My hero

Primero que nada una disculpa a los seguidores de los anteriores relatos, por cuestiones fuera de mi control no pude actualizarlos, espero en estos meses subir varios capítulos y terminar algunos, ya dejando las disculpas, este relato vera la relación de deku x bakugou desde el punto de vista de sus amigos y familiares.

OCHACO URARAKA

El joven de 15 años con aspiraciones de ser un héroe, el pequeño maltratado desde la infancia por no tener un quirk (don o habilidad en español), deku se hacía llamar y ese joven era su amigo, su mejor amigo, pese a que para ella er un joven apuesto, dado que en las veces que hicieron equipo y el traje del jovense rompia dejava a la vista un cuerpo esculpido por el ejercicio, aparte de eso su carácter dulce y amable, sumándole que era responsable, ingenioso y eso ojos azules que hacían juego con su cabello negro con toques verdosos, Ochaco se lamentaba que pese a todo sus esfuerzos el joven parecía verla mas como una amiga, pero ¿Cómo es que ella sabia eso?, ¿acaso no se sonrojaba al verla?, bueno eso es simple de explicar, aunque ahora en plena pelea contra bakugou esos recuerdos eran lo que menos y a la par mas nececitaba para no caer rendida.

Durante la primera pruba con AllMight

Ochaco y Deku-kun habían salido victoriosos contra Iida-kun y Bakugou, o eso pensaba ella felizmente, pero no fue hasta que los demás hacían sus pruebas que ella sentía una mirada acecina a su persona, sobre todo cuando preguntaba por el joven Midroriya, esos ojos rojos es un joven apuesto de pelo rubio cenizo, con un carácter que raya mas a un villano que un héroe, la joven sentía esa mirada. Al salir de la escuela se topa al joven de las explosiones deteniéndola, el pasillo a la enfermería estaba vació, a buena hora decidió decirle a Iida-kun que ella y midoriya lo verían en la salida. Aunque para su sorpresa el joven que obstruía el camino estaba escuchando en silencio tras la puerta donde el pequeño de ojos verdes estaba descansando.

Mente de Ochaco: seguro llegue en mal momento, seguro intenta matar a deku-kun, pero su rostro parece algo triste. Esos ojos, creo que a quien matara será a mí.

La joven retrocede unos pasos ante la mirada del rubio y sus pasos silenciosos hacia la pequeña ingrávida.

-si dices algo a alguien, te mato- el rubio soltó con un tono entre rabia, tristeza y fastidio,mientras sus pasos iban alejandoce.

-sss si bakugou-kun- su corazón se acelero por el terror, pensaba como es que deku podía admirar a alguien como ese sujeto.

Mente de ochaco: si no fuera por la amenaza juraría que estaba triste, su pongo que no era su intención real hacerle daño a deku-kun.

-hey tu, mas te vale que no te acerques al torpe deku- ochaco se congelo al escuchar esa frace con un tono mas frio que la tundra.

-cierto bakugo- kun será mejor dejarlo descanzar hehe- lapelicastaña sonriendo tan naturalmente como podía, dio media vuelta y salió corriento para ver a ida.

-nadie puede estar con deku- susurro el de ojos rojos sin saber que la pequeña había escuchado eso.

Ochaco decidió no contarle nada a Iida mas que nada por no generar problemas, pero en su mente seguían las ultimas palabras de su comprañero, su mente noestaba segura pero todo eso parecía algo que un novio celoso haría.

-pero que tonta soy claro que no lo es, ¿o si?- dijo en voz alta siendo escuchada pro el joven de los motores

-¿Qué cosa uraraka-san?- poniendo sus ojos en los de la castaña para indagar en ese tema.

Mente de Ochaco: rayos por no prestar atención a lo que decía Iida-kun, seguro hablaba algo de la practica de hoy.

-Nada Iida-kun, solamente que no creo que sea tan malhumorado bakugou-kun- soltó con un semblante nervioso peor lo mas decidido que pudo.

-cierto, es bastante gruñón, seguro Midoriya-san podrá decirnos algo de él, después de todo creo que son compañeros desde la infancia-

Esperaron durante una hora, hablaron de casi todo, el tema mas recurrente era cobre Todoroki quien había sido el mejor en la prueba, cuando vieron que salía midoriya lo saludaron efusivamente mientras caminaban para ir a sus respectivos hogares.

