Corría rápidamente hacia mi aula de clases por los pasillos del instituto, luchaba contra mi reloj que marcaba las 6:59 am, aceleraba mis pasos a medida que visualizaba a lo lejos aquella puerta la cual era la entrada de mi destino. Sonreí al verla a unos cuantos metros de mí, en mi reloj faltaban 10 segundos para las 7 am, casi me sentía victorioso al estar cerca de aquella puerta, pero, en ese momento sentí mi pie deslizarse hacia atrás y mi cuerpo cayendo hacia adelante, terminando finalmente en el suelo. Levante mi cabeza tan solo para ver como la puerta se cerraba, de mi boca solo salió un gruñido que representaba mi frustración.

No pude evitar pensar que todo esto había sido culpa mía, en primera: por dormirme tan tarde, en segunda: por no dejar la alarma de mi reloj encendida y en tercera: ¡por no arreglar mis libros ayer!, mire hacia atrás para encontrarme con lo que parecía ser una cascara de banana, la cual me había hecho caer al suelo, me levante y la patee con frustración y cuando pensaba que nada podía ponerse peor escucho una voz por detrás de mí, una voz que en verdad era la última que quería escuchar en estas circunstancias.

-Jackson Overland Frost-le escuche pronunciar mi nombre completo, eso significaba solo una cosa: esto es serio-

-Director Norte…yo…puedo explicarlo-intente excusarme dando vuelta lentamente para verlo cara a cara sabiendo lo que no creería ni una sola palabra de lo que diría-

-Adelante- me incentivo a contarle mi versión de lo que había sucedido, solo que esta vez…pues bueno no había tenido tiempo de pensar en una excusa si quiera creíble-

-Ah…pues mire yo…no…la verdad no puedo explicarlo-dije rendido, él se cruzó de brazos soltando un suspiro-

-A mi oficina-dijo sin más caminando hacia la dirección, yo solo lo seguí sabiendo que me daría el mismo sermón que me había dado todas las mañanas desde hace 3 días-

Ya en la oficina del director Norte, él fue el primero el tomar asiento detrás de su escritorio, seguidamente me pidió que tomara asiento, lo cual hice sin dudarlo. Ya estando ambos lo que el diría "cómodos", prosiguió con su típica mirada que decía más de mil palabras o sermones en este caso, yo solo hice todo lo posible por apartar mi vista de ella, lo cual pareció funcionar por unos momentos, el director no era el típico director malhumorado, injusto y desinteresado por los asuntos "emocionales" de los alumnos, al contrario era bastante comprensivo, es más gracias a él me había salvado de una que otra situación comprometedora que tuviera que ver con mi actitud con los profesores y mis castigos, pero eso no quitaba el hecho de que era el director.

-Jackson ya hemos hablado de esto, no puedes seguir llegando tarde ¿quisieras contarme porque lo haces?-yo solo agache mi cabeza sin mirarlo, el soltó un suspiro- está bien no te estoy obligando a nada, pero no podrás entrar a tu salón durante la primera hora y como castigo…-dudo un poco al pensar cual sería la actividad extra que haría como castigo, pero dirigió su mirada hacia la pila de libros que se encontraba tirados en un lado de la oficina- ¡Ah!…tendrás que ordenar esos libros-dicho esto se levantó de su silla y se dispuso a salir de la habitación- tienes una hora-me digo antes de cerrarla-

Yo me quede ahí con una mirada de disgusto en mi rostro mientras colocaba cada libro en su lugar, por lo menos esta vez no hizo que limpiara su oficina, era un trabajo ligero. Estaba a punto de colocar el último libro en su lugar, pero había un problema: era un tanto grande y por poco no cabía, empuje fuertemente el libro moviendo un poco aquel estante y cuando por fin logro calzar…un libro de los que se encontraban en la parte de arriba callo justo en mi cabeza, Pensando que este día no podía ponerse peor frote mi cabeza donde me había caído este para después en un arranque de frustración patear aquel libro el cual voló casi hasta el otro lado de la habitación, pero, paso algo logre visualizar que era un álbum de fotos del anuario del año pasado y se había abierto justamente en la página que tenía una foto de esa persona que había dejado atrás pero no olvidado desde hace ya unos cuantos años. La foto de una chica de cabello rubio platinado que se recogía en un cómodo peinado recogido en una trenza amarrada a su cabello que era complementado por un pequeño flequillo, casi blanco, la piel tan blanca que se asemejaba a la misma nieve, y unos profundos ojos de un color poco distinguible por la gafas que llevaba, pero sabía a la perfección que eran azules como el mismo cielo.

