Este es mi primer fic, espero que les guste, no se si escribir sea mi talento pero lo hago lo mejor que puedo.

Se que Gaara y Hinata son una combinación media rara pero el resultado puede ser muy bueno.

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Granos de arena en una hoja

Capitulo 1¿Conociéndote?

Sabaku no Gaara había sido enviado a una misión en la aldea oculta de Konoha. Era un poco extraño ya que debía ir solo y entregar un pergamino cuyo contenido no sabía.

-No sería interesante saber lo que hay dentro de ese pergamino- shukaku comenzaba a molestar

-Cállate…

-Grrr…

No estaba seguro de lo que ocurría pero tenía un extraño presentimiento con respecto a lo que sucedería cuando llegara a la aldea. Se sentía inquieto, además shukaku se comportaba extraño, no estaba sediento de sangre, ni deseaba muerte o algo por el estilo, estaba realmente extraño.

Al llegar a la aldea la arena dentro de su calabaza comenzó a agitarse y, sintió fuertes punzadas en su cabeza, la sujeto con una mano, y camino de forma pausada a sentirse aliviado del dolor. Cuando ya había entrado a la aldea estaba oscureciendo, sintió el helado viento recorrer su espalda, junto con una presencia, alguien se acercaba, oyó pasos, y sollozos… sintió curiosidad…

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Una chica de cabello corto y ojos color perla, se encontraba con la cabeza gacha frente a un chico de pelo largo lacio y café sujetado en la punta con una cinta.

-Creí que habías mejorado en algo con el entrenamiento Hinata-sama

-Yo… Neji-onisan

-Realmente no creo que pueda llegar a ser un digno miembro de la familia Huyuga… y menos del Souke…

-Ne-Neji-onisan… yo…

-Supe de su tu fracaso en las misiones recién pasadas Hinata-sama con esa actitud, tan amable, siempre sumisa, sin tener opinión propia alguna…

-Neji-onisan y-yo no que-quería parecer i-inútil… para…

-No entiendes Hinata-sama, tu destino es este por más que entrenes no lograras las expectativas de tu padre, no puedes cambiar lo que ya eres Hinata-sama, y no tienes porque tratar de mostrar lo contrario- el ojiblanco dio la media vuelta dejando a la joven sola en medio de la calle con la mirada quieta pensando en la conversación que había escuchado el día anterior.

---Flash back---

La chica de cabello azulado se dirigía a su habitación cuando escucho la conversación que estaba teniendo su padre, con cierta persona cuya identidad no conocía.

-No puedo creer que tenga que desacerme de mi propia hija, no, yo no soy capaz de hacer eso…

-Pero es lo que tienes que hacer, es tu obligación para mantener intacta la y limpia la reputación de nombre de uno de los clanes mas importantes de Konoha, debes desacerte de alguna manera de ella, aun que te duela, recuerda el pacto que tienes con el señor de la aldea de la arena, incluso ya han mandado a alguien para encargarse de Hinata…

-No habrá otra solución…

-No, definitivamente no.

---Fin del flash back---

La ojiblanco no resistió las lagrimas al recordar esa conversación, ella era un estorbo para la familia Huyuga, a veces creía incluso que no debería haber nacido en el souke si no en el bouke. Comenzó a caminar sin saber bien donde dirigí sus pasos, entre sollozos y el caminar con la cabeza gacha no advirtió a la persona que tenía en frente.

El pelirrojo actuando naturalmente se habría corrido, dejándole el camino libre a la chica o simplemente habría "jugado" un poco con ella, pero no hizo ninguna de esas dos cosas, solo observó como se acercaba hasta él hasta chocar.

La ojiblanca sin levantar la cabeza retrocedió un paso para disculparse.

-Gomen-asai- dijo con una pequeña reverencia para luego alzar el rostro y fijarse en la persona que tenía delante, el mismo Sabaku no Gaara. Entonces comenzó a recordar…

-recuerda el pacto que tienes con el señor de la aldea de la arena………ya mandaron a alguien para encargarse de Hinata

El pelirrojo fijo su mirada en la chica que lo miraba aterrada, cosa a la que estaba acostumbrado.

