Esta "cosa" la llevaba pensando hace bastante tiempo, es mi primer intento de slash, espero algún comentario por ahí.
Sé que no soy buena escribiendo pero lo considero una terapia, además aún estoy tratando de terminar uno de mis fics, y mi señor muso me ha dado varias ideas.
Hawaii Five 0 no me pertenece, sino que es propiedad de los señores de CBS. Si fuera mío, ya habría eliminado a Lori. muajajajajaaa
Steve estaba entrenando boxeo con sus compañeros de los Seals, nunca entendió muy bien porque siempre tenía candidatos a ser golpeados, todos los que se atrevían a pelear con el terminaban totalmente castigados, y con el orgullo herido después del rechazo de su comandante.
Solía entrenar duro y dejarlos machacados a todos, ignorando que las intenciones de aquellos era que después de las palizas Steve les diera la oportunidad de salir con alguno de ellos.
-No sé si eres ciego Steve o eres idiota -comentó Nick Taylor su camarada.
-¿De qué hablas? -pregunto secándose el cabello envuelto en una toalla el sexy comandante.
-Todos los idiotas se dejan golpear por ti para llamar tu atención.
-¿En serio? Siempre creí que lo hacían por el reto de ganarle a alguien de mayor grado.
-No es tan solo por eso, no creo que te hayas dado cuenta de que eres el más cotizado de aquí.
-El día que me enamore será de alguien que no sea un arrastrado.
-Es lo más seguro te enamoraras de un idiota que te golpee y te ignore -comentó riendo.
-No digas bobadas -sonrió con autosuficiencia.
-El día que menos te lo esperes conocerás a ese idiota y será la envidia de todo el escuadrón.
No pasó mucho tiempo cuando Steve tuvo que viajar a Hawái al funeral de su padre, conociendo al rubio más malhumorado y parlanchín que había visto nunca, de seguro fueron sus ojos azules y la manera en que lo encaro. Pero lo que más le quedo grabado al alto fue el derechazo que le clavo en medio de la quijada cuando al detective no le gusto su manera de actuar.
Danny Williams había logrado lo que una gran cantidad de Seals habían tratado por mucho tiempo, lograr llamar la atención del comandante McGarrett, de una dolorosa pero efectiva manera.
-H50-
