PRÓLOGO

Salto al precipicio

EL sol del desierto brillaba con intensidad sobre sus cabezas, su piel transpiraba sin parar, aun asi caminaba contenta de huir de la monotonia de la mansion Hyuga y sus obligaciones.

Despues de la guerra no quedaban buenas misiones por seguir y la calma hacia mella en su marchito corazón, nunca obtuvo una respuesta y cansada de seguir esperando tomo el escape mas facil.

Unos meses en Suna serían favorables, conocer un tipo de vida totalmente distinto al que acostumbraba, empaparse de todo lo habido y por haber.

si ahi estaba ella la timida Hinata Hyuga de 19 años caminado con su equipo al agreste Sunakagure, sus compañeros no decian nada, incluso el extrovertida Kiba estaba callado, sólo observaban como la cara de Hinata cambiaba constantemente de feliz a completamenta y absolutamente desolada.

Ninguno comentaba nada, puesto que sabian que la muerte de Neji habia dejado un profundo dolor en el alma de Hinata y apesar de ser sus mejores amigos no podrian llenar el vacio que ella sentia.

Sus diminutos pies se undian en la arena y la temperatura se sentia incluso atravez de sus botas ninja.La sensacion era...como explicarlo gratificante, poder sentir su piel arder la hacia sentir viva si ¡Viva! por tonto que pareciera aveces olvidaba quien era y de verdad no sabia cual era su mision en la vida.

El poder tener la dicha de salir de Konoha sin dar explicaciones, apesar de ser reconocida por participar en la guerra las cosas no habían cambiado mucho y ahora no habia nadie en el souke para darle animos y hacerla sentir acompañada y aveces apoyada.

Neji, si el tan estricto e imparcial Neji, a pesar de todo siempre tenia guardada una mirada de cariño y preocupacion para ella, aunque fuera por un segundo su semblante frio cambiaba y eso era lo que la hacia sentir en casa, ahora que el no estaba se sentia mas sola que nunca y la tristeza y la culpa la carcomia.

Pero sabia a el no le hubiera gustado verla deprimida encerrada en su habitacion durante todo un año llorando su perdida como lo hizo.

Asi que un dia de tantos se armo de valor, se levanto de su cama, tomo un baño, comio lo que le habia dejado la servidumbre y salio a caminar rumbo ala torre Hokage.

Cuando entro Kakashi la miro sorprendido pero no dijo nada solo sonrio debajo de su mascara y la saludo.

ella fue la que hablo y pidió permiso para hir a suna a conocer su herbolaria, era de conocimiento de todos que los Hyugas tenian un amplio conocimiento en el tema pero Kakashi sabia lo que ella pretendia y con gusto firmo su permiso.

Y ahi estaba caminado bajo el intenso sol del desierto con sus compañeros.

Un sonido fuerte resono en el desierto, los tres se agacharon al instante con kunai en mano.

Akamaru gruñia.

.-calmate amigo-.decia Kiba preocupado.

Otro sonido aun mas fuerte acompañada de una gran explosion levanto una gran cantidad de arena que cayo sobre ellos y enmedio de esa conmoción el Kazekage de Sunakagure estaba en lo alto suspendido de una alfombra de arena agarrando su brazo herido mientras caia vertiginosamente a un gran cañon que se encontraba bajo el.

Para Hinata todo fue en camara lenta la arena caia alrededor de Gaara cual diamantes brillando por el sol y su cabello carmesi se mesia como sangre en el agua, sus fieros ojos verdes zafiro miraban a un punto fijo y de pronto los cerro y empezo a caer.

El corazón de Hinata latio a mil por hora y sus pies se movieron con vida propia sin darse cuenta, hasta que salto al precipicio en direccion de Gaara con los brazos abiertos y la preocupacion dibujada en su rostro.

escucho a lo lejos los gritos de Kiba y Shino pero su mente solo pensaba en el Kazekage y como no soportaria ver otra muerte mas.

cerro las piernas y junto sus brazos a su cuerpo en un intento en hir mas rapido y funcionó , lo alcanzo y con todas sus fuerzas lo abrazó, las lagrimas brotaban de sus ojos sin parar mientras hiban hacia arriba por la fuerza en que caian.

Lo abrazo mas fuerte al ver cerca el final del recorrido y penso que si ese era su final de los dos por lo menos se hirian juntos y se harian compañia.

Su barbilla descansaba en el hombro de él mientras sus brazos estaban sosteniendo su cintura con fuerza y sus piernas estaban entrelazadas con las de el, con mucho esfuerzo y entre lagrimas le dijo al oido.

.-Gaara-kun, despierta, no puedes morir, tu gente te espera, pero si es lo que deseas no hiras sólo pues te acompañare hasta el final-.

Lo decia en serio, no tenia por quien vivir, siempre habia vivido para y por los demas, no tenia sentido seguir.

la desolacion la golpeo de nuevo y un inmenso dolor en el pecho hizo que le costara respirar, pero para su sorpresa Gaara volteo a verla y con sus ojos frios la observo fijamente sin apartar la vista ni un instante, le enredo sus fuertes brazos alrededor de su diminuta cintura pegandola a su pecho y sintio como la arena corria alrededor de ellos y como poco a poco bajaba la velocidad hasta llegar al suelo.

tocaron el suelo y él seguia observandola hasta que volvio a perder el conocimiento y sus ojos verdes se cerraron de nuevo.

Hasta ese momento se dio cuenta que olvido respirar y empezo a toser con violencia mientras bajaba del cuerpo de Kazekage asustada.

Miro hacia arriba y se dio cuenta que la caida habia sido muy larga tanto que no lograba observar desde que lugar cayeron.

la realidad la despertó y vomito estrepitosamente del miedo y la adrenalina que todavía corria por sus venas.

el cuerpo del Kage tendido al frente suyo y palido como el papel la regreso ala realidad.

activo su byakugan y encontro una cueva en la que podria atender al Kazekage, lo arrastro a duras penas ya que su complexión pequeña no la ayadaba mucho y lo acomodo mientras sacaba su saco de dormir y preparaba fuego para pasar la fria noche del desierto.

Desvistio a Gaara y curo sus heridas tenia grandes ematomas y quemadas en todo el cuerpo.

Con mucho cuidado lo vistio de nuevo y entro en el saco de dormir juntoa él mientras temblaba de frio, hiba a ser una noche muy larga...

continuara...