-No crees que sería divertido "jugar" un poco con ella, será divertido- shukaku le hablaba desde su interior

-No me apetece- dijo Gaara para si mismo como respuesta para el demonio

Gaara dio unos pasos hasta quedar muy cerca de la chica, movió su cabeza hacia un lado, como para estirar el cuello, dio media vuelta y se fue. La peliazulada lo miraba aun inmóvil.

-Espera- dijo la chica tratando de no mostrarse temerosa cosa que no logró. El pelirrojo extrañado pero sin cambiar su expresión volteó para mirar a la chica- yo… yo se cu-cual es tu p-propósito… en esta aldea- no sabía de donde había sacado valor para decir esto… o lo que iba a decir- por favor… cúmplelo… ahora…

Gaara no entendía que ocurría… ella le estaba diciendo que cumpliera su propósito pero… si su propósito solo era entregar un pergamino a la persona que mañana lo esperaría en la entrada de la aldea.

-Claro…- dijo Gaara sin tomar mayor importancia alo que la joven le decía siguió su camino

-Pero…

-Puedes ser clara- el pelirrojo se estaba irritando, ese día no se encontraba muy bien que digamos, si se irritaba mucho, mataría al primero que le incomodara.

-Y-yo……- la chica perdió todo su valor, o el poco que lograba sacar y se hecho a correr hasta llegar a una esquina y sentirse más segura. Cuando pudo comenzar a respirar mas calmada sintió una mano un su cuello.

-Que querías decir…- el pelirrojo se encontraba detrás de ella.

-Así me gusta, así me gusta… que tal sí…- shukaku había comenzado a hablar al sentir una pequeña parte del roze de la piel de su portador con la suave y tibia piel de la joven

-Cállate…

-Por qué, p-por qué no me m-matas… de una vez- dijo la ojiblanca con lagrimas brotando de sus ojos cerrados

-¿M?- no entendía, no hacía nada por defenderse¿deseaba morir? Pero… ¿por qué no darle en el gusto? Le estaría haciendo un favor...

La arena empezó a emerger de la calabaza, el pelirrojo se apartó un poco de la Huyuga.

-¿Por qué papá… por qué?- la peliazulada, sin darse cuenta, pensaba en voz alta- mamá ¿por qué me hacen esto? Si tú estuvieras aquí, si tú estuvieras…

-Dijo… mamá…- pensó sintiendo una punzada fuerte en su cabeza, colocó su mano para disminuir el dolor, pero otra punzada se hacía presente- mamá ¿por qué?- la arena que estaba en el suelo comenzó a moverse bruscamente, de manera inestable. El dolor se hacía presente, no se encontraba bien, nada de bien, shukaku comenzó a agitarse, Por qué le ocurría esto ahora…

-¿Te… te encuentras… b-bien?- la chica se había percatado de lo que le ocurría al pelirrojo, ahora lo miraba, arrodillado en el suelo con la dos manos en la cabeza, los ojos rojos, no era necesario preguntar. No se encontraba bien.

-Déjame- dijo el chico, sin saber si realmente era eso lo que quería… que lo "dejara" muchas personas lo habían dejado ya. No sabía si eso era lo que quería. Trato de pararse, lográndolo, la arena entró a la calabaza con movimientos bruscos, el chico dio la media vuelta sin importarle si debía matar o no a la ojiblanca, avanzando pausadamente.

-Tú… tu no… no te encuentras bien

-¿M?

-Do-donde… pasarás la noche

-Que dices…

-Desearía poder… saber donde te puedo encontrar… en la mañana… para… que todo sea más rápido…- En un abrir y cerrar de ojos el pelirrojo se encontraba detrás de la Huyuga, dándole un certero golpe en el cuello, dejándola completamente inconciente. La tomó en sus brazos y siguió su camino… sin entender muy bien que era lo que estaba haciendo.

Fin del primer capítulo

Espero que les halla gustado nn, prometo que el próximo capítulo estará mejor, y además no me demoraré mucho en escribirlo (estoy en el computador casi todos los días n.nU)

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