Disclaimer: Kishimoto-san y a su santa propiedad.

Posibles spoilers.


"Situaciones atípicas muy típicas de Rock Lee"

I. Neji

El pertenecer al equipo de Gai sensei ya era una tarea laboriosa. El hombre era complicado y tan simple a la vez. Una persona apasionada; Neji era capaz de comprender eso. Pero como si tener a un apasionado en el grupo no fuese suficiente la viva imagen del sensei, Lee era otra cuestión que podía llegar a ser irritante. Llegar a ser muy Lee. Y los exámenes chunnin pisándoles los talones…

Él se consideraba a sí mismo como alguien simple de leer. Alguien muy del tipo, "No te entrometas en mis asuntos".

(Es un mensaje bastante claro si me lo preguntan)

Pero Lee tenía una extraña y (a su parecer) molesta forma de entrometerse en los caminos de los demás… Y vaya que Neji había sido paciente, pero después de que ese dúo de herbalife se ponía en acción en los entrenamientos podían llegar a exagerar. Neji Hyūga no era un debilucho y mucho menos un flojo ya que obviamente estaba a la altura o más de los entrenamientos.

A veces lo dudaba de su compañera Ten Ten. Venga ¿Cómo haces volteretas lanza kunais y no se despeinaba ni un poco? Bueno, tampoco es que los tratamientos capilares de la kunoichi lo trajeran muy preocupado. Pero algo de ley gravitacional por Kami.

(Las leyes de la gravitación no aplican a los peinados ninja)

Luego de un segmento de "Rodearemos Konoha parados de manos" tan acostumbrado de su superior y muchos "Por la llama de la juventud" después, deslumbraron el final de la jornada al regresar al punto de partida, los campos de lanzamiento, no sin antes un combate cuerpo a cuerpo para no tentar las malas vibras.

Rock Lee vs Neji.

No sin demasiada sorpresa Neji había vencido a Lee. Ten Ten vio el mundo arder en los ojos del chico con mallas ajustadas. Pero no señor, no iba a quedarse a esperar un entrenamiento extra del chico, finalizaba la semana y estaba cansada.

En cuanto Gai sensei se acerco a Lee para reconfortarle, la kunoichi huyo. Neji entrenaría en el bosque. Un ejercicio un poco menos… extravagante le vendría bien. Practicaría su puño suave. Lejos de todo ese circo.

Mientras Lee… Había proclamado con su puño en alto hacerse más fuerte, por lo menos más que ese día y vaya si no lo tomaba en serio. Ese chico tenía fuerza de voluntad o poseía una tonta terquedad. Quizá ambas.

Ahora bien.

Cómo explicar el predicamento en el que se encontraba nuestro genio.

Estaba enredado. Enredado de verdad. ¡Cómo no había esquivado las ramas!

Era bochornoso. Él, Neji Hyūga un miembro prodigio de su clan en la rama secundaria… ¡Atrapado como un ave enjaulada! Ni eso siquiera. Su largo cabello se había enredado de lo lindo en ese pobre árbol, que bien hubiera terminado hecho polvo si Neji no le tuviera un poco menos de aprecio a su cabello. Era doloroso. Y un poco difícil desenredarlo al estar de espaldas. Estúpida piedra. ¡Como osaba a atravesársele!

Ya un tanto más desesperado había optado por empuñar un kunai y esperar que quedara medio recto.

Hace unos instantes danto giros y lanzando golpes magistrales a un enemigo imaginario y ahora aquí… inmovilizado por su propia existencia.

Vaya día.

Fue entonces cuando Lee apareció. Una persona prudente habría tomado en cuenta la cara que ahora plantaba el miembro del clan Hyūga y se largaría sabiamente. Pero no alguien como Lee. No le huía a los problemas, aquellos quienes podían darle una paliza o quienes necesitaban de una mano. Y a sus ojos eso era justo lo que su camarada necesitaba. Una mano. Y él poseía dos dispuestas a sacarlo de apuros.

-¡Ey Neji!- Saludó a pesar de haber pasado todo el día con él y haberse despedido hace no más de una hora.

-Tsk.

Decir que estaba apenado era una cosa. No se deja ver a nadie una debilidad…Mucho menos una ridiculez semejante.

-¡No te preocupes! ¡Te liberare de las ramas que turban tu cabeza!- Y antes de que pudiese proclamar otra victoria para su tan amada llama. El chico Hyūga estaba libre. Con restos de ramitas y una que otra hoja rasgada, pero ileso, aún empuñando el kunai.

Un miembro diferente de tan poderoso clan hubiera quizá dado las gracias, si de Hinata hablaramos… Pero Neji… bueno.

Lee dio por suficiente la inclinación de cabeza de su compañero quien ya había salido de su zona de visión… -Probablemente tomara un baño-pensó.

Hinata recuerda haber visto a su primo entrar con el cabello hecho un nido de pájaros. No se veía feliz.

-Neji-niisan no tuvo un buen día…-dijo para sí teniendo compasión de él.

Neji detestaba las situaciones atípicas de su persona. Como esas. Como hoy. Interrumpido por un árbol viejo y una piedra en su camino. Con un adversario inferior auxiliándole…

¿Qué rayos estaba mal con Rock Lee?

Mientras lavaba su aún largo cabello y pensaba los acontecimientos del día. Neji solo sabía una cosa. Lee no era adversario para él. Y ciertamente él no llegaría a comportarse como su compañero. ¿Qué se creía? ¿Qué debía esperar a que su cabello estilo hongo se atorara en una mata para estar a mano? ¿Qué se harían trencitas? ¿Qué se sacrificaría por alguien?

Elimino esos pensamientos en cuanto el agua helada caía por su frente. No tenía tiempo para eso. Debía entrenar.

Cuantas cosas podían aprenderse de Rock Lee.


C.B.

¿Criticas, sugerencias, reviews?

Lo leo todo :3

Podrían ser varios, podría ser solo este, como sea ¡Gracias por leer!

-A Lee por ser mi personaje favorito.

-Y Neji quién es tan... inefable.