-Elsa…-susurre tomando el gran libro y volviendo a tomar asiento en aquella silla donde había escuchado un sermón por parte del director-

Mire con nostalgia aquella foto y no pude evitar acariciarla con mi pulgar, imaginado que era su rostro el que tocaba en vez de un simple pedazo de papel emplastecido así como tampoco pude evitar recordar como conocí a aquella chica, como me enamore de ella, como me dolió verla con mi ex mejor amigo y luego haberle fallado.

Recuerdos de Jack

Era la mañana del primer día del último año de secundaria, yo me levante temprano para no llegar tarde ese día, las vacaciones de verano habían sido bastante buenas pero extrañaba ver a mis amigos, jugar con ellos y todas esas cosas, tome mi morral y mi patineta luego de vestirme y desayunar, empecé a patinar por la acera con destino a mi secundaria. En el camino me encontré con lo que actualmente era mi mejor amigo…oh al menos eso creía, Hans Westerguard, caminaba tranquilo con su morral en la espalda, llevaba una chaqueta marrón abierta, por dentro una camisa color beige y unos pantalones azules, detuve mi patineta un momento para saludarlo, el solo se volteó y me miro con una sonrisa.

-¡Jack! Hermano cuanto tiempo-ambos chocamos nuestras manos como acostumbrábamos hacerlo-

-Sí, mucho tiempo-dije tomando mi patineta empezando a caminar con el- Me entere que te fuiste de vacaciones a Francia.

-Si fue divertido, pero no soporto estar mucho tiempo allá no soy muy bueno con el francés-dijo rascándose la cabeza, para seguidamente revisar su reloj- ¡Oh! ¡Ya viste que hora es! ¿Qué haremos? ¡Vamos a llegar tarde!-dijo algo desesperado-

-Oye tranquilo amigo si corremos podemos llegar a tiem…-en ese momento sentí como su mano me empujaba haciendo que callera al suelo- ¡oye! ¡¿Qué estas…?!-vi como tomaba mi patineta y se subía en esta, cuando se encontraba lejos volteo y me grito…

-¡Nos vemos en el insti amigo!-grito mi supuesto "amigo" mientras se iba del lugar con MI patineta, frote mi cabeza intentado comprender mejor lo que había sucedido, pero eso de las bromas era normal entre nosotros, no podía enojarme por eso con él aunque quisiera, tuve que ir al instituto corriendo…-

Había logrado llegar a tiempo a mi salón de clases "sorprendentemente" en aquel salón me encontré con mi "mejor amigo" que se encontraba conversando sus demás colegas, decidí acercarme para preguntarle sobre mi patineta.

-Hey muy gracioso viejo pero devuélveme mi patineta-yo sabía el valor sentimental que tenía esa patineta, me la había regalado mi padre antes de bueno…de que se fuera de mi lado…-

-¿Tu qué?...-dijo prestándome atención- la deje en mi casillero, es una muy buena patineta eh, muy rápida- le escuche mientras decía halagos hacia MI patineta-

-Sí, si lo es, ahora...dime cuando me la puedes devolver-dije sonando desesperado-

-Tranquilízate viejo pensaba quedármela-dijo como si nada-

-¡¿Qué?! ¡¿Estás loco?! ¡Significa mucho para mí!-grite llamando la atención de casi la mayoría del curso-eh…-él también me miro mal- lo siento…-¡¿por qué me estaba disculpando?! Aparentemente también estaba nervioso, genial- es que significa mucho para mí por favor devuélvemela- le suplique para que tan solo me hiciera un gesto de disgusto-

-Tranquilo viejo, los amigos se prestan las cosas ¿no?-me dijo con una mirada que incluso podría llamar siniestra- te la devolveré…en un tiempo-me dijo luego de dejar prácticamente de prestarme atención-

-Pero Hans yo…-mi próxima petición fue interrumpida por la puerta del salón cerrarse por acción del profesor-

El profesor Kai nos saludos con un simple "buenos días" todos los demás solo nos levantamos de nuestros asiento y procedimos a contestarle con el mismo saludo.

