
— ¿Quieres? —le ofreció, pero Rose se negó y la observó bebérselo ella.
3.
La urgencia estaba volviéndola violenta. La puerta de aquel cuarto barato de motel de segunda mano casi se rompe cuando la cerró de un porrazo.
Al mismo instante ya se encontraba sobre Sharon, haciendo que ésta riese al haber tirado la botella entre sus manos y haber derramado todo el contenido de ésta. Las manos de la joven comenzaron a ir torpemente por todo su cuerpo, intentando deshacerse de las ropas, por lo que Rose tuvo que desnudarse y desnudarla. No tenía la paciencia para esperar.
Sus labios fueron rápidamente a los de Sharon, y comenzó a devorarlos sin pedir permiso.
4.
Sharon le enterró las uñas en su espalda sin mucho éxito cuando sintió la oleada de placer recorrer todo su cuerpo, desde sus piernas hasta sus brazos, jugando y cosquilleando en sus deos, cuello y vientre. Rose enterró su rostro en el hueco entre el cuello y el hombro de ella y acarició la piel suavemente con sus dedos, reteniéndose, suspirando contra la cálida piel y completamente fusionada con Sharon.
Respiraron casi al unísono y quedaron inmóviles por largo rato, tendidas en aqul colchón rígido e incómodo, pero sin importarles.
Sus cabellos se mezclaron, rojo incendiado con dorado brillante, y no sabían dónde comenzaba una y terminaba la otra.
5.
Rose se sintió extraña. Porque sabía que hacía mal en quedarse, que debería haberse ido de allí, porque la sed comenzaba a aparecer, pero ver a Sharon durmiendo con aquel rostro de infinita paz y sin darse cuenta del peligro que la miraba desde cerca le hacían quedarse allí, le hacían sonreírle y acariciarle el encendido cabello y apartarlo de su rostro, le hacían besarle el hombro de vez en cuando, e ir de un lado al otro en la habitación, esperando a que despertara, impaciente por primera ve en muchos años de su existencia.
Le hacían querer una segunda ronda de mordiscos sin lastimar, besos que quemaban y caricias indebidas.
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