Disclaimer:Eragon no me pertenece, ni Saphira, ni Brom, ni Arya, ni ningún personaje de la saga.

Es corto, cutre y el primer fic que escribo de este fandom, tiene Spoilers que bien podrían considerarse entre Eldest-Brisingr.

El título está en el "idioma antiguo", "eitha" significa "Márchate" y "Shur'tugal" como bien sabeis, significa "Jinete de dragón"


La respiración de ella es demasiado débil, casi inexistente, sus ojos se nublan, ambos ya saben lo que le espera. En sus últimos alientos de vida, la dragona intenta calmarle, compartiendo miles de recuerdos e imágenes, lo siento, pequeño, tendrás que hacerlo solo… Eragon se aferra lo más que puede a Saphira, y, ella, esboza una tenue sonrisa antes de que el manto de la muerte le invada. Te extrañaré, pequeñajo.

El grito desgarrador de él irrumpe la calma e invade cada rincón del bosque. Es perfectamente conocedor de que lo que un día nace, también, algún día, se marchita, pero no se le puede culpar por desear que ella siguiese viviendo…

No cuándo su compañera de alma, vida y espíritu, acaba de morir, de fallecer por él, para salva su pellejo.

Apreta sus manos hasta convertirlas en puños mientras observa pasmado el cuerpo inerte de su dragona. Las lágrimas pugnan por salir por sus mejillas, él es un simple granjero, piensa, no un héroe de guerra.

Se ve reflejado en un charco cercano a ellos, mira con asco sus facciones de elfo, dudoso, observa el cuerpo de Saphira, una avallazadora rabia le corroe por todo el cuerpo. Decide abandonar Alagaësia esa misma noche, tal cuál como Ángela lo había predicho meses atrás, puesto que lo hará para siempre.