Los personajes de esta historia no me pertenecen a mi (por desgracia(?)) ellos pertenecen a Ubisoft.


Capítulo 1:

Era un día caluroso en Tierra Santa, Altaïr iba para su siguiente objetivo ubicado en Jerusalén. Ya estaba cerca de su destino, pero algo había pasado por su mente, es decir, alguien había pasado por su mente y era Malik.

Malik, aquel que fue al Templo de Salomón junto con su hermano y Altaïr, y por la arrogancia de este último, había muerto su hermano y perdido su brazo izquierdo. Malik, aquel hombre que ahora es el rafiq de la casa de los asesinos en Jerusalén.

Altaïr sin duda alguna, a pesar de ser una persona solitaria, sentía algo por él, pero era algo inexplicable para este asesino. Ya estaba subiendo al tejado de la casa de los asesinos. El corazón de este comenzó acelerarse, jamás se había sentido así, ¿por qué será?

Desde la última vez que se vieron, Malik tenía una actitud diferente, no era como si le hubiera recibido con los brazos abiertos, pero, no obstante, su evidente hostilidad había sido sustituida por cierto cansancio, y había mirado a Altaïr con el entrecejo fruncido en vez de fulminarle con la mirada.

Altaïr le había explicado sobre su siguiente objetivo; Majd Addin. Luego de esto, el rafiq le había entregado la pluma al asesino, sus manos se rozaron. Altaïr miraba a los ojos oscuros del otro sujeto, quería decir algo, pero solo se marchó para asesinar a su objetivo.

- No lo estropees, Altaïr. - Había dicho Malik, antes de que el asesino se marchara.

Altaïr había regresado al bureau para informar de que el sujeto había muerto en las manos del asesino. Había visto a Malik ordenando algunos libros de su estantería. El asesino comenzó a acercarse al rafiq, Malik al darse cuenta, se dio vuelta y solo se dedicó a mirar al jóven de ojos ámbar, con un poco de rencor, aún seguía molesto por lo que había ocurrido en la última misión que estuvieron juntos, pero, Malik se había dado cuenta que también Altaïr tenía una actitud diferente desde su última visita a la casa de los asesinos.

Ambos jóvenes se observaban el uno al otro, no se decían ninguna palabra. Altaïr le gustaba observar al rafiq, y una sonrisa de le había escapado, ¿realmente le gustaba?. Por el lado de Malik, sonrojó ligeramente, esos ojos color ámbar lo miraban fijamente a él. Había pasado un momento de silencio, hasta que el asesino le enseñó la pluma ensagrentada, ya era hora que Altaïr vaya a Masyaf para hablar con Al Mualim, pero antes de marcharse, esperó a que Malik le diera la espalda y continuara con lo suyo, seguir ordenando su estantería de libros. Cuando el rafiq se dio la vuelta, el asesino dejó sigilosamente un pequeño ramo de flores, que él tenía escondido, en el escritorio donde Malik dibujaba los mapas de Jersualén, y se marchó.

Malik, se había percatado de eso, se dio vuelta para ver el escritorio, y se encontró con el regalo del asesino, observó las flores, rodó sus ojos y dio un pequeño suspiro.


Oh well, después de un año de inactividad x'D and I say: Hello again(?)

Bueno, este es mi primer fanfic de AltMal, será por capítulos, este es sólo el comienzo y luego habrá más cosas *inserte cara pervertida aquí(?*

y también continuaré con mi otro fanfic, ya que me estaban pidiendo que lo continuara:

¿Qué tal les pareció?