-Clase me complace anunciarle que este año tenemos una alumna nueva, ya que la mayoría de ustedes han estado varios años en el instituto-dijo el profesor, y al parecer la noticia había hecho que algunos empezaran a murmurar entre ellos estaba Hans, éramos amigos pero… no compartíamos exactamente los mismos gustos, el decidió hablarme a mí solo para decirme un mini chisme-

-Me contaron que la nueva viene de una familia muy adinerada…-me susurro en voz baja-

-Oh ya veo…-dije con poco interés, en realidad no me gustaba juzgar a las personas antes de conocerlas a diferencia de mi "amigo"-

-Adelante cariño pasa-dijo el profesor incentivando a una persona que estaba del otro lado de la puerta a la vista de nadie-

Entonces fue cuando entro la chica de la cual repentinamente me enamoraría, pero no en ese momento no sería lo que muchos dicen "amor a primera vista" y no por su apariencia más bien porque necesitaba conocerla más para descubrir lo maravillosa que era. Ella entro dando cortos pasos y se notaba en su rostro una timidez evidente, la chica varias expectativas porque se decía que era de familia dinerada, sim embargo por las caras de decepción y disgusto del curso no parecía agradarles mucho su aspecto, el profesor le dijo que se presentara y una vez dicho esto quito su mirada de donde había estado clavada desde que entro, el piso, para mirar a todo el salón con una timidez aún más evidente.

-B-buenos días… m-mi nombre el Elsa Frozen…e-espero llevarme bien…con…todos ustedes-dijo finalmente la chica con una voz aún más nerviosa que su aspecto, se notaba que su voz era linda pero sería evidentemente más linda si no fuera tan tímida, inmediatamente todos empezaron a murmurar cosas sobre Elsa, como había dicho antes no era lo que esperaban, Elsa, tenía más bien el aspecto de lo que algunos llamarían " una nerd", su cabello trenzado recogido en un estilo de giro de pan francés y un pequeño flequillo que cubría su parte de su frente, su tez era notablemente MUY clara casi como la mía, pero la de ella era un poco más delicada, llevaba unos lentes algo grandes que hacía que el color de sus ojos fuera poco divisible, cualquiera que la viera de lejos diría que son negros o de un color obscuro aun que se podía ver un poco de turquesa a través de ellos, era delgada y vestía con un suéter azul que cubría todo su torso y sus brazos, llevaba una falda de tablillas gris un poco más arriba de las rodillas y finalmente unos zapatos cerrados y algo formales de color negro.

Inmediatamente empezaron a murmurar aún más y seguidamente se escucharon unas risas burlonas en voz bajas, esto hizo que ella se encogiera un poco, hasta que el profesor carraspeo llamando su atención.

-Muy bien señorita Frozen, puede sentarse en el asiento vacío detrás del señor Frost- dijo señalando el puesto vacío detrás de mí, ella le contesto con un simple "si profesor" y se dirigió al asiento detrás de mí sin decir ni una sola palabra y mirando de reojo a los que murmuraban-

Elsa parecía una chica bastante tímida, sin embargo a medida avanzaba la clase ella participo varias veces, de hecho, era la única que levantaba la mano y demostró que era una chica bastante inteligente tal vez sería la más lista del curso próximamente, pero esto hizo que la clase le tomara algo de disgusto o más bien envidia. Ella era una chica lista quería hablar con ella en clases pero no encontraba el momento o simplemente no se me ocurría de que hablar con ella, y por el momento no me importaba mucho.

Transcurrieron normalmente las horas de clases hasta llegar al receso vi como una chica choco intencionalmente su hombro con el de Elsa, no me importo mucho. Salí del salón para ir directamente con mi "amigo" que se encontraba conversando con un grupo de chicos.

