Hola!
Bueno, pues aqui me tienen con un drabble inspirado en el poema titulado Nocturno por José Asunción Silva, espero que les guste y pues creo que este espacio lo ocuparé para subir pequeños drabbles inspirados en diferentes poemas de diferentes autores y pues creo que serán de diferentes parejas, en esta ocasión es un Severus/Lily, espero que les guste n.n
Pues creo que esta demás recordar que los personajes no son míos pertenecen a J.K. Rowling
Nocturno
Flash back
Era una noche, una noche en la que se encontraban dos personas en las profundidades de una hermosa pradera, a decir verdad ninguno de los dos sabía dónde se situaba aquella pradera, pero solo el hecho de estar ahí, disfrutando y viviendo juntos un momento más, los hacía inmensamente felices pues no habían tenido una oportunidad así desde hacía ya mucho tiempo; ellos se encontraban rodeados por hermosas luciérnagas cuyo brillo quedaba disminuido por otra intensa luz blanca esparcida sobre aquella pradera: la luna, la cual lucía majestuosa e invencible sobre aquel cielo nocturno.
Lily Evans caminaba tomada de la mano de Severus Snape, su amor silencioso, y aquella luz que emanaba de la enorme luna proyectaba un par de sombras, aquel chico tan serio, tan callado simplemente observaba a su chica grabando en su memoria cada línea, cada curva que dibujada aquel hermoso rostro para después besarla con dulzura, y aquellas sombras sobre el húmedo suelo cubierto por una espesa capa de pasto se juntaban formando una sola sombra larga.
Fin Flash Back
Pasaron los años y ahora aquel chico convertido en un hombre frío camina solo y mudo por aquella misma pradera recordando cada movimiento de aquella noche, cada línea del hermoso rostro de la chica que alguna vez estuvo caminando junto a él, se escuchaba el aullar de feroces lobos a la luz de la pálida luna que a pesar de todo no había perdido su majestuosidad, pero eso a él no le importaba, sentía frío, el mismo frío que sintió al tocarle por última vez sus mejillas, sus manos, y esos perfectos labios que habían perdido el hermoso color de las rosas, aquel frío era el hielo de la muerte, era el frío de la nada, de la nada que ahora sentía al caminar sólo y ver su sombra larga proyectada sobre el suelo cubierto de pasto.
Al cerrar los ojos pudo observar esa otra sombra que tanto añoraba observar, acercándose lentamente junto a la de él como en esa noche tibia de primavera, como en esa noche donde se encontraban rodeados por luciérnagas fantásticas, y se marcharon juntas, enlazadas, solemnes.
"¡Oh, las sombras de los cuerpos que se juntan con las sombras de las almas!
¡Oh, las sombras que se buscan en las noches de tristezas y de lágrimas!"