-deku-kun tu y bakugou-kun ¿son amigos desde hace tiempo?- pregunto ochaco con un tono algo apagado

-eto… creo que si, desde que tengo memoria estamso juntos, aunque siempre maltrata un poco- dijosoltanto una risa que era vista desde la distancia por unos ojos rojos algo furioso.

-midoriya-san pido una disculpa por el comportamiento de Katzuki-san- inclino su cabeza por respeto a quien considera el alumno mas prometedor.

-no tienes que disculparte, Kacchan siempre a sido asi, de hecho ya sabia que haría algo así,- dejo escapar el peliverde.

- deku-kun ¿lo planeaste todo desde el inicio?- otra pregunta de la joven con un toque de admiración que un rubio entre los arbustos parecía odiar.

-realmente lo pensé, aunque no pensé que conociera tanto a Kacchan- el joven rio un poco junto a sus amigos.

Mente de Ochaco: realmente se conocen bien, aunque se lleven mal, pero aun no dejo de sentir que alguien nos observa, ¿será mi imaginación?, creo que hoy imagino muchas cosas, mira que pensar en que katsuki-kun estaba preocupado por deku-kun, será mejor no pensar en eso.

-presente-

Creo que debía sospechar desde ese dia, pero ahora en esta competencia donde somos equipo y rivales me queda claro, Bakugou-kun, tú amas a deku. Decía la joven mientras seguía combatiendo contra el rubio.

-Ríndete ya uraraka, no tienes como ganar- el rubio sonreía de manera engreída y miraba con desden a la joven.

-deku-kun me apoya bakugo-kun, por eso no me rendiré- dijo a la par que saltaba al combate y tendía una trampa con su chaqueta.

La explosión saco a volar escombros que ella tocaba mientras era lastimada por la onda de impacto, auque esta ultima era mas fuerte, algo murmuraba el chico explosivo.

-no digas ese nombre, el es mi deku- susurró con un poco de rabia, a lo cual se cubrió laboca con sus manos y un leve sonrojo apenas visible para quien lo viera de cerca se apareció en su rostro.

-lo sabia- otro susurro aun mas inaudible, mientras seguía atacando.

La batalla duro mucho tiempo, paso desde abucheos hasta fritos de animo, pero al final su estrategia fue destruida de un golpe.

-te dije que no funcionaria, y ten esto en mente deku es mio- dijo mientras la chica se desvanecía en sus pensamientos.

Mente de ochaco: perdón madre, padre, perdón , Iida-kun, perdónenme, estoy cansada, bakugo-kun tu quiere que midoriya-kun solo te mire a ti, ¿are? Le dije midoriya hehe creo que si es tu deku.

Camino a la sala enfermeria

-sueltame kacchan- se revolcaba un rubio en los brazos del mayor.

-tú ¿la ayudaste verdad?- tenia un toque de rabia y celos en su voz.

-y ¿si fuera asi que tiene de malo? Ella es mi amiga- decía en un tono de enojo y retador

Mente de bakugou: no me mires así, no mantengas esa mirada, no me desafies, conformate con estar, estar a mi sombra, con estar siempre tras de mi, con ser tu, ser mi deku, conformate con que yo sea el hero que admiras.

-no serian nada sin ti, maldito nerd- dijo al tiempo que soltaba un puñetazo cerca de la cara del menor

- para tu información kacchan ella pensó en esa estrategia sola, yo no pude ayudarle- bajo la mirada alfgo triste

Mente de bakugou: esa mirada, ese eres tu deku, nunca lo olvides, nunca olvides que eres mio.

El joven rubio tomó al pequeño de cuello del traje y lo levanto un poco.

-tu eres mio deku, nadie mas tiene derecho a lalamarte así ni tu tienes derecho a ayudarlos- decía con un tono firme y rabioso

-kacchan tu no eres mi….- un beso rudo, agresivo, desesperado y hambriento, ese era unbeso de su amigo de la infancia.

-ya de lo dije deku, eres mio, siempre lo seras- solto el pequeño de ojos verdes

-desde pequeños haces eso kacchan- el pequeño sonriendo toco sus labioslastimados por los golpes y el reciente beso y se encontró recordando cuando eran pequeños y el joven explosivo lo besaba mientras jugaban, y como siempre que alguien se acercaba a su persona reaccionaba con violencia a todos.

Ochaco había visto todo, todo eso , y comprendió que quizás no fueran solamente amigos un amigo no besa de esa manera, roja y nerviosa espera a midoriya en sentada, aun que con sentimientos de felicidad al saber que llego lejos y frustración al ver la brecha de poder que había entre ella y el malhumorado rubio.