-Hola Hans ¿Qué tal?-dije llamando su atención-

-Oh hola Jack-me dijo algo desinteresado-

-¿Oye vamos al comedor?- le pregunte señalando con mi pulgar hacia atrás-

-Oh… sobre eso…lo siento iré con ellos-dijo señalando al grupo de chicos que de por si su apariencia me inspiraba un poco de desconfianza-

-Bien pues ¿voy con ust…?-fui interrumpido por el grandulón que se encontraba al lado de Hans-

-Lo siento enano solo caben 6 en la mesa- dijo en un tono burlón los demás se rieron incluyendo a mi "amigo" que solo se fue con ellos sin decirme nada-

Hans había sido mi amigo de la infancia siempre lo considere mi mejor amigo por eso y casi siempre estábamos juntos, sim embargo en los últimos años podía notar que se volvía cada vez más superficial desinteresado y algo presumido, en ese sentido creo que en verdad el ya no me consideraba como su mejor amigo, a pesar de que yo si aún que se halla llevado algo valioso para mí, aún tenía la confianza suficiente como para creer que me la devolvería más tarde, oh quizá en algún momento.

Entre al comedor del colegio y tome una bandeja con comida, en ese momento no sabía dónde sentarme casi todas las mesas estaban ocupadas incluyendo la de Hans, por un momento me sentí perdido hasta que vi una mesa donde tan solo se encontraba una persona, Elsa, no perdí tiempo y me acerque donde estaba ella en realidad en ese momento no compaginaba mucho con ella pero tenía que intentarlo al menos para no quedarme parado, oh al menos eso pensaba.

-Hola, ¿puedo sentarme aquí?-le pregunte de la manera más amablemente posible, ella se encontraba tomando una malteada de chocolate mientras leía un libro, despego su mirada de el para contestarme-

-Ah…claro, puedes- me dijo con una sonrisa tierna-

-Gracias- le conteste mientras me sentaba-

-Bueno no tienes que agradecer no esperaba…bueno que alguien me pidiera sentarse conmigo-dijo algo tímida-

-Oh ya veo, no te incomodo ¿verdad?-pregunte-

-No, para nada-contesto para luego dar un sorbo a su malteada, yo comencé a comer. Pero al poco rato se hizo un silencio incomodo entre los dos que decidí romper por mi mismo-

-Así que…te llamas Elsa ¿no?-pregunte tratando de entablar una conversación-

-Eh si… ¡oh! que grosera ¿Cuál es tu nombre?-me pregunto interesada-

-Me llamo Jackson Overland Frost, pero preferiría que me llames Jack, mucho gusto- dije extendiendo mi mano para saludarla, ella el tomo también, aunque pude notar que estaba fría- Hey estas helada, ¿muy nerviosa?-intente bromear con ella, pero pareció sorprenderse un poco y alejo rápidamente su mano de la mía-

-Eh…no como crees-dijo un poco nerviosa-

-Jaja está bien y… ¿eres nueva también en la ciudad?

-Algo así mis padres…bueno digamos nos están en la mejor relación y por ahora me eh mudado con mi madre y mi hermana-dijo con algo de tristeza en su voz-

-¿Quiénes son tus padres?- le pregunte sin más-

-Mi madre es azafata así que casi nunca pasa tiempo con nosotras dos…-iba a pedirle que no me dijera más pero suspiro y decidió continuar- mi Padre es el presidente de la compañía de aviones Arendelle -al escuchar eso me impresione mucho su padre era alguien que tenía mucho dinero y poder-

-Oh…ya veo…-en ese momento no sabía de qué hablar con ella, hasta que vi la portada de su libro- ¡Oh! Valla ¿te gusta ese libro?-ella sonrió- Jaja pero que pregunta si lo lees claro que te gusta

-¿A ti te gusta?-me pregunto ingenua-

-Es mi libro favorito- si así se me gusta mucho leer, pero no se lo cuento a nadie porque no quiero que piensen que bueno…soy un nerd para hacer eso, creo que en ese punto Elsa era más valiente que yo- no pensé que a nadie más le gustara-dije sonriendo, ella también me sonrió-

-Pues al parecer ya somos dos-dijo aun sonriendo, su sonrisa era linda después de todo y era una chica agradable no era una sabionda o engreída como algunos creían-

-Si así veo…emmm ¿pero puede ser un secreto entre los dos?-dije mirándola algo serio-

-¿Te da miedo que sepan que te gusta?-no le respondí tan solo agache un poco la cabeza- Esta bien no te preocupes, tu secreto está a salvo conmigo-me dijo yo le sonreí, ella me miro unos momentos-

-Jeje gracias-dije mirando para otro lado, me sonroje levemente igual que ella-Y… ¿tu hermana estudia aquí?

-Bueno no precisamente, estamos en secundarias separadas por ciertas razones nos colocaron en secundarias separadas-

-Yo tengo una hermana pero es algo pequeña esta en primaria-

-Ya veo…debe ser muy linda-me dijo sonriendo-

-¡Por supuesto en eso se parece a mí!-dije en tono de juego, ella rio-

-Cuanta modestia-me dijo sonriendo-

-Jajaja-yo también reí ante su comentario, era agradable después de todo, estaba a punto de decirle algo más hasta que sonó el timbre que ponía fin al receso- es hora de volver al salón ¿vamos?-le pregunte poniéndome de pie ella se sorprendió un poco-

-Emmm claro-dijo algo nerviosa, yo sonreí-

-Tranquila, somos amigos si-dije para tranquilizarla, ella me devolvió la sonrisa y nos dirigimos al salón-

Las horas transcurrieron normalmente después de eso aunque me di cuenta de que me gane ciertas "miradas" por parte de algunos alumnos, pero me importaba poco Elsa era una chica agradable eso era lo que realmente me importaba, aunque Hans tampoco dejaba de mirarnos extraño ni a mí ni a ella, me pareció raro pero tampoco le preste importancia, no me dirigió la palabra durante el resto del día, de hecho a la salida le pregunte si podíamos irnos juntos como siempre pero me ignoro, y por otro lado vi como Elsa subía a una limosina bastante lujosa para irse a casa eso hizo que se ganara aún más miradas. No teniendo a nadie con quien ir de regreso decidí irme solo, pero en el camino recordé algo: mi patineta, corrí lo más rápido posible intentando alcanzar a Hans, hasta que al fin lo alcance.

-¡Hans!-grite llamando su atención, me miro como si nada- ¿me devuelves mi patineta?-le pregunte tratando de sonar calmado-

-¿Ah esa cosa?-dijo refiriéndose a mi patineta, seguidamente saco algo de su morral que me dejo con la boca abierta, era mi patineta…pero estaba prácticamente partida a la mitad, eso fue todo, la gota que derramo el vaso- pensé que era más resistente resulto ser una basura ¿Qué lástima no?-dijo con cinismo, no pude aguantarlo más le lance un golpe directamente en la cara- haciendo que callera de espaldas-

-¡Eres un imbécil! ¡Significaba mucho para mí, tú significabas mucho para mí! ¡Esta amistad se acaba ahora!-grite lo más enojado que podía estar mientras me daba la vuelta para caminar, el me grito-

-¿A si? ¡Pues vete si quieres! ¡Me sobran los amigos! ¡No te necesito! ¡Eres un perdedor!-trate de no enojarme más de lo que ya estaba y solo seguir mi camino-

Hans era mi amigo pero ahora me di cuenta de lo equivocado que estaba, pasaron unas horas para que pudiera digerir lo que acababa de pasar, en ese momento se me ocurrió hacer la única cosa que amaba tanto como patinar en mi patineta, patinar sobre hielo, si me gustaba mucho y había una pista a la cual iban pocas personas no quedaba lejos decidí entrar para relajarme un poco, empezó a meditar mientras patinaba cuando alguien choco conmigo y casi hace que caiga.

-¡Hey! ¡Fíjate por donde…!-intente gritar cuando me di cuenta, de quien había chocado conmigo- vas… ¿Elsa?-pregunte torpemente-

-¿